Carta de Seoane a Alvajar. 1963
22/06/1963
Madrid, 22 de junio de 1963
Sra. Amparo Alvajar
Ginebra
Querida Amparo:
Debimos haberte escrito hace unos días, pero desde que llegamos todos fueron, como se dice, de locura. Hemos andado hasta ayer de restaurant en restaurant y entre parientes, acompañando a nuestro tío que vive en Méjico, que tiene 82 años y volvió a España a pasar una temporada. Madrid confirma la impresión de nuestras conversaciones de Ginebra y las gentes rebosan en general simpatía. Es cordial y amable en la calle y en cualquier parte y dan ganas de quedarse a vivir para siempre en un país de gentes como estas. No olvides nuestro tiempo y causa de ausencia y toda la grosería ambiente soportada en Buenos Aires durante muchos años. Italia y España creo que son los únicos sitios donde nosotros viviríamos a gusto. En otro orden que no sea el estrictamente popular se confirman tambien nuestras presunciones. Pero no es de España de lo que quiero ahora hablar. Te estamos profundamente agradecidos Maruja y yo por todas las atenciones que tuviste con nosotros y por el tiempo que te hemos hecho perder. Yo creo que no perdí el mío en Suíza. Tengo que hacer el mural para Zurich, se confirmó en encargo en las horas que pasamos allí antes de embarcarnos para Madrid. No sé aún dónde lo ejecutaré, si aquí en España o en Suíza pues voy a hacerlo de hierro y bronce o en duroaluminio, pero, con cualquier procedimiento, tengo libertad para su ejecución, debo entregarlo en setiembre. Volveré seguramente por esta fecha a Ginebra y Zurich. El envío de los cuadros desde ahí resultó en cambio una complicación. Ayer me enteré que están todavía en Port Bou y que no los tendré seguramente hasta mediados de la semana que viene. Casi un mes desde Ginebra a Madrid y la culpa no es exclusivamente española. Este retraso nos hace perder mucho tiempo. En la próxima semana iremos a visitar a tu hermana. Perdóname que no lo hubiésemos hecho hasta ahora pero los días pasados hasta ayer fueron disparatados. Para matar nostalgias “americanas” Madrid está lleno de marisquerías gallegas y para nuestro caso de familiares. El departamento que tenemos es suficiente para nosotros de momento, pero preferíamos el de Ginebra en el que podía trabajar con más holgura aún siendo éste de Madrid quizás mayor. Bueno, estas son simplemente unas letras de saludo. Marcial Suárez te va a enviar sus obras de teatro. Hablé con él de vuestro esfuerzo. Contéstame. Un abrazo de Maruja y mío:
[Seoane]
Te agradecemos el envío de las cartas, que recibimos.