PROXECTO EPÍSTOLAS

----

LOCALIZACIóN: Xixón

Epístolas
23 mencións
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
1960-05-23
Carta de Seoane a Díaz Dorado. 1960
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Dorado. 1960 en 23/05/1960


Gijón, 23 de mayo de 1960

Sr.
Diego Díaz Dorado
Buenos Aires.

Querido amigo:

Es verdad que no contesté sus dos últimas cartas, sólo recibí dos. No pude y pienso que ahora estos días en España puedo menos aún que en Italia. Perdóneme. En una de las dos que recibí, en la que se refería al libro de Ruibal, que éste espere por mí, ya que llegaré a esa el 21 del mes que viene. Después de las conversaciones que tuvo conmigo resulta absurdo lo que propone y no me refiero, como es natural, a la imprenta. El sabe que existe una colección a la que se incorporaría su libro y que una editorial no modifica a capricho de los autores sus colecciones. En cuanto al diagramador que propone igual dá que busque como tal a un diputado cualquiera de la UCRI, pues sabrá lo mismo sobre estas cuestiones. Hablé de las posibles exposiciones del Centro Lucense y en principio conseguí una de grabados de Jesús Núñez de quien se habló en Galicia Emigrante. Tienen ustedes que escribirle. La dirección es: Jesús Núñes. Calle Antonio Leyva 19-7º piso D. Madrid. Para sucesivas exposiciones conviene que ustedes escriban a un joven pintor y grabador de La Coruña, Raimundo Patiño Mancebo, que vive en la Calle Santander 24, 1º, La Coruña, a quien pedí se encargase de organizarlas desde esa ciudad siempre que ustedes estuviesen de acuerdo. En todo caso si Ud. lo cree conveniente se les puede escribir a mi regreso. No quiero darle mis impresiones de ésta ni de Italia. A mi vuelta hablaremos de todo ello. Estamos consagrados a los viejos amigos y familiares. De Citania tambien hablaremos. Hago lo que puedo y no puedo demasiado. Los libros nuestros gustan mucho en Madrid que es donde ahora pude encontrarme con gallegos.

Bueno, saludos para todos los de Citania y los amigos comunes y Ud. reciba el especial de su amigo:

[Seoane]

1960-05-23
Carta de Seoane a Sofovich. 1960
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Sofovich. 1960 en 23/05/1960


Gijón, 23 de mayo de 1960

Dr. Bernardo Sofovich
Buenos Aires

Querido amigo:

Recibí su carta que agradezco en todo lo que ella contiene. En sus noticias más íntimas y en su prueba de amistad. Yo no puedo juzgar sobre sentimientos y respeto el de los amigos cuando sé, como en el caso suyo, que son honestos. En mí, como en Maruja, cualquier decisión suya y de Berta (Berta Yvsen, de origen judío, que se separa de Bernardo Sofovich, que acabó casándose con Julia Lublin) en cuanto al porvenir, no puede variar nuestra amistad por ustedes. Les estimamos hondamente y esta estimación no puede cambiarla la decisión que tomaron. No quiero escribirle ahora sobre nuestro viaje. Estamos en España a donde nos alegramos Maruja y yo de haber venido aunque sólo fuese por días y parece como si de repente por mi parte hubiese olvidado todo el viaje pasado y hasta veinte años de mi vida. Sólo queda en mi recuerdo los amigos, ustedes. Creo que de momento ni siquiera me importa mi arte. He vuelto a las fuentes que tuvimos que abandonar. A incorporarme, aunque esta vez parezca ser como turista, al pueblo de donde procedo. Encuentro en él la palabra justa y aquella cortesía que le viene distinguiendo por siglos. No puedo escribir, ya lo digo en otras cartas a los amigos comunes, sobre lo que sentimos, creo que ni siquiera podemos expresarlo hablando. En todo caso, será cosa de intentarlo en nuestras conversaciones con ustedes. Encontramos algunas cosas cambiadas, todo lo que se puede cambiar accidentalmente y aquello que es permanente en el pueblo y nada puede cambiar, que se vino formando desde no se sabe cuando. Hemos encontrado amigos y familiares, también nuevos familiares. Con todos ellos, apenas hemos hablado a pesar de que lo hemos hecho incansablemente. Hemos hablado y hablado y nos queda para el futuro casi todo por hablar. Primero fue abrazarnos en silencio, un resumen del silencio de veinte y más años y luego romper a hablar en una conversación interminable que ya no podrá finalizar nunca. Esto es todo lo que queremos decirle ahora. Repetirle nuestra amistad verdadera y contarle, o no contarle porque no se puede, esta experiencia. Un gran abrazo de:

[Seoane]

Saldremos de Lisboa, si no hay novedad, el día 20 de junio, pues ya tenemos confirmado el regreso.

1960-05-23
Carta de Seoane a Muñoz Manzano e Dieste. 1960
Xixón
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Muñoz Manzano e Dieste. 1960 en 23/05/1960


Gijón, 23 de mayo de 1960

Queridos Carmen y Rafael:

Os debemos cartas desde no sé donde, desde Italia creo, desde Génova, desde donde debí haber escrito dándonos noticia de dos espléndidos Zurbarán y un Cristo maravilloso tallado en madera, de anónimo castellano, que me pareció lo mejor del museo. Pero no quiero escribiros sobre esto ahora ni sobre Italia por donde estuvimos hasta Roma, parando a capricho en sus ciudades y viendo lo que a nosotros nos gustaba y no a las oficinas del turismo italiano, tan despistado como el de cualquier parte, sino de España, cuyo pueblo, países y paisajes nos tienen sumidos en admiración y silencio. Pasaron más de veinte años y bastó llegar a Barcelona, escuchar el castellano por sus calles, aún el de los catalanes, para sentirnos de pronto incorporados a nuestra sangre. Aquí encontramos el ademán justo y la cortesía popular que habíamos casi olvidado. En Barcelona, en Madrid y en Asturias hasta ahora. De la miseria nace la grandeza. Recuerdo a un viejo mendigo de la calle de la Calderería compostelana que se limitaba a descubrirse con gran cortesía y solamente decía: “Ud. lo pase bien”. Mantenía sus ojos a la altura de los nuestros y no arqueaba sus espaldas, sino que las sostenía erguidas en un gesto hidalgo que hubiese enviado el más galano Caballero de Santiago. Así nos parece ahora el pueblo de España limitándose a decir al mundo “Udes. lo pasen bien” desde la cima de sus desgracias, dando otro ejemplo de señorío y grandeza. Yo no puedo deciros en una carta todo cuanto siento, precisamente porque lo siento hondamente, muy dentro de mí y no puedo expresarlo. Tengo miedo de llegar a Galicia a donde iremos dentro de unos días. Creo que hicimos bien venirnos desde Barcelona y pasar por Madrid y Gijón, habituándonos nuevamente a pisar el suelo de la península y a escuchar otras voces de las Españas. En Asturias estamos como oliendo a Galicia como estuvimos en Portugal y por fin, dentro de unos días, estaremos en su territorio.
Perdonadme esta carta. Creo que hacéis bien en veniros. Deberíamos, si fuese posible regresar todos. Hasta algunos enemigos después de veinte años parecen haber recobrado el gesto velazqueño y español de la Rendición de Breda aún sabiendo que no podemos entregarnos, que nunca nos entregaremos. Tenía razón Díaz Pardo y Baltar diciéndonos que había que venir y ver y escuchar. Bueno, ya estamos aquí. Vemos y escuchamos y ya pronto hablaremos. Hasta entonces, un gran abrazo para los dos de:

[Seoane]

1960-05-25
Carta de Seoane a Falcini. 1960
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Falcini. 1960 en 25/05/1960

Gijón, 25 de mayo de 1960

Sr.
Luis Falcini
Buenos Aires

Querido Falcini:

Recibí su espléndida carta ya no sé donde, pues creo que hace mucho que no vivo tan intensamente y los sucesos se acercan o alejan de la memoria como nunca creí que pudiese suceder. Ya hablaremos personalmente de Italia, ese maravilloso país, y tambien de España, donde recibo las más notables emociones producto de sus maravillas y del sentimiento, del mío, del de los antiguos amigos y familiares. Me gustará hablar con usted de escultura de la que ví en Roma, en Florencia y de la que estoy viendo en España, de la ibérica y de las tallas en madera de los coros de las catedrales y de las iglesias. Como tambien de ese escultor de pájaros extraños, murciélagos y reptiles que fué el arquitecto Gaudí, aunque él no modelase por sí mismo que yo sepa. Si viviese en Barcelona creo que escribiría una monografía que se debería titular Flora y fauna del arquitecto Gaudí. Pero bueno, de todo esto ya hablaremos, repito, personalmente. Ahora, en estos días, no me resta ánimo para escribir tal cantidad de cosas sobre las que me gustaría hacerlo, tal la diversidad de sensaciones que experimento y la necesidad que siento de estar y charlar con ustedes. Estaremos de regreso el día 21 del mes que viene y ya nos reuniremos para hablar. Hasta entonces, con el ruego de que transmita mi saludo a todos los amigos, reciba usted el fuerte abrazo con saludos de Maruja, de:

[Seoane]

Nota:
Sé que ésta es un conato de carta, que debiera escribir más, referirme a todo cuanto quiero después de haberlo visto y tratado de comprender como ocurre con Roma, con alguna pintura que allí encontré, con las viejas columnas romanas y con su arquitectura, pero me es imposible. Estoy en Gijón de Asturias recordando días vividos y mirando de frente a viejos compañeros universitarios y a mis familiares.

1960-05-25
Carta de Seoane a Enrique e Perla Rotzait. 1960
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Enrique e Perla Rotzait. 1960 en 25/05/1960


Gijón, 25 de mayo de 1960

Sres. Perla y Enrique Rotzait
Buenos Aires

Queridos Perla y Enrique:

Os debemos carta no sabemos desde dónde y os escribimos ahora estas líneas simplemente para deciros que existimos y que os recordamos. Andamos por España viendo familiares y amigos. Viéndolos y hablando con ellos. Dando y recibiendo noticias de veinte años de separación, conociendo nuevos familiares y a los hijos de los amigos que crecen con inquietudes parecidas a las nuestras de cuando teníamos la edad de ellos. No se ven por España esos jóvenes desesperados de ocio y mala literatura que hacen escuela en Estados Unidos y en parte de Europa y que tienen su silla curul en algunos cafés de la calle Florida. Los problemas son más serios y afectan a la vida de la colectividad y de cada uno que para jugar a la angustia o decidirse por el peinado varonil de últimos del siglo XVIII o de los emperadores romanos, y para comenzar, luego de peinados, un cuadro informal bien nutrido de texturas y de incapacidad. Estamos en España y no podemos escribir hasta ahora, tal [es] nuestra emoción, sobre lo que sentimos. Creo que mejor cuando nos encontremos hablaremos en nuestra casa o en la vuestra muy pronto. Ayer hemos visto dos maravillosas iglesias del siglo IX. Yo las recordaba. Maruja no las había visto nunca. Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo, en la cima de una montaña de Asturias a doscientos metros una de la otra y dominando, desde su altura, la ciudad de Oviedo. Aquí sólo vienen arqueólogos y algunos yankis a ofrecer sus dólares insolentes por esas construcciones. Ya hablaremos de todo. Estaremos en esa de regreso el día 21. El 20 salimos de Lisboa. Hasta entonces, recibid, con el saludo para todos los amigos, un gran abrazo nuestro:

[Seoane]

1964-01-13
Carta de Seoane a Varela. 1964
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1964 en 13/01/1964



Gijón, 13 de enero de 1964

Sr. D. Lorenzo Varela
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Estoy en Gijón y mañana marcho nuevamente a Galicia para despedirme de amigos y familiares antes de regresar a Buenos Aires. Pasaré el mes de febrero íntegro o casi íntegro en Madrid. Maiztegui quedó en enviarte directamente el resumen musical del año 63 en Madrid, que le solicité para Hora once. Espero que lo haya hecho. Ahí van ahora algunas noticias:
El historiador y crítico de arte español Lafuente Ferrari acaba de publicar una extensa monografía sobre el gran pintor asturiano Evaristo Valle. Un extraño artista con influencias del Gauguin de Bretaña y que mezcla en sus cuadros temas de Solana y del belga Ensor tratados con la ironía peculiar de su país. Mas Ensor que Solana, pero respondiendo siempre a la realidad asturiana. Uno de los grandes pintores españoles casi desconocidos en la misma Península y que a comienzos de siglo prometió, en muy pocos años de París, convertirse en un dibujante universal conocido, sino hubiese decidido vivir entre las gentes de su pueblo. Una decisión que muchos no comprenden.
Isidore Isov, el poeta letrista francés que tuvo su cuarto de hora en París al terminarse la última guerra, un cuarto de hora de escándalo, se ha convertido en una especie de desorganizador de Pompas Fúnebres como le denomina un semanario parisién. Actuó como espontáneo recitando sus poemas letristas en el destierro de Jean Cocteau, hace muy pocos meses y, recientemente, en el sepelio de Tristán Tzara. Parece como si el letrimo y su jefe Isidore Isov se nutriese de público solamente en los entierros y alrededor de las tumbas de los verdaderos poetas.
Jean Dubuffet, el pintor francés del movimiento artístico El arte bruto, conocido por la calidad y cantidad de sus texturas y por el extraño mundo figurativo que sirve de tema a sus obras, solicitó a un librero de la Rue de Beaux Arts de Parías un extraño dibujo situado al lado del teléfono de la librería con destino al Museo de Arte Bruto: “¿Cuánto cuesta?, preguntó al librero señalando el dibujo. -Nada, no está a la venta, responde el librero. -¿Cuánto?, insiste Dubuffet. -Nada, repite el librero. Y añade: -Si os divierte llevároslo. -Bien, dice el pintor, esta obra me interesa para el Museo de Arte Bruto que estoy organizando. Os propongo un cambio. Vuestro dibujo por uno de los míos”. Dubuffet envuelve el dibujo con precaución y algunos días más tarde envía al librero un trabajo suyo que los clientes de la librería admiran colgado de una pared. El dibujo que había interesado tan extraordinariamente a Dubuffet era un conjunto muy heterogéneo de líneas trazadas por el librero al azar de las conversaciones telefónicas, una masa confusa de tinta con esos signos que generalmente se trazan distraídos cuando una persona atiende al teléfono en una conversación más o menos larga y, en este caso, según parece, durante muchas conversaciones.
Se acaba de editar de Paul Eluard, reunidos en tomo, una colección de poemas perdidos publicados en revistas políticas, o de arte, en diarios, catálogos y de circunstancias, que su autor no había reproducido en ninguna obra suya. Uno de ellos, publicado en 1951, es el titulado En Espagne que dice así:

S´il y a en Espagne un arbre teint de sang
C´est l´arbre de la liberté
S´il y a en Espagne une bouche bavarde
Elle parle de liberté
S´il y a en Espagne une verre de vin pur
C´est le peuple qui le boire.

Son nada más que tres noticias, pero Gijón no es demasiado buen sitio para ser muy comunicativo y hace demasiado frío para extenderse. Un gran abrazo a todos y uno especial para Marika y para ti de Maruja y de:

[Seoane]

1967-05-24
Carta de Seoane a Falcini. 1967
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Falcini. 1967 en 24/05/1967


Gijón, 24 de Mayo de 1967

Sr. Luis Falcini
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Recibí carta suya hace bastantes días y otra más reciente de Frontini en vísperas de nuestra salida de Madrid. Una carta larga que me alegró mucho, como la suya, como las de todos los amigos de quienes siento ausencias y con los que me gustaría charlar y discutir sobre aquellos asuntos que a todos nos interesan, porque el discutir es tambien algunas veces, prueba de amistad, no se discute con cualquiera, sino con quien se estima o al menos se estima su juicio. En cuestiones de arte se discute ahora muy poco. Más bien se escribe o se habla despreciando lo que no se estima o no se comprende. R.[omero] B.[rest] dá por muerto, en grabado, en una noticia de catálogo, a Picasso o por existente en pasado, así me dijeron, o consideró su aporte poco valioso y, sin embargo, a mí me parece que su aporte en ese género, el del grabado, como en otros, el aporte de Picasso resulta fundamental en nuestra época. En España quienes siguen las nuevas tendencias estéticas no pueden soportar a los que continúan una tradición de la pintura española que tiene ya más de un siglo, la de Goya, y al revés.
A unos les parece que el dibujo de los más jóvenes, totalmente seco, mecánico, técnico, con mucho de “art nouveau”, es preferible a ese dibujo de línea sensible, caligráfico, temperamental, que constituyó la gloria de Toulouse Lautrec, de Bonnard y, antes, de Daumier y Goya. Pero no discuten, se desprecian. Quizá en lo más hondo de ellos se envidien y no comprenden que tanto para unos y para otros lo que puede salvar su obra es la “gracia”, ese algo indefinible que para los cristianos se alcanza en la santidad, lo que los andaluces denominaron “duende” y que es lo que yo encuentro en muchas obras de arte popular.
En el Rastro de Madrid hemos comprado unos ex-votos extremeños, naturalmente anónimos, que tiene eso, “gracia”, algo encantados, inexplicable, que vence a todas las torpezas. No tienen probablemente un gusto establecido por el hábito de repetirse, que es lo que constituye un estilo, pero tienen un candor que me atraen. Eso es lo que tiene todo el arte cultivado que estimamos, junto con otras cualidades de orden distinto, técnicas, y lo que le une a la creación popular realizada sin técnica alguna, una canción, una edificación campesina, una leyenda, etc.
En la zona minera de Asturias por donde pasamos para venir a Gijón, esas casas blancas de cal, en las que destacan como ornamento la cantería de sus aberturas, el color de las puertas y ventanas y la pizarra de sus techos, o la teja roja, en un paisaje verde y negro con un cielo casi siempre gris, tienen la “gracia”, la ingenuidad de los ex-votos que compré en El Rastro y, al mismo tiempo, la de los dibujos de Bonnard o de algún artista sabio como éste. Aquí, en Gijón, queda mucha de esa edificación surgida de los constructores del pueblo y lo que desentona hasta ahora son esas nuevas construcciones al estilo de las revistas de arquitectura en uso la que le hace perder carácter, como ocurre con las nuevas construcciones en casi todas las ciudades europeas que vimos.
Pero esta rotura con un pasado que había alcanzado a distinguirse ya no se discute. Se desprecia ese pasado como los fanáticos de éste desprecian lo bueno, útil y bello de lo nuevo. Vivimos en una época en que parece no tratarse de congeniar en nada. A mi juicio podrían los arquitectos buscar de encontrar coincidencias entre ese acierto de la construcción popular y sus técnicas, pero no, se trata de cambiarlo todo en su totalidad, aunque este cambio borre las características de un pueblo antiguo.
En Gijón la guerra se llevó muchas cosas, entre ellas el espléndido museo de dibujos que había coleccionado Jovellanos y que alcanzaba desde los grandes artistas renacentistas a Goya, del que no quedó nada, y ahora tratan de borrar sus características más visibles.

Un gran abrazo de Maruja y mío para ustedes dos:

[Seoane]

1967-05-24
Carta de Seoane a Shand. 1967
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Shand. 1967 en 24/05/1967


Gijón, 24 de mayo de 1967

Sr. William Shand
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Recibí su obra Judith y el gángster, en la que acierta una vez más a plantear problemas de nuestro tiempo. Excuso decirle la alegría que me produjo recibir, aquí en Gijón –bajo un cielo habitualmente gris como el de Londres– una obra suya. Me gusta en ésta, no solamente el tema que sin su desarrollo no sería nada, sino el diálogo, la concepción de ella y la construcción de la misma. Los personajes, tal como fueron concebidos y se nos presentan a través de las distintas situaciones que atraviesan, constituyen un acierto del tipo de realismo que usted busca en teatro y que a mí me parece muy característico de nuestra época, buscando para ellos esas dimensiones que la vida produce, haciéndolos expresión de inquietudes generales y utilizándolos para defender la vida, lo único que de verdad –por lo que cada día aprendemos de los sucesos de toda índole que ocurren– merece defensa. Leída Judith y el gánster lejos de los comentarios de los amigos comunes, de usted, su autor, y de aquello que pudiera influenciar mi juicio, me parece una excelente obra teatral y creo debe constituir un éxito bien interpretada y puesta en escena. En Madrid, vi alguna muy buena interpretación de Valle Inclán, tres obras de un acto, y Bertold Brecht, creo que ya se lo escribí, y nada más. Estos días representaban a Shakespeare, El rey Lear, y a Beckett, casi nada de teatro español joven, aún comercial, y nada del más comprometido que, sin embargo, existe y es muy bueno por algunas obras que leí manuscritas. El teatro insustancial de Paso, o el nada interesante a mi juicio, o equivocado, de Sastre y Romero, políticamente opuestos, son los que ocupan los escenarios. Existen dos buenos directores jóvenes, Salvat (Brecht) y Alonso (Valle Inclán) y desde luego compañías de experimentales con obras de Beckett y de algunos autores españoles como Arrabal, que escribe en francés, vive en París, y levanta ronchas por su ostracismo. Hace un teatro efectista y de verdadero disparate jugando con la sorpresa al espectador. En el resto de la Península salvando Barcelona apenas existen compañías de aficionados que destrozan el teatro clásico y el más convencional de nuestro siglo. El teatro, como la caricatura, resultan aquí un peligro, pero este último género comenzó a abrir brechas en la prensa diaria y esperamos que pronto pueda decirse lo mismo con respecto a las obras de teatro que hoy los autores jóvenes más decididos conservan en sus carpetas. Por mi parte, continúo trabajando, hice muchas acuarelas y una cantidad importante de dibujos de cabezas hechas en los cafés, que quizá reúna, seleccionándolas, en un pequeño libro. En Galicia, pienso continuar pintando y grabando. Aquí, en Asturias, estaremos muy poco tiempo y no puedo hacerlo como quisiera. Ayer nos asomamos al mar, este mar acerado del norte español, tan distinto al Mediterráneo, un poco lago para las gentes de este lado del Atlántico, y vimos como se deslizaban las olas en instantes de baja y calma. El cielo gris, el mar azul-acerado y las colinas verdes y amarillas encerrando una ciudad blanca y negra. Negra de tiempo y carbón. Así es esta ciudad asturiana, puerto minero. En algún lado, algunas ruinas romanas y en el fondo de todo, en el subsuelo y en el aire misteriosas creencias célticas con hadas y fantasmas. Escríbannos. Abrazos de Maruja y míos para los dos:

[Seoane]

1967-05-25
Carta de Seoane a Rafael e Emma Lifschitz. 1967
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Rafael e Emma Lifschitz. 1967 en 25/05/1967


Gijón, 23 de Mayo de 1967

Sres. Emma y Rafael Lifschitz
Buenos Aires

Queridos amigos:

Recibimos la carta última de ustedes dirigida a Madrid. Nos hemos venido a Gijón, en Asturias, el día 21 de este mes, es decir, hace dos días y aquí estamos en casa de mi hermana y mi cuñado hasta dentro de dos semanas aproximadamente, en que iremos a La Coruña. La exposición de grabados de Madrid se cerró el día 17, luego de estar abierta durante un mes, y, aparte del éxito de crítica y público, vendí 12 grabados de los 21 que expuse, entre ellos uno nuevo, el retrato de un poeta desterrado de México, León Felipe, cuyo apunte a lápiz le hice en noviembre y cuyo grabado hice en España a mi llegada. De Colonia sé que la exposición se celebra con mucho éxito y que estuvo a verla Payró* de paso por aquella ciudad y que le gustó mucho. Hay dos muy buenas notas de críticos alemanes sobre ella, cuyo resumen les enviaré próximamente, tan pronto las tenga debidamente traducidas, juntamente con las de España.
En Gijón, no creo pueda trabajar, pues vamos a estar muy poco tiempo, tenemos aquí hermana, cuñado y parientes, todos muy solícitos con nosotros y queremos andar un poco por Asturias. Gijón es una ciudad muy antigua, aún quedan restos romanos en ella, y es el puerto de la cuenca carbonífera asturiana, seguramente por esto mismo en sus barrios predomina un tono gris y negro en sus viejas casas que contrasta con el azul acerado del mar Cantábrico, muy a la manera de Rouault o de alguna marina expresionista alemana de Nolde, por ejemplo. Aquí hubo un gran pintor casi desconocido en Buenos Aires y en el resto de España, Evaristo Valle, que pintó muchas escenas del puerto y de la zona minera y se le tenía por un gran dibujante, pero renunció a su porvenir universal para encerrarse en esta ciudad y pintar a su pueblo, muriendo a los ochenta y pico de años.
Hoy se cotiza muy alto su obra y se le considera como uno de los grandes pintores españoles. Yo creo que su prestigio ha de crecer aún mucho más, pues fue, efectivamente, muy importante pintor post-impresionista. Otro buen pintor asturiano, Piñole, aún vive, es casi nonagenario y también pintó a este pueblo suyo. A media hora de aquí está Oviedo, la capital asturiana, con una catedral importante y dos monumentos de los siglos IX y X, Santa María de Naranco y San Miguel de Lillo, pre-románicos, y que constituyen por algunas razones auténticos misterios de la arquitectura medieval española. Todo dentro de uno de los paisajes montañosos más impresionantes y bellos de Europa y que imprime un fuerte carácter a sus habitantes, verdaderos montañeses aún siendo costeros y dedicándose muchos de ellos a los trabajos del mar.
Bueno, éste es el lugar donde estamos como introducción a nuestro viaje a Galicia. Toda España es muy diversa de país a país y a pesar del centralismo político mantiene cada uno de éstos sus características propias en los más diversos aspectos de la sociedad y de la cultura. Escribiremos con más noticias nuestras y, por favor, no dejen de escribirnos y enviarnos noticias.

Un gran abrazo de Maruja y mío para Carlos y Eduardo y para ustedes dos:

[Seoane]

1967-05-26
Carta de Seoane a Cherniavsky. 1967
Xixón
Vicente López
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Cherniavsky. 1967 en 26/05/1967


Gijón, 26 de Mayo de 1967

Sres. Julia e Isidoro Cherniavsky
Vicente López

Mis queridos amigos:

Recibimos en Madrid la carta última de Isidoro hace quince o veinte días, no recuerdo ahora exactamente la fecha, y nos alegró muchísimo saber de ustedes. Nosotros continuamos viendo lo que podemos y descansando ahora en Asturias del trabajo de Madrid, donde pinté mucho, grabé algo –una cabeza de León Felipe– y expuse con éxito hasta el 17 de este mes. La exposición de Colonia se cierra mañana, luego es probable que se remita a Hamburgo y uno de estos días se inaugura la de grabados de Munster. Aquí, en Asturias no hago nada sino gozar del paisaje maravilloso de este país de montañas abruptas, eternamente verdes, coronadas en parte de nieve y con valles idílicos donde no es cuenca minera, que es negra y blanca como esta ciudad, Gijón, que es su puerto más importante. Maruja y yo pasamos una buena parte del día entre las farmacias de mi hermana y de mi cuñado, a 500 metros una de la otra, haciendo tertulia de rebotica y actualizando viejos recuerdos familiares, universitarios y de los otros, de los que no se debe hablar demasiado. En la primera decena de junio nos iremos a Galicia, donde volveré a trabajar hasta nuestro regreso a Buenos Aires. Tengo muchos proyectos, algunos de los cuales pienso realizar allí en donde cuento con un gran estudio acondicionado para mí por un amigo y desde el cual veo bosques, campesinos trabajando la tierra como hace dos mil años, una aldea marinera y el mar. De vez en cuando hablaré con algún campesino o pescador que poséen una especie de memoria secular, que estoy seguro me contará, a propósito de cualquier noticia actual, alguna leyenda heredada del ciclo caballeresco, o me referirá hazañas de las ánimas que pueblan la fantasía gallega y de fantasmas errantes condenados. Si es un viejo campesino es posible que lleve en el bolsillo migas de pan para alimentar las hadas de las fuentes, y si se trata de un viejo pescador nos relatará picardías y hazañas de los delfines, o sucesos de ocurridos hace mucho en las rías, en los que intervinieron fuerzas sobrenaturales, que él, como el campesino, tratará de explicarlos con intervención de los muertos. Todo ello después de muchas razones: argumentos más o menos racionalistas, porque algunas gentes, maestros, médicos o curas, se vienen empeñando en que no sean tan paganos y no crean en aquello que no vieron y les contaron sus padres y abuelos, a quienes, por otra parte deben creer, o que dicen haber visto ellos mismos en algún momento de alucinación. Todo esto tiene para nosotros un encanto indescriptible, nos vuelve a la niñez y a todos los miedos pasados. En el viaje anterior conocimos un cura muy alto y de ojos azules, con una sotana pobre llena de suciedad y manchas, que actuaba de radomante buscando agua, a través de la vibración de la plomada, para algún vecino. Era un visionario de orígen campesino que había olvidado las lecciones del seminario, y había regresado al paganismo. A nuestro juicio era lo mejor que pudo haberle ocurrido, de no vivir su tiempo como, naturalmente, no lo vivía. Continuaba siendo en el siglo XX el sacerdote, el druída, de una tribu anterior a Roma en esta parte de occidente. No sé por qué les escribo de todo esto, como no sea porque esta Galicia es la que nos explica de alguna manera a Maruja y a mí. De Buenos Aires tenemos pocas noticias. De pintura en Madrid vimos muy poco últimamente que valiese realmente la pena, una exposición muy buena de Lucio Muñoz, que expuso hace años en Bonino, una notable grabadora norteamericana y una de dibujos muy buenos ilustrando a Bertold Brecht de un escenógrafo catalán. También vimos otra muy amplia de Torres Aguero con el que estuve en Madrid.
Esto es todo por hoy. Escríbannos. Uno de estos días le escribiré a Dina y Abrasha Rotemberg, de quienes no tenemos noticias. Un gran abrazo para los dos de Maruja y mío:

[Seoane]

1967-05-26
Carta de Seoane a Díaz Dorado. 1967
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Dorado. 1967 en 26/05/1967


Gijón, 26 de mayo de 1967

Ing. Diego Díaz Dorado
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Hace mucho tiempo que le he escrito, ya no recuerdo desde donde, y siempre pensé en volver a escribirle con motivo de algo nuevo que veía y que me hubiese gustado contarle, pero lo fuí dejando hasta ahora. Expuse grabados en Bonn y en Madrid con gran éxito de crítica, público e incluso venta, óleos en Colonia, con el mismo éxito, en la galería Boisserée, en una exposición que termina mañana y que el dueño de la galería donde se exhibe pasa a otra de Hamburgo. La de grabados, reforzada con algunos más de los expuestos en Bonn que envié de Madrid, pasa a exhibirse a la galería “Das Schwarzw”, algo así como “La oveja negra”, en Münster. Ahora, cuando deje Asturias, en la primera semana de Junio, me encerraré en El Castro nuevamente a trabajar. Toda la exposición de óleos que expongo en Alemania la hice en Madrid, trabajando cuanto pude que fué diariamente y durante bastantes horas cada día. Esto es todo lo que se refiere a mi actividad. De Buenos Aires sé lo que cuenta algún amigo y lo que leo en los diarios que no es demasiado, lo que prueba su felicidad o por lo menos de que no ocurren demasiado desgracias que son las que con más frecuencia se destacan en la prensa diaria de cada país.
Hemos visto museos extraordinarios en diversas ciudades de Alemania, galerías con exposiciones notables en Bonn, Colonia, Dusseldorf, Francfort, Munich y Berlín. Pudimos ver en Francfort una exposición muy completa de los constructivistas rusos y holandeses de la segunda década del siglo. En París alcanzamos a ver las tres grandes exposiciones del homenaje a Picasso y una extraordinaria de los “dadás” completada con otra de Roma, aparte de los museos extraordinarios de Nueva York y el antropológico de Méjico. En Madrid alguna que otra exposición regular, una muy buena, ésta sí, de “ingénuos” de toda América. En esta ciudad está comenzando ahora el comercio de arte. Dos buenas muestras, la de un escultor, Serrano, y de un pintor, Lucio Muñoz, que usted seguramente conoce de Bonino en Buenos Aires. Lo que más me impresionó en este viaje fué el “Museo de arte abstracto español” de Cuenca, uno de los más bellos y logrados de cuantos he visto, hecho por iniciativa particular en una de las casas colgadas de esa ciudad y conservando detalles mozárabes del edificio, artesonado, puertas, etc., y un mural gótico del siglo XV en lo que debió haber sido comedor. Este museo me impresionó y me hizo pensar como podría hacerse en un viejo caserón criollo de San Telmo, con muy pocas modificaciones, un excelente museo tambien de arte contemporáneo argentino, donde la gracia de su acondicionamiento sustituya la riqueza, que es lo que en definitiva consiguieron en la antigua casa de Cuenca. Pero de todo esto hablaremos con tiempo a nuestro regreso, como de otras cuestiones a la que ahora no quiero referirme. No sé si usted hizo o no el mural de la sucursal del Banco Español y como quedó, ni tengo noticias de usted, ¿por qué no me escribe? Ahora quiero pedirle un favor, que me renueve en el Banco de Galicia, en la sucursal de Callao, el alquiler de la caja de seguridad que vence el dia 30 de Junio, está a nombre de Maruja y mío, usted tiene el contrato. Tambien nos gustaría saber si el viento no afectó en el departamento de Montevideo el toldo metálico. Le agradeceríamos nos escribiese al Castro, donde vamos a estar hasta finalizar agosto o principios de setiembre.

Reciban sus padres, Carmen y usted el saludo de Maruja y mío, igualmente Lamela y señora y usted el abrazo fuerte de:

[Seoane]

1967-05-26
Carta de Seoane a Negri. 1967
Xixón
Bonn
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Negri. 1967 en 26/05/1967


Gijón, 26 de Mayo de 1967

Srta. Nélida Negri
Bonn

Querida amiga:

Recibimos su carta en Gijón, a donde llegamos el día 21 y donde estaremos hasta el día 8 ó 9 de Junio, con noticias de Payró, de la exposición de Petorutti y de las fotografías de Peter, ¿se escribe así?, etc., que agradecimos mucho y quisiéramos ahora saber algo de la exposición de la Galería Boisserée, que suponemos debe cerrarse mañana, si va a Hamburgo o no, que críticas hubo y cual es su destino. Perdóneme por mi impaciencia. Desde Madrid enviamos un paquete con 14 grabados para completar la exposición de Münster, creo que ninguno de los enviados ahora estaba en la exposición de Bonn, y, con los que quedaron de ésta, pueden constituir una buena muestra de ellos. La de Madrid fué un éxito en todos los sentidos: público, crítica y venta, como le escribí ya a Tomás y quedé muy contento de haberla hecho.
Estamos deseando llegar a Galicia donde comenzaré de nuevo a trabajar, aquí en Gijón, por muchas razones, es imposible, pasamos gran parte del día charlando en las reboticas de mi hermana y de mi cuñado, cada uno tiene una farmacia, y viendo cine, sobre todo películas del Oeste. Todo en un clima de frío, viento y lluvias, pero gozando de un paisaje montañoso extraordinario, con altos picos de nieve y con las laderas y las montañas y valles matizadas de los más bellos verdes. Gijón es un puerto minero, a muy poca distancia está la cuenca carbonífera de Asturias, y su color es blanco, gris y negro que contrasta con el azul agrisado del Cantábrico. La ciudad posée poco interés, apenas unas ruínas romanas y algunos edificios civiles medievales. La gran colección Jovellanos, de dibujos de pintores italianos, franceses y españoles del renacimiento a Goya, fué destruída durante la guerra civil y su pinacoteca municipal tiene solo obras de artistas asturianos, algunos muy interesantes como Valle y Piñole, de un expresionismo local al tratar temas de mineros, campesinos y de la costa.
Suponemos que Payró debe estar ya de vuelta de su recorrido alemán. Nos hubiese gustado mucho haber coincidido con él para gozar de su saber y de sus observaciones, pero debemos contentarnos con limitarnos a comentar nuestros recuerdos en Buenos Aires. Supongo que Tomás habrá recibido ya los dibujos de Lugones, a lápiz y a tinta, pues en la conversación telefónica que tuve con él me había dicho que no los había recibido y me cuesta pensar que se hayan perdido. Fueron enviados desde Madrid por correo aéreo certificado. Le ruego me dé noticias de si llegaron o no y de la exposición de Colonia.

Reciban su madre, Tomás y usted abrazos muy cordiales de Maruja y míos y saludos en nuestro nombre a Payró si está en Bonn:

[Seoane]

1967-05-30
Carta de Seoane a Glusberg. 1967
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Glusberg. 1967 en 30/05/1967


Gijón, 30 de Mayo de 1967

Sr. Jorge Glusberg y Sra
Buenos Aires

Queridos amigos:

Les debemos noticias nuestras desde hace meses, desde alguno de los sitios por donde estuvimos y en los que pasamos escribirles, enviarles una tarjeta, unas pocas noticias o algo así, pero siempre dejándolo, como ocurre con frecuencia, de un día para otro. Tienen que perdonarnos. Sabemos, no recordamos por conducto de quienes, que ustedes viajaron últimamente, no sé ahora si a Estados Unidos o a los países del Báltico y esto nos alegró y alivió nuestra turbia conciencia de malos corresponsales. Estamos en España desde Enero con alguna salida al exterior, a Alemania, a donde fuí a inaugurar una exposición de óleos en la Galería Boisserée de Colonia y trabajando todo lo que pude. Hice algunos grabados nuevos, un retrato de León Felipe de unos apuntes hechos directamente en México, que expuse con mis otros grabados en la Galería Fernando Fé de Madrid, exposición que obtuvo mucho éxito de público, crítica y venta, igual que la de Bonn, con menos venta (también de grabados), que se prolongó durante dos meses. La exposición de Colonia de ahora se cierra precisamente hoy, para, según noticias, inaugurarse en otra galería de Hamburgo cuyo nombre no sé, en contacto comercial con la Boisserée, y la de Bonn a la galería Das Schwarze Schaff de Münster. A los críticos les sorprende tanto la técnica de mis grabados como la de los óleos y lo que alguno llama mi independencia. Pero ya hablaremos de todo esto a nuestro regreso que será a finales de agosto o en setiembre, como de todo cuanto fuímos viendo de arte por las ciudades que pasamos. Únicamente, porque no creo se tenga noticia en Buenos Aires, quiero destacarle a usted un nuevo museo, de iniciativa privada, extraordinario, fundado por un grupo de pintores, Zobel, español-filipino, Torner, etc., en Cuenca, una ciudad extraña a 160 kilómetros de Madrid al sudeste, de edificaciones sobre precipicios que llaman las “casas colgadas”, el Museo de Arte Abstracto Español. Está hecho en una de esas antiguas “casas colgadas”, conservando los restos de un mural gótico del siglo XV, creo, con escenas caballerescas y artesonado, puertas, etc., mozárabes. Creo que es uno de los museos más bellos de cuantos he visto y las obras que se exhiben, en general muy valiosas, escultura y pintura, están perfectamente presentadas. No se puede pedir más. Ahora, antes de irnos a Galicia, estamos pasando unos días en Gijón, Asturias, donde tengo una hermana, gozando del paisaje montañoso de este país, del blanco, negro, es zona carbonífera, y verde envuelto en grises que la distingue. En Madrid, vimos una importante exposición de Torres Agüero, una de grabados en plomo de Rafael Alberti que obtuvo un gran éxito –fue la primera exposición de Alberti en España y no hay que olvidar su significado– y alguna exposición más de algún argentino desconocido ahí que se arriesga, creo yo, a estrenarse aquí no dejándonos del todo bien. Quien, sí, nos deja bien, es un director joven de teatro, Jaime Jaimes, que puso en escena dirigiéndola, en un teatro madrileño Esperando a Godot de Beckett. Éstas son algunas noticias recordadas en este momento que quizá puedan interesarle. Muchas más las comentaremos a nuestro regreso. Escríbanos con noticias de ustedes si no nos guardan rencor por nuestro silencio.

Reciban los dos un abrazo de Maruja y mío:

[Seoane]

Nuestra dirección en Galicia:
Cerámicas del Castro. Osedo. Sada. La Coruña. España.

1967-05-30
Carta de Seoane a Pagano. 1967
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Pagano. 1967 en 30/05/1967


Gijón, 30 de Mayo de 1967

Sra. Sara B. de Pagano
Buenos Aires

Mi querida amiga:

Recibimos su carta aquí, en Gijón, una ciudad antigua, puerto minero, que también lo fué de escuadras nacidas en el pasado para la guerra contra los ingleses o franceses y donde ahora pasamos Maruja y yo, una semanas de ocio. Nos alegró mucho recibir y tener noticias del viaje de Silvia y usted a Méjico, en cuyo país estaba seguro que encontrarían bastantes obras de arte y monumentos que iban a interesarles. Me alegro de la coincidencia de gustos en cuanto a la pintura mejicana mural, en la que se destaca Orozco, por otra parte, de la única pintura, casi puedo afirmarlo así, de caballete, que realmente me interesó. La piel azul, que está en el museo que fué su estudio y dedicado a él, de Guadalajara, y del que no pude encontrar reproducción alguna. Ese cuadro y la bóveda del Hospicio de esa ciudad, con esos hombres grises desnudos entre altas llamas, me parecen de lo más significativo del arte mexicano actual, al menos del que yo he visto. Quizás unos sorprendentes Tamayo últimos, en blanco y negro, que encontré en una Galería de Méjico. Pero a nosotros lo que más nos sorprendió fué la riqueza del arte colonial y de la artesanía popular. Estuvimos en un pueblo, Tlaquepaque, de las cercanías de Guadalajara, quizá uno más entre varios, no lo sabemos, donde la cerámica, el trabajo de los metales, de la madera, etc., resulta sorprendente. Todo el pueblo como un gran taller instalado en casas coloniales con bellísimos patios y jardines donde está presente el recuerdo de antiguas grandezas. De buena gana hubiésemos comprado, Maruja y yo, alguna pieza de cerámica representando a un perro, a un toro, o a un buho de más de medio metro de tamaño y que si recuerdan por el ornamento y algunos detalles piezas españolas, tambien recuerdan no sé por qué, la escultura de las civilizaciones mejicanas perdidas. Es un arte mestizo como lo es la mayoría de la población mejicana y en este mestizaje reside posiblemente uno de los secretos de su fuerza y de su encanto. Cada vez estoy más convencido de que los pueblos son naturalmente barrocos, contémplense los trajes populares de todas partes, los adornos de las mujeres, las ropas de las camas que se hacían en el pasado, las mantelerías, los bordados y me parece ver en el barroco estilo un fermento para el arte popular.
El barroco de los españoles e italianos le hizo bien al arte de Méjico como seguramente el del Perú, encendiendo la imaginación de sus pueblos, abriéndoles nuevos caminos a su gran capacidad creadora. Siento mucho haber despertado tan tarde a estas cuestiones, no haberlas estudiado cuando me atiborraba la cabeza con artículos de códigos y teorías inútiles, por lo que se advierte, de la filosofía del Derecho o de Derecho Penal. Creo que hubiese encontrado, por lo menos las hubiese buscado, las influencias del barroco americano en el barroco español, que ahora superficialmente percibo a través de algunos temas, influencia de la que nadie habla, ni escribe y que sin embargo presiento en el barroco gallego y en el de Salamanca.
Tanto Obispo yendo y viniendo de España a América, o al revés, durante tres siglos, ordenando construcciones de iglesias y monasterios, trayendo y llevando ideas originales de cada uno de los dos continentes, fueron los que produjeron el arte colonial de América y el barroco de España, más colonial seguramente, de lo que los españoles creen. Pero de todo esto ya hablaremos en Buenos Aires, la ciudad americana con una grandeza tambien original, la de hacer surgir todas sus artes del cosmopolitismo fundador. Hablaremos de todo hasta aburrir a los amigos.

Reciba usted y todos los amigos, todos, a todos los recordamos, María Silvia, Pepita, los Golubof, Luisa Kaufman, Anita y Juan, Mario y Rosana, y todos con los cuales me escribo, el recuerdo y abrazo nuestro. Y otro grande para usted de Maruja y de:

[Seoane]

1967-05-31
Carta de Negri a Seoane. 1967
Bonn
Xixón
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Negri a Seoane. 1967 en 31/05/1967


Bonn, 31 de mayo de 1967

Querido amigo:

Dos líneas para agradecerle los Lugones, que encuentro excelentes.
Le adjunto las críticas aparecidas en los dos principales diarios de Colonia: van con la traducción correspondiente.
En cuanto al aspecto “ventas” lamento tener que comunicarle que el resultado fue totalmente negativo. Mañana, 1 de junio, iré a ver al señor Schilling para disponer el transporte de los cuadros a la Embajada donde, si Ud. no decide otra cosa, los guardaré hasta encontrar otra galería. Creo que lo conseguiré, pues la exposición de Boisserée es un antecedente importante y las críticas son buenas. El hecho de no haber vendido no debe preocupar demasiado porque incluso artistas de mucho nombre aquí, no venden. La mayoría de las exposiciones se clausuran con poca o ninguna venta. Dicen que la gente está asustada por la crisis financiera. En fin, volveré a escribirle después de mi entrevista con el Sr. Schilling.
Paso ahora a Mûnster. Los grabados llegaron muy bien y todo está en marcha para inaugurar el 25 de junio. Quieren hacer un afiche y piden un linoleum del tamaño que Ud. eligió para el de Boisserée o más chico, que pueda imprimirse en azul. Si está Ud. de acuerdo, mándamelo por favor cuanto antes, por expreso. Gracias.
Payró se fue muy contento. Lo hemos recordado a Ud. y a Maruja con mucho afecto.

Reciba, junto con Maruja, los más cordiales saludos de su invariable amigo.

Tomás

Señor Luis Seoane
Gijón

1967-06-01
Carta de Seoane a Scheimberg. 1967
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Scheimberg. 1967 en 01/06/1967


Gijón, 1º de junio de 1967

Dr. Simón Scheinberg
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Estamos en Gijón en casa de mi hermana hasta el martes próximo, día 6, y estamos, como quien dice, lejos de todo lo que viene preocupándome en los últimos tiempos, museos, galerías, etc.; Gijón tuvo antes de la Guerra uno de los museos de dibujos más importantes de Europa, el Jovellanos, con el nombre de este ilustre político asturiano, de aquí, de esta ciudad, cuyas doctrinas se habían nutrido de los enciclopedistas franceses y de Feijóo, como muchos de los grandes americanos de la independencia. El museo fue destruido en la Guerra y poseía centenares de dibujos del Renacimiento italiano, Miguel Ángel, Leonardo, etc., y luego Velázquez, El Greco, Zurbarán, hasta Goya y pintores de su época de finales del XVIII hasta principios del XIX. Cuidador de este Museo en la década del 20 fue Moreno Villa, el notable poeta y pintor que falleció exiliado en México, quien confeccionó un catálogo que ya no se encuentra. Fue una gran pérdida la del Museo Jovellanos. Hoy sólo queda el Museo Municipal que posee algunas obras interesantes sobre todo de artistas de la ciudad, los naturalistas de los últimos años del siglo pasado, Álvarez Sala, Martínez Abades, que fueron muy reproducidos en las páginas artísticas del Blanco y Negro y de La Esfera, de un naturalismo regionalista como entonces se usaba, bastante sentimental muy de acuerdo con las poesías de otro asturiano, Campoamor, con sus Doloras. De esa época también, pero que falleció hace pocos años, fue un gran pintor de aquí, de Gijón, Evaristo Valle, triunfador como dibujante en París en revistas de moda, que repentinamente deja la capital del mundo para encerrarse en ésta, puerto industrial, y pintar escenas mineras, trabajos del puerto y escenas populares, con un humor y desgarro próximo por igual a Ensor y a Solana y a quien Lafuente Ferrari, el historiador de arte madrileño, dedicó un tomo impresionante hace dos o tres años. Otro pintor que aún vive, nonagenario, es Piñole, que pintó esos mismos temas y que aún siendo interesante no alcanza a mi juicio, el humor ni el dramatismo de Evaristo Valle. Esto es todo en cuanto a arte. En lo que se refiere a naturaleza, aquí está el Mar Cantábrico que se extiende hasta el Finisterre gallego, acerado, profundo, tormentoso, poblado de naufragios y leyendas, como todo el Atlántico Norte, donde intervienen por igual sirenas y embarcaciones errantes, apestadas, condenadas a errar para siempre, o marinos corsarios, iguales o muy parecidas leyendas que en la costa gallega. Junto a ese mar un país montañoso, abrupto, verde, cuando no negro de minerales, de carbón, que es uno de los más bellos de Europa. También estas montañas encierran leyendas, hadas, las xanas y brujas y sucesos históricos deformados por el pueblo referidos a los moros, muy presentes en Asturias, porque aquí comienza, en Covadonga, la Reconquista. En una ladera de la costa, casi junto al mar, en una casa solitaria, vivió hasta hace diez o quince años una anciana poeta gallega, Rosario Acuña, que tenía fama de bruja y de quien decían las gentes del pueblo que convocaba a los espíritus. Las gentes evitaban el contacto con ella y se apartaban de la casa y a mí me hubiese gustado conocer su misterio, pero parece imposible. Todos los que conozco dicen lo mismo, que tenía fama de bruja, de echar a las gentes el mar de ojo y de reunirse con los espíritus. Es posible que hubiese contemplado más de un naufragio desde alguna de las ventanas de esa casa blanca y solitaria en que vivía. Me hubiese gustado ser su amigo. Debía ser como una vieja sacerdotisa de tiempos remotos. Le escribo a usted sobre pintores y la naturaleza de Gijón y Asturias y, nada de Rosario Acuña, sobre las gentes, mejor lo hablaremos a nuestro regreso. Impunemente, podría hablarse de los indianos que aquí hay muchos en los cafés, hablan en voz alta y recuerdan todos los acentos de América, pero no vale la pena, el asturiano es, en general, bastante vanidoso. Escríbannos. Pueden hacerlo ya al Castro.

Un abrazo para todos los amigos, para sus hijos y un fuerte abrazo para Aída y usted de Maruja y de:

[Seoane]

Porcelanas del Castro. Osedo. Sada.
La Coruña. España.

1967-06-06
Carta de Seoane a Negri. 1967
Xixón
Bonn
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Negri. 1967 en 06/06/1967


Gijón, 6 de Junio de 1967

Dr. Tomás A. Negri
Bonn

Mi querido amigo:

Recibí la carta de usted y de acuerdo con ella le envié ayer, dia 5, por correo aéreo expreso, el linóleum para el afiche de la exposición de grabados de Munster. Es del mismo tamaño que el otro. Si quieren imprimirlo en color azul que lo hagan más bien en un azul oscuro, un ultramar, o no demasiado claro. Esperemos que les guste. Las críticas están todo lo bien que se podía esperar para la exposición de un pintor desconocido en esa, un poco confusas quizás, pero esto viene siendo norma de la crítica de arte en las publicaciones diarias de todas partes cuando el artista es independiente y no aparece claramente comprometido con una escuela establecida o un movimiento artístico determinado, como creo es mi caso. En cuanto a las obras no me gustaría causarle más molestias, le debo a usted demasiado por todo cuanto hizo con esta exposición de Colonia y las otras. Seguramente pasada ya la temporada de exposición lo mejor sea que usted me las remita a C. Macarrón S.A. Jovellanos 2. Madrid, escribiéndome a mí los cuadros que faltan, título y número, para poder advertirlo a la Aduana. Se trata del suyo y del que queda en poder de la Galería. No me preocupa demasiado el no haber vendido, me hubiese gustado, claro está, vender, sobre todo pensando en que pudiesen quedar cuadros en Alemania, o que hubiese aceptado la galería el plan aquel que discurríamos la tarde de la inauguración en aquel café de Colonia, que era otra manera de que quedasen en esa. Otra vez será. De todas maneras disponga usted como crea conveniente. Recibí el catálogo de Pettoruti. Muy bueno. Lástima no poder leer los textos, el de Payró y el suyo. Refiriéndome a esto, usted me debe el que hizo para la inauguración mía, perdóneme que insista en que me lo envíe así como las fotografías de Peter que me pueden ser útiles para alguna publicación futura.
Pasado mañana, dia 8, nos iremos de Asturias a Galicia. Hemos paseado mucho por Asturias todos estos días, a la que ya conocía en gran parte de otros viajes. Es un país de paisajes extraordinarios, de montaña y de mar, con playas entre bosques y rocas altísimas que son muy visitadas ahora por el turismo francés y belga. En Oviedo ví un museo provincial que tiene notables obras de arquitectura prerrománica, relieves, escultura única en Europa aunque no demasiado abundante. De este estilo estuvimos en una preciosa capilla, San Juan de los Prados, como la de San Miguel de [...]

[Seoane]

1967-06-06
Carta de Seoane a Vinitzky. 1967
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Vinitzky. 1967 en 06/06/1967


Gijón, 6 de junio de 1967

Sres. Lea y Juan Vinitzky
Buenos Aires

Estimados amigos:

Recibimos en Madrid la tarjeta de ustedes con el recorte de La Prensa de Buenos Aires referido a mi exposición de Colonia, y agradecemos mucho la atención de ustedes. Estuvimos en esa ciudad sólo unos pocos días, casi exclusivamente para la inauguración y el dueño de la Galería Boisserée la remitió a Madrid, de donde salimos hace quince días para Gijón y aquí estaremos con mi hermana y mi cuñado hasta dentro de dos o tres días que marcharemos a Galicia, donde pasaremos una temporada mayor, en La Coruña, y donde me pondré nuevamente a trabajar en el estudio que me cede un amigo mío pintor y ceramista. A nuestro regreso, hablaremos con calma de la experiencia deducida de este viaje, para mí pródigo en enseñanzas y muy útil. El día 25 inauguro una nueva exposición, la cuarta de la temporada y esta vez en Münster. Antes, además de la de Colonia, lo hice en Bonn y Madrid con éxito de crítica y público y aún de venta, por lo que estamos muy contentos. Pero hablaremos del viaje de ustedes y del nuestro. Debemos noticias de él a muchos amigos, a Maruja e Ignacio, y en la casa, entre otros, a Manuel Goldstein y señora, que estando ustedes ausentes, a quienes molestamos la otra vez, nos hacen el favor de encargarse de nuestro teléfono. Ahora solamente estas pocas líneas de recuerdo, agradeciendo, como dije, el de ustedes.

Reciban el saludo afectuoso de sus amigos:

[Seoane]

1967-06-06
Carta de Seoane a Waisman. 1967
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Waisman. 1967 en 06/06/1967


Gijón, 6 de junio de 1967

Sra. Ora A. de Waisman Diamond
Buenos Aires

Estimada amiga:

Debí haber contestado quizás antes a su carta, pero estuve pensando todos estos días como poder cumplir con usted y la Galería Galatea participando en la muestra El arte en el espejo, y no encuentro manera de poder hacerlo. Resulta muy difícil el envío de un cuadro desde aquí, donde los problemas de aduana son similares a los de Buenos Aires –quizás menos anárquicos y más desinteresados– aparte de que creo no poder fuera de la tranquilidad de mi estudio recrear, como usted expresa, una obra maestra. Quizá se lo hiciese, escogería una obra de pintura románica o algún exvoto popular que considerase conseguido en su propósito, seguramente resuelto con la mayor ingenuidad técnica, o sin técnica alguna, pero bastantes veces de una gran fuerza emotiva y lírica. Pero sería casi imposible luego enviarlo, o así me lo parece, sin contar con un amigo que viajase a ésa, que lo llevaría de muy mala gana por tratarse de este tipo de envío con el que no se sabe si se pueden tener o no dificultades de aduana. Perdóneme por esta vez y créame que agradezco de corazón el que usted me hubiese incluido entre los expositores. El 25 de este mes, inauguro mi cuarta exposición de la temporada, en Munster, en la Galería Das Schwarze Schaf, creo que La oveja negra en castellano. Antes las hice en Madrid, Colonia y Bonn con éxito de crítica y público. También vendí algunas obras. Payró vio la exposición de Colonia, lo que me alegró mucho. Le ruego que le diga a Gategno y a Goldsmith que les recuerdo con afecto, que un día cualquiera les escribiré, que recuerdo con nostalgia la librería y que me guarden los números de Quadrum que vayan llegando.

Que salude usted a los amigos comunes y reciban usted y su espeso el afectuoso saludo de Maruja y mío:

[Seoane]

1968-12-17
Carta de Seoane a Anita e Enrique Goldstein. 1968
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Anita e Enrique Goldstein. 1968 en 17/12/1968


Gijón, 17 de diciembre de 1968

Sres. Anita y Enrique Goldstein
Buenos Aires

Mis queridos amigos:

Empezamos hace apenas unos días, una semana o algo así, a escribir a los amigos. Empezamos a necesitar respuesta, cartas de todos ellos que nos digan de sí mismos y de Buenos Aires. Nosotros hicimos el viaje de la manera que pensábamos: Nueva York, algunas ciudades alemanas, Dusseldorf, Colonia y Bonn y luego Roma antes de llegar a España. Las únicas sorpresas fueron el Museo de Arte Moderno de Roma, o mejor, el viejo museo totalmente renovado, puesto al día, con numerosos autores europeos incorporados y perfectamente situados con arreglo a la trayectoria que siguieron, espléndidamente distribuidas las salas e iluminadas. Pasó a ser uno de los más notables museos de Arte Moderno de Europa. En Barcelona, hemos visto una gran exposición de Miró, alrededor de 400 obras de pintura, escultura y grabado. Le hemos escrito hace algunos días sobre ella a Sofovich. Está dedicada a homenajear los 75 años del pintor y se une a ella la creación de un Museo Miró para el cual éste donó cuarenta obras. Al mismo tiempo, el Municipio de Barcelona le encargó un gran mural para el aeropuerto de la ciudad y la decoración de un trecho del piso de las Ramblas, igual que a Picasso. En cuanto al Museo Picasso, le incorporaron toda la serie de Las Meninas, aparte de nuevos grabados, lo que aumenta el Museo en unas setenta piezas aproximadamente. Barcelona se convierte con todo esto en una de las más importantes ciudades de arte de Europa: Museo de Cataluña, de arte Románico, pintura mural y escultura; Museo Marés, de escultura románica, gótica e imaginería española, estos dos Museos únicos en el mundo. Museo de Arte Moderno, en obras; Museo del Teatro con buena cantidad de bocetos y figurines de Gordon Craig y de la ópera rusa; Museo Picasso, y, pronto, el Museo Miró y el del traje, que va a ser, según parece, un museo muy completo. Aparte de ellos, existen colecciones inusitadas de filatelia, de sombrillas del siglo XIX, de abanicos, de cajas de fósforos del mundo, de naipes, de tabaqueras, etc., que dan idea del amor catalán por el coleccionismo. Pero de todo esto ya hablaremos con calma. En Madrid, hemos visto alguna exposición de pintores nuevos, una exposición Bauhaus y luego los museos tradicionales al que se añadió ahora el Museo de América, que dirige un *ex-compañero mío de Facultad y amigo mío, destinado hasta ahora a la América pre-colonial con piezas aztecas, mayas, incas, etc., pero al que se va a añadir la parte colonial y el arte actual de América.
Bueno, esto es todo. Iré escribiendo regularmente a partir de ahora, sobre todo tan pronto esté instalado en Galicia.
¿Cómo fué al viaje a París? Estamos deseando conocer noticias. ¿Cómo están todos? ¿Y Susana y Edgardo? ¿Está Sofovich en la nueva casa?

Escríbannos y reciba mientras tanto con el saludo para todos los amigos el abrazo de Maruja y mío:

[Seoane]

1968-12-17
Carta de Seoane a Goldstein. 1968
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Goldstein. 1968 en 17/12/1968


Gijón, 17 de diciembre de 1968

Señores Polita y Lázaro Goldstein
Buenos Aires

Mis queridos amigos:

Estamos a punto de instalarnos en Galicia, donde haré nuevas jarras y proyectaré algunas piezas de porcelana y tapices. Hemos estado en Nueva York, algunas ciudades alemanas y Roma. Ahora estamos en España donde volvimos a ver viejos amigos, en Barcelona y Madrid, y parientes. Estamos contentos de todo el viaje y comenzamos ahora a notar los primeros grandes fríos que nunca son tan importantes como dicen, en general, las gentes y acusan los pocos grados de temperatura. Todo esto de los climas resulta ser muy personal, aparte de no ser inmutables como pareciera a través de las geografías al uso. Algunos de los climas templados están situados en la zona tórrida y países fríos en invierno de menos de cero grados o de muy pocos por encima, pero secos, son más resistibles que los de las zonas húmedas con mayor cantidad de grados. Pero todo esto no importa demasiado cuando se tienen ganas de ver museos, exposiciones, edificios, calles, etc., que es lo que nos ocurre a nosotros y lo hacemos casi siempre, y mientras podemos, caminando, que es el mejor modo de ver mundo. Hemos visto así, aparte siempre los museos, grandes exposiciones en Nueva York y naturalmente, ahora, en Europa. Hemos visto todo cuanto es posible ver, o así nos parece, por calles y barrios de Nueva York y las otras ciudades. Hemos visto en Brooklyn, a la puerta de grandes supermercados, los jóvenes con cartelones haciendo campaña contra la adquisición de uvas de California y por el aumento de los jornales a obreros rurales californianos y mejicanos. Eran jóvenes estudiantes con los que estuvimos charlando, pues bastantes eran del sur donde aún se habla español y de zonas donde existen movimientos separatistas. Y hemos también visto la propaganda electoral en Nueva York con carteles inusitados y pósters tremendamente inquietantes para los candidatos, pero a nadie parecía importarles nada. Johnson, su mujer y el Vicepresidente aparecían en una composición fotográfica como pistoleros, y en otra gran fotografía una mujer negra embarazada, sonriente, señalaba con un índice su gran vientre y dice: “Esto lo hizo Nixon”, etc. Todo con un humor tosco, brutal, que tiene muy poco que ver con la ironía de los europeos en general y la porteña. Eso mismo se diría en Buenos Aires de otra manera. Se llamarían pistoleros a Johnson, al Vicepresidente y a la mujer de Johnson de otra manera, así lo creo yo. Me refiero a la propaganda gráfica.
Bueno, ya iremos refiriéndonos a éstas y otras muchas cosas en nuevas cartas. Ahora, por favor, contesten, mándennos noticias. Escriban los dos, o uno de los dos, pero escriban. Les deseamos unas felices fiestas y buen fin y comienzo de Año Nuevo a ustedes y toda la familia. Y con el saludo para los amigos, reciban el fuerte abrazo de Maruja y mío:

[Seoane]

1968-12-17
Carta de Seoane a Varela. 1968
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1968 en 17/12/1968



Gijón, 17 de diciembre de 1968

Sr. D. Lorenzo Varela
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Te escribo sin demasiada confianza en tu respuesta. Simplemente, para que sepas de nosotros y de lo que vamos viendo de España. Estuvimos antes en Nueva York, tres ciudades alemanas, Dusseldorf, Colonia y Bonn y luego en Roma, donde visitamos, aparte algunos monumentos, a María Teresa y a Alberti. Muy bien. Alberti, trabajando mucho. Acaba de hacer un libro dedicado a Miró, con cinco o seis grabados y manuscrito, y destinado a enviarle el número 1 hace, creo, que veinte ejemplares, al mismo Miró, del que estaban exponiendo 400 obras en Barcelona –te envié el catálogo– con motivo de sus 75 años de edad. Y ganando dinero con un disco, el que hizo un joven cantante italiano con un poema suyo, La paloma, y música de Guastavino, adaptada ésta por el cantante a la actual música, si se puede decir así. Alberti está muy optimista con este disco. Piensa ganar con él mucho dinero. Acaba de salir cuando nosotros pasamos por Roma y se habían vendido alguna buena cantidad de ejemplares de La paloma. En Madrid, Aguilar acaba de publicar su libro a la pintura, con reproducciones en color, muy caro, 250 pesetas el ejemplar y del que fuimos excluidos todos los pintores vivos menos Picasso y Miró y algunos nuestros como Portinari. En el caso de lo vivos, quizás para no tener que explicar quiénes somos y por eso que se dice: “justicia distributiva”, y en el de Portinari, porque ya muerto, sin rendir a beneficio, y no habiendo sido ni Goya ni Cezanne, así parece, realmente no vale la pena. Pero dejemos a Alberti. Estamos en España hace casi un mes. Hemos estado en Barcelona y Madrid, espléndidas las dos en muchos aspectos, pero aguantando ambas, como toda España, una crisis económica sorda producida por el cierre de industrias y que afecta al comercio. La gente se queja este Fin de Año, pero continúan hablando del progreso español y enseguida por el éxito del turismo. El progreso consiste, en general, en la producción de electrodomésticos y el aumento de pequeños autos, de Citroën y de la Fiat, muy baratos, y que se compran, como las máquinas eléctricas, en muy cómodas cuotas. Un progreso similar al de los países africanos, o a los de cualquiera del tercer mundo. El progreso se nota en anuncios como éste de Gijón, una ciudad, como sabes, industrial, puerto de la cuenca minera de Asturias, pero sin apenas atractivo alguno, una estatua de Jovellanos, otra de Don Pelayo, una buena playa y unos cuantos cines donde se proyectan películas del oeste. Dice el aviso en La hoja del lunes: “Bonnie y Clyde –Club Boite Fundición, 10. El único ambiente pop de Gijón. Venta de pósters. Carnets especiales para chicos y chicas. Tarde y noche–”. Éste es el progreso. Ni minifaldas, ni cohetes a la luna. Por otra parte, en Madrid, hay 90.000 casas en ruinas y 70.000 departamentos vacíos. Existen jubilados con 500 pesetas mensuales, 2.500 pesos argentinos. Te escribiré con más detalle. Ahora sólo quiero saludaros a vosotros, a los amigos comunes, que paséis unas felices fiestas y fin de año con Fernando y esposa, Hugo, Ariel y novias. A todos, nuestro saludo. Recibid Marika y tú el fuerte abrazo de Maruja y mío:

[Seoane]

1969-04-19
Carta de Seoane a Kornblith. 1969
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Kornblith. 1969 en 19/04/1969


Gijón, 19 de abril de 1969

Sr. D. Isaac Kornblith
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Estamos en Asturias y a muy pocos días, 10 o 15, de regresar a Buenos Aires, pasando unos días con mi hermana. Aquí, en Gijón, tengo una hermana y un cuñado, farmacéuticos ambos, con sendas farmacias, que aún tienen tarros antiguos con nombres medicinales en latín. Estamos a pocos kilómetros de la cuenca minera donde también tengo una prima hermana farmacéutica. En la ciudad, de muy vieja tradición y más que milenaria, todo está negro de carbón, las fachadas de los edificios, las calles y el puerto. Todo huele a carbón. Los antiguos escudos heráldicos, de rancios palacios de piedra carcomidos por la sal del mar, tienen carbón. Como si el carbón lo fuese aquí todo, y lo es, o, mejor dicho, lo fue hasta hace muy pocos años. Ahora se están cerrando minas en una y otra parte de Asturias y se crean fábricas de otros productos que dependen en parte de grandes empresas europeas o yankis y que no rinden lo que se espera. Gijón tiene una gran playa, unas estatuas de sus hombres más ilustres, el rey Pelayo, supuestamente asturiano, lo disputan los gallegos, el de la Reconquista contra los mahometanos, y la de Jovellanos, un gran prócer de la Ilustración Española de fines del XVIII y comienzos del XIX, en sus comienzos jacobino y afrancesado, amigo de Goya, preso y desterrado por la Inquisición y que escribió muy bien sobre casi todo: economía, sociología, política... y que, naturalmente, influyó en España y en los que libertaron América, lo mismo que Feijóo, tanto como los enciclopedistas franceses, y los libros prohibidos que, en el caso de la Argentina, iban de La Coruña a Buenos Aires en el “Correo del Río de la Plata”. Pero todo esto es historia. En la mentalidad de las gentes para la vida diaria esto no cambió demasiado desde los tiempos de Jovellanos. Solamente se incorporaron a los hábitos ciudadanos los nuevos productos industriales y el automóvil para pasear el ocio de los días de fiesta. Pero la mentalidad es casi la misma, treinta años de una política les hizo volver atrás un siglo o dos, en cuanto a determinadas cuestiones y la gente de aquí como la de toda España, marcha al norte de Europa. Es curioso este irse de la gente al norte en Europa. En cierto modo, pasadas muchas generaciones es una vuelta en parte a los lugares de orígen, pues en las múltiples mezclas de las sangres españolas están las de los pueblos que vinieron del norte, de las orillas del Báltico, o del que que se llamó Germania, de los godos, de los vándalos, los suevos, alanos... Ahora vuelven los nietos, los tartaranietos de una parte de esa sangre a servir de peones y el éxodo parece no tener fin. Pero de todo esto ya hablaremos a nuestro próximo regreso. Estos días, el lunes, saldremos para Madrid donde esperamos encontrarnos con Frontini.

Reciban Sima y usted, y todos los amigos comunes, un abrazo grande de Maruja y mío:

[Seoane]