PROXECTO EPÍSTOLAS

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LOCALIZACIóN: Xenebra

Epístolas
80 mencións
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
1963-00-00
Carta de Tschumi a Seoane. 1963
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Tschumi a Seoane. 1963 en 00/00/1963


[Ginebra, 1963]

Estimado Luis:

Ya ve... para escribir soy de lo más lerdo. Aunque en este caso tengo atenuantes, por un lado, las cosas se me complicaron con el hecho que Gladys tuvo que internarse para una intervención... pues las dudas se confirmaron, que por otro, estuve sobrecargado de trabajo por la ausencia de uno de los colaboradores de E.N.I.
Gladys, Victoria y yo los extrañamos mucho y no vemos la hora en que estarán de vuelta. Cuando pensamos hacer algunos paseos, vamos reservando los programas que nos parecen interesantes para hacerlos con Uds. Por lo pronto, ya está el nuevo coche donde podrán estirar mejor las piernas.
Debo decirle, Luis, que me enorgullezco de haber hecho su amistad y me felicito de haber ido ese día para avisarle que Víctor no llegaría a hora.
En los pocos días que he estado con Ud., aprendí muchas cosas importantes que me serán útiles... por lo cual le agradezco.
Seguramente Ud. ya estará en plena labor... ¿está cómodo?.. espero que el Caudillo no lo perturbe demasiado.
¿Qué me dice de los resultados de las elecciones en Bs. As.? ¡La U.C.R.P. a la cabeza! !El acabose! Menos mal que no se escribe en voz alta... pues tendría una discusión con Gladys.
Con Víctor sigo teniendo los “Martes locos”, pero está muy agradable y simpático.
Burnand (sic) y Catalá, de E.N.I., me pidieron que le mande los datos para que estudie los afiches para Swissair. Asunto que Ud. ya está al tanto por Bosseror (textual). En los proyectos, no es necesario poner texto ni marca.
Espero que haya recibido sus cuadros. Para la empresa de aquí Ud. ya los debe tener en su poder.
El proyecto par las vacaciones en Costa Brava lo hemos fijado para el 15 de Agosto. De cualquier manera, le escribiré nuevamente y precisaré la fecha.
Esperando se encuentren felices entre buenos amigos y familiares, los dejo hasta pronto. Un fuerte abrazo para Ud. y Maruja... Besos de Gladys y Victoria y un brrvuvupobrrovuvu! De Adrianita.

Eric

Afiches Swissair
1. SWISSAIR EN GENERAL. Afiche universal que represente la Cia.
2. EUROPA. Para los demás continentes, invitándoles a viajar a Europa.
3. USA. Para el público Europeo, invitándoles a viajar a USA.
4. AMÉRICA DEL SUR. Para el público Europeo.
5. CERCANO ORIENTE. Para el público Europeo.
6. MEDIO ORIENTE (INDIA)
7. LEJANO ORIENTE
8. JAPÓN
MEDIDAS 0,65 X 1,00
A TODO COLOR

1963-03-30
Carta de Seoane a Abt. 1963
Xenebra
Basilea
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Abt. 1963 en 30/03/1963

Ginebra, 30 de Marzo de 1963

Sr. Otto Abt
Basel

Mi estimado amigo:

Hemos pasado con su esposa y Ud. momentos muy agradables y estamos muy agradecidos por las atenciones que han tenido con nosotros. Personalmente le debo a usted, Abt, el amable interés que mostró por mi obra y que para mí significa mucho.
Estamos ya instalados en un pequeño apartamento y a partir de mañana comienzo a pintar. Hace más de dos meses que no trabajo y tengo muchas ganas de comenzar nuevamente. Nos gustaría que si ustedes pasan para algún otro sitio de Suíza o hacia Francia, y Ginebra les queda de paso, nos visiten, o si se deciden pasar un fin de semana en esta ciudad.
Reciban su esposa y usted de Maruja y míos un saludo muy cordial y Ud. el afecto de:



S/C.-
Luis Seoane
4-6 Rue du Lac. Ap. 59
Genève

1963-03-31
Carta de Seoane a Varela. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1963 en 31/03/1963

Ginebra, 31 de marzo de 1963

Sr. Lorenzo Varela
Buenos Aires

Querido Varela:

Hoy comienzo a escribir algunas cartas, pues hasta ahora no hice más que andar, gastar dinero en hoteles –el dinero más dormido– y comidas y en orientarme. En la primera quincena de abril, creo que se confirmará una exposición mía de grabados en Zurich y mañana lunes, en Basilea, se reúnen las autoridades de la Kunsthalle con alrededor de ochenta obras entre óleos y grabados. Hemos alquilado un departamento de un ambiente en Ginebra por dos o tres meses y a partir de mañana comienzo a pintar, pues no traje cuadros y sólo cuento con los veinte que dejé en Basilea en 1960 depositados en la Kunsthalle y los cuarenta y siete grabados que seleccioné en ésa para traer. Los grabados han impresionado por su técnica a los pintores y grabadores que conocí las respuestas sobre algunos de los resultados conseguidos. No vaya a ser el diablo que expongan ellos antes que yo y nos vengan luego esos recursos como novedades de París a Buenos Aires.
Pero pasemos a las noticias que pueden ser interesantes para tu audición radial. En la Galería Krugier de Ginebra se exponen actualmente ochenta óleos del pintor Alexej Jawlensky, que formó parte alrededor de 1921 con Kandinsky, Feininger y Paul Klee, del grupo los Cuatro azules en Alemania. Nacido cerca de Moscú en 1864, alternó en su juventud la carrera militar con la pintura. Alrededor de 1900, abandonó su profesión oficial por el arte, estableciéndose en Munich. Desde la Primera Guerra, debiendo abandonar esta ciudad, vivió alternativamente en Suiza, donde se refugió, y en Alemania al término de aquella. En la primera época muniquense de su pintura se notan influencias fauves y expresionistas, abundando en temas referidos a España, pero siempre destacando en ella su fuerte temperamento eslavo y el carácter popular de sus colores. Su época última se acentúa en él su profunda vocación mística y su obra, puede afirmarse, sólo consiste en cuanto a tema, en una serie considerable de variaciones sobre el rostro de Cristo. Adquiere su pintura una profundidad notable y para nosotros, Jawlensky, es no sólo uno de los grandes continuadores de la iconografía bizantina de su país, es uno de los pintores más hondos de este siglo. Falleció en Wiesbaden en 1941. En los últimos años atacado de parálisis debieron atarle los pinceles a las manos, como a Renoir, para que realizase esos rostros dolorosos y sintéticos que nos trae al recuerdo el tono de las maderas secas y de las cortezas de los árboles.
El crítico de arte del semanario francés L´Express, Pierre Schneider, afirma refiriéndose a una gran exposición de Raoul Duffy en París que: “Los prejuicios nos ciegan en nuestra ignorancia. Se exhiben los síntomas de la vanguardia y nosotros salivamos de éxtasis como los perros de Pavlov”. La frase es un acierto referido a parte de la crítica universal y a mucho público aficionado que supone que el arte es asunto de modas y modistas. Schneider se refiere en su artículo a la solidez del arte de Duffy y a como crece con el tiempo su prestigio de gran pintor. La viuda del artista, Madame Raoul Duffy, ha donado a los museos de Arte Moderno de París y los de Le Havre y Niza 75 óleos, 15 acuarelas y 90 dibujos, además de los tapices y cerámicas proyectados por el artista.
Jacques Prévet, el extraordinario poeta francés, está haciendo un libro en colaboración de Joan Miró, el también extraordinario pintor español. Uno de los poemas del libro es éste:

Mangez sur l´herbe
Dèpêchez-vous
Un jour ou l´autre
l´herbe
mangerá sur vous.

El Museo de Basilea, en Suiza, uno de los más importantes del mundo por la obra que contiene de arte moderno y contemporáneo, aparte de las numerosas obras primitivas y antiguas, entre las que se destaca la valiosa colección de óleos y dibujos de Holbein, exhibe estos días la donación que recibió de Raoul La Roche, uno de los magnates de la industria química universal, que consiste en 1 Juan Gris, 7 Leger, 11 Braque, 6 Le Corbusier, 20 Ozenfat y cuatro esculturas de Lipschitz. Su primera donación, en 1955, consistió en 9 Braque, 4 Picasso, 11 Juan Gris, 10 Leger y uno respectivamente de Ozenfat y Le Corbusier. En tres años los museos suizos de Basilea y Zurich y Berna se han enriquecido notablemente por las cuantiosas donaciones de sus comerciantes e industriales. Igual que en Buenos Aires, podemos afirmar irónicamente.
Bueno, es todo por hoy y dime si te interesan estas noticias. A partir de hoy te iré mandando regularmente las que considere novedad y poco probable que lleguen por agencia a ésa. Me voy a quedar quieto y trabajando en Ginebra por dos o tres meses, con alguna escapada a las otras ciudades suizas y a Grenoble en Francia. Escríbeme aunque sólo sean pocas líneas.

Un gran abrazo de Maruja y uno para Marika y para ti de:

[Seoane]

1963-04-01
Carta de Seoane a Falcini. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Falcini. 1963 en 01/04/1963


Ginebra, 1 de Abril de 1963

Sr. Luis Falcini
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Hace veinte días que estamos en ésta y hasta ahora no traté de hacer otra cosa que mirar y, cuando pude, ver y comprender. Las ciudades suízas son encantadoras, más, para mí, las de la Suíza alemana: Berna, Basilea, Zurich, me gusta lo que tienen de medieval estas ciudades, sobre todo Basilea y Berna y encontrar el arte por sus calles, bueno y malo, pero siempre hecho con amor y oficio. Me gustan las fachadas pintadas, con relieves, o solo con viñetas heráldicas y frases en caracteres góticos que no entiendo, pero distribuídas de manera que uno puede encontrar en su disposición el genio gráfico suízo. Es un arte racional el que hacen las gentes de este pueblo. Racional como sus máquinas y sus comidas.
Suiza va siendo una inmensa máquina donde los hombres actúan formando parte de su engranaje y cuando tienen tiempo para detenerse a pensar en sus vidas sueñan con el apasionado desorden latino, o con la supuesta vida libre en la para ellos desconocida América de las grandes pampas, horizontes y selvas. La misma belleza del paisaje está aquí muy construida y pensada. Apenas queda rincón que el hombre no hubiese diagramado. Se trata de un esfuerzo de siglos y el propósito de libertad que les llevó a hacer este país condicionándolo a las montañas, los ríos y la nieve, y a racionalizar su religión, acaba por encadenarlos. Pienso que la vuelta de muchos suízos a la iglesia católica es un regreso instintivo a las viejas supersticiones, a la poesía de las imágenes y los ritos, a la anarquía teológica y al desorden y variedad latina que distingue a esta iglesia. Nosotros, herederos de Grecia y Roma y de las leyes bíblicas, que la iglesia nos resumió en catecismos y más bien procuró hacernos olvidar, buscamos algo de ese orden y racionalidad que a ellos ahora les distingue. Pero corremos el peligro de sumirnos en otro exceso y en la nostalgia de la acción instintiva, humana y verdaderamente libre. Perdóneme esta disquisición.
Al arte suízo le falta en general dejarse llevar por el instinto, por ese supremo valor del “me dá la gana” de otros pueblos. Todo está demasiado calculado y sabido, por esto, seguramente, su genio se expresa fundamentalmente en las artes gráficas, industriales y prácticas, lo que, a mi modo de pensar, no les desmerece, sino que los distingue. Son sobre todo notables e ingeniosos artesanos y su arte tiene siempre una finalidad colectiva. Se comprende que Le Corbusier sea suízo y hubiese inventado aquello de la “máquina para vivir” refiriéndose a la casa. Uno ve en los museos las habitaciones medievales de este país y ya entonces eran “máquinas para vivir”, como verdaderas máquinas semejan las fachadas de sus casas antiguas, cada ángulo de la decoración formada por las maderas obedece a una necesidad formal de resistencia y geometría.
Quizá esto explique a Max Bill y su concretismo. Pero uno come los sabios e insuperables chocolates de Suíza y a uno le queda en el paladar la nostalgia de los chocolates hechos a mano en las viejas ciudades españolas, heredado del descubierto en Méjico, menos dulce y más arenoso. Más primitivo y más humano, como ocurre con los quesos de Italia y España. He vuelto a ver a Hodler y a los primitivos suízos, Conrad Witz y Nicolás Manuel, se trata de extraordinarios técnicos de la pintura, de grandes pintores que hay que conocer, pero les falta el toque de dramatismo, locura e instinto, o el genio renovador de sus contemporáneos de algunas otras partes de Europa. Hodler pintó algunos cuadros con figuras yacentes. En ellos está todo lo que caracteriza a la muerte, el color y los gestos últimos, pero se trata de una muerte limpia, ascética, muy poco dolorosa y cruel, humanamente animal, tal como la descubrieron Rembrandt o Goya.
En los museos de Basilea y Zurich encontré nuevos ejemplos de escultura, incorporados a partir de 1960 por adquisición o donaciones. A la entrada del Museo de Zurich junto con La puerta del infierno de Rodin y la gran escultura de Lipschitz están ahora Moore y Marino Marini con una maternidad y un caballero, respectivamente. En el patio del de Basilea junto con Los burgueses de Calais de Rodin, está otro caballero de Marini de bronce, como el de Zurich. Pero más que en escultura es en pintura en lo que aumentaron estos museos. Extraordinarias piezas de impresionistas y casi todas las escuelas posteriores se han incorporado a ellos, pero a todo esto iremos refiriéndonos con tiempo en otras cartas. Uno siente como el arte constituye una necesidad para las gentes de Suíza. Está presente en todas partes y hasta ahora no me referí a los maravillosos libros que se ven en las vidrieras de las librerías impresos en Zurich o en Lausanne, o en Newchatel, y por los cuales uno siente, otra vez más, no ser millonario.

Un gran abrazo para todos los amigos, de Maruja y mío, saludos para los suyos y otro abrazo de su amigo para usted:

[Seoane]

1963-04-02
Carta de Seoane a Sofovich. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Sofovich. 1963 en 02/04/1963


Ginebra, 2 de abril de 1963

Sr. Bernardo Sofovich
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Estoy ahora empezando a escribir cartas. Dejé pasar todo este tiempo para poder de mejor manera concretar las impresiones que voy recibiendo de lo que veo. Suiza me gusta mucho. Me encanta su paisaje, su nieve y sus ciudades y hasta sus gentes, creo que más a partir de Berna y hacia el norte. Se ven los defectos, pero también puede uno ir admirando sus virtudes y éstas son todas aquellas que nos enseñaron a practicar de niños nuestros padres y la escuela. Se trata de virtudes elementales y prácticas que sirven para hacer cómoda la convivencia. La practicidad es la norma de conducta habitual de estos montañeses, seguramente impuesta por el clima y la necesidad de preservarse de vecinos ambiciosos. Su fantasía está destinada a la invención de objetos útiles y a encontrar en su ejecución satisfacción artística. Les gusta que las cosas estén bien terminadas y produzcan buen efecto, que sean bellas. Quizás esta cualidad les viene de una larga herencia campesina, de encierros caseros en las largas nieves de sus montañas. Alrededor del fuego para calentarse el cuerpo debieron nacer las mejores virtudes suizas, y las virtudes de su arte. Pintan, dibujan, esculpen con exacta corrección, con largo conocimiento del oficio y con tozudez destinada a hacerlo lo mejor posible. Un gran pintor suizo es Hodler, que no tiene, a mi juicio, la resonancia universal que debiera. Extraordinario dibujante y pintor, un poco frío, pero muy sabio y que en su obra es espejo fiel del temperamento de su pueblo. Yo no sé si fue verdad histórica el suceso de Guillermo Tell o es leyenda, pero, cualquiera sea su origen, esa precisión conque dispara la flecha sobre la manzana que está en la cabeza de su hijo, es la precisión que caracteriza a Suiza y a sus artistas. Posiblemente, nada se encuentra individualmente genial en este país. Su genio, en todo caso, es producto del esfuerzo colectivo. Los retratos de Holder son admirables como lo son muchos de sus paisajes de montañas, donde las nieves y las nubes se confunden en color y forma para dejarnos ver por trozos el azul del agua y el verde de los vegetales. Cada línea de sus retratos es exactamente del tamaño que corresponde y está en el único sitio donde puede estar en el cuadro, sirviendo al mismo tiempo para definir al retratado. Pero esto mismo ocurre en los retratos de Goya o de Rembrandt y existe además algo indefinible que escapa a toda lógica y a la corrección del oficio. Félix Valloton, otro suizo, es un maestro, pero le falta el valor de saber desprenderse de lo que es correcto y que fue aprendido. Uno piensa en Renoir o en Monet, que vivían por los mismos años, posiblemente de más edad, no lo sé, pero que se atrevían a dejarse llevar por la fiebre del color y de la expresión. He visto estos días un desnudo rojo de Renoir muy descuidado de dibujo en el sentido académico, pero bellísimo de color y, ¿quién nos diría que esas manchas verdes y azules de Monet componen el detalle de un paisaje?
Vi algunas exposiciones extraordinarias, una de ellas de Jawlensky, del que le hablo a Scheinberg, y en una galería dedicada a libros de arte y grabados cuatro libritos, más chicos que los librillos de papel de fumar, de 3 centímetros por 2 aproximadamente, ilustrados por Picasso con aguafuertes. Son ejemplares numerados y de muy poco tiraje y cuestan 1.000 francos suizos, unos 31.000 pesos más o menos. Aparte de esto, también algunos espléndidos Picasso que vi por galerías, aparte de los museos, que nunca he visto reproducidos.
Bueno, refiriéndome a cuestiones de otra índole. ¿Cómo va el asunto del cobro de la Hebraica? ¿Qué dice el doctor Bruetman? ¿Y Bernárdez? ¿Continúan yendo a Ranelagh? Suponemos que sí si el verano este año es tan constante en ésa como aquí el invierno. Ayer nevó en Ginebra y hoy amanecimos con lluvia y frío, a pesar de esto, los comercios y las gentes están preparadas para gozar de la primavera. Me gustaría que nos enviasen noticias de ésa. Supimos por los diarios de la renuncia del Ministro del Interior y antes de los sucesos provocados por la actitud de la Marina. Le ruego que nos escriba.

Reciban Elsa y Ud. el saludo de Maruja y mío y además Ud. un abrazo de:

[Seoane]

1963-04-03
Carta de Seoane a Goldstein. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Goldstein. 1963 en 03/04/1963


Ginebra, 3 de Abril de 1963

Sr. Lázaro Goldstein
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Llevamos en Suíza alrededor de tres semanas. Hemos vuelto a ver los espléndidos museos de Basilea y Zurich y los menores, pero también muy interesantes, de Berna y Wintenthur. No hemos visto aún el de Ginebra a pesar de estar viviendo en esta ciudad, pues esperamos visitarlo con calma y algún domingo próximo para evitar pagar la entrada. En tres años, desde 1960, los museos han aumentado en obras de arte moderno. Pintores como Juan Gris creo que solo es posible verlo en su total dimensión solamente en Suíza, entre los museos de Berna y Basilea, pues entre los dos completan las distintas facetas de su trabajo y con obras fundamentales. De Paul Klee solamente el museo de Berna tiene en la actualidad alrededor de ochenta horas y unas treinta o más están en el de Basilea. En las galerías particulares se realizan, en general, exposiciones de grandes pintores actuales o muertos en los últimos años. Aún nos tocó ver en Ginebra una gran exposición de Jawlensky, en Zurich una extraordinaria de Jacques Villón (ésta en el museo), y en Basilea, una muy completa de Paul Klee.
En cuanto a mis asuntos, estoy hasta ahora contento, gustan mucho mis grabados y es posible que exponga en Zurich próximamente. Tengo también aún en proyecto la exposición de Basilea. Llaman mucho la atención las fotografías de los murales y preguntan sobre la técnica con que fueron ejecutados y el emplazamiento. Algunos que he visto hechos últimamente en grandes casas de departamentos son bastante flojos. Sólo en Basilea me llamó la atención un vitral espléndidamente ejecutado para una puerta. Está hecho de metal y vidrio. En otro edificio, el de una empresa de seguros, vi otro, también notable, de metal, no sé qué metal, desde luego inoxidable, sobre piedra. El segundo, abstracto, pero como el primero, de gran efecto decorativo. Ayer he visto uno horrible, pintado, en el vestíbulo de una casa de esta ciudad.
Anteayer alquilamos un pequeño departamento de un ambiente con el tamaño necesario para poder trabajar y no tropezarnos y hoy comencé a pintar. Quiero pasar en Suíza dos o tres meses y no es posible hacer vida de hotel, por los precios y porque no podemos aguantar hoteles y restaurantes.
Suíza parece estar muy próspera y los suizos consideran que Ginebra es en la actualidad la Chicago europea. Aquí se están estableciendo grandes firmas norteamericanas y sospecho, no tengo mayores pruebas para afirmarlo pues me dejo llevar por la intuición, que los norteamericanos pretenden hacer de esta ciudad económica de la Europa que no está incluida en el Mercado Común. Hacer de Ginebra la rival de Bruselas, que también parece crecer industrialmente, pero, en este caso, como centro de la Europa unida en su economía. Tres ciudades se anuncian, según algunos que entienden de estas cuestiones, como tres grandes emporios económicos de este continente: Milán, Ginebra y Bruselas. Cualquiera sea el porvenir, lo cierto es que, aún transitando de turista por Suíza, uno no puede menos de verla como una inmensa fabrica donde el trabajo es el denominador común de todos sus habitantes.
Me interesaría mucho que si usted la tiene, o le es posible conseguirla, me enviase la dirección de Antonio Bonet en España, pues a última hora me olvidé de pedirla en Buenos Aires. De ahí no sabemos más noticias que las que publica Le Monde de París, periódico muy bien informado y con comentarios muy actuales respecto a la Argentina y Sudamérica. Hasta ahora parece que no existe claridad alguna en la política de Buenos Aires y en Le Monde, refiriéndose concretamente a la deuda exterior y al estado de las finanzas, en un comentario último llama a la reflexión a la marina argentina.
Les tendremos al tanto de cuanto vayamos viendo y haciendo por aquí. Por hoy reciban Polita y usted el abrazo cordial de Maruja y mío con el afecto de:

[Seoane]

1963-04-04
Carta de Seoane a Díaz Dorado. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Dorado. 1963 en 04/04/1963


Ginebra, 4 de Abril de 1963

Sr. Diego Díaz Dorado
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Esperé para escribir a los amigos a estar un poco tranquilo y dejar de andar de un lado para otro. Nos establecimos por dos o tres meses, quizá dos, no sabemos, aquí en Ginebra, donde hemos encontrado un departamento de un ambiente en el que puedo pintar y ya comencé a trabajar. Hasta el dia 29, hemos estado entre Basilea, Berna y Zurich e hicimos una visita al Museo Reinhart de Winterthur, una ciudad exclusivamente industrial que como todas las ciudades suizas tiene su interés particular. El Museo está destinado sobre todo a pintura alemana, austríaca y suíza, con una sala importante destinada al grabado francés. La parte impresionista que era lo que más nos interesaba ver está circunstancialmente clausurada lo que nos defraudó bastante. Los Museos de Basilea y Zurich aumentaron en bastantes obras desde 1960 y el de Berna, que a mi juicio es inferior, tiene ahora una colección espléndida de Juan Gris. Creo que para poder ver cómodamente a este pintor hay que venir a Suíza, pues entre Basilea y Berna se reúnen en sus museos más de treinta obras sin contar las de Zurich. Estamos viendo mucho mueble nuevo y nuevos motivos de decoración venidos muchos de ellos de los países del Báltico y de Italia. En uno de los grandes almacenes de Ginebra nos encontramos con sorprendentes Muranos, lástima que un poco caros para nuestros bolsillos y, aparte, no sabríamos como transportarlos. En cerámica no hemos visto objetos superiores a los del otro viaje, pero sí en cuanto a trabajos en madera. En los ambientes preparados en las mueblerías para la venta, incluyen, con los muebles de línea moderna, alguno de “Art nouveau”, como si el prestigio de este estilo volviese a renacer en este aspecto. Encontramos nuevamente los trabajos de trapos como los de las montañas de Galicia, hechos por los campesinos, y que resultan encantadores en la variedad de sus colores, a pesar de la limitación de la decoración general por como tienen que ser hechos. Y volviendo a cuestiones de arte, pude ver algunas grandes exposiciones entre ellas una de Lurçat muy completa, con 70 tapices, algunos de trece metros por cuatro y medio que resultan notables de color, no tanto en su dibujo. Abusa en recursos fáciles para llenar espacios, como mariposas, estrellas y hojas de árbol. Se ve que se siente cómodo en los tamaños más chicos. En general creo que no es un muralista y que si llegó al muro es por la artesanía a que se dedica. Tiene más temperamento e imaginación de ilustrador, pero una imaginación más bien limitada. Como pintor no tiene, para mí al menos, interés. Son interesantes sus cerámicas, no así tanto sus litografías y gouaches. Pues además de los setenta tapices expone unas 110 obras más de otros procedimientos. Sorprendente para mí fué un vitral hecho con vidrios picados de color, acumulados y seguramente puestos de nuevo al horno para fundirlos. Me gustaría saber como es su técnica.
Bueno, esto es todo por hoy. Ahora acabo de recibir noticias alarmantes de ésa. Vamos a salir para encontrar algún diario que nos informe. ¿Cómo andan los asuntos de Citania? ¿Fué el libro de González López a la imprenta? ¿Debo enviar el dibujo de la tapa? Y por Montevideo, la casa, ¿ocurrió alguna novedad? Le ruego me escriba y me dé noticias de ésa.

Salude a sus padres y hermana en nombre de Maruja y mío, y a Martínez Lamela y señora, a Julio Fernández y a los de Citania, y Ud. reciba un abrazo de:

[Seoane]

1963-04-04
Carta de Seoane a Díaz Dorado. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Dorado. 1963 en 04/04/1963

Ginebra, 4 de Abril de 1963

Sr. Diego Díaz Dorado
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Esperé para escribir a los amigos a estar un poco tranquilo y dejar de andar de un lado al otro. Nos establecimos por dos o tres meses, quizá dos, no sabemos, aquí en Ginebra, donde hemos encontrado un departamento de un ambiente en el que puedo pintar y ya comencé a trabajar. Hasta el día 29 hemos estado entre Basilea, Berna y Zurich e hicimos una visita al Museo Reinhart de Winterthur, una ciudad exclusivamente industrial que como todas las ciudades suizas tiene su interés particular. El Museo está destinado sobre todo a pintura alemana, austríaca y suiza, con una sala importante destinada al grabado francés. La parte impresionista que era lo que más nos interesaba ver está circunstancialmente clausurada lo que nos defraudó bastante. Los Museos de Basilea y Zurich aumentaron en bastantes obras desde 1960 y el de Berna, que a mi juicio es inferior, tiene ahora una colección espléndida de Juan Gris. Creo que para poder ver cómodamente a este pintor hay que venir a Suiza, pues entre Basilea y Berna se reúnen en sus museos más de treinta obras sin contar las de Zurich. Estamos viendo mucho mueble nuevo y nuevos motivos de decoración venidos muchos de ellos de los países del Báltico y de Italia. En uno de los grandes almacenes de Ginebra nos encontramos con sorprendentes Muranos, lástima que un poco caros para nuestros bolsillos, y, aparte, no sabríamos como transportarlos. En cerámica no hemos visto objetos superiores a los del otro viaje, pero sí en cuanto a trabajos en madera. En los ambientes preparados en las mueblerías para la venta, incluyen, con los muebles de línea moderna, alguno de “Art nouveau”, como si el prestigio de este estilo volviese a renacer en este aspecto. Encontramos nuevamente los trabajos de trapos como los de las montañas de Galicia, hechos por los campesinos, y que resultan encantadores en la variedad de sus colores, a pesar de la limitación de la decoración general por como tienen que ser hechos. Y volviendo a cuestiones de arte, pude ver algunas grandes exposiciones entre ellas una de Lurçat muy completa, con 70 tapices, algunos de trece metros por cuatro y medio que resultan notables de color, no tanto en su dibujo. Abusa en recursos fáciles para llenar espacios, como mariposas, estrellas y hojas de árbol. Se ve que se siente cómodo en los tamaños más chicos. En general creo que no es un muralista y que si llegó al muro es por la artesanía a que se dedica. Tiene más temperamento e imaginación de ilustrador, pero una imaginación más bien limitada. Como pintor no tiene, para mí al menos, interés. Son interesantes sus cerámicas, no así tanto sus litografías y gouaches. Pues además de los setenta tapices expone unas 110 obras más de otros procedimientos. Sorprendente para mí fue un vitral hecho con vidrios picados de color, acumulados y seguramente puestos de nuevo al horno para fundirlos. Me gustaría saber como es su técnica.
Bueno, esto es todo por hoy. Ahora acabo de recibir noticias alarmantes de ésa. Vamos a salir para encontrar algún diario que nos informe. ¿Cómo andan los asuntos de Citania? ¿Fue el libro de González López a la imprenta? ¿Debo enviar el dibujo de la tapa? Y por Montevideo, la casa, ocurrió alguna novedad? Le ruego me escriba y me dé noticias de esa.

Salude a sus padres y hermana en nombre de Maruja y mío, y a Martínez Lamela y Sra., a Julio Fernández y a los de Citania, y Ud. reciba un abrazo de:

[Seoane]

1963-04-04
Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1963
Xenebra
Magdalena (Arxentina)
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1963 en 04/04/1963

Ginebra, 4 de abril de 1963

Sr. Isaac Díaz Pardo
Magdalena
Pcia. de Buenos Aires

Mí querido amigo:

Aquí estamos instalados en Ginebra hace tres o cuatro días. Hasta ahora no hicimos más que ir de un lado a otro viendo todo lo que hemos podido, museos, exposiciones, en Basilea, Zurich, Winterthur, Berna y aquí, además, naturalmente, de los monumentos y de lo que se ve por la calle que es mucho.
Ahora alquilamos un departamento de una habitación para quedarnos en esta dos o tres meses y trabajar. Ya empecé a pintar. Es posible que exponga en Zurich grabados y en Basilea pintura y grabados, dentro de unos días creo que se concretará algo. Hemos visto muchos juegos de porcelana en vidrieras y grandes almacenes de diversa procedencia, algunos muy buenos y extraordinariamente bellos, pero creemos, Maruja y yo, que no alcanzan en calidad a lo que haces. Uno de estos días, mañana o pasado iremos al Museo Aridna de esta ciudad, exclusivamente consagrado a cerámica y porcelana y que en viaje pasado no nos enteramos de su existencia. Parece que es un museo notable. De antemano tiene el interés de su especialización y de que abarca obras desde la antigüedad hasta nuestros días y de su carácter universal. Es un museo que se mantiene cerrado dos o tres meses del año y se inaugura el 10 de abril. Es posible que nos hubiésemos enterado de su existencia la otra vez por encontrarse cerrado. A Laxeiro le he escrito sobre los emigrantes gallegos en las ciudades suizas y también envié una nota para la audición de Galicia Emigrante. Es impresionante la cantidad de gallegos que vienen y de españoles en general, pero abundan más los procedentes de Galicia. Se siente constantemente hablar gallego por las calles y vienen a trabajar en los oficios más humildes pero son bien retribuidos en sus trabajos. Ganan de 800 a 1200 francos suizos, es decir, alrededor de 30.000 pesos argentinos y la vida en ésta les permite, según nos dijeron algunos, enviar de 2.000 a 3.000 pesetas por mes a sus casas, pero deben trabajar duramente. Es tremendo el caso de España. La gente más útil para el trabajo y la que está en la mejor edad debe salir por Europa para poder vivir, perdiendo el país destinado a criar hombres que solo han de servir a otras naciones. Nosotros nos detenemos cada vez que sentimos unas palabras en gallego. Los conocemos desde lejos por las calles, por el color rosado de los rostros y por la robustez en general. “Cando van, van como rosas...” decía Rosalía de los que iban a Castilla en el siglo pasado. ¿Cómo volverán los que vienen de estos países del centro y del norte de Europa? ¿Y existe alguien ahora, en Galicia, que se conmueva por ellos como Rosalía y Curros en el siglo pasado? Muchos seguramente no volverán como turistas, se desprenderán para siempre de su familia y de su tierra. Aquí los españoles deben adaptar su idioma al italiano para que puedan comprenderlos, y, en general, la población, por lo que nos dijeron, los prefieren a los italianos.
Bueno, me gustaría tener noticias tuyas y de los tuyos y saber que haces nuevo. Por mi parte quisiera que pintases y escribieses además de hacer porcelana. Creo que tienes capacidad de trabajo para hacer las tres cosas sin descuidar ninguna. Escríbenos.

Un abrazo de Maruja y mío. Saludos para todos los amigos. A Mimina le va escribir Maruja a Galicia. Otro trabajo para ti de:

Seoane

1963-04-04
Carta de Seoane a Núñez Búa. 1963
Xenebra
La Plata
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Núñez Búa. 1963 en 04/04/1963


Ginebra, 4 de abril de 1963

Sr. D. José Núñez Búa
La Plata

Querido amigo:

Te escribo desde Ginebra donde me quedaré dos meses o algo más. Me gusta Suiza y en esta ciudad viven algunos amigos españoles y argentinos a quienes puedo ver cuando siento nostalgia de hablar de Argentina y España, y castellano, pues gallego se siente ahora a menudo por las calles de Ginebra y de las otras ciudades del norte de este país.
A Laxeiro y a Díaz Pardo les escribí sobre esto. En 1960 apenas había emigración española aquí. En menos de tres años se calcula que entraron alrededor de 16.000 inmigrantes, una gran parte gallegos. Suiza progresa notablemente. A Ginebra la consideran por su progreso industrial y por la cantidad de fábricas europeas y norteamericanas que se establecieron aquí en los últimos años, como una especie de Chicago. Pienso que esto no es un honor para la patria de Rousseau y la adoptiva de Voltaire, aunque se une perfectamente con su tradición calvinista ya que, según parece, fueron los consejos de Calvino los que la convirtieron en emporio relojero e industrial. De cualquier modo se nota que las gentes viven cómodamente y necesitan de mano de obra extranjera para poder desenvolver su comercio e industria. Sin embargo los suizos sueñan con América, temen a la posible guerra, a las andanzas de De Gaull[e] y de Adenauer y piensan en el continente americano como un lugar de libertad, con selvas y grandes pampas, remoto para cualquier contienda, naturalmente, que europea. No se imaginan guerras que no sean europeas. En este sentido no han mejorado desde 1960. Los técnicos en general marchan en cantidad a otros países, a África, Norteamérica sobre todo, y las simpatías de los que se dirigen a América del Sur las tiene San Pablo, en Brasil. De una verdad están seguros y la temen y es que, en caso de guerra, Suiza no podría quedar neutral, tiene demasiados compromisos con uno de los dos bandos que hasta ahora aparecen como beligerantes. Claro que puede cambiar, pues la política suele depararnos grandes sorpresas.
Hasta ahora hemos andado por otras ciudades de Suiza: Berna, Zurich, Basilea, Winterthur. Dejamos las más cercanas a Ginebra para más adelante. De momento quiero pintar, trato de preparar alguna exposición que es posible pueda hacer de grabados y pintura. También recoger notas para enviar a El Día y tratar de normalizar mis colaboraciones a Galicia emigrante. Ya envié una referida a los inmigrantes gallegos en Suiza, con algunos datos que logré conseguir hablando con algunos de ellos. Los días aún viendo museos y galerías de arte y momentos, se nos hacen largos y tengo las mañanas dispuestas para el trabajo. Las noches resultan más largas que los días pues Suiza es una inmensa fábrica donde todo el mundo madruga y se acuesta tempranísimo. En esto les queda, como en otras cuestiones, un fuerte resabio de país campesino.

Bueno, nada más por hoy. Saludos de Maruja y míos para Otilia y para ti y tú recibe un fuerte abrazo de:

[Seoane]

1963-04-08
Carta de Seoane a Goldstein. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Goldstein. 1963 en 08/04/1963


Ginebra, 8 de abril de 1963

Sr. Enrique Goldstein
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Acabo de recibir su carta, hoy, domingo, entregada con especial formalidad por un empleado de correos a las nueve de la mañana. Ayer tarde habló Ruty* con Maruja por teléfono desde Interlaken, y, seguramente, este fin de semana y de vuelta de Zurich, a donde tenemos que viajar el jueves, veremos a los padres de Anita y a su hermana.
Debió llegar a poder suyo una carta que le había escrito estos días pasados con noticias nuestras y de lo que fuímos viendo de más importante en los museos y galerías de las distintas ciudades de Suíza del norte, y participándoles que en la misma casa donde vive una amiga nuestra, funcionaria de la Organización Internacional del Trabajo, alquilamos un departamento de un ambiente para el tiempo que estemos aquí. Estoy pintando, tengo cinco cuadros nuevos, dos alargados de 1,50 aproximadamente por 50 cm., y otros tres más chicos. Nuestro viaje del jueves a Zurich lo hacemos para concretar una exposición de grabados en una galería destinada a este género de arte, a cuyos dueños entusiasmaron los que yo hago. También, aparte de Basilea, estoy en conversaciones con una galería de Ginebra, pero todo aquí es muy lento y objeto de muchas reflexiones y tropiezo con la dificultad de ser un pintor desconocido procedente de un país absolutamente ignorado en estas cuestiones. Si viniese de Nueva York o París, todo se hubiese resuelto en el acto, pues mis trabajos interesan mucho. En Zurich, tendré ocasión de ver esta semana la gran exposición retrospectiva de Max Ernst que prepara el museo, y aquí, en Ginebra, alrededor del 20, la del cubano Willfredo Lam, que desde hace años reside entre Nueva York y París.
Me sorprende la carta de la Otis, pero no me enteré exactamente de qué se trata ni de qué papeles, pues, en su carta, no venía la muestra que me anuncia. De cualquier manera, cuando me escriba, me gustaría saber qué es, a lo mejor, pienso, es papel para pruebas de grabado, en este caso, me lo guarda en la oficina o lo mete en el departamento de Montevideo. De todas maneras, para escribirle y agradecerle a Otis, deseo saber bien en qué consiste el envío. Perdóneme esta molestia, pero si es una atención que tienen conmigo, quiero agradecérsela, como le agradezco a usted su preocupación por esta cuestión. Nos alegró mucho la noticia de Anita y recordaremos la fecha, octubre, en que calculan se acrecienta la familia.
Me gustaría saber de Fiterman, Jenijovich, su tía Rosita, Edgardo y Susana, a todos ellos envío mis saludos. A su padre le hemos escrito también días pasados. Les recordamos a todos.

Un gran abrazo de Maruja y mío para Anita y Ud y Daniel, y otro más para usted de:

[Seoane]

1963-04-08
Carta de Seoane a Varela. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1963 en 08/04/1963


Ginebra, 8 de abril de 1963

Sr. Lorenzo Varela
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Apenas tengo otras noticias nuestras que darte de la que continuamos en Ginebra, haciendo pequeñas salidas a otras ciudades de este país, y de que estuve dos o tres veces con Herrera Petere que siempre te recuerda con cariño. Muy envejecido, preocupado por el destino de lo que escribe y luchando para que le estrenen una obra de teatro en Lausanna y Ginebra. Trabaja mucho en su oficina de la Organización Internacional del Trabajo, y hace, en general, la vida metódica y aislada de los suizos. Nuestras noticias de Buenos Aires son, hasta ahora, muy limitadas. Creo que Le Monde fue quien mejor informó sobre los últimos sucesos. Pero, he aquí algunas noticias últimas por si pueden seros útiles para la audición:
En París, se acaba de estrenar por el Teatro Nacional Popular Luces de Bohemia de Valle Inclán en el Teatro Odeón. Con Divinas Palabras, son dos de las obras de este autor español en las carteleras de teatro de esa ciudad. Las obras de Valle Inclán muestran en Francia la España de su época, como, por los mismos días en otros estrenos, muestran la Alemania e Irlanda, la suya, obras de Brecht y de O´Casey. Algún crítico al escribir sobre Valle Inclán reconoce la pincelada goyesca y negra del escritor, pero consideran Luces de Bohemia como un excelente croquis al lado del admirable mural de Divinas palabras. Poirot Delpech escribe de este estreno: “Una evocación afectuosa, una espléndida lección de independencia de espíritu”.
Ansermet, el excelente músico suizo bien conocido del público de Buenos Aires, acaba de estrenar en Ginebra La Atlántida, de Manuel de Falla, el compositor español fallecido en Córdoba, ciudad donde vivió largos de años de destierro, entregado a la tarea de escribir esa obra, comenzada en España e inspirada en un poema del poeta catalán Jacinto Verdaguer. El estreno constituyó un notable éxito, aún cuando la crítica señaló defectos que atribuye a Halfter, el músico español discípulo de Falla, que la ordenó, y que se hizo cargo de completar algunas de sus partes, al fallecimiento del genial músico.
Por la televisión suiza se proyectó una película consagrada al excelente afichista y decorador francés Paul Colín, uno de los renovadores de la decoración teatral contemporánea y del cartel de publicidad. Fue luego de la Primera Guerra decorador y pintor de Music-Hall y cabarets negros, entonces de moda, y pintó desnuda, en 1921, a Josephine Baker que acababa de llegar a París procedente de Estados Unidos con una compañía de girls a la cual pertenecía. Dibujó carteles e hizo decoración para el Studio des Champs-Elysées y para los espectáculos de los Pitoëff, para obras de Jules Romains, Mercel Pagnol, Georges Neveux, etc. Anciano, afirma: “De los tres mil nombres escritos en mi libreta de direcciones, hay diez de amigos, y de estos diez sólo puedo contar con tres”.
En el museo de Ville de París se está haciendo una exposición retrospectiva de Georges Mathieu. La crítica, casi en su totalidad, arremete contra el pintor y su obra. André Chastel escribe: “Uno se apercibe con sorpresa que el secreto de Mathieu es lo bonito, lo chic, el estilo Dior: sus entonaciones de malva y gris en las pequeñas telas y su administración obsesiva del rojo y del negro, son los rasgos más notorios de una vocación de sastre un poco audaz”. “Estos cuadros ofrecen un interés enfermizo que se puede apreciar sin tener en cuenta la literatura que le acompaña y que abunda, como en los envoltorios de los productos farmacéuticos”. Otro crítico, Claude Roger-Marx, dirigiéndose al director del Museo, escribe: “No, la función de nuestros conservadores no es la de estampillar productos destinados al gran fracaso”. “Los títulos mixtificados cambian, el cuadro no: siempre las mismas salpicaduras del pincel, los mismos signos que no significan nada, los mismos fuegos de artificio, los mismos colores eyaculados del pomo, el mismo dinamismo loco que, no traduciendo ningún movimiento interior, queda en decorativo”. Mathieu, que suele ejecutar en público un gouache en algunos segundos y una tela al óleo en pocos minutos y que organizó a los cuarenta y dos años de edad sesenta exposiciones en Francia y catorce países más, es un producto exclusivo de la actual especulación comercial del arte, siendo como en el caso de Dalí, él mismo su principal agente.

Son cuatro noticias de estos días. Escríbeme y dime si son útiles. Saludos a los amigos y un gran abrazo para Marika y para ti de Maruja y mío

[Seoane]

1963-04-19
Carta de Seoane a Varela. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1963 en 19/04/1963


Ginebra, 19 de abril de 1963

Sr. Lorenzo Varela
Buenos Aires

Querido Varela:

Aquí te van nuevas noticias, espero que te sirvan de algo. De nosotros, no tenemos nada que contaros. Trabajo y mañana o pasado viene a ver mis cosas el dueño de una galería de Ginebra. Durante la semana de Pascua quedó desierta Suiza, o sus habitantes se movilizaron de un lado para otro buscando los rincones más escondidos del su país. Nosotros hemos estado en Zurich e Interlaken. En Zurich, vimos una gran exposición de Max Ernst. Pero ésta es la primera noticia, ahí va:
En el Museo de Bellas Artes de Zurich se abrió una exposición retrospectiva del pintor surrealista alemán, nacionalizado francés, Max Ernst. Se presentan 231 obras de pintura, escultura, grabado y collages y, en vitrinas, algunos álbumes y libros ilustrados por el pintor y joyas diseñadas por él. Se trata de la exposición más completa que se haya hecho de Max Ernst y se considera un acontecimiento artístico europeo. Las obras más interesantes, a nuestro juicio, son las que abarcan los años que van de 1926 a 1930, con los temas de los bosques, metamorfosis de pájaros y hordas. En los años siguientes, los recursos de oficio que había ido descubriendo durante ese período se convierten en mecánicos y, de hace dos o tres años, es el muy flojo Retrato de Dorotea, (Dorotea Tanning, de Arizona), ejecutado con un lenguaje impersonal y consabido. Se trata, sin embargo, de un gran pintor, un pintor alemán por la rigurosa artesanía de que hace gala y por el mundo romántico que utiliza en su temática.
Eugene Ionesco acaba de publicar un largo artículo contra los críticos de teatro y la crítica profesional en general, Critiques, vous vivez de moi!, se titula. Afirma “Que la crítica sea hecha por los novelistas, los pintores, los filósofos. Delacroix comprendía la poesía mejor que los críticos literarios de su tiempo. Baudelaire y Apollinaire comprendieron la pintura que los críticos de pintura no comprendían”. Con este párrafo termina el artículo provocado por los comentarios desfavorables a su última pieza, Le piéton de l´air. Con motivo del centenario de la muerte de Delacroix, Claude Roger-Marx afirma en un ensayo que el gran pintor romántico fue para los escritores de su tiempo, lo que Baudelaire para los pintores y el más grande de los críticos de arte, coincidiendo, sin hacerlo y sin propósito seguramente de coincidir, como lo afirmado por Ionesco.
El Director de orquesta, Ansermet, uno de los más famosos desde hace muchos años que sostuvo y, seguramente sostiene, vinculaciones con destacadas figuras intelectuales argentinas entre las cuales debe citar a Victoria Ocampo, preside, en Ginebra, el Comité ginebrino por la amnistía a los presos y exiliados políticos españoles. El grupo que constituye dicho comité comprende importantes intelectuales de esta ciudad. Estos días enviaron un telegrama al Papa Juan XXIII y al ministro español Fraga Iribarne, en favor de Julián Grimau, sujeto a proceso en Madrid.
La actriz norteamericana Olivia de Havilland, famosa intérprete de Lo que el viento se llevó y Foso de serpientes, acaba de publicar en Londres un libro titulado Todos los franceses padecen del hígado, en el que comenta costumbres y tradiciones de Francia. “El pecho de una mujer, como los franceses afirman, –escribe Olivia de Havilland– tiene más importancia cuando ella está sin ropas que cuando las lleva”. Y comentando la necesidad de vestirse sexy ella añade: “En Francia, jamás oí hablar de tal asunto. Una acepta por definición que siendo mujer se es sexy y no tenéis necesidad de vestiros para probarlo”.
Estas son cuatro noticias últimas aparte de las políticas que son muchas y muy interesantes, pero que no creo sean oportunas en este momento de Buenos Aires.

Un gran abrazo para Marika y para ti de Maruja y mío:

[Seoane]

Nota: Dile a Marika que compre todas las plantas de carbón antiguas que encuentre. Los comercios de antigüedades de Suiza la tienen a la venta justamente con objetos y obras de arte que a nosotros nos parecen más valiosos.

1963-04-21
Carta de Seoane a Whitelow. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Whitelow. 1963 en 21/04/1963


Ginebra, 21 de abril de 1963

Sr. Guillermo Whitelow
Buenos Aires

Querido Willy:

Hace más de un mes, casi dos, que salimos de Buenos Aires, sin plan alguno fijo y pensando más bien quedarnos algún tiempo en Suiza antes de ir a España. No sé por qué Suiza me atrae, tan distinta a mi temperamento, tan ordenada y quieta. Quizás porque sé que entre estos ciudadanos exactos, de muy antiguo calculadores de minutos y segundos, aficionados a las máquinas de precisión, ellos mismos máquinas de precisión, se consumieron muchas vidas apasionadas de desterrados ilustres, desde Paracelso a Nietzsche, o desde Erasmo y Holbein a Hesse y Jawlensky, que vivieron extraños, observados por los ojos fríos como agujas de relojes de las gentes de este país. Unos ojos azules sin pupilas que no miran y taladran como si fuésemos culpables de un delito que no recordamos, que buscamos en vano en nuestra memoria y no recordamos. O, quizás, solamente, de pisar con nuestras sucias suelas de extranjeros el suelo de su país. Un suelo que un suizo de estos días encuentra excesivamente sucio de excrementos de perros, detallando su número –48 de un puente a otro, 34 de una a otra calle– en una carta abierta dirigida a un diario de esta ciudad. En Zurich, pasamos por delante del Cabaret Voltaire, donde el dueño actual parece empeñarse en vano en mantener el fantasma de los Dadá, al lado de la casa donde vivió Lenin que, hace cincuenta o sesenta años, seguramente, miraba curioso a través de sus vidrieras a esos revolucionarios del arte. Volvimos a ver en Basilea, en el museo de la ciudad, los extraños objetos de la cirugía y de la alquimia medieval y, en las calles, el gaitero de Holbein y las viejas casas que ostentan orgullosas un nombre, incomprensible para nosotros, escrito en caracteres góticos sobre una fecha que puede ser 1398 o 1425 y que, desde entonces, fue renovada muchas veces y amparó muchas vidas y muchos muertos y las más extrañas historias que ya nadie sabrá jamás. En Ginebra, me gusta recordar a ese español muerto a fuego lento por decisión de Calvino increpándole en su agonía a éste por haber ahorrado leña para el fuego que le quemaba. Al español furioso, probablemente con el mismo gesto furioso con que le representaron los librepensadores de Francia en la estatua que le erigieron en París, y a Calvino sentado, tétrico, reflexivo, contemplando el espectáculo que él mismo había organizado, oliendo la carne quemada y mirando a las llamas subir al cielo hasta el mismo trono de Dios, con sus ojos casi ginebrinos, calculadores, fríos y sin pupilas.
Vemos todo esto y los museos, algunos magníficos, Basilea y Zurich, y las grandes exposiciones que la riqueza suiza trae a estas ciudades, pero empezamos a sentir nostalgia del desorden mediterráneo y del céltico, el del Atlántico de los Finisterres. Vivir en Suiza es como vivir en el purgatorio donde no se goza del cielo ni se sufre de las condenas de los hombres. Es el purgatorio de Europa.
Estamos sin apenas noticias de ésa, sólo algunas políticas a través de los diarios. Mándanos a decir algo y la dirección de Bonino en Estados Unidos. Aunque para ti sea un castigo, escríbenos unas letras. Saludos a todos los amigos, a Mujica Láinez, a Adriana y un abrazo de Maruja y mío para ti:

[Seoane]

1963-04-22
Carta de Seoane a Aisenson. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Aisenson. 1963 en 22/04/1963

Ginebra, 22 de Abril de 1963

Arquitecto José Aisenson
Buenos Aires

Querido amigo:

Estamos aquí en Suíza desde hace ya más de mes y medio. Hemos recorrido mucho de este país y hemos visto nuevamente los museos más importantes: Basilea, Zurich, Berna, Winterthur y algunas magníficas exposiciones de pintura como las de Paul Klee , Jacques Villon , Jawlensky , Max Ernst , Lurçat, etc., extraordinarias, descontada su calidad por la cantidad de obras expuestas. Solo le escribo ahora por la de Lurçat, que se realiza en Ginebra, y que a mí no me gusta demasiado, por el amaneramiento de sus formas que recuerdan un modernismo gráfico de alrededor de los años veinte y porque pienso que casi nunca resuelve como muralista sus grandes tapices, cuyos espacios cubre de estrellas, hojas, mariposas, pequeñas viñetas multicolores, etc., burlando una posible solución. Es un gran artesano que si consiguió popularizar en nuestro siglo el tapiz, no renovó, a mi juicio, su técnica ni consigue imprimirle la grandeza de los pequeños tapices medievales. Pero no le hablo de Lurçat para hacer su crítica, sino porque en la exposición donde muestra cerámica, alguna magnífica, pintura, litografías, joyas, hay como cuatrocientas obras de él, tiene un vitral realizado con una técnica nueva que éste sí me pareció un aporte notable a esta artesanía. Un vitral espléndido, donde la luz adquiere los matices más sutiles y en el cual se prescinde del plomo y de cualquier clase de nervaduras para convertirlo, con sus vidrios acumulados y seguramente unidos a fuego, no lo sé, en un solo vidrio maravilloso. Le escribo de esto porque sé que a usted le interesan estos procedimientos y en compensación de no haber visto aún los de Lucerna que usted me recomendó que viese.
Nosotros hemos alquilado aquí un pequeño departamento de un ambiente y en él estoy pintando exactamente como en Buenos Aires, con alguna exposición en perspectiva y esperando quedarnos en Suíza uno o casi dos meses más. Como sabemos que ustedes tenían pensado viajar a Europa, por alrededor de estas fechas si no entendí mal, nos gustaría mucho verles en esta ciudad que a nosotros nos gusta mucho, aunque no más, desde luego, que Basilea. No olvido la conversación con el Sr. Saiace y me ocupo de ver lo que puedo de artes gráficas, que en esto, a mi juicio, se distingue el genio suízo.
Saludos a su hermano y a los suyos y a los amigos comunes y reciban Margarita y usted, de Maruja y mío, el cordial de:

N/dirección.- 4-6 Rue du Lac. Ap. 59
Ginebra

1963-04-22
Carta de Seoane a Sofovich. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Sofovich. 1963 en 22/04/1963


Ginebra, 22 de abril de 1963

Sr. Bernardo Sofovich
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Le he escrito hace unas semanas la primera carta desde ésta dándole cuenta de nuestra vida en Suiza. Un vida ahora regular, con menos viajes a otras ciudades y encerrado parte del día en el departamento, trabajando. Tengo unos óleos nuevos y quizás, dentro de unos días, me ponga a hacer algunos estarcidos. Habituados al ajetreo deshumanizado de Buenos Aires, todo es aquí demasiado tranquilo y lento y ni siquiera se parece notar en esta ciudad que en uno de sus barrios se deciden medidas que afectan al mundo entero. Visitamos galerías de arte, pero nada vemos en las exposiciones individuales, como no sean de artistas consagrados, que pueda interesarnos más que las exposiciones corrientes de Buenos Aires y nos recorremos la ciudad una y otra vez, sobre todo por su parte antigua, para sorprendernos con la vieja bodega cambiada ahora en boutique o en galería artística, con un buen gusto notable. A veces pensamos en las viejas casas de Buenos Aires susceptibles de ser transformadas en algo parecido y, sin embargo, condenadas a la demolición. Casas de San Telmo o del bajo que parecen avergonzar a muchos porteños. En esta ciudad y en la otras suizas, Zurich, Basilea, se pueden encontrar grabados de artistas muy destacados, –excluyendo, naturalmente, los grandes nombres de Picasso, Braque, Miró– y de tirajes que oscilan entre los 100 y 200 ejemplares, a un precio aproximado de 3.000 pesos argentinos. Los libros, en general, están a los precios de Buenos Aires, resultan muy caros aquí mismo donde los hacen. Para estos días se anuncia en Ginebra la inauguración de una gran muestra de Wilfredo Lam, el pintor cubano, que tengo mucho interés en ver. En Zurich, le he escrito a Sarita (Sarita, hermana de la mujer de Scheinberg), vi una exposición de 230 obras de Max Ernst, muy interesantes. Pero todos estos goces se alteran con las noticias que llegan de Buenos Aires. ¿Qué pasa ahí? Le Monde hizo algún comentario muy atinado con respecto a la situación argentina y hoy uno espléndido con motivo de la ejecución de Grimau en España, que hizo reaccionar a Europa con diversos actos de protesta. Estamos necesitados de noticias.
El día 2 del mes que viene, de mayo, vence el segundo pagaré impuesto a los réditos. Creo que Bernárdez debió haber liquidado los intereses correspondientes de la deuda de Ranelagh y, si es así, le rogaría que me hiciese el favor de hacer pagar su importe en la sucursal del Banco de Santa Fe y Azcuénaga. Son 7.998 pesos.

Bueno, esto es todo por hoy. Esperamos impacientes noticias de ustedes y de todos los amigos. Un abrazo de Maruja y mío para Elsa y usted y reciba además uno fuerte de:

[Seoane]

1963-04-24
Carta de Falcini a Seoane. 1963
Bos Aires
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Falcini a Seoane. 1963 en 24/04/1963


Buenos Aires, 24 de abril de 1963

Sr. Luis Seoane
Ginebra

Mi querido amigo:

Hace varios días que me llegó su hermosa carta de Ginebra con su amplio panorama de Suiza y de los suizos, con su penetrante visión de hombre y artista latino. La hice leer de Sofovich, y yo leí la que le usted envió a él, en Ranelagh, en compañía de Elsa, Sarita y María Luisa Sofovich, recordándoles a Uds. dos viendo la casa que fue de Uds., lamentando todos que se hubiesen desprendido de ella. En fin, recordándoles mucho. Al día siguiente en lo de Scheimberg nos intercambiamos la lectura de las respectivas cartas recibidas. Todos esperamos que allí les esperen muchas satisfacciones: trabajos, exposiciones, compras, resonancia artística pública, buena acogida de la crítica y de los artistas, sin excluir –claro está– del público visitante de las muestras y que no olviden de viajar mucho durante la estadía en Europa, que se las deseamos larga y provechosa. Sé muy bien que llegan a una Europa convulsionada que ofrece al hombre sensible aspectos desagradables y otros agradables que compensan y justifican el viaje, máxime sabiendo que han dejado una Argentina en manos militares engreídos de su fuerza material y de su incultura política y general, que han impuesto el miedo y el desasosiego que paraliza las mejores intenciones en todos los sectores del país. Hoy se anuncia ya la postergación de las cacareadas elecciones generales, con las proscripciones conocidas. Se han prohibido las manifestaciones el 1º de Mayo y la C. G. T. ha resuelto acatar la prohibición, tratar de realizar actos en locales cerrados. Pero, hasta ahora, no se advierte ninguna reacción popular...
El fusilamiento del comunista español no tuvo repercusión entre nosotros, al menos ostensiblemente. Indiferencia o inactividad por temor? Hasta cuándo?
El Museo Nacional de Bellas Artes ha comenzado a exponer esculturas al aire libre en una parte de los jardines que rodean a su edificio. Entre ellas figura mi Mujer del Éxodo. Comienza en la ciudad el movimiento artístico a través de las exposiciones. Entre nuestros amigos el asunto [Evgueni] Evtouchenko y sus derivaciones actuales y futuras da lugar a fuertes y apasionadas discursiones...
Advierto los diferentes panoramas que muestran en su carta y la mía, por ello los felicito una vez más por haber emprendido el viaje, aún con deseos de volverlos a ver pronto. Mientras tanto reciban, Ud. y Maruja, nuestros saludos, de los míos, y de este su amigo, un fuerte abrazo para Ud. de

Falcini

1963-04-28
Carta de Seoane a Kleinman. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Kleinman. 1963 en 28/04/1963


Ginebra, 28 de Abril de 1963

Sr. Julio Kleinman
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Hace y algo más de un mes y medio que estamos en Suíza y hemos visto en todo este tiempo una cantidad notable de museos y exposiciones importantes. Los museos han aumentado considerablemente en estos tres años, sobre todo los de Basilea y Zurich, el de Berna también con con espléndidas obras de arte contemporáneo. Aumentan con donaciones de particulares. La Roche, uno de los propietarios de la industria química de ese nombre, acaba de hacer una donación muy importante al museo de Basilea consistente en varios Braque, Juan Gris, Picasso, Leger, Le Corbusier, etc. Estamos, pues, como puede imaginarse, muy contentos de poder gozar de todo esto, de la maravilla del paisaje de este país, de sus viejas ciudades y del arte que reúnen, pero nos faltan los amigos de Buenos Aires. Seríamos felices si todos estuviesen aquí con nosotros. No tenemos planes concretos para orientarnos en los próximos meses. Estoy pintando. Alquilamos un departamento amueblado de un ambiente y en él trabajo todas las mañanas como si continuase en el departamento de Buenos Aires. Trabajo mucho. Por las tardes, salimos a buscar diarios para tratar de conseguir noticias de esa y andamos por la ciudad antigua y por las galerías de arte.
Las obras mías, óleos y grabados, parecen gustar mucho a los pocos que las vieron y estoy en tratos con algún dueño de galería para tratar de exponer. Ginebra es una ciudad llena de encanto y tiene la ventaja para nosotros de que nos entendemos en ella con sus habitantes mejor que en Basilea, por el idioma, y porque además alzan con más frecuencia la voz para hacer notar su presencia o destacar su voluntad, aunque Basilea es, a nuestro juicio, más hermosa y más importante desde el punto de vista artístico. Toda esta digresión está destinada además de darles cuenta de nuestra vida a saludarles a Ida y a Ud. y a los suyos, a participarles nuestra dirección por si vienen o pasan por ésta en alguno de los viajes que ustedes realizan. Nos gustaría mucho verles por aquí. Tenemos entendido que ustedes pensaban viajar por estas fechas aproximadamente, si lo hacen, cuenten ustedes con unos guías, Maruja y yo, que tenemos la ventaja de no ser suízos y poder destacar más con mayor imparcialidad sus virtudes y defectos. La pena es que no conocemos la vida nocturna de estas ciudades, suponiendo que tengan verdaderamente vida nocturna para poder ser perfectos guías. Pero algunos españoles, funcionarios de las N. U. nos llevaron a algunas tabernas donde parece que se afirma el espíritu greco-latino alrededor del vino tinto. Nosotros no bebemos, somos más primitivos, pero podemos mostrárselas a ustedes junto con la catedral, las viejas calles, las tiendas de antigüedades, las galerías de arte y la estátua de Calvino, un ser infernal.

Reciban Ida y usted, lo mismo que Edgardo y Susana y Ricardo, el saludo cordial de Maruja y mío y usted un abrazo de:

[Seoane]

1963-04-29
Carta de Seoane a Varela. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1963 en 29/04/1963


Ginebra, 29 de abril de 1963

Sr. Lorenzo Varela
Buenos Aires

Querido Varela:

Recibí tu carta del 22 y te agradezco todas las noticias que me envías. Resulta confusa la de Paspagnoli, ¿es Director del Museo Nacional, como escribes, o del de Arte Moderno, en lugar de Squirru? Si lo es del Museo Nacional, ¿qué pasó con Romero Brest? Siento verdaderamente la muerte de Lorenzo Domínguez, era un gran artista y un excelente amigo. Para mí, además, otro español del exilio, aunque hubiese nacido en Chile, ocupado cátedras en la Argentina, etc., como escultor nació en España, donde se formó y a cuya sangre pertenecía. De aquí la noticia más importante fue la ejecución de Julián Grimau en Carabanchel. Toda Europa se conmovió. Manifestaciones en todas las ciudades europeas. En Francia, Italia y Suiza, obispos y organizaciones católicas hicieron pública su protesta. Aquí, en Ginebra, hubo dos manifestaciones. La última, el sábado 27, de todas las organizaciones sindicales. Al terminar el acto, donde sólo hizo uso de la palabra un dirigente obrero, lanzaron al lago dos coronas de claveles blancos y centenares de claveles rojos para que remontasen las aguas del Rhône y llegasen simbólicamente a la costa de España. Franco se cerró definitivamente, pienso, muchas puertas europeas, las que se había entreabierto para la liberación de su economía y su política. La prensa francesa es en casi totalidad, intransigente con él, con la ahora dudosa ayuda económica de De Gaulle y con Malraux, del que nadie puede escuchar su silencio. Pero ahí van algunas noticias, pues no creo puedas pasar la de Grimau.
En Ginebra, se ha inaugurado una gran exposición del pintor cubano Wilfredo Lam en la Galería Krugier, seguramente una de las más amplias y selectas de esta ciudad, que comprende obras desde 1938 hasta 1962. Se trata, en general, de cuadros de gran formato, de un surrealismo muy particular y realizados con una técnica muy sintética. Sus temas, muy repetidos desde hace años, se refieren a un mundo cubano tropical y de resonancias africanas y oriental. Cañaverales, grandes pájaros, pies y manos muy dibujados sugiriendo no se sabe de qué cuerpos, picos de aves, todo formando ángulos agudos dibujados con precisión. En la primera época, usaba una paleta de verdes, rojos y violetas muy tímidamente puestos al modo impresionista y en los últimos años dibuja simplemente con negro sobre un fondo gris casi blanco. Manifiesta un mundo original que tiene que ver lo mismo que con su país, con su origen chino y negro. Se trata desde luego de un excelente pintor, sabio y menor, que con los años redujo sus aspiraciones y que alcanzó, como los chinos con sus aguadas o como Goya con sus últimos óleos y grabados, a encontrar todo el color posible sólo en el negro.
En la ciudad vieja de Ginebra, se instaló una nueva galería de arte, la Galería Iolas. Se trata de una galería de Nueva York que ha abierto dos sucursales en Europa, en París y en Ginebra. Seguramente, en esta última ciudad, como muchas empresas norteamericanas con el fin escondido de burlar los impuestos de su país. Se inaugura con una muestra de Max Ernst, unas sesenta obras, casi todas ellas de la última época del pintor y los precios de los cuadros oscilan entre 150.000 francos suizos, es decir, 4.600.000 pesos aproximadamente, el de mayor tamaño que es de alrededor de un metro cuadrado, y 21.000 francos suizos, es decir, 690.000 pesos el más chico, el grandor de media tarjeta postal. La calidad, con ser buena en general, no está, pensamos, de acuerdo con los precios. Los mejores cuadros de Max Ernst se presentan, como ya comentamos, en el Museo de Zurich.
Suiza acabad de obsequiar a la Unesco con un tapiz de Le Corbusier de 6,50 x 3,50 metros que decorará la sala 5 y que evocará, según una frase del delegado suizo, “la alegría de vivir y una incesante juventud”. Esperamos que el tapiz, como los tapices de los cuentos orientales, pueda desprenderse a ratos de la pared a que fue destinado para llevar, entre nubes, alegría y juventud a los pueblos subdesarrollados y hambrientos que tantas valiosas horas de preocupación consumen a los delegados de la Unesco. La preocupación de Le Corbusier fue, antes de pronunciarse los discursos, colocar su gran tapiz en la pared de una sala exigua como parece que es la sala cinco de la Institución internacional. Se le presentó al arquitecto racionalista un problema de Chesterton que, seguramente, por nada racionalista, podría el escritor inglés resolver más fácilmente.
Uno de los más importantes críticos de arte de Europa, el francés Georges Duthuit, acaba de publicar un libro, Le feu des signes en Ediciones Skira de Suiza. Con este motivo, acaba de declarar “los estetas generalmente vienen después de los artistas, de sus obras”. En el libro se vuelve contra la estética contemporánea, la dispersión del arte de nuestra época, la concepción individualista del arte y reniega de los prefacios que hizo en los últimos tiempos para pintores del informalismo y de la abstracción lírica, como Riopelle y Sam Francis. El pintor, afirma, debe participarnos la certeza de pertenecer al mundo. La obra de arte no puede reducirse a sabios juegos formales ni a especulaciones geométricas o psicológicas. El libro de Duthuit estalló como una bomba en los medios artísticos y del comercio de arte. Antes se había rebelado contra la concepción estética del Malraux publicando su excelente libro El museo inimaginable.
Georges Mathiew, afecto por la mala crítica que obtuvo de su gran exposición en el Museo de Arte Moderno de la ciudad de París, responde a uno de los más sañudos, André Chastel, de Le Monde, con un artículo en uno de los últimos números de Arts, en el que, si bien logra comadrear alrededor de la obra de Chastel, no consigue desde luego defender su pintura, que era lo que algún público esperaba. En compensación, en uno de los últimos números de París Match, aparece retratado en las poses más diversas vestido de lujosos trajes, que unas veces parecen hacen surgir su figura de una tela del Ticiano o de Velázquez y otras de Goya, y entre muebles muy curiosos y caros. Fotografías singulares que en nuestra época tienen mucho que ver, aunque parezca mentira, con el comercio artístico.
Morir en Madrid es la última película de Frédéric Rossif, el autor de otra muy buena Le temps du ghetto, hecha a base de documentales extraídas de los archivos. También de los archivos de varios países extrajo la documentación gráfica para relatar la guerra de España. Un relato apocalíptico, según juzgan algunos críticos, que mereció el que interviniese la censura francesa cortando frases del texto redactado por Madeleine Chapsal. En estos días, la película de Rossif es la más comentada de Francia y su nombre Morir en Madrid sirvió, en general, como título a los numerosos comentarios que se hicieron contra Franco alrededor de la ejecución de Grimau. Resulta un excelente recuerdo en el momento en que Francia se apresta a ayudar financieramente a España formando parte de su gobierno Malraux, el caballero, subrayamos entre comillas, de La esperanza.

Querido Varela. Éstas son las noticias por hoy. Creo que abundantes. Escríbeme. Un abrazo de Maruja y mío para los dos:

[Seoane]

1963-04-30
Carta de Seoane a Goldstein. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Goldstein. 1963 en 30/04/1963


Ginebra 30 de Abril de 1963

Sr. Enrique Goldstein
Buenos Aires

Queridos Anita y Enrique:

Recibimos sus cartas con la muestra de papel, espléndido, y precisamente para grabados o libros de lujo. Creo que es papel Japón nacarado y, si no, una muy buena imitación. Con ella las diapositivas que resultaron muy interesantes. Nunca me vi tan cargado de bultos. Aquí, en Ginebra, continuamos haciendo la vida que supongo haberles comentado en la anterior. Trabajo todas las mañanas, escribo cartas a los amigos y salimos a las tardes a recorrer la ciudad, ver galerías de arte y calles. El domingo pasado estuvimos en Ivoire, un pueblecito de Francia a orillas del Lago Léman y a 15 kilómetros de Ginebra, realmente encantador. Viejas casas medievales, arcos de medio punto y piedra por todas partes. Allí mismo a la puerta de una casa una maternidad ingénua, pero preciosa, labrada por un cantero del pueblo. Un sitio para quedarse a vivir si uno fuese pescador, o supiese como no teniendo dinero. Podría hacerse una casa toda de vidrio hacia al lago, con una vista de montañas, agua y pueblos al otro lado de la costa. Allí encontraré un solar con malezas, aguardando probablemente al turista suízo o francés que lo compre para hacer su casa de fin de semana. De mis posibles exposiciones, aún nada concreto. Gustan, se lo dije en las cartas anteriores, mucho mis obras, me hablan de exposiciones de grabados y de óleos por separado, pero aún no se pudo concretar nada. Es posible que en los próximos días tenga noticias firmes sobre mis asuntos. Lo malo de Suíza es que sus habitantes suspenden una conversación para hacer un viaje a París o a Amsterdam y uno queda sin respuesta hasta su regreso. Y, además, no tienen prisa, lo que es natural, están en su casa. He pintado unos diez cuadros, cinco, con diez grabados, están en la Galería Benador de aquí, una galería de la calidad de la de Bonino en Buenos Aires, pero más chica, y estoy bastante satisfecho con lo que hago.
Hemos visto nuevos objetos dinamarqueses y nuevos muebles. La línea parece cambiar. Buscan las curvas y en los objetos decorativos, representación de animales, etc., eliminan la línea recta. Es como si buscasen un regreso al Art Nouveau. Las últimas cosas no me gustan demasiado, pierden su carácter funcional y violentan la naturaleza de los materiales. En calidad resultan estar entre las ingenuas tallas de madera para el turismo y lo racional que ellos venían haciendo en los últimos años. Puede ser que sea algo pasajero. Hemos visto también una nueva exposición de Max Ernst en la sucursal de una galería de Nueva York que se acaba de inaugurar en esta ciudad. Son últimas obras del pintor y no compiten con las que en estos días están expuestas en el Museo de Zurich. El cuadro más caro de alrededor de 1 metro cuadrado vale 150.000 francos suizos. El más barato, del tamaño de media tarjeta postal cuesta 21.000 francos. Es decir, aproximadamente 4.500.000 pesos y 650.000 pesos respectivamente. La calidad no responde a los precios. Son unas sesenta obras, casi todas chicas y pertenecen al dueño de la galería, al señor Iolá, un griego de Nueva York que seguramente con esta sucursal de Ginebra busca burlar los impuestos del Estado norteamericano.
Ruty le dijo por teléfono a Maruja que la madre está bastante repuesta, cosa que nos alegra mucho. Nosotros pensamos volver a verles cualquier día de estos.
Por favor, pregúntele a su padre si recibió una carta mía, porque sé que alguna no llegó. Escríbannos. Saludos a todos los familiares de ustedes y a los amigos. Reciban Anita y usted de Maruja y mio un fuerte abrazo:

[Seoane]

1963-04-30
Carta de Seoane a Scheimberg. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Scheimberg. 1963 en 30/04/1963


Ginebra, 30 de abril de 1963

Sr. Simón Scheinberg
Buenos Aires

Mi querido amigo:

No recibí respuesta a mi carta anterior. Quizá esté en camino. Tenemos hambre de noticias de Buenos Aires. Ayer y anteayer recibimos las de Sofovich y Falcini que nos produjeron un gran alegría. Creo que no tengo nada nuevo que contarles de nosotros, pero ahí va una estampa de un día en Zurich, el día de Viernes Santo, con todo cerrado menos alguno que otro restaurante o café.
Dios nos busca en Zurich
Doblaban las campanas desde el alba. Era Viernes Santo. Doblaron todo el día. A la salida del hotel, a las nueve de la mañana, lo sorprendente eran las calles desiertas. Sólo, en general, uno que otro zuriquense de edad las travesaba a grandes pasos, seguramente, para llegar a tiempo a alguna ceremonia religiosa. El río Limat estaba azul, el día claro, espléndido, y los cisnes, para despiojarse, ondulaban sus cuellos sobre su propio cuerpo. Quizá lloviese al atardecer o a la noche. Así sucedió. Nosotros nos entretuvimos en pasear por el muelle del río Limat. Viendo, una vez más, las vidrieras de los comercios. Deteniéndonos a descifrar los títulos de los libros alemanes, o suizos alemanes, y los viejos y nuevos grabados que se ofrecen en venta en alguno de esos establecimientos, mapas antiguos, grabados de interiores de casas campesinas del siglo XIX, grabados con vacas y escenas de labor; grabados de hoy, de Miró, de Max Ernst, de Bazaine, de Manessier..., sólo línea y colores, de técnica rigurosa, inexplicables y simples como el Viernes Santo y el mundo. Una mujer se acerca a nosotros, anciana, menuda, vestida de negro y con un sombrero ridículo en la cabeza. La mujer tenía el rostro blanco, muy blanco y los ojos azules, bondadosos, muy azules. Extrajo de la cartera un pequeño folleto en alemán y nos lo ofreció. En francés, malo explicamos que era inútil el ofrecimiento. No entendíamos alemán. “Mercí, madame”, le dijimos. Preguntó de que idioma éramos. Español, respondimos. “Un momento”, nos contestó. Revolvió en la cartera y del fondo de ella sacó otro folleto que en su ángulo izquierdo superior tenía escrita a pluma una indicación. Sp. El idioma español estaba en el fondo de la cartera. El título nos alarmó. Decía en rojo y entre admiraciones “¡Dios te busca!”. Agradecimos, y nos echamos nuevamente a andar. Por fin, alguien nos buscaba en Zurich y nada menos que Dios. Alguien superior al Director de Turismo, a las autoridades de la ciudad, del Cantón y aún a los mismos gobernantes de la Confederación Helvética. Dios, pensamos, estará en cualquier parte. Resolvimos andar. Abandonamos el muelle Limat, subimos hacia la catedral, la contemplamos, dimos vuelta a su alrededor, alzamos los ojos hacia sus cúpulas revestidas de metal. Dios no nos encontró. No estaba allí. Vimos el gigantesco Carlomagno con la espada sobre las rodillas. Seguimos por aquellas calles estrechas, medievales. Veíamos las calles, los edificios, las vidrieras. En una, pequeñas tallas en madera para el turismo, campesinos suizos tallados, animales, el oso más que cualquier otro, escudos de los Cantones y de las ciudades, objetos de cuero, de metales, todo lo que uno piensa que nadie compra. En otra, bellísimas piedras apenas pulimentadas del Brasil y de la Argentina. Piedras de todos los colores, cantos rodados de las orillas de los grandes ríos. La vidriera de una relojería. Relojes de muchos tamaños y formas. Sólo raramente se puede hablar de estilos. Chatos, abombados, de bolsillo, de pulsera, para la pared, para los muebles. Y cadenas y correas, y precios. Y otras vidrieras, con fotografías de cupletistas y bailarinas. Con apellidos españoles y franceses. Blancas y negras. Morenas y rubias, de diversos colores y formas, como los relojes, los objetos para el turismo y los emblemas de Suiza. Una vidriera entre todas, sólo con un bikini y un precio. ¿Para qué más? Dios no nos encontraba. Decidimos entrar en un café. Volvimos a pensar. Dios puede estar en todas partes. A la izquierda de nuestra mesa un mulato joven, barbudo y con el cabello descuidado y sucio. Seguramente, un artista. Un pintor. Miraba sin ver a nadie. Quizás él fuese Dios. Pero no, tampoco. Posiblemente, un santo. Mujeres beatas, beatas protestantes, impasibles, tomaban su café con leche o crema, o su cerveza, luego de las ceremonias religiosas. Eran como grandes madres estáticas, indiferentes, moviendo sólo la cabeza como las lechuzas para penetrarnos con sus ojos fríos. Dios, evidentemente, no estaba con ellas. Únicamente, las conmovía el dulce y los pasteles. Tenían la edad de la gula. Salimos. Continuamos andando. Llegamos a la estación. Entramos. Compramos Le Monde del día anterior. Escuchamos hablar en las tertulias de emigrantes italianos y españoles. Hablaban en voz alta, reían, cuando no se les notaba preocupados, pensando en dinero. Nadie piensa, ya se sabe, más en dinero que los pobres. Nosotros. Nuevamente salimos. Dios no estaba entre las boleterías y los kioskos, ni entre los trenes. Posiblemente, no había llegado. Ningún tren lo había traído hasta esa hora. Habíamos pasado el Bahnoft Brücke antes de ir a la estación y desde aquí seguimos por Bahnhof Strasse. Nuevas vidrieras. Ahora elegantes. Muebles, alfombras, perfumes, cosméticos, trajes, maniquíes en actitudes amaneradas, de rostros morenos con cabellos de nylon. Comimos algo en un restaurante cualquiera. En una mesa cercana, otra gran madre impasible girando únicamente las pupilas de sus ojos. Las manos sobre las rodillas. Observándolo todo. Estableciendo in mente las incorrecciones de los extranjeros. Abandonamos el restaurante y anduvimos por las viejas y bellas calles. Solos. Anduvimos la colina que fue castro celta. Miramos los viejos techos al estilo de los flamencos. Un capilla del siglo XV. Todo. Nos fatigamos andando. Al atardecer, regresamos hacia el hotel. Por el Quaibrücke, Bellvueplatz, seguimos por Ramí Strasse unos centenares de metros, y volvimos al Quai Limat. En el río, los cisnes se despiojan más sañudamente que a la mañana. Con los largos cuellos aún más ondulados. Y los patos alzaban a un tiempo sus cortas patas para rascarse las cabezas. Caían unas gotas de lluvia. Dios no nos encontró. Sin embargo, el folleto que nos había dado la anciana de ojos bondadosos, y que terminaba en un pequeño capítulo que aseguraba nos necesitaba, comenzaba afirmando: “¡Dios te busca!”. Dios nos buscaba. Nos necesitaba. Pero no nos encontró. Nosotros, naturalmente, tampoco lo encontramos. Seguramente, ese día nos hubiésemos entendido. Hubiésemos estado solos en las calles de Zurich. Él y nosotros. Hasta la hora de los bikinis en los cabarets y de los borrachos agrupados a las puertas de los bares.
Claro, es el hombre quien generalmente busca a Dios. El que llegue a encontrarlo es otra cuestión.
Fue un día así. Dormimos perfectamente, a pesar de los grandes almohadones que nos ponen como almohadas en los hoteles y de los fastidiosos edredones.
La ejecución de Grimau conmovió a Europa entera. Hubo actos en todas las ciudades europeas de protesta. Aquí, en Ginebra, los obreros lanzaron simbólicamente coronas y claveles al lago para que el río las llevase a la costa española. Obispos y sacerdotes católicos de Francia y Suiza protestaron contra Franco. En Rabat, en plena embajada de España, en cuyo salón se celebraba un concierto, un joven se levantó, dijo una palabras de protesta y pidió un minuto de silencio por Grimau. Sólo el embajador y unos cuantos se mantuvieron sentados. Casi todo el público se levantó en su homenaje.
Otro día enviaré más noticias nuestras y de lo que vemos. Un gran abrazo a todos los amigos, a Aída y los suyos de Maruja y míos y otro para usted, fuerte, de:

[Seoane]

1963-05-03
Carta de Seoane a Brughetti. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Brughetti. 1963 en 03/05/1963


Ginebra, 3 de Mayo de 1963

Sr.
Romualdo Brughetti
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Acabo de recibir una carta de Billy, de Bonino, en la que me participa que usted ha sido designado Director de Relaciones Culturales, noticia tambien participada por Lorenzo Varela en otra que me acaba de llegar. Si alguna noticia de los últimos tiempos, en cuanto a designaciones, me es particularmente grata, esta lo es sobre cualquiera. Le felicito de todo corazón. Es un puesto en el que se puede hacer mucho a pesar de todas las dificultades y usted es una persona que se lo merece por su obra, por la generosidad conque juzga siempre la obra de los demás y por su adhesión a la actividad cultural del país.
Billy me habla de que he sido invitado a participar con grabados en la Bienal de San Pablo. Hoy mismo le escribo indicándole cuales grabados me gustaría enviar y que un amigo mío puede entregarle. Tambien me habla de una gestión suya con el Museo de Río de Janeiro. No sé como agradecerle todo esto. Tambien me participaron, en vísperas de venirme, que estoy invitado a la exposición del Museo de Arte Moderno de París, pero aún no me puse en contacto con Kósice, que me dijeron le escribiese a la Embajada Argentina de París. Le ruego me diga que debo hacer. A Kósice voy a escribirle, pues yo no creo que me mueva de Suíza durante todo este mes y parte del que viene. Me gusta mucho esto, estoy trabajando y tengo en perspectiva alguna exposición.
Bueno, estoy escribiendo rápidamente solo para felicitarle y agradecerle su interés por mi.

Saludos de Maruja y míos para su señora y usted y Ud. reciba el abrazo de su amigo:

[Seoane]

1963-05-03
Carta de Seoane a Díaz Dorado. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Dorado. 1963 en 03/05/1963


Ginebra, 3 de Mayo de 1963

Sr. Diego Díaz Dorado
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Recibí su carta cuando más impaciencia tenía de recibir noticias de Buenos Aires. Estoy encantado de Ginebra, me gusta mucho esta ciudad y pinto con una tranquilidad que no tenía para trabajar desde hace mucho. El día es nuestro y uno puede encontrar, siempre se encuentran, motivos de desagrado, pero en general las gentes procuran ser correctas y agradables en la convivencia. Uno encuentra aquí parte de lo que se desea de bueno para Buenos Aires. La de hoy es una carta apresurada con motivo de una por expreso que me llegó de la Galería Bonino. Resulta que me seleccionaron para intervenir con cinco grabados en la próxima Bienal de San Pablo. Quisiera, pues, que me hiciese el favor de separármelos y se los entregase a Billy, Guillermo Whitelow, en Bonino, usted creo que lo conoce, para que le pongan marcos y los entreguen a la Dirección de Relaciones Culturales del Ministerio de Relaciones Exteriores. Serían los siguientes, a mi juicio:

Juana de los trapos
La profecía
El caído
Mendigos cautelosos, burlones e
Inestable mendigo

Si a usted y a Billy no les parecen bien quizás pueden seleccionarse otros. Por aquí estuvo Núñez Búa pasando dos días. Llegó el primero de Mayo y marchó hoy de mañana. Me alegró mucho verlo y estar con él. Anduvimos juntos con Maruja recorriendo la ciudad. Me habló de la conversación con Alvaro Gil alrededor del libro de González López. Creo que está, por lo que me dijo, resuelta la edición con el aporte que haría Alvaro Gil. Por mi parte tengo entendido que en la conversación que habíamos tenido con Alongo Lago se había hablado de 30.000 pesos, pero de cualquier manera esto no modifica demasiado la situación. No depende, claro está, de lo que recordemos, sino de lo que recuerde Alongo Lago. Ojalá se imprima y se termine con este asunto. Las noticias que vienen de Buenos Aires son desesperantes. Estos señores que gobiernan o pretenden gobernar, dá lo mismo, parecen vivir fuera de la realidad y del mundo. Los funcionarios argentinos de las Naciones Unidas y de la Organización Internacional del Trabajo, etc., que residen aquí, sabemos por uno de ellos, se sienten avergonzados de lo que allí ocurre por las noticias que les llegan. Nosotros solo conocemos las que vienen publicadas en los periódicos de París. Núñez Búa creo que llegará alrededor del 18 y por él sabrá noticias de como estamos. Mis asuntos marchan lentamente pero pienso que bien.

Un saludo para todos los de Citania y uno muy especial de Maruja y mío para su familia y usted reciba el abrazo fuerte de:

[Seoane]

1963-05-03
Carta de Seoane a Whitelow. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Whitelow. 1963 en 03/05/1963


Ginebra, 3 de mayo de 1963

Sr. Billy Whitelow
Buenos Aires

Querido Billy:

Acabo de recibir tu carta por expreso con las noticias de la participación en la Bienal de San Pablo y la posible exposición de pintura en el Museo de Río. En cuanto a lo primero, dejé al ingeniero Díaz Dorado, amigo mío que creo que tú conoces, una serie de grabados separada en mi estudio por si era necesario por alguna circunstancia. Es necesario desde luego ponerle marcos, de modo que hay que pasárselos a Enzo pidiéndole que se esmeren en el taller dada la ocasión. Hoy le escribo también al ingeniero Díaz para que se ponga en contacto contigo por esta cuestión. En cuanto a la exposición en Río, aparte de los cuadros que están ahí en esa Galería y en la de Río, habría que separar otros en mi estudio y enviar yo algunos de los que están en Basilea, donde tengo unos veinte, pero esto si ocurre lo que proyecta Brughetti, a quien, naturalmente, agradezco mucho –voy a escribirle también hoy– su interés.
Si por falta de tiempo no puedes escribirme, te ruego me pases una copia de párrafos de tus memorias, o de tu diario, aquellos que puedan conocerse sin vulnerar su secreto ni intimidad, pero que me dé idea de lo que opináis sobre lo que ocurre por ésa, sobre gentes amigas o sobre arte. Yo comencé un posible libro de narraciones con una que se titula Dios nos busca en Zurich. A lo mejor, casi seguro, no pasa de proyecto.
Estamos encantados en Ginebra, nos gusta más de lo que sospechábamos cuando nos instalamos y no nos da muchas ganas de salir de aquí. El lago Léman es un pequeño mar, un mar suizo, un mar a la medida de Suiza. Tiene color y huele a mar. Nos gusta el gris que cubre casi siempre sus montañas y las calles de la ciudad vieja con sus galerías, tiendas de antigüedades y bares, no exactamente tabernas. Sólo nos fastidian los autos, las motocicletas y el exceso de cine francés. Pero éstas son otras cuestiones que no tienen que ver con tu carta de hoy. Pinto mucho. Tengo alrededor de ocho o nueve cuadros, no muy grandes, hechos aquí y siento ganas de pintar aún sin saber para qué. Con respecto a mis asuntos, posibles exposiciones, etc., todo parece ir por sus cauces. Nos alegraría mucho que Adriana consiguiese la beca de Italia. Estamos seguros que así será. En España, pienso grabar nuevamente. ¿Hiciste el texto sobre Venecia? Piensa que es uno de los proyectos que más estimo.

Muchos saludos de Maruja. Abrazos para Adriana y para ti de los dos y tú recibe uno fuerte de:

[Seoane]

1963-05-04
Carta de Seoane a Frontini. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Frontini. 1963 en 04/05/1963


Ginebra, 4 de Mayo de 1963

Sr. Norberto A. Frontini
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Llevamos dos meses en Suíza y estaremos viviendo quizás hasta junio en Ginebra. Hemos andado por todas sus ciudades importantes, gozado de sus museos y de las espléndidas exposiciones que se realizan, pero siempre, nos acordamos de los amigos de Buenos Aires. No podemos olvidar los amigos y no queremos olvidarlos. Nos gustaría que todos estuvieseis aquí con nosotros.
Suíza nos gusta mucho. Nos gustan mucho sus ciudades, el aire, sus lagos, e incluso la mediocridad educada y civilizada, un poco fría, que anda por las calles, en los trenes, en las estaciones, por todas partes. He vuelto a ver en el Museo de Basilea los Juan Gris que tienen, la sala de Juan Gris y los del Museo de Berna, unos treinta óleos entre los dos museos, extraordinarios. Deberían estar en el Museo del Prado, puestos muy cerca de los doce apóstoles de Zurbarán que están en el Museo de Lisboa. Zurbarán y Juan Gris establecen una línea esquemática, severa, profunda, de la pintura española. El blanco y el negro son los colores definitivos de estos dos grandes pintores. Todos los otros colores son como un pretexto para alcanzar ese negro profundo, abismal, y el blanco, el blanco de España. Vi una exposición de Paul Klee, además de todos los que guardan los museos suízos, y te recordé. Recordé que a tí debía en gran parte la adhesión profunda que siento por este otro gran pintor. A todo lo que me habías dicho de sus cuadros en Santiago de Compostela en 1931 o 1932. ¿Cuándo fue? Y a tu obsequio de una pequeña monografía y de un catálogo de la exposición que habías visto en Berlín. Recuerdo que dijiste frases que me parecieron muy acertadas acerca de Paul Klee, de Hofer, de Renée Sintenis y de la pintura y escultura alemana de entonces. Tú gustabas entonces de la pintura, pero luego te fuiste apartando de ella, naturalmente que por otras preocupaciones quizás más fundamentales para tí, pero, por mi parte, te reprocharé siempre el que no continuases ocupándote de ella con el apasionamiento que entonces tenías. Eres una de las personas más dotadas para verla de cuantas conocí y has desdeñado esas dotes. Sin embargo, la pintura, el arte en general, están siempre en el fondo de tus preocupaciones. En tu libro de la cárcel, están los notables capítulos de Burgoa Videla y de las manos significando esa preocupación que no te deja.
Acabo de hacer dos cuadros de homenaje a Grimau. Por toda Europa se han hecho manifestaciones imponentes con motivo de su ejecución y el primero de mayo en Ginebra se encabezaba la adhesión a la fiesta con la bandera republicana española con crespones negros. Era el tercer gran acto de protesta de los ginebrinos.

Un abrazo a Mony, a tí y a los tuyos de Maruja y mío y otro fuerte para tí de:

[Seoane]

N/D. 4-6 Rue du Lac, Ap. 59
Ginebra

1963-05-07
Carta de Seoane a Brughetti. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Brughetti. 1963 en 07/05/1963


Ginebra, 7 de Mayo de 1963

Sr.
Romualdo Brughetti
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Acabo de recibir carta de Lorenzo Varela en la que me habla de la Bienal de San Pablo, de la posible exposición en Rio de Janeiro y de la necesidad de que envíe unas fotografías mías y de los grabados. Naturalmente que acepto participar en la Bienal. Ya le escribí a Billy, en Bonino, para indicarle como tener los grabados. El mismo día le he escrito a usted. A Billy puede pedirle alguna foto mía de las que ellos conservan en su archivo y, tambien, que a mi cuenta, Forero, o quien ellos consideren, les haga de los grabados para entregarle a usted. Usted mismo, si me hace el favor, hable con Billy, pues yo le escribiré mañana o pasado. En cuanto a Rio puede disponer, cuando llegue el momento, de cuarenta o cincuenta grabados, todos de regular formato. Solo hace falta que me escriban con tiempo para que se puedan hacer los marcos.
Creo que, de momento, esto es todo. Por favor escríbame cualquier novedad con respecto a todo esto.

Saludos de Maruja y míos para su señora y usted reciba el gran abrazo de su amigo:

[Seoane]

1963-05-07
Carta de Seoane a Falcini. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Falcini. 1963 en 07/05/1963


Ginebra, 7 de Mayo de 1963

Sr. D. Luis Falcini
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Me llegó su carta en vísperas del 1º de Mayo, que aquí se celebró con una gran manifestación encabezada con las banderas de Suíza y la de España republicana, ésta con crespones negros. Fué el tercer acto en esta ciudad dedicado a Grimau. El segundo, que fué la protesta de todas las organizaciones sindicales, se remató con una ofrenda floral. Se lanzaron al lago dos coronas de claveles blancos y centenares de claveles rojos para que el Rhône llevase simbólicamente esas flores a la costa española. Un elemento obrero muy activo en esta ciudad parecen ser los anarquistas. Los socialistas acaban de ganar las últimas elecciones del Cantón y el Partido del Trabajo, comunistas, aumentó en la ciudad sus votos. Europa efectivamente está convulsionada, y se vé, aunque no sea Suíza la mejor ventana para ver; pero, a diferencia de lo que ocurre en la Argentina, las posiciones están tomadas por los distintos sectores populares, son muy claras, y las gentes actúan con una serenidad que ahí se desconoce. Además les ayuda su larga historia. No se trata aquí de soltarle al primero que protesta una andanada de nombres que van desde San Martín a Uriburu por ejemplo, para mostrarlo antipatriota. Ni el ejército, aunque se subleve, se siente tutor de la patria. Napoleón, Garibaldi, el Gran Capitán, o Guillermo Tell, son muertos que viven en la gloria de sus países, pero que están verdaderamente muertos para la historia actual.
No es una guerra entre rosistas y sarmientistas la que está planteada, sino entre dos formas de civilización y en ella se notan, viviendo aquí, los avances y retrocesos, el terreno que se ceden para dar batallas. Ocurren fenómenos como el de Suíza, un país sin trabajadores propios, que dejaría de ser próspero sin la mano de obra italiana, española o griega. Aparte, naturalmente, el depósito de los capitales negros procedentes de todo el mundo que engrandecen la banca de este país y que hacen que su prosperidad sea en parte absolutamente inmoral y haga más patente la hipocresía de ser un país campeón de la libertad. Su banca, las leyes del Estado, amparan a los Gómez de Venezuela, a los Trujillo y a los Perón. Al menos esconde para los pueblos los tesoros que les arrebataron.
En Winterthur, vimos el famoso Museo de Oskar Reinhart y había que hacer un esfuerzo para no recordar, viendo tanta espléndida obra de arte, que su inmensa fortuna se debió en parte a la fabricación de armas y a las guerras. El Sr. Oskar Reinhart, un apacible técnico de la muerte, coleccionaba fundamentalmente pintura alemana, austriaca y suíza del siglo XIX, una pintura de género, tranquilizadora, bucólica, con vacas doradas en verdes montañas, campesinos endomingados, interiores de escuelas infantiles, tabernas donde el pintor mostraba la alegría de los trabajadores en los instantes de asueto, etc. El Sr. Oskar Reinhart luego de calcular la eficacia mortífera de sus armas se sentaba seguramente frente a esos cuadros y sentía una paz infinita, veía bellos desnudos, flores, niños angelicales, las colinas del Tirol, los azules lagos. Böcklin le proveía de leyendas y Anker de retratos de niños. Los artistas acudían a adorar la naturaleza, la vida, seguramente por los mismos años de Reinhart. Bourdelle veía en las pastoras de cabras de su país diosas del Olimpo y adoraba cada movimiento de un cuerpo. Miss Duncan decía, aproximadamente, “es como una sacerdotisa eterna, ella evoca todas las grandes obras de la más noble y alta antigüedad”. Reinhart no veía la vida, a la Duncan, a todo lo que es bello en la tierra, sino su anécdota a través de los cuadros. A la vida la mataba con su actividad. La idea que tenía de la vida es la que tiene Suíza de la libertad. La libertad es la vida, vivirla, no los reglamentos, ni las leyes. Un griego fue siempre un hombre libre y un italiano y un español, aunque los quemasen y los matasen.
Me extendí quizás demasiado y aún no le felicité por La mujer del éxodo colocada en el jardín al aire libre. Al aire libre es donde siempre debiera estar. Debe quedar espléndida y me alegro mucho de esa decisión de Romero Brest. Los momentos que se ven por Ginebra son bastante flojos. La mujer del éxodo en los jardines del Lago Léman tendría un emplazamiento extraordinario y con una figura de Rodin, El deseo, que ví hace pocos días en una plaza, un poco perdida, honrarían el jardín, al lago y a la ciudad. Pero mejor quedaría en Madrid, si las cosas cambiasen.

Saludos a los suyos, un abrazo a todos, todos, los amigos, de Maruja y mío y usted reciba uno fuerte de:

[Seoane]

¿Por qué no me escribe Scheimberg? Le escribí dos cartas, ¿es qué no le llegaron? Maruja le escribió tambien a Aída.

1963-05-07
Carta de Seoane a Poggi. 1963
Xenebra
Nova York
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Poggi. 1963 en 07/05/1963


Ginebra, 7 de Mayo de 1963

Srta. Elena Poggi
Buenos Aires

Estimada amiga:

Recibí su carta en la que me participaba su proyecto de hacer un trabajo sobre dibujantes argentinos, que a mí, personalmente, me parece muy útil e interesante, pues es un aspecto del arte que generalmente no se estudia y que, sin embargo, es fundamental. En mi caso como dibujante y grabador he publicado 14 álbumes en Buenos Aires desde 1937, que comencé con uno de dibujos satíricos contra el franquismo. La bibliografía de ellos está en el último catálogo de Bonino con motivo de la muestra de grabados, de agosto del año último. En Bonino, Billy, puede facilitarle alguno de ellos que tiene prólogo mío como es el caso de Libro de tapas, Segundo libro de tapas, Doce cabezas, etc. En 1946 fué seleccionado Homenaje a la Torre de Hércules editado por Nova, por la Pierpont Morgan Library de New York, como uno de los mejores libros de dibujos publicado entre 1935 a 1945. En la librería del Centro Gallego (Belgrano y Pasco) debe estar otro, Figurando recuerdos hecho en 1959 y en El Ateneo debe aún haber Paradojas de la Torre de Marfil. Alguno de ellos los tiene Varela. En cuanto a ilustraciones hice muchísimas; para Sartre y Huxley, en Losada; Quevedo y Conde de Gobineau, en Poseidón; Varela, en Nova; Alberti en Emecé y Losada, en ésta última Editorial juntamente con Unamuno, Neruda y Lorca (grabados en madera), y para libros de Yeats, Blake, el mismo Alberti en Botella al mar. Para Lorenzo Varela, Girri, Dora Melella. Miguel A. Asturias, Betina Edelberg y otros tambien en Botella al mar, creo que ya todos están agotados. He ilustrado muchos libros y hecho la tapa para centenares de ellos, además en los libros de Botella al mar hice retratos a casi todos los autores argentinos que allí se publicaron, recogidos muchos de ellos en un pequeño librito, que también debe encontrarse en El Ateneo, titulado Testimonio de vista, tambien con prólogo mío. Antes de Buenos Aires, en Galicia, ilustré libros de poetas contemporáneos míos y con la guerra civil se perdió en la imprenta donde debía imprimirse, por asalto de los franquistas, un álbum titulado Síntesis del crimen de tendencia surrealista. He dirigido gráficamente varias editoriales desde 1939 aproximadamente y alterné siempre la pintura con el grabado y la ilustración.
Yo no sé el tiempo que estaré por Europa pero pienso que si puedo me quedaré hasta fin de año. Estos datos que le envío creo que pueden servirle, sino le ruego me vuelva a escribir y yo le participaré aquellos que necesite. Por mi parte siento no tener nada aquí con que poder orientarla y serle más útil. Apenas traje nada conmigo únicamente las últimas ilustraciones para Losada. Pero esos autores que cité todos deben tener los libros que yo les ilustré y pueden seguramente facilitárselos. Si hacen este libro sobre dibujantes, por cuya idea la felicito, no olviden a los extranjeros contemporáneos nuestros que trabajaron ahí: Clement Moreau, Attilio Rossi, Gubellini, Toño Salazar, etc., que han hecho obra satírica o de ilustradores muy interesantes.
Por aquí, como siempre, estoy trabajando. Para tener vacaciones tendría uno que ser militar y ya es tarde para seguir una carrera tan productiva y nunca sujeta a investigaciones de comisiones especiales. Una carrera en la que uno pueda llegar, solo con sueldos, a dueño de estancias. Escríbame por cualquier cosa que necesite. Por mi parte le agradezco mi inclusión en este trabajo suyo.

Reciba usted con el saludo de Maruja el afectuoso mío:

[Seoane]

1963-05-07
Carta de Seoane a Sofovich. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Sofovich. 1963 en 07/05/1963


Ginebra, 7 de mayo de 1963

Sr. Bernardo Sofovich
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Recibimos su carta y, ayer, el dinero del Museo por medio de una sucursal en Ginebra de la Societé de Banque Suisse. Le agradezco mucho sus gestiones y el dinero nos viene muy oportunamente. Nosotros estamos en esta ciudad como si hubiésemos estado en ella toda la vida, nos sentimos a gusto y trabajo, pinto, más de lo que hubiese creído dada la pequeñez del departamento que habitamos. Entre los cuadros que pinté en este tiempo están dos Homenaje a Grimau que pienso llevar a Madrid donde, según nuestras noticias, el ambiente producido por esta ejecución es extraordinario. Tanto que en Le Monde de ayer se anunciaba la supresión de varios decretos y leyes de represión y la constitución de tribunales civiles para los delitos políticos, limitando los consejos de guerra a los asuntos puramente militares. Éste es un triunfo de la presión interna y la protesta de toda Europa y de todos sus sectores desde los comunistas a los católicos, excluyendo, naturalmente, las minorías fascistas. Franco hizo imposible momentáneamente con esa ejecución la entrada de España en el Mercado Común Europeo. Nosotros hemos vivido las grandes manifestaciones de Ginebra, y de su calidad, y más violentas fueron las de muchas ciudades europeas. La prensa española no hace más que achacar al comunismo internacional estas protestas y tratar de revivir supuestas represiones de las checas de Barcelona y Madrid. El embajador de España en Suiza pretendió con una carta, que los diarios reprodujeron en su letra más chica, dar lecciones de interpretación del Evangelio a los sacerdotes católicos que hicieron público su repudio por la muerte de Grimau y, de Madrid, pusieron verdes a los obispos franceses e italianos por protestar por la ejecución, acusándoles de aliados de los comunistas. Pero la oposición esta vez le ganó a Franco cuando éste pretendía aplacarla con un nuevo asesinato. Creo que de todo esto no informará la prensa de Buenos Aires. En cambio, la francesa y suiza traen un o dos columnas diariamente dedicadas a la repercusión de la ejecución de Grimau. Por la tv francesa habló la viuda el domingo pasado y los diarios se ocuparon de la impresión patética producida por su presencia y sus palabras. Así nos dijeron también quienes la vieron por tv.
De arte estos días hemos visto muy poco. Hemos andado por algunas ciudades y villas francesas de la costa del Lago Léman, Ivoire una de ellas, una villa medieval que conserva su carácter hasta que pronto el turismo se lo haga perder. Ya hay dos o tres hoteles y algunos restaurantes destinados a la explotación turística y hechos con el mal gusto general en esta clase de construcciones. Estuvimos también en el valle del Rhône, por sus montañas patéticas y nevadas, por caminos recién abiertos ahora en los últimos días de abril entre paredes de nieve de tres metros de alto, y por Chamonix, una encantadora ciudad francesa que creo es una estación destinada a deportes de nieve o algo así. Pero más impresionante que las montañas y la nieve y el paisaje en general, resulta el esfuerzo humano capaz de cosechar vides, frutas o verduras, en terrenos casi verticales, a altura inverosímiles, expuestos siempre a los aluviones que deshacen lo que ellos con tanto esfuerzo heroico han construido y sembrado. Hemos estado casi en la colina de San Bernardo. Todo esto es un paraíso para el turismo, pero es un infierno para el hombre que debe arrancarle su sustento a la tierra. Las casas de esta región del Valais son primitivas como en Galicia, de piedra y pizarra, y tienen un tipo de granero muy parecido al hórreo gallego. Ramuz y Giono han descrito las luchas del hombre con esta naturaleza, pero es un hombre metido en un paisaje grandioso entre grandes catástrofes meteorológicas y casi nunca, por lo que he leído de ellos, en lucha con el solamente pedazo de tierra que quiere hacer producir, acumulándola entre unas rocas o entre unos pinos, despojándola de piedras, cuidándola, sin ver de ese paisaje más que aquello que trabaja y comprobando la seguridad de lo que hace elevando los ojos a la cima de la montaña por si desde allí puede desprenderse la nieve o peñascos que haga inútil su labor. Miran para las nubes por si llueve o por el futuro del tiempo, pero no por su belleza. El paisaje es sólo espectáculo para los ciudadanos, no para ellos. En un café donde paramos, dos campesinos miraban colgado en la pared un cuadro que representaba un paisaje muy realista, se acercaron a él y se detuvieron a dialogar sobre la posibilidad de trabajar aquella tierra entre tanto peñasco y nieve. Señalaban con el dedo y, de pronto, también a nuestros ojos, aquella obra de arte se convirtió en un plano puesto en la pared por dos verdaderos estrategas.
Bueno, basta por esta vez. Si no me envió ese dinero de la Hebraica de que me habla, le rogaría lo hiciese lo más pronto posible, pero no me envíe más, de lo que vaya cobrando, guárdelo usted ahí por si hace falta para algo o necesito de él más adelante. Le agradezco todas estas atenciones y molestias y la pérdida de tiempo que debe significar dialogar con el doctor Bruetman.

Un abrazo de Maruja y mío para Elsa y usted. Saludos a los suyos y a los amigos y otro abrazo fuerte para usted de:

Seoane

Estoy buscando el número de Du en librerías de viejo que parece ser es donde quizás pueda encontrarse.

1963-05-07
Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1963
Xenebra
Magdalena (Arxentina)
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1963 en 07/05/1963

Ginebra, 7 de mayo de 1963

Sr. Isaac Díaz Pardo
Magdalena

Querido Isaac:

Aquí llegó el primero de Mayo, Núñez Búa, con quién pasamos ese día y el siguiente andando por las calles de esta ciudad, con una llovizna, el día dos, que recordaba la Galicia. Nosotros nos alegramos mucho de que hubiese venido, aunque para él hubiese sido un sacrificio y estaríamos felices si pudiésemos congregar en Ginebra a todos los amigos de esa. Esta ciudad nos gusta mucho y nos sentimos viviendo en ella como si fuésemos habitantes suyos de muchos años. Trabajo, pinto igual que si estuviese en esa a pesar de no contar con un lugar amplio como el de Ranelagh, o el estudio de la Calle Montevideo. Aquí, o en una ciudad como ésta, es donde tu debiste haber levantado tu nueva fábrica de porcelanas, incluso para poder anunciar en La Coruña y en España, “sucursal en Ginebra“. El asunto de Grimau conmovió a Europa. Aquí se hicieron tres grandes manifestaciones de repudio al régimen franquista y en todas las ciudades europeas se hicieron y continúan haciendo grandes actos contra Franco organizados por gentes y agrupaciones de las más distintas tendencias, desde los comunistas a los católicos. Varios obispos franceses e italianos protestaron y repudiaron lo que se juzga un asesinato deliberado. Creo que en España está preocupando esta reacción de Europa. Sacan a relucir el fusilamiento de un militar en Francia pero los diarios franceses contestan que ese militar pretendían hacer en su país precisamente lo que Franco había hecho en el suyo, sublevarse contra las autoridades legítimas.
Nosotros estamos deseando ir a España, seguramente a mediados o a fines de junio nos iremos para encontrar contigo en El Castro y discutir diariamente. Mis cosas marchan bien, pero lentamente. El único que tiene prisa soy yo. Una prisa que me viene de naturaleza. Decidimos hacer uso de tu hospitalidad y quedarnos “algunos años” en el Castro. En Madrid de momento creo que estaremos solo unos días, de paso para Asturias y Galicia, luego volveremos, pues en los meses de Julio y Agosto no hay nada que hacer allí. Contéstame cómo andan por ahí las cosas. Si has hecho cosas nuevas de porcelana y si pintas y escribes. Me fastidia que te pases los días discutiendo con asuntos económicos que nadie entiende, ni los banqueros suizos, y metido entre máquinas y cardos.

Un gran abrazo de Maruja y mío con el cariño de:

Seoane

1963-05-09
Carta de Seoane a Núñez Búa. 1963
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Núñez Búa. 1963 en 09/05/1963


Ginebra, 9 de Mayo de 1963

En cuanto a la posible empresa pienso que podría ser un gran negocio y útil para fomentar en Galicia el trabajo artesano, evitando, además, la salida de gentes de oficio fuera del país. Se trataría fundamentalmente de la fabricación de muebles en serie y piezas únicas, y objetos en general de decoración en los que se aprovechase la habilidad de carpinteros, herreros, tallistas de la piedra y ceramistas, y tuviese como fundamento el arte popular gallego, y, naturalmente, el del resto de la península, pero siempre pensando que debe ser Galicia, por la madera, la piedra, los puertos, la gente, nosotros, etc., el centro de esta actividad. Galicia tuvo, por lo menos hasta el año 30, que sepa, aproximadamente, una industria del mueble, –Magariños en Santiago, Tizón en La Coruña– que se habían quedado haciendo un falso renacimiento y un falso barroco cuando imperaba el Art Nouveau en el mundo, pero que habían tenido su momento de esplendor. Cuando dejaron renacimiento y barroco se limitaron a copiar las revistas extranjeras. Yo conocí siendo estudiante en Santiago la revista de Londres The Studio, de arte y decoración, por uno de esos tallistas que estaba suscrito a ella y copiaba los estilos de muebles cuando se los encargaban. Se trata de hacer labor creadora y competir en el mercado internacional con Dinamarca y los países del Báltico, desde Galicia, buscando nuevas formas e inspirándose en el arte popular gallego y peninsular. Los plateros de Santiago continúan haciendo lo mismo que hace un siglo, por lo que yo vi, degenerando estilos pasados. No hay nada en azabache que pueda compararse con lo que se hizo en el siglo XV o XVI, y la pizarra no sirve en Galicia nada más que para techos. Se trata de aprovechar materiales populares gallegos y sacarles partido con arreglo al gusto de nuestra época. Se trata de hacer el mueble en serie, para el pequeño departamento del edificio colectivo de hoy, y el mueble singular para quien tenga gusto por el arte, los objetos artísticos y la decoración. Todo esto unido a los elementos de decoración del hogar y aún a los “souvenirs”. En Santiago hacen cucharillas para el café, de plata, exactamente igual que en Suiza, cambian casi únicamente en el motivo central de la decoración; donde el platero compostelano pone una urna del Apóstol, el suizo sitúa el emblema de un cantón o de una ciudad suiza. Los pequeños campesinos de madera tallados ahí no cambian, en el estilo, también de los suizos, sino en el traje. El negocio reside en parte notable en la originalidad y el gusto de las creaciones. Ceramistas como los de Celta en Padrón, o algunos de Vigo, han creído que cualquier artista puede servirles para decorar y crear. Así en cerámicas Celta han intervenido grandes artistas gallegos, escultores y pintores, Asorey, Castelao, que conocían muy bien su oficio pero no el de la cerámica y el destino que se daba a las obras que les encargaban. O remedaron el románico y el gótico como los Hernández de Vigo viviendo fuera de su tiempo. Cuando quisieron hacer otra cosa, cayeron en el diseño “modernista” de 1915, de Varela de Seijas en Blanco y Negro. Y sus temas, los de todos los artesanos actuales gallegos, los redujeron al Apóstol y a la ciudad de Santiago, en parte por ignorancia de Galicia, de su pasado artístico –el arte no lo hacen solamente los genios– y de su historia. En Vasco de Aponte o en el Padre Gándara, o en la prehistoria, se encuentran tantos posibles motivos decorativos como en la Compostelana o la Historia de Santiago de López Ferreiro. Se trata de buscar y de encontrar. En la vieja habitación campesina gallega puede encontrarse inspiración para mucho mueble de hoy, como en los yugos, las mantas, etc., para mucha decoración. Somos tan ricos en motivos como Dinamarca, Suecia o Finlandia, sin embargo solo éstos hasta sacaron partido de la cuchara y el tenedor de boj, labrado por campesinos en las noches de invierno o por los pastores, casi iguales o iguales a los gallegos, sabiendo adaptar a nuestra época y a nuestro estilo actual de vida las lecciones de practicidad del pasado.
Bueno, no sé que más decirte en mi carta. Pienso que todo esto puede ser origen de una gran empresa gallega. En Galicia está en estas cuestiones todo por hacer. Tanto por hacer que hasta las latas de sardinas en su presentación, que me perdone Valentín, creo que se lo dije, no pueden competir con las del resto de Europa. Y en nuestra civilización todo lo que quiera venderse debe convencer por los ojos en primer término. No sé si el genio de los países del Báltico se expresa ahora en literatura, pero lo que sé es que para el mundo se divulga en su mueble moderno y decoración. ¿Por qué no hemos de competir con estos países?

[Seoane]

1963-05-13
Carta de Seoane a Payró. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Payró. 1963 en 13/05/1963


Ginebra, 13 de Mayo de 1963

Sr.
Julio E. Payró
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Llevo aquí en Suíza algo más de dos meses y estaré, seguramente, casi un mes más. Anduve por todas sus ciudades importantes, viendo museos y grandes exposiciones individuales organizadas por los mismos museos o por galerías privadas, y todo aquello que pueda ofrecerse a la curiosidad del público. Es un país difícil y espléndido en muchos aspectos.
A mi, personalmente, me conmueven sus preocupaciones teológicas en su afán de reducir la teología a sentido común, estatutos y reglamentos, el movimiento alquimista de Basilea con sus personajes curiosos, mezcla de charlatanas, teólogos, químicos y médicos, y el genio gráfico popular de sus habitantes que les lleva, sobre todo en el norte, a diagramar instintivamente una pared o cualquier espacio con una seguridad y acierto que hace, a mi juicio, perfectamente suizo y nacional el arte de Max Bill y de los concretos, no tan distante como pudiera parecer a simple vista de Hodler o Valloton a pesar de las figuraciones de éstos. Les une a todos una parecida preocupación gráfica, este gusto particular de su país, e igual exactitud en la colocación de un tono o en la disposición de una línea en la composición del cuadro. Me gusta el Hodler de la última época –siempre es un excelente pintor– el de los retratos, paisajes de lagos y montañas y cuadros históricos de lansquenetes, o lo que sea, en guerra. Su paleta gris y blanca, y esa hábil línea negra que sabía desplazar sobre los planos de color para definir un gesto o un objeto. Pero desde los primitivos suízos hasta los concretos hay una línea anímica nacional que puede explicarse por la arquitectura rural, con sus pontones del exterior de los edificios que definen espacios, por la composición de las leyendas con sus letras góticas en las fachadas de las casas, desde el siglo XIV o XV hasta hoy, por la composición coloreada de las ventanas y puertas, perfectamente concretas, o de muchos de sus emblemas. Atraviesa uno la frontera y ya no es lo mismo Francia ni la misma Alemania, más unida al norte de Suiza.
Entre éstos dos países Suíza significa el amor por la materia, solo por ella; a un color solo por éste, y a una línea exacta y definida. Si tuviese que buscar un ejemplo pondría el de los cencerros de las vacas antes de llegar al de las artes gráficas actuales. A todo esto no he dicho nada de nosotros. Estamos encantados. Alquilamos un departamento de un ambiente y trabajo, pinto. Las obras mías parece que gustan bastante y tengo esperanzas de hacer algo. Casi concretadas tengo exposiciones para la próxima temporada en Zurich y Basilea. Estuvimos con su hijo y su nuera dos o tres veces. Han estado con nosotros muy amables y nos parece conocerles de siempre. Su hijo preside una agrupación hispanoamericana que realiza una labor espléndida a través de un pequeño teatro de aficionados con obras españolas y de latinoamérica. De vez en cuando le iré dando cuenta de nuestra vida. De Buenos Aires creo que tenemos nostalgia desde la semana de salir de ahí, por los amigos sobre todo.

Reciban Anita, María Inés, Silvia y usted el saludo de Maruja y mío y usted además el abrazo de su amigo:

[Seoane]

1963-05-13
Carta de Seoane a Azcoaga. 1963
Xenebra
Madrid
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Azcoaga. 1963 en 13/05/1963


Ginebra, 13 de Mayo de 1963

Sr. D.
Enrique Azcoaga
Madrid

Mi querido amigo:

Estamos en Suíza desde hace dos meses viajando de una ciudad a otra pero instalados, momentáneamente, en Ginebra, hasta el mes que viene que iremos a París, donde solo estaremos unos días, antes de irnos a España que es donde realmente tenemos ganas de estar. Nos reunimos muy de vez en cuando con algunos españoles y argentinos que trabajan en organizaciones internacionales y más a menudo con Herrera Petere. Por Ginebra pasó Núñez Búa con quien paseamos de un lado al otro de la ciudad los dos días de su estancia en ésta y quien nos dió noticias tuyas. Continúo pensando en aquellos proyectos de ediciones de que hablamos en Buenos Aires para realizar en colaboración y también en alguna exposición en esa. Tienes que orientarme. Aquí gustan mucho mis cosas y creo que van a quedar organizadas para la próxima temporada dos o tres exposiciones entre Basilea y Zurich, no sé aún Ginebra, de grabados y óleos. Trabajé bastante en este último mes y tengo nuevos cuadros además de otros que haré que lleguen a Madrid o a Vigo alrededor de Julio. Ayer, domingo, ví en una vidriera el tomo de Seghers, de París, dedicado a la poesía española. Por los nombres que cita en la cubierta, la antología reúne poemas desde fragmentos del Cid hasta nuestros días y me pareció absolutamente arbitraria la selección. Es posible que tu ya lo conozcas. Todas estas ciudades están llenas de emigrantes españoles. Dicen que solamente en Ginebra hay 16.000, y por las calles se puede escuchar todos los acentos de España. Igual ocurre en Francia por las pequeñas ciudades de la Saboya, que recorrimos en estos últimos días. Vosotros debéis tener ya seguramente organizada vuestra vida. ¿Qué haces? ¿Se concretó alguno de los proyectos que tenías? Escríbenos unas letras, simplemente para decirnos si estáis contentos y cuales son vuestros planes. Si han variado o no. Si María se encuentra a gusto en Madrid y no lejos de Aragón, y si sentís alguna nostalgia de Buenos Aires. Maruja y yo no sentimos nada más que la lejanía de familiares y amigos. Estamos muy contentos en Europa. Las noticias que vienen de la Argentina no dan ganas de regresar. Núñez Búa se marcha creo que con ganas de volver a vivir en España. Escríbeme.
Un gran abrazo de Maruja y mío para María, para tí y los chicos. Otro fuerte para tí de:

[Seoane]

N/dirección es: 4-6 Rue du Lac. Ap. 59. Ginebra

1963-05-15
Carta de Díaz Dorado a Seoane. 1963
Bos Aires
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Díaz Dorado a Seoane. 1963 en 15/05/1963


Buenos Aires, 15 de Mayo de 1963

Sr. Luis Seoane

Querido amigo:

De acuerdo a su indicación, hice entrega al Sr. Whitelow de Bonino, de los grabados por Vd. elegidos para San Pablo, al día siguiente me volvió a llamar ese señor para decirme que el Sr. Brughetti le había pedido que fueran 15 en vez de 5, aunque hasta ese momento no me lo podía confirmar, creo que tenía el propósito de hacer una exposición suya de grabados en San Pablo. No sé si he procedido bien, pero en la mañana de hoy separé 10 grabados más, a mi leal saber y entender, pues el Sr. Billy me indicó que no tenía objeto su intervención en la elección, y se los llevé a Bonino.

A continuación, va la lista de los grabados y el número.

9/35 Inestable mendigo
14/35 Mendigos cautelosos, burlones
19/35 El Caído
14/35 Juana de los trapos
10/35 La Profecía
14/35 El peregrino
2/30 La conversación
13/20 Habita en la montaña
12/20 Cipreses de pájaros escondidos, silenciosos
12/35 Cada uno con sus trapos
15/33 Diálogo con signos, andando
15/35 La calle
13/20 Gaucho dormido con viento sur
11/35 La Celestina
14/35 Sacerdotisa de oscuros presagios
Espero me confirme si es esto lo que corresponde para modificarlo si hubiera tiempo.
Por otra parte, el libro de González López ya está en la imprenta, de manera que, cuando le parezca oportuno, le ruego que piense en las tapas. El Sr. Alonso se portó muy bien y nos va a hacer un envío de papel que superará los 30.000$. Estamos a la espera de Núñez Búa para ver si confirmamos el aporte de Álvaro Gil, en cuyo caso estaríamos tranquilos por el resto de la financiación.
Por la calle Montevideo, todo marcha muy bien y sin ninguna dificultad.

Reciba Vd. y la señora, de mi familia el mejor cariño y mío como siempre un fuerte abrazo.

M. D. Díaz Dorado

A carta está mecanografada con marcas feitas a lápiz na descripción das obras, puideron ser feitas por Seoane.

1963-05-17
Carta de Azcoaga a Seoane. 1963
Madrid
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Azcoaga a Seoane. 1963 en 17/05/1963


Madrid, 17 de mayo de 1963

Luis Seoane
Ginebra

Querido Luis:

A la vuelta de un viajecillo –el sexto en dos meses– para ver la “Medea” de Eurípides realizada en Mérida por el “Piraikon Theatron” y de una incursión fugaz en Elvas (Portugal) donde pasamos el día de ayer con mis compadres, me encuentro con la tuya del 13, largo tiempo esperada. Con Pepe Núñez Bua, que ahora está por Madrid camino de Sevilla nos hemos preguntado algunas noches –visitando el Madrid antiguo–, cómo no nos habías escrito antes. Llegamos el 14 de marzo a Valencia y el 17 a Madrid, después de darnos una vuelta por Ifach, Altea y Benidorm, lugar este último de nuestra “luna de miel” remota. Y desde entonces, pues a disfrutar de la tierra como podéis imaginaros, y a soportar los encuentros y desencuentros naturales de quienes vivieron lejos de ella, once años y medio.
Me alegra mucho que me recuerdes a Petere... El día de la inauguración en este del “Fondo de Cultura Económica”, tuve el gusto de charlar un rato con su mujer. Parece que la misma ha vuelto a Ginebra, sin tiempo para pasar un nuevo rato con nosotros. Cosa que lamenté infinito, por mi antigua amistad con el poeta, y porque la galleguita me produjo una impresión estupenda.
No me parece nada mal que continúes pensando en tus proyectos de edición y en lo conveniente de una exposición tuya en estos pagos. Yo voy tomando contacto con amigos de las artes, con galerías, etc., etc., pero no paso por ahora de ahí... No sé en realidad como enfocaré mi vida, vale decir, de qué manera ganaré lo antes posible mi urgente subsistencia. Pero te confieso que tengo una calma como millonario, sencillamente improcedente.
Con Trabazo, con Cristino Mallo, con otros pintores y con tantas gentes, voy haciéndote relaciones públicas. Cosa un poco inútil, pues aquí toda la gente con la que me encuentro, considera “naturalísimo” que los españoles peregrinos, sentemos un poco la cabeza y continuemos nuestra tarea por estos pagos.
La vida, mucho más cara de lo que supuse, sale triple que en América, pero cuesta bastante. Mi hija Isabel, deseando incorporarse al clan sigue anunciando viaje para noviembre, mientras su hermana Clara suspira por el Johnny lejano, y los pequeños –Myriam y Rafaelillo– preparan sus estudios con discreto entusiasmo. María, a quien virtualmente no veo, en vista de lo bien que la tratan –esta tarde, por ejemplo, está en los toros–, está radiante de satisfacción en su nueva –y un poco vieja– casa. El que te escribe, contento de haber hecho lo que hizo, ve las cosas con la calma que más o menos consiguió en la “trepidante Argentina”, de la que tenemos las peores noticias.
Conozco la edición de Seghers de que me hablas... No me parece la pena ni enfadarme: en literatura y en arte, las cosas desgraciadamente son casi siempre así, y no merece la pena de tomarlo en serio. Aunque...
Por mi parte, en vista de que Gonzalo Losada no publicará mi ESPAÑA ES UN SABOR, le he escrito una carta diciéndole que me diga algo definitivo, y copio mi libro para endilgárselo a TAURUS. Luis López Anglada, capitán de la correspondiente sección poética, me lo ha pedido con un afecto extraordinario. Veremos a ver.
De eso de la nostalgia, me parece estúpido hablar... Si no fuera porque tenemos en Buenos Aires a nuestra hija, y porque en aquel “pandemónium" tenemos muy buenos amigos, no nos acordamos ni del santo de su nombre. Es decir; no nos acordamos durante el día... Porque todas las mañanas leemos en la prensa lo que allí pasa, aparte informes directamente por el correo, de lo que pasa, no pasa y puede desgraciadamente pasar...
Escribí a Rafael Dieste anunciándole que habíamos llegado. Aún no me ha contestado. He visto cosas de Arturo Serrano Plaja en Poesía española y en los Papeles de Camilo José Cela, a quien he entregado algunos poemas de mi nuevo libro. También entregué un par de cosas a José Ortega para la Revista de Occidente, cuyo segundo número –segunda época– está en los quioscos. Debería entregarme el “colaboracioneo” por lo menudo, con el fin de ganar y no gastar, operación a la que entusiásticamente nos dedicamos. Pues aunque la vida está por las nubes, sobre todo para quienes no ganamos aún las 20.000 pesetas imprescindibles, esto es un ir y un venir; un llegarse a Logroño a celebrar la llegada de la primavera; es un pasarse la Semana Santa en la sierra y un acercarse a La Mancha, a Toledo, al Escorial, etc., etc., que nos tiene enloquecidos.
Nos han llegado noticias de Buenos Aires referentes al divorcio de Noemí Gerstein y Franco Di Segni, así como de la escena que se organizó el día que el concreto Capristo sorprendió a su señora esposa en delito de adulterino... Porque vienen constantemente gentes de aquellas latitudes –los Trosman, la directora de El Pórtico, la hermana medio polaca, medio brasilera de Alicia Giangrande, etc., etc– que son portadoras de tan extrañas nuevas. Ya sabréis que Squirru está en Nueva York, encargado de la Dirección de Asuntos Latinoamericanos, o algo así, de la O.E.A. Y que Romualdito Brughetti ocupa el cargo que antes tenía en el Ministerio de la Plaza de San Martín, el bueno y un tanto extraño Francisco Luis Bernárdez, actual embajador de Argentina en Portugal... Hugo Parpagnoli dirige el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires. Y como consecuencia de estos y otros sucesos, el bueno de Héctor Blas González no contesta a una carta mía en la que le solicitaba noticias de mi “Spilimbergo”. Nuestro buen amigo vive en París, Rue Henrion de Pensey 23, distrito 14, según me informó en el Gijón el amigo Burnichon, editor barbado. A quien un día me encontré de palique con el enfurecido Arturo Soria, compañero matutino de Pepe Bergamín, en Loto, bonito local de la calle Serrano. Me dicen que Rosa Chacel pasa temporada en Madrid y que regresa a los Nuevayores. (Yo no la he visto). El amigo Burnichon dijo también que nuestro entrañable Lorenzo Varela piensa venirse con Marika a las Españas, cosa que yo realmente no creo... Mi hija me manda a veces Primera página y leo cosas suyas. Aún no he escrito al galaico y enloquecido muchacho, como me pidió al final de una temporada argentina durante la que tan mal cultivamos nuestra amistad después de nombrarme corresponsal de su semanal emisión radiofónica...
Escribo poquísimo, como me lo sospechaba. Los poemas “cotidianos” que por las buenas me salen, y alguna colaboración para El día uruguayo y La prensa bonaerense. La parte económica, me resulta desoladora... Mil pesos argentinos, que es lo que siguen pagando los Gaínza Paz todavía, se convierten en 432,90 pesetas. (Aquí, parece que pagan 500 con alguna facilidad, y los colegas no están conformes). Paco Leal Insua solicitó mis servicios como director de Mundo Hispánico, pidiéndome una cosa sobre la Antología de Sorolla que se celebra en el Casón del Retiro. Y...
La casa, que en principio nos parecía horriblemente pequeña, va ajustándose a nuestra destartalada y un tanto híspida idiosincrasia. A ella llegan amigos, conocidos, cartas y telefonazos... Está manga por hombro, porque como os digo, no nos queda un minuto para respirar plácidamente. Aunque sospecho que el cuarto desde que os escribo, con algo de rastro madrileño o de “mercado de las pulgas” parisino, se ordenará próximamente... Todos los amigos situados nos llevan y nos traen con sus coches... Uno, como me decía en Buenos Aires Julián Marías, tendrá que pertenecer a “infantería” mientras las cosas no varíen... En lo expansivo, arquitectónico y aparente, España ha variado de manera considerable en estos once años y medio. En lo otro, ni parole de plus... Las gentes, más dispersas y desparramadas como consecuencia de las exigencias vitales, van apareciendo con una cordialidad y generosidad generales, que a mí me honran y sorprenden. Pero si te he de ser franco, mucho me temo que cuando uno comience a buscar el corrusco las cosas no sean tan plácidas. Se me ha sugerido hacer la crítica de arte mensual en Índice, aunque no he concretado nada... Hablé con los Bioscas, sin que mis entrevistas cuajaran en ningún resultado... Como yo me vine dispuesto a todo y pensando que pasarían seis meses hasta que nuestro caudal familiar y creador se encauzara no grito S.O.S... Pero, sólo los ricos como vosotros –no me peguéis–, que llegaréis con dinero fuerte, encontráis esto fácil y posible.
Un día aparecen por el café Pucciarelli y el Greco, personaje este último que vive, protesta y dice que pinta en casa de Manuel Viola. Otro, se me asegura desde Buenos Aires que Barragán llegó, taciturno y maltrecho... La vida sigue, queridos Maruja y Luis, y vuestro amigo de hace algunos años, está siempre encantado de reencontraros. No necesita jurároslo.

Enrique Azcoaga

1963-05-21
Carta de Blum a Seoane. 1963
Segovia
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Blum a Seoane. 1963 en 21/05/1963


Señor, Sra. LUIS SEOANE
4-6 Rue du Lac
5º Dpt. 59
GINEBRA
Suiza

21-5-1963

Amigos Seoane!

Con el amigo Azcoaga presencié la inauguración de la Exposición El arte de América + España en compañía del “Caudillo”. Me encontré también con Duciarelli y con C. de la Cárcova y Sra. Visité Toledo (hermoso!), El Escorial y también Segovia, un encanto!
Hoy, por la mañana: El Prado. Y a las 24 horas, salgo para la Argentina.

Saludos muy cordiales, siempre suyo.

Sigwart B.

1963-05-21
Carta de Seoane a Díaz Dorado. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Dorado. 1963 en 21/05/1963


Ginebra, 21 de Mayo de 1963

Sr. Diego Díaz Dorado
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Acabo de recibir su carta, le agradezco mucho las molestias que se toma por mí rogándole me perdone por todas ellas. Nosotros continuamos casi lo mismo. Mis asuntos en general bien aunque todo muy lento, los suízos son en general lentos, y, en los últimos días hemos viajado mucho por la Savoya y el Delfinado, en Francia, aparte de internarnos por la región central de Suíza. Estuvimos en Grenoble, donde hay un excelente Museo de arte antiguo y moderno, con piezas extraordinarias de arte contemporáneo, sobre todo de Matisse y Bonnard, aparte de los cubistas. Estamos contentos, pero deseando ir pronto a España, quizás vayamos el mes que viene alrededor del 15 o el 20. Antes estaremos unos días en París y para regresar, después de estar en España, a Suíza. Ya veremos. La verdad es que no tenemos plan concreto alguno. Dejaremos que fijen los planes las circunstancias.
Recibí carta de Brughetti en la que me habla de diez grabados para la exposición de San Pablo, quizás, luego, hayan pensado en quince. De cualquier manera me gustaría sustituir de la lista que usted hizo, que le agradezco, los siguientes:

La conversación
Diálogo con signos, andando
Cipreses de pájaros escondidos
Gaucho dormido con viento sur

por

Raudo llamamiento
En el bosque, en otoño
Ponzoñosa bruja del páramo
Haciendo el personaje

Todos ellos están en la colección que dejamos separada en una carpeta, sobre el mueble. Pienso en éstos en lugar de los anteriores para dar mayor unidad y variedad al envío, pues se trata de grabados con tonos superpuestos que pienso que no han de quedar mal al lado de los otros, pues son de técnica similar. Sería importante que Enzo, en Bonino, les ponga marcos del tamaño de los grandes dejando todo el blanco posible. Perdóneme por esta nueva molestia que le solicito.
Me alegro mucho de la publicación del libro de González López. Yo haré la tapa tan pronto ustedes me digan. Núñez Búa estuvo aquí conmigo y les informará de lo que hago. En general lo que hago es pintar, dejo solo de hacerlo para ir a Galerías y ver algo de paisaje o lo que sea que pueda resultar interesante. En Lausanne hemos visto los trabajos de urbanización de una parte de la ciudad donde levantan grandes edificios destinados a la exposición de productos suízos en 1964. Una obra muy importante a la que se destinan 500 millones de francos suízos. Apenas tenemos noticias de ahí y las que vienen son desastrosas. ¿Crée usted que habrá elecciones? La prensa de aquí es implacable con los sucesos de la Argentina.

Un saludo muy cariñoso para su familia, a sus padres, a su hermana y a usted de Maruja y mío, para todos los amigos, y usted reciba un gran abrazo de su amigo:

[Seoane]

1963-05-21
Carta de Seoane a Varela. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1963 en 21/05/1963


Ginebra, 21 de mayo de 1963

Sr. Lorenzo Varela
Buenos Aires

Querido Varela:

Continuamos en Ginebra. Pinto. Salimos a conocer nuevos lugares. Estuvimos en el Museo de Grenoble, magnífico por las obras que reúne de arte moderno y aún de arte antiguo en un edificio inadecuado. Espléndidos Matisse, Bonnard, un retrato de no sé quién de Derain notable, siempre Picasso, etc., y viajamos por la Savoya, una región bellísima y bonapartista. Fuimos a alguna inauguración de exposición de pintura y estuvimos en el estreno de la obra de Buero Vallejo que dirigió Amparo. Muy bueno todo y mucho éxito de crítica en Ginebra donde se ve generalmente buen teatro. Ahora noticias:
Un crítico francés Le piéton de Paris, de France observateur, desalentado por las exposiciones informalistas en rebaño –según él–, se refiere –reproducimos su frase–, “al importante profesor de arte abstracto americano –léase estadounidense–, Hofman –paz– escribe a sus viejos días –y a sus manchas insípidas–”. “Y hasta Brauer –continúa– ese joven austriaco que, Galería Flinker (Rue du Lac) resucita el Jardín de las Delicias como un paquete de gruesos bombones”. Hofman, a quien grandes revistas dedicaron grandes páginas en colores, y del que se hizo propaganda abusiva a todo costo, representó a Estados Unidos especialmente en las Bienales de Venecia y San Pablo. Se trata de un pintor nacido en Alemania que reside desde hace muchos años en Nueva York. Le piéton de Paris termina preguntando: “¿No habrá un pintor que trate de encontrarse a sí mismo delante de la tela? ¿Tratando de escapar a las modas, a sus mezquindades, a este miedo y a esta avaricia sórdida que se cierne por la galerías?
Con motivo del estreno de Tomás Moro o el hombre solo de Robert Bolt, por el Teatro Nacional Popular de Francia, algunos críticos rinden homenaje a Jean Vilar. Uno de ellos, Robert Kanters, escribe en una crónica titulada Sin Jean Vilar: “El T.N.P. de Jean Vilar ha tenido siempre una alta idea de su misión civilizadora, rindámosle homenaje diciendo que ha rehusado incluir en sus planes tal o cual obra políticamente teleguiada, realizando su repertorio sin oportunismo, con una intransigencia sonriente, un sentido agudo del primado de la belleza”. “Uno termina por hablar de él –añade Kanters– casi como de Tomás Moro: es San Jean Vilar quien nos deja”. A Jean Vilar le sustituye en la dirección del Teatro Nacional francés, Georges Wilson, un excelente actor de la misma compañía al que tampoco regatean elogios algunos críticos.
El millonario catalán Alberto Puig, mecenas de los gitanos, la gitanería andaluza de los tablados fue casi siempre una empresa catalana, va, según se escribe, a realizar “la gran operación Flamenco internacional” al estilo de los Ballets rusos de Diaghilev, transformando en un verdadero espectáculo teatral las danzas folklóricas andaluzas. Solicitó la colaboración para ello de Vicente Escudero y Carmen Amaya y espera que se incorpore al grupo La Chunga. El Picasso de estos Ballets sería el pintor madrileño Manuel Viola, informalista, que, según noticias, protege actualmente en Madrid al pintor informalista argentino Alberto Grecco.
Gaeton Picon, el crítico e historiador literario francés, con un equipo de ensayistas y poeta transforma Le Mercure de France, la más antigua revista de ese país, fundada en 1672. Cuando se fundó, se la adjetivó como galante. Boursault la escogió como tema de una comedia: “Donde uno encuentra todo, fábula, historia, verso, prosa.
Sitios, combates, procesos, muerte, matrimonio, amor.
Noticias de provincia y noticias de la corte.
Ningún libro me agradó ni me fue más necesario”.
Sucesivamente Le Mercure de France fue nueva, galante, francesa y nacional. Grandes escritores a partir del siglo XVII han colaborado en sus páginas hasta Gide, Apollinaire, Mauriac, que escribe a propósito de ella: “A comienzos de este siglo, para un adolescente que se roe en su provincia, el caduco Mercure fue símbolo y llave de toda poesía”.
Ahora, según un periodista, El título de rojo obispo, pasó a ser violeta cardenal.
Con motivo de la visita de Marc Chagall al edificio de las Naciones Unidas, en relación con un mural dedicado a honrar la memoria de Dag Hammaskjoeld, se recuerda que el gran pintor entregó al poeta Evtochenko una monografía suya dedicada a Nikita Sergueievitch Kroutchev para que se la entregase personalmente al jefe del estado soviético.
En Lausanne, Suiza, con motivo de la gran exposición de productos de este país que se celebra cada veinte años, se está celebrando un gran esfuerzo arquitectónico y urbanístico. Se crean nuevos barrios y parques, se abren calles nuevas y se levantan gigantescos edificios que luego de ser hoteles serán transformados en viviendas y oficinas. El presupuesto de esta gigantesca obra se fijó en 500 millones de francos suizos, es decir, aproximadamente 17.500 millones de pesos argentinos. La exposición se realizará el próximo año.

Éstas son todas las noticias por hoy. Hasta la semana que viene. Escribe algo. Un gran abrazo para Marika y para ti de Maruja y mío:

[Seoane]

1963-05-22
Carta de Seoane a Pagano. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Pagano. 1963 en 22/05/1963


Ginebra, 22 de Mayo de 1963

Sra. Sara B. de Pagano
Buenos Aires

Querida amiga:

Hemos recibido su carta con las noticias de ahí que agradecemos. Apenas leemos en la prensa de aquí y de París algún que otro comentario desolador y algún día, cuando en un diario trae algún cable escueto, buscamos otro diario que lo interprete y aclare. Su carta y la de Scheinberg que llegaron casi juntas, nos produjeron alegría, aparte por saber de Udes y los amigos, por saber algo más de lo que ahí ocurre. Nosotros continuamos una vida normal, tratando de ver lo que podemos y trabajando con esperanzas de que algunas gestiones iniciadas lleguen a ser realidad. Ahora durante un tiempo, el verano, marcharemos a España a estar con la familia en Madrid, Asturias y Galicia. Antes pasaremos por París. Estaremos muy pocos días, unicamente para ver museos y amigos. Queremos aprovechar lo más posible este viaje. Hace pocos días, le escribo a Scheinberg, hemos estado en Grenoble donde hay un notable Museo de arte antiguo y moderno. De entrada solamente tuvimos que acordarnos de Falcini, pues allí, en el vestíbulo, estaban tres piezas de Bourdelle de seis o siete metros de alto, La Virgen que estuvo expuesta en Buenos Aires en su museo, La Victoria y otra cuyo título ahora no recuerdo, impresionantes. Supongo que en alguna otra parte de Francia estarán al aire libre que es donde deben conseguir todo el efecto para que fueron hechas. De cualquier manera aún con el techo del palacio que sirve de Museo, encima, estas obras de Bourdelle son muy importantes. Quizás les falte al aire libre esa calidad vegetal en el modelado, de tronco, o algo así, que hace que a las obras de Rodin se las vea incorporadas más definitivamente a un parque, como ocurre con La musa que está a la puerta del Museo de Ginebra.
Interrumpo la carta aquí para escribir sobre otros asuntos. La venta de ese cuadro mío en el Teatro del Pueblo me sorprendió, lo tenía absolutamente olvidado. Debe tratarse de algún cuadro entregado hace años y del que luego no me acordé más. Seguramente, como ocurre siempre, o casi siempre, lo vendieron al precio de entonces. A Malamud le entregué un cuadro y un pastel hace mucho tiempo. El pastel se había vendido y creí que me había devuelto el óleo. Parece que no fué así. Le ruego, pues, me lo cobre. El arquitecto Aisenson y su hermano me adeudan 40.000 pesos. 15.000 José, y 25.000 su hermano. Le agradecería que me hiciese tambien el favor de cobrarlos, si ellos pueden pagarlo ahora, pues quizás necesite de todo ese dinero en España.
En cuanto a mis obras gustan mucho en general. Me ofrecieron un puesto para trabajar en cuestiones gráficas en una empresa norteamericana en Ginebra, pero no acepté. No es en Ginebra precisamente donde me gustaría trabajar en estas cuestiones, prefiero Buenos Aires donde se paga menos o no se cobra nada. Esto es muy difícil de explicar. Sarita, le agradecemos todas las molestias que se toma por nosotros y le rogamos a Ud., como a todos los amigos, que nos escriban. Los tenemos a todos presentes aunque no escribamos a todos. Saludos a los suyos, a Falcini, a Nélida, Anita y Petroni, Silvia, María, etc., a todos y un abrazo cordial de Maruja y mío:

[Seoane]

1963-05-22
Carta de Seoane a Scheimberg. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Scheimberg. 1963 en 22/05/1963


Ginebra, 22 de mayo de 1963

Sr. Simón Scheinberg
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Estábamos verdaderamente alarmados por la falta de noticias directas de ustedes. No sabíamos a qué atribuirlas. Nosotros, es cierto, no escribimos inmediatamente después de nuestra llegada porque no queríamos dejarnos llevar por impresiones rápidas. Su primera carta, la del día 16 de la que usted me escribe, no la hemos recibido. Pero no fue la única perdida. Tampoco recibí una que me envió un amigo mío del Centro Gallego a quien envío semanalmente las colaboraciones de la audición Galicia emigrante. De modo que puede imaginarse la alegría con que Maruja y yo abrimos su segunda carta, la que nos llegó, del 12 de mayo. De mis asuntos, los referidos a la pintura, no puedo decir aún si me va bien o mal. Creo que, en general, me va bien. Es posible que haga algunas exposiciones en Basilea, Zurich y Ginebra, en las tres ciudades o en dos de ellas, aún no lo sé, pues no tengo nada firme concretado, y es también posible que haga un mural de hierro para unas oficinas de Zurich. Gustan mucho mis obras y en este sentido estoy contento, pero la gente es muy lenta para decidir cualquier asunto, y yo, venido de Buenos Aires, soy aquí como un caído de Marte, pues la vara de medir en cuestiones artísticas es París o Nueva York. Para la Suiza alemana, Alemania además de París y Nueva York. Nueva York cada vez menos, pues París recobra en estas cuestiones su influencia. El arte italiano actual no cuenta en Suiza. El caso de Marino Marini, muy comprado aquí, no sirve como ejemplo, pues vivió muchos años en Zurich. Se trata de una influencia económica, de intereses comerciales de galerías en la que nada tiene que ver la calidad de la obra de un artista. En Ginebra, según veo ahora en un diario para transmitírselo a usted, hay 23 galerías de pintura. De ellas dos o tres son directamente sucursales de galerías norteamericanas y llevan el mismo nombre de la casa central, las otras tienen nombres independientes, pero sus dueños son agentes de venta de grandes galerías de París. El marchand, aquí, más que un agente cultural es un agente financiero que depende de otros agentes financieros de tipo distinto. La obra de arte posee un valor económico al que se atiende en primer término y, concretamente, la banca le dedica especial atención. Un marchand de París o de Nueva York invierte sumas muy importantes en la propaganda de un artista contratado por su galería, le hace intervenir en exposiciones internacionales, bienales, concursos, etc., promueve campañas de prensa por medio de ensayos de expertos, reportajes sobre el artista, su vida, sus costumbres, etc. Todo sirve como pretexto de la nota, el castillo que compró Buffet que es un pintor de 32 o 35 años a quien espera un porvenir más glorioso que su pasado; la colección de perros de otro; el amor por los muebles antiguos y las ropas lujosas y extrañas de Mathieu; el catolicismo gaga de Utrillo, cualquier motivo sirve para una nota en París Match o en revistas similares y otras breves notas para agencias periodísticas internacionales, que luego compran y reproducen por precios baratísimos los diarios y revistas de todo el mundo, especialmente las que como en Buenos Aires son exclusivamente comerciales. Luego, también por medio de agentes, los mismo directores, comienza la venta a museos europeos de países ricos, los del Báltico, Suiza, Alemania Occidental, Holanda, Bélgica y es entonces cuando aparece el agente bancario o el experto financiero que invierte grandes cantidades en estos valores. En Suiza, se ve muy bien esto. El experto financiero de cualquiera de esos multimillonarios árabes, por ejemplo, lo que más abundan de países petroleros, o que un día siendo ministros se levantaron con el tesoro de su patria, norteamericanos, o de cualquier parte, compran una cantidad de cuadros del pintor consagrado en París, que tiene ya una cotización alta, y los deposita en un banco suizo sin que el propietario jamás los vea, pues no le interesan como arte, sino como inversión, y sin que esos cuadros vean más la luz en mucho tiempo. Estos cuadros rinden más beneficio al adquiriente que muchas acciones de empresas industriales y comerciales. Calcule usted la suba de valor de una obra de Buffet o cualquiera en su condición, de 1950 a 1960, este cálculo le dará a usted idea del beneficio. De Max Ernst podía adquirirse en París en 1949 un pequeño óleo suyo por unos 15.000 francos de entonces. Ahora, en una galería norteamericana de Ginebra, óleos suyos de tamaño de media tarjeta postal valen 21.000 francos suizos, es decir, alrededor de 650.000 pesos argentinos. Y esto que ocurre en la obra de artistas actuales para con las antigüedades. No hay, creo, pequeña villa suiza, casi aldeas, que no tengan su tienda de antigüedades, objetos extraños que pasan de unas manos a otras creciendo de valor. Creo que me extendí demasiado sobre esta cuestión, pero ello explica muchas cosas. Solana, un gran pintor español, tiene una cotización local en España, pero no la tiene internacionalmente y eso ocurre, por ejemplo, con Carrá en Italia, Figari en la Argentina, etc. Pero todo ello aclara porque lo que se ve en galerías son exposiciones de artistas provenientes de París. Alguien que venga por su cuenta, solo, de Calcuta o Buenos Aires, debe luchar con enormes dificultades y la primera importante es el miedo de las galerías a perder dinero. Sin embargo, por mi parte, no me quejo. Vine, eso sí, en mal mes, debí haber llegado en invierno. Ahora tengo que esperar. Mientras tanto, iremos a España alrededor de mediados del mes que viene luego de pasar unos días en París para ver museos y amigos y volveremos aquí en septiembre. Hemos estado en Grenoble y vimos espléndidos óleos de Matisse, Bonnard, Picasso y los cubistas en general. También notables obras antiguas: Zurbarán, Velázquez, Goya, aparte de los franceses y primitivos. Un notable retrato de Fantin Latour. Grenoble es una ciudad encantadora que como todas las del Delfinado y la Savoya tienen además el atractivo de su soberbio paisaje. Por todas partes, trabajadores españoles en cantidad. Como aquí mismo en Ginebra, castellano, catalán y gallego son idiomas que se escuchan corrientemente por las calles. Anduvimos también por regiones suizas. Hasta estuvimos en Gruyère, el lugar de los famosos quesos que resulta que se hacen sin agujeros, muy compactos y que los agujeros son de Ementhal, un sitio entre Berna y Lucerna. Gruyère tiene un hermoso castillo. He hecho algunas acuarelas de paisajes alpinos. Todo esto me atrae mucho. Pero, en esta época del año, los suizos, por lo menos los que a mí me interesan para mis asuntos, se marchan de vacaciones y nosotros aprovechamos para ir a España.
Tuvimos noticias del tremendo efecto causado por el movimiento europeo de protesta por la ejecución de Grimau, sobre todo de las protestas católicas, de obispos, de congregaciones, etc., que se manifestaron con firmas o en la calle junto a las personalidades de izquierda y los partidos políticos. Los diarios españoles, por vez primera, dieron noticia de algunas de ellas sin alterarlas, aunque luego las comentaran caprichosamente. Pemán arremetió contra Mauriac en el ABC. Es inútil, algo cambia también en España. Pemán usa argumentos que no sirven para un católico francés y que empiezan a no servir tampoco a algunos españoles con miedo al porvenir. Sobre la Argentina, los comentarios son de pesimismo alarmante. Nosotros sentimos no tener más noticias.
Bueno, Scheinberg, nada más por hoy. Lamentamos la enfermedad de Aída. Esperamos que cuando llegue ésta haya mejorado. Nosotros los recordamos siempre y les extrañamos como a todos los amigos de ésa, a los que escribimos y a los que aún no les hemos enviado noticias nuestras. Para todos, todos, un gran abrazo de Maruja y mío y otro especialmente para Aída y usted de Maruja y de:

[Seoane]

1963-05-25
Carta de Aisenson a Seoane. 1963
Bos Aires
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Aisenson a Seoane. 1963 en 25/05/1963

Buenos Aires, 25 de mayo de 1963
Querido Seoane:

He recibido su carta de Ginebra en la que me refiere las interesantes experiencias en decoraciónes de vidrio hechas por Mercat¿? , cuyos detalles constructivos sería interesante indagar para tratar de aplicarlo en esta Buenos Aires actualmente tan gris, donde tan poco se ha realizado en este tipo de decoraciones y que tanto necesita de su luminosidad. He demorado unos días en contestarle pues no tenía aún definido mi itinerario ni las fechas, y trataba de encajar a Suiza dentro de la época en que ustedes estarán allí, pero desgraciadamente no será ello posible por las combinaciones aéreas de nuestro viaje triangular, que nos obligará a visitar Suiza recién a fines de septiembre, perdiendo lamentablemente el asesoramiento germánico de Maruja, pues aún recordamos su gracioso: “empuchen, rempuchen, estrechem, frachem” (sic)
Iremos primero a Dinamarca y Suecia, quizás Noruega y luego a París donde quizás tengamos la suerte de encontrarlos, pues allí estaremos alrededor del 12 hasta fines de julio para ir luego a España, incluyendo a Galicia, que pensamos recorrer en automóvil y donde sería magnífico tenerlos de compañeros y asesores a la vez.
El movimiento de exposiciones en Buenos Aires aún está opaco, quizás por la influencia de la situación económica. Creo que lo más interesante hasta ahora ha sido la Exposición de diseño industrial en el teatro San Martín y la más reciente aparición del libro de Eudeba en el que también colabora usted, de narradores argentinos, muy elogiado por el suplemento de la Nación de mañana que aquí en Belgrano recibimos adelantado. Mi hermano estuvo estos días recordándolos y les envía cordiales saludos, lo mismo que Saidel ¿?. A Julio Kleiman le propuse estos días una pared en la obra de Callao 2050, muy visible desde la calle y que creo que sería interesante que usted la tratara plásticamente quizás con cemento coloreado, en distintos relieves a la manera del italoamericano Nivola ¿? Creo haber visto en algún número de Art D´Aujourd hui algún trabajo de Abt también ejecutado con cemento. De manera que de nuevo lo esperará para que usted lo embellezca, pues recién estará en condiciones cómodas para trabajarlo, quizás en abril o mayo próximo. En ese intervalo, podrá usted imaginar quizás alguna otra técnica para tratarlo más interesante (cerámica, por ejemplo).
Confío en que ésta los encontrará bien gozando conjuntamente de los encantos lacustres de Suiza y que tengamos la suerte de encontrarlos en algún rincón de Europa. Reciban mientras tanto mis afectuosos saludos así como el de Margarita.

J. Aisenson

1963-05-25
Carta de Falcini a Seoane. 1963
Bos Aires
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Falcini a Seoane. 1963 en 25/05/1963


Buenos Aires, 25 de mayo de 1963

Sr. Luis Seoane
Ginebra

Mi querido amigo:

Su carta con noticias de la resonancia que tuvo en Suiza el fusilamiento de Grimau, particularmente de las organizaciones sindicales, cuya protesta fue rematada por la simbólica ofrenda floral lanzada a las aguas del lago para que el Rhône llevara esas flores a la costa española, me emocionó de veras, primero, porque revela esa capacidad de reaccionar ante tamaña injusticia y, en seguida, por oposición a la apatía argentina, que nos avergüenza, por la insensibilidad que podría significar para propios y extraños.
Esta insensibilidad política, tremendamente antisocial, ayer tuvo entre nosotros, si no me equivoco y si es una reacción popular, la acción de un “comando para combatir el hambre”. En el Minimax Superket, situado frente al Parque Rivadavia, sustrajeron un camión cargado de siete u ocho toneladas de verduras, con el que se trasladaron a una villa miseria, de Villa Lugano, donde distribuyeronle entre los moradores que al parecer lo esperaban. Con los alimentos recibían volantes anunciando la organización de comités de lucha para combatir el hambre, la miseria y la desocupación. La comisaría no tomó medidas contra nadie, para evitar la resistencia de los beneficiados. Y los demás...
Por otra parte, el diario La Nación de hoy da un extenso telegrama, procedente de The New York Times donde dice que la Falange española está bajo la amenaza de división, en un acto. Cantarero del Castillo previno que a menos que se llevara a cabo reformas sociales en España, el proletariado “establecerá su dictadura”. Ojalá anuncie buenos vientos para el pueblo español, hacia un ascenso tan esperado.
Y la Argentina sumida en el desconcierto de sus dirigentes hoy nos enteramos de la ley monstruosa que el desgobierno acaba de promulgar para reprimir las actividades comunistas en el país, decreto que puede alcanzar a todos. Es un estímulo a la delación, a la calificación canallesca, a las venganzas de la ambición. Este decreto homicida tiene un segundo, que legisla sobre el doble visado para viajar de y a España.
A pesar de ello, María Casares, en Yerma, pudo provocar y conocer, como Gori Muños, con su arte, la admiración delirante de nuestro público, desde las salas del Teatro Municipal San Martín. Esto por lo español. Y por lo ruso–soviético, el estadio del Luna Park vibró del entusiasmo de millares de personas, durante muchas noches, celebrando la alegría oriental del Ballet Moisseiev, espectáculo de ritmos y colores folklóricos.
Pasando a otras actividades: la galería Bonino inició sus actividades del año con una muestra de pinturas de Vidal, Pellegrini, D´Astrel Baldasua, Batlle Planas, Aizemberg y Seguí, con el título A partir de Vidal. De los tres primeros hay opinión hecha. De los otros me interesan los envíos pictóricos de Basaldúa, cuya figuración evoca con una intensidad colorista. Y Seguí, con un intenso expresionismo menos sabio, más instintivo. En Riobo, Alonso hace un alarde de trabajo en muchas aguadas, en las que persiste un desorden en procura del espacio, que no logra claridad, según mi ver.
Yo trabajo en la preparación de lo que constituirá mi envío a la muestra de esculturas que Romero Brest prepara para la segunda de Julio, en el Museo, de un número limitado de escultores, con otro de pintores, reunidos bajo el signo La generación madura se expresa.
Usted, Seoane, cuándo muestra sus trabajos en Suiza? Tiene taller? En buenas condiciones? Está pintando? o grabando?
Mucho le agradezco sus buenas y cordiales expresiones para mi Mujer del Éxodo y, sobre todo, sus afectuosos deseos de que la veamos en Madrid, cuando las cosas cambien. Supongo que Ustedes habrán recibido las cartas de Scheimberg y la de Sarita, que les dicen cómo los recordamos y extrañamos.

Los míos retribuyen vuestros saludos, los amigos les hacen llegar los suyos; a Maruja y a Ud. un fuerte recuerdo mío y Ud. reciba un abrazo de:

Falcini

[Escrito na marxe esquerda:] Una noche vimos unas interesantes pinturas de Lea Lublin que piensa exhibir en la Galería Riobo, en agosto próximo.

1963-05-26
Carta de Burd a Luís e Maruxa Seoane. 1963
Bos Aires
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Burd a Luís e Maruxa Seoane. 1963 en 26/05/1963


Bs. As., 26 de mayo 1963

Queridos Maruja y Luis:

Con un poco de vergüenza les escribo estas cortas líneas, por haber dejado pasar tanto tiempo desde vuestra primera carta. Si fuese personalmente, les podría contar todas las razones de esta demora. Así, por carta, sólo les digo que el clima tan denso de nuestros problemas es el culpable. Escribirles más sería insistir en un tema agotado en nuestras conversaciones de antes de vuestra partida.
Parece mentira que ya hayan pasado casi tres meses desde nuestra despedida. Aquí todo cada vez peor. Allí, noto por vuestro tono que quizás las cosas no vayan tan rápido como esperaban. Pero pienso que es necesario ser un poco paciente ya que soy un convencido que los resultados no están a la vuelta de cada esquina. Venimos de despedir a María Teresa [León] y Rafael [Alberti] que parten pasado mañana para Milán. Con ellos hablamos largamente de Uds. Hemos coincidido que tus trabajos pueden tener gran éxito en Europa, pero es necesario esperar y trabajar. Que trabajen nadie de nosotros duda, pero tememos que quizás no sean tan pacientes y que puedan malograr, por desistir, de un desarrollo imprescindible en el arte de Luis. Todos nuestros amigos se van... No les niego que nos duele mucho. Las perspectivas aquí no existen. ¿Será que nos tendremos que ir un día nosotros también?
Esther y yo salimos el miércoles 29/5 para Madrid (Imposible llegar a Ginebra, a pesar nuestro) 15 o 20 días allí y después a Amsterdam. A ambas ciudades por negocios, y vamos sin ningún entusiasmo. A tal punto nos absorben nuestros problemas. Esto se los digo para que tengan el entusiasmo de permanecer luchando. A Rafael le daremos vuestra dirección, ya que su avión los deja en Ginebra y estarán en esa un día. Charlarán bastante. Lamento no estar presente para ampliar la tertulia. Pero estoy seguro que ya la haremos pronto. Les estoy escribiendo a las 12 de la noche para que les llegue pronto en el primer avión de mañana, lunes. Nuestra dirección en Madrid: Hotel Emperador (del 30/5 al 18/6). Quizás tengamos noticias de Uds. (o quizás nos encontremos allí o en Amsterdam) ¿Se animarían a llegar hasta nosotros? Si es así, escríbannos. Sería una alegría enorme.

Un abrazo fuerte para los dos y otro más.

Lipa

Queridos Maruja y Luis:

Son la doce de la noche, venimos de despedir a María Teresa y Rafael, a quienes dimos vuestra dirección de Ginebra y les escribimos a 2 días de nuestra partida para España. Vamos por poco tiempo y solamente a España y Amsterdam. Lástima no verlos, pero Lipa debe trabajar en esos 2 países. No podemos quedarnos más de 4 semanas de manera que aprovecharemos el viaje para dar una vuelta por España y sacar muchas fotos. Bs. Aires está como uds. la dejaron, llena de toda clase de problemas, y los nuestros personales siguen aún. Arroyo no se ha terminado todavía, pensamos que para fin de año eso suceda. Aquí estrenaron Yerma de García Lorca con María Casares, dirigida por Margarita Xirgú, la crítica fue en general muy buena, pero nosotros no hemos tenido tiempo de ir a verla. Y creo que no alcanzaremos a verla. Ha habido una exposición de diseño industrial muy interesante y algunas otras de relativa importancia. Parece que Torres Agüero viene a Bs. As. en julio a exponer en Bonino.
Las direcciones que piden son las siguientes:

Aurora Cortázar: 9 Place du Gral Beuret Paris XV
Teléfono: Lec (Lecurte) 6923.
Maria Jonquières: 3 Impasse du Moulin Vert Paris XIV
Teléfono: Seg (Segur) 1032.

Los Jonquières vienen a Bs. Aires para Julio. Eduardo se queda 15 días y se va para Grecia. María se queda todo el mes. Bueno, queridos amigos, a ver si nos podemos ver en Amsterdam como les escribe Lipa. Va un gran abrazo para los dos.

Esther

1963-05-28
Carta de Seoane a Torrallardona. 1963
Xenebra
San Antonio de Padua
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Torrallardona. 1963 en 28/05/1963


Ginebra, 28 de mayo de 1963

Sr. Carlos A. Torrallardona
San Antonio de Padua
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Llevamos casi tres meses fuera de Buenos Aires, hemos andado por toda Suiza, por la Savoya y el Delfinado de Francia y siempre me hice el propósito de escribirte para contarte alguna de mis impresiones, pero siempre, también, fui dejando para otro día el hacerlo. He visto en las ciudades suizas algunas exposiciones espléndidas: Paul Klee, Villón, Jawlensky, etc., volví a ver los espléndidos museos de Basilea, Zurich y Berna, los Juan Gris –treinta y tantos– que a mí me apasionan de Basilea y Berna y, hace pocos días, el también bueno de Grenoble, en Francia, con un magnífico Bonnard casi blanco; un Derain, retrato de no sé qué personaje, notable, y un Matisse extraordinario que cien veces vi reproducido sin percibir su belleza hasta que lo vi en Grenoble centrando una sala. A su lado un pequeño paisaje de camino y árboles ejecutando con una gran sabiduría y de un realismo sorprendente. Pero no es de esto sólo que quería escribirte, sino de Peinado... Aquí, en Ginebra, me encontré con Peinado, pasó unos días en casa de una amiga suiza, aficionada a la música y a la pintura, que vive en un pueblo a pocos kilómetros de esta ciudad. Peinado estaba pintando el paisaje de esa zona y algunas tardes venía a la ciudad para visitar galerías y hacer gestiones o compras. Maruja y yo hemos andado mucho con él y te hemos recordado a menudo. Por mi parte, no lo había visto desde 1949, pero continúa siendo, 14 años después, la misma bella persona, seria y correcta que entonces me pareció y el mismo sabio pintor, aunque un poco vencido. Nos hicimos el propósito de escribirte unas líneas en una tarjeta postal, pero el propósito no pasó de tal. Quiero escribirte sobre esto, sobre el recuerdo de Peinado y deciros a Matilde y a ti algunas noticias nuestras. Llevamos tres meses, o casi tres meses en Suiza, viviendo más que en ninguna otra ciudad en Ginebra. Nos gusta mucho este país. Esta vez, hemos recorrido bastante su zona alpina. He concretado aquí alguna exposición para la próxima temporada y una galería de Ginebra, muy importante, se encargó de representar mis grabados en Europa, aparte de hacer, así mismo, una muestra de ellos próximamente, pero aún no tengo fecha. En los primeros días de junio, vamos a París, donde estaremos una semana o diez días y luego marcharemos a España. En Asturias y Galicia pasaremos, con los familiares, casi todo julio y agosto. Aquí pinté bastante, pero en España pienso aprovechar el tiempo que pueda para trabajar. Os tendremos al tanto de nuestra vida desde allí. Quisiera tener noticias de Buenos Aires. Las que aquí llegan son realmente decepcionantes. Parece que no solamente no mejoró nada, sino que todo se ha puesto políticamente peor.

Por hoy nada más. Recibid Matilde, tú y tus hijos un gran abrazo de Maruja y mío y tú otro fuerte de:

[Seoane]

1963-05-28
Carta de Seoane a Varela. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1963 en 28/05/1963


Ginebra, 28 de mayo de 1963

Sr. D. Lorenzo Varela
Buenos Aires

Querido Varela:

Ahí van unas noticias. La primera, privada, es que una Galería de Ginebra, muy importante, que acaba de editar un libro de Char con litografías de Braque, y otro no me acuerdo ahora de quien con litografías de Miró, se encarga de mis grabados en Europa. Ayer también tuve noticias de Basilea del acuerdo de la Kunsthalle para exponer óleos míos en la próxima temporada, pero aún no tengo fecha concreta. De cualquier manera, el 10 salimos hacia París, donde estaremos muy pocos días y desde allí para España, que es donde queremos estar. Si hiciese falta, trataríamos de volver en septiembre a Suiza. Ya veremos.
Noticias
Un escritor polaco emigrado a la Argentina cuya reputación comienza a ser universal ha hecho declaraciones a algunos diarios de París. Se trata de Vitold Gombrowicz, que publicó en castellano, hace años, en la Editorial Argos de la capital argentina, su libro Ferdydurke sin que esta publicación tuviese ninguna resonancia en la prensa porteña ni entre los escritores que se tienen por más importantes en Buenos Aires. Ferdydurke se publicó en francés en 1958, desde esta fecha se ha hecho una decena de traducciones del libro a diversos idiomas y el apellido Gombrowicz es ahora conocido, en los medios intelectuales europeos, como el de un importante creador que estuvo aislado en Buenos Aires durante muchos años. La traducción de Ferdydurke al francés se efectuó inmediatamente de la edición polaca en 1957, diez años después que la argentina y veinte máis tarde que la primera edición en Varsovia. Vitold Gombrowicz emigró a Buenos Aires en 1939 y en esa ciudad escribió TransAtlántico, La pornografía, algunos volúmenes de su Diario y la obra de teatro El casamiento, que se estrenará en París el próximo mes de junio. Veinticinco años después de su llegada a la Argentina y luego del silencio porteño, regresa a Europa y se mueve, según parece, con dificultades en el mecanismo de su celebridad naciente: interviús, recepciones, reuniones, encuentros... Entrevistado por Piotz Rawicz afirma: “En la Argentina, yo viví fuera de los medios intelectuales, rodeado de amigos que no pasaban de los veinticinco años de edad. Con éstos, dijo, me habitué a hacer una política literaria, mezcla de provocación, de juego, tontería, rareza, indolencia... Resulta pequeño el universo de la juventud”. Interrogado sobre París, contesta Gromwicz: “Cuarenta mil pintores en esta ciudad de los cuales cuatro o cinco son auténticos. Millares de escritores o que se consideran como tales. La estupidez, la impostura, conscientes o inconscientes, constituyen sus límites. El escándalo no dura mucho”. Se considera la obra de este escritor polaco como una de las más importantes en este siglo en la literatura de su país, precursora de la de Ionesco, conteniendo como tema principal la inmadurez. Los autores franceses preferidos por él son, en general, Montaigne, Rabelais, Jarry y Gide. Hablando de sí mismo, dice: “Soy un viejo campesino, un poco desconfiado y frío. Desconfío de los conceptos y mi obra constituye la sátira de la conceptualización. Definí una vez como una aspirina que produce el relajamiento. Mi arte es el opuesto de la nueva novela francesa, que se hizo descriptiva, objetiva. No me sujeto al objeto. Trato de seducir a las gentes, busco la superioridad, la dominación, la expansión de mi yo. Ésta no es una filosofía, sino la actitud patética de un artista. El hombre está en conflicto perpetuo con la forma, cualquiera que ella sea. La parodia es su venganza”. “Mi drama personal –añadió– procede de dos fuentes, de una degradación vengativa de toda forma, y de mi sumisión humillante a la juventud. Como artista, busco la perfección, tiendo a la madurez y al mismo tiempo estoy locamente encariñado con la inmadurez, lo inacabado. No existe solución, no puede existir, si me convierto en maduro dejo de ser joven, y así continúo...” No es, pues, por azar, la obsesión melancólica de adolescencia y juventud de Gromwicz. Rawicz afirma que la grandeza del drama de este escritor reside en ser “el de un formalista que se burla de la formas, de un realista que no solamente entrevé, sino que ve, carnalmente, la inconsistencia fatal, la pluralidad dolorosa de aquello que se llama comúnmente realidad” Entresacamos algunas respuestas de esta entrevista a un escritor casi desconocido en la Argentina a pesar de vivir en esta nación, conocido ahora universalmente por Francia y que, sin embargo, llegó a la madurez en nuestro país. A la madurez de su propósito de inmadurez literaria. Habría que estudiar hasta que punto influyó en él, o lo afirmó en su propia inmadurez, la inmadurez general argentina. George Braque expone actualmente grabados en madera en una Galería de París y en otra collages. El papel pegado, afirmó el pintor, me permitió disociar el color de la forma y ver que eran independientes uno del otro.
Sobre una exposición de arte norteamericano que se celebra actualmente en París y que constituye una selección de la sesenta y seis exposición del Instituto de Arte de Chicago, afirma Conil Lacoste que la última invención de la vanguardia de Estados Unidos constituye una especie de fotomontajes de objetos domésticos dibujados a gran tamaño, integración de franjas dibujadas, sonrisas de Marylin en serie, falsos helados a gran escala, etc.
Me extendí un poco con el reportaje de Gromwicz, pero creo que vale la pena por ser conocido de una minoría argentina. Hasta dentro de unos días. Saludos de Maruja y míos para Marika y para ti. Un abrazo:

[Seoane]

1963-06-01
Carta de Seoane a Abt. 1963
Xenebra
Palafrugell
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Abt. 1963 en 01/06/1963

Genéve, 1 de Junio de 1963

Sr. Ott Abt
Palafrugell (Gerona)

Querido amigo:

Recibí su carta de hace ocho días y me alegra saber que están, su esposa y usted, disfrutando de sus vacaciones. Nosotros saldremos de Suíza dentro de unos días hacia España, Madrid en Junio y para Asturias y Galicia en Julio y Agosto. Quizás hagamos alguna escapada a Barcelona haciéndoselo saber a Uds. para poder encontrarnos. Es casi seguro que vuelva a Suíza en setiembre. La galería Edwin Engelberts, de Ginebra, se encarga de mis grabados y es posible que para el otoño haga una exposición de mis obras. Trabajé bastante. Tuve noticias de la reunión de la comisión de la Kunsthalle y del acuerdo que ustedes tomaron con respecto a mí. Estoy muy agradecido al Sr. Theller y a usted por todo cuanto hicieron en esa oportunidad. Además de escribirme el Sr. Theller, el Sr. Sigwar Blum me habló de ello y de la satisfacción que tuvo de conocerles a usted y a su señora. Se trata de un gran amigo mío de tanto valor intelectual y sensibilidad como modestia. Me alegro que usted, Otti, hubiese terminado el gran mosaico cuyo proyecto ví en su estudio. Estoy seguro que debió haber quedado espléndido, pues así se veía en el proyecto mismo. Espero que ahora hubiese abierto ya su caja de colores y empezado a aprovechar en lo posible el paisaje catalán. Por mi parte hice algunas acuarelas de montañas en las cercanías de Ginebra. Me gusta mucho este paisaje y comprendo cada vez más al Hodler de los paisajes de los últimos años de su vida. En Neuchatel ví en el Museo una sala dedicada a él, con recuerdos personales conmovedores. Pero espero hablar de esto con usted personalmente, ahí en Cataluña, o aquí en Suíza.
Les mandaremos nuestra dirección en España. Mientras tanto reciban usted y su esposa el saludo afectuoso de Maruja y mío:

1963-06-01
Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1963
Xenebra
Madrid
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1963 en 01/06/1963


Ginebra, 1 de Junio de 1963

Sres. Esther y Lipa Burd
Madrid

Queridos Esther y Lipa:

No sabéis cuanto nos alegró tener noticias vuestras. Estábamos impacientes por tenerlas. Es casi seguro que coincidimos en Madrid. Nosotros marcharemos estos días a París, donde estaremos solo unos pocos y alrededor del once o doce calculamos estar en esa. A París volveremos más adelante. Estamos deseando ir a España a donde debió llegar hoy un tío nuestro que está viviendo en Méjico y al que no vemos desde cuando vosotros podéis imaginar. Hemos estado con Rafael y María Teresa, y Aitana, que nos informaron de todo lo lamentable de Buenos Aires. No da ganas de volver. Nosotros sentimos solamente la nostalgia de los amigos, tan hartos estábamos de todo lo que allí pasaba. En Suíza hasta ahora me fué bien. Una galería que se dedica a grabado, de aquí de Ginebra, muy conocida, con fuertes vinculaciones con París, editora además de libros para bibliófilos, (acaba de editar un libro de Char con litografías de Braque, 200 ejemplares, 3000 francos el más barato, es decir casi unos 100,000 pesos aproximadamente), me va a representar en toda Europa, hará una exposición mía seguramente en el otoño, propaganda, etc. Además está tomado el acuerdo definitivo de mi exposición en la Kunsthalle de Basilea, pero ésta no sé cuándo será, desde luego no este año, todo aquí es muy lento, lentísimo, tienen dos grandes exposiciones, de Braque y de Ensor que duran dos o tres meses cada una, una de pintores de la suíza (sic) alemana, etc. Ya hablaremos de todo esto en Madrid, donde ya tenemos un pequeño departamento en el centro.
Bueno, esto es todo por hoy. Hasta dentro de pocos días. Un cariñoso abrazo de los dos para los dos de:

[Seoane]

1963-06-01
Carta de Seoane a Núñez Búa. 1963
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Núñez Búa. 1963 en 01/06/1963


Ginebra, 1º de Junio de 1963

Supongo que a tu regreso a Madrid habrás recibido una carta mía, donde te decía lo que pensaba sobre el proyecto de fabricación de muebles y objetos de decoración que puede comprender desde el tapiz, incluyendo el diseño de mantelerías, colchas, etc., hasta el objeto en madera, cerámicas... Todo siguiendo el ejemplo de los fabricantes de los países del Báltico, pero imprimiéndole un carácter particular y precisamente para competir con ellos. Yo no sé bien como puede hacerse el proyecto para que pueda servir a las gentes que financien esto. Sé como puede encararse su parte artística y también donde deducir los elementos populares que lo caractericen, aparte, naturalmente, de lo que uno mismo, de acuerdo con diseñadores, puede ir creando. El mueble nuevo debe ser destinado a servir teniendo en cuenta el espacio en que vive el hombre de hoy. Espacio en relación con una economía media cada vez más universal. El ingenio del proyectista industrial consiste en crear belleza con el máximo de economía y en utilizar lo más posible las viejas artesanías que restan en cada país, combinándolas con el trabajo que realizan las máquinas. El mueble de hoy debe ser lógico, económico, su belleza debe deducirse más que de la ornamentación, de la belleza y calidad de los materiales, haciéndolos ostensibles, y de la perfección del trabajo. Pero en esa lógica no va a descuidarse la ornamentación, que, aún siendo un elemento secundario en la arquitectura del mueble, debe caracterizarlo, significando, época a que pertenece, su dependencia a los estilos generales de la arquitectura y arte de nuestro tiempo y continuidad de la personalidad diferenciada del pueblo donde se hace. En parte muy importante, se trata de emplear la imaginación con este propósito. Debe ser sencillo y económico, brindar comodidad y eficacia, llenar los requisitos prácticos pero además las intelectuales y espirituales. En cualquier zona de la Península Ibérica existe una riqueza de formas populares artísticas que nunca fue utilizada industrialmente. España y Portugal copian modelos del exterior, repiten formas y ornamentaciones de las viejas artesanías, pero no crean una continuidad de ellas con arreglo a nuestro tiempo y a las necesidades de la industria, cuando no se subalternizan copiando modelos bastardos publicados en malas revistas de labores, construcción, muebles, etc. Una artesanía en Galicia como la del encaje de Camariñas fue incapaz de renovarse. Los checoeslovacos han hecho, con igual procedimiento de bolillos que en Galicia, tejidos ingeniosos y nuevos que pueden llegar a decorar una pared. Pues bien se trata de utilizar también la habilidad de estos artesanos para hacerles eficaces para la industria. El desarrollo y la evolución es tan necesario en cualquier arte como en la industria y, creando, despertar el sentido de belleza que el pueblo conserva rudimentariamente. Yo te hablo pensando en Galicia y en los países del noroeste peninsular, norte de Portugal, León, Zamora y Asturias, si tú quieres puedes extender a parte de Castilla la vieja la fuente de inspiración, pero hay que sujetarse a una zona peninsular para crear un estilo definido, pues España y Portugal no tienen, como pueden tener los países bálticos u otros países europeos una unidad de estilo. Tienen en el pasado, una riqueza de estilo superior y una extraordinaria riqueza artesanal y folklórica.
Estas son unas cuantas ideas generales que creo complementan las que te envié en mi carta anterior.

[Seoane]

1963-06-03
Carta de Azcoaga a Seoane. 1963
Madrid
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Azcoaga a Seoane. 1963 en 03/06/1963

Madrid, 3 de junio de 1963

Luis Seoane
Ginebra

Querido Luis:

Contesto a la tuya del 28 de mayo, después de “refeccionar”esta pobre máquina mía... El sábado último tuvimos la alegría de cenar con Esther y Lipa Burd, circunstancialmente en Madrid, por cosas de negocios... Están muy contentos pensando que podéis llegar a ésta el 15 de junio. Pues el 18 toman el avión para Barcelona, después de recorrerse el norte español, tarea que iniciarán dentro de tres días. (Hoy quedaron en llamarnos para ir a ver el Arte de España y América. Y no sé por qué, aún no lo han hecho...)
Con Trabazo te dedicamos grandes parrafadas, cuando este reajuste enloquecido y enloqueciente, nos permite a María y a mí bajar por los “Gijones”. Por este mismo correo, informo a Rafael Dieste –aunque supongo lo estará– de tu próximo arribo. Pasado mañana inaugura en Prisma –donde la hizo Laxeiro– Mercedes Ruibal, que me escribió recientemente de Vigo. De novedades argentinas, aparte las citadas, no tengo que hablarte más que de la llegada a Madrid de Enma de Cartosio...
Comprendo perfectamente lo que me dices en la tuya. Si mi “reinstalación española” no me está resultando nada fácil, ¡imagínate como te lo va a resultar a ti! Confío, sin embargo, Luis en tres de tus valores, y por este orden: en lo que vas a realizar en el Castro, en la calidad de lo que traes hecho y en el empuje tremendo que siempre te ha distinguido. Con Blum lo comentábamos, y aunque conveníamos que este país no está nada fácil ni para Barraganes ni para otros “anes” o “agas”, creíamos que tu llegada merecía la pena. Y que no debes desanimar.
Esas ganas de venir a España para trabajar en no sé en qué, me parece lo más interesante. ¡En eso estoy yo...! Y no importa que aún no haya vendido una escoba. Una pereza tremenda y un afán escueto de vivir me tienen como “en el barco”. ¡Pero ya saldremos de todo! Cuando pertenecemos a los que nunca decimos: “¡Ya triunfaremos!”
Las chicas están trabajando y estudiando. (Por el trabajo les dan cantidades miserables) El Rafaelito, a trancas y barrancas con los estudios. María tiene enormes deseos de ir de compras con Maruja, de pasear con ella, de charlar de lo divino y de lo humano…De manera que con esto y con nuestro afán de “trabajar en lo que nos echen”, pueden fundarse simpáticas perspectivas.
Llegó Casona para celebrar las 200 representaciones (400.000 pesetas) de su Barca sin pescaor. Esta noche el teatro de Cámara recuerda a Ramón Gómez de la Serna representándole su Corona de Hierro. Sabrás que Luisa Sofovich ha aparecido como pimpante colaboradora de Arriba a la muerte de su esposo. Sorprendiéndonos profundamente a quienes hace años la tratábamos...
Lamento la situación de los argentinos y españoles que por ahí residen y de los que me hablas. ¡Peor para ellos! Eso de pertenecer a la legión extranjera de la burguesía es cosa que hacen muchos españoles, argentinos, finlandeses y hasta judíos... Yo no entiendo una palabra de muchas actitudes, riéndome serenamente de ellas. Porque uno, aunque mal le esté decirlo, no pueda vivir adherido a otras convicciones que a las que de siempre le han nutrido... El paréntesis de “lo moderno” va resultando demasiado largo. Y los modernos se hacen del Opus Dei, de la O.N.U de la O. I. T., etc., etc., porque esto de vivir de lo que a uno le echan, no es por otra parte nada simpático.
Nos encontrarás en Madrid cuando vengas, viejito, porque eso de veranear no es palabra para los Azcoaga. ¡Ya veranearemos por los mares a primeros de año! Se me hablaba el otro día de 15 días en Benidorm baratitos. Pero los “empleos” de las hijas, los estudios del bigardo y la “iliquidez” amenazante de nuestra economía, dirá la última palabra; vale decir: “no hay veraneo”. De manera que aquí nos tenéis para recibiros con el cariño y la amistad que siempre os ha tenido el clan.

Azcoaga

1963-06-04
Carta de Seoane a Fernández del Riego. 1963
Xenebra
Vigo
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Fernández del Riego. 1963 en 04/06/1963

Ginebra, 4 de Junio de 1963
Sr. D.
Francisco F. Del Riego
Vigo

Mi querido amigo:
Desde hace tres meses vivimos en Suíza, donde trabajé bastante, saliendo por días a distintas ciudades del país, a la Savoya, al Delfinado o a la zona alpina italiana. Tengo dos exposiciones para la próxima temporada en Basilea y Ginebra y una galería muy importante de ésta última se encarga en exclusiva de mis grabados para Europa. Ahora, dentro de unos días, marcharemos a España. Estaremos en Madrid hasta fines de Junio, luego en Gijón con mi hermana en los primeros días de Julio y calculamos estar en Galicia a mediados de ese mes, hasta setiembre aproximadamente. Este es nuestro plan inmediato. Esperamos abrazaros en Vigo, a vosotros y a los amigos, cualquier día de Julio. En estos tres meses no he escrito a nadie, solo hice mis colaboraciones para Galicia Emigrante y para una audición de literatura y arte que hace Lorenzo Varela en Buenos Aires con un grupo de periodistas argentinos, La hora once, notable por sus comentarios y su sentido general. Le serví hasta ahora de corresponsal en esta parte de Europa. Pero ya hablaremos con tiempo de todo esto. Ahora no queremos nada más que saludaros y enviaros, para Evelina y para tí, el fuerte abrazo de Maruja y mío:
Seoane

Otro abrazo a Xohan Ledo, Ferreiro, los Alvarez Blázquez, Castroviejo, etc.

1963-06-04
Carta de Seoane a Paz Andrade. 1963
Xenebra
Vigo
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Paz Andrade. 1963 en 04/06/1963


Ginebra, 4 de Junio de 1963

Sr. D.
Valentín Paz Andrade
Vigo

Mi querido amigo:

Llevamos tres meses aquí en Suiza y estamos en vísperas de marcharnos a España donde estaremos a mediados de este mes, en Madrid. Iremos luego a Gijón donde vive mi hermana y a mediados de Julio nos encontraremos en Galicia. Esperamos, pues, abrazaros en Vigo y hablar largamente. Por este país hemos viajado mucho y también he pintado bastante. Hice un contrato con una galería de aquí para representarme en Europa, con grabados, y es posible que tenga que regresar por algunos días en septiembre para hacer un mural en Zurich. Quedan además proyectadas dos exposiciones para la próxima temporada en Basilea y Ginebra. Habréis tenido noticias nuestras por Núñez Búa, que pasó en ésta uno o dos días. Díaz Pardo tengo entendido que vuelve en Julio. Al menos quedé en encontrarme con él en El Castro. Tengo muchas ganas de ver si puedo realizar alguno de los proyectos que tengo y de los cuales hemos hablado y quedarme a vivir en España. Por aquí pasaron estos días Alberti y su mujer que se van a establecer en Milán.
No te escribo hoy más. Lo haré desde Madrid por si podemos veros en esa ciudad antes de que vayamos a Galicia.

Recibid Pilar, Alfonso y tú el gran abrazo cariñoso de Maruja y mío:

[Seoane]

1963-06-05
Carta de Seoane a Lifschitz. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Lifschitz. 1963 en 05/06/1963


Ginebra, 5 de Junio de 1963

Ingeniero Rafael Lifschitz
Buenos Aires

Querido amigo:

Debimos haber escrito antes, pero fuímos dejando pasar los días sin hacerlo como era nuestro buen propósito. Tienen ustedes que perdonarnos, pero no queríamos enviarles una tarjeta postal con dos simples líneas de saludo, sino alguna noticia nuestra. Ahora escribimos en vísperas de salir para España. Quedan dos exposiciones mías proyectadas para la próxima temporada en Basilea y Ginebra y, una gran galería de esta última ciudad, se encarga de representar mis grabados para Europa. Creo, pues, que mi viaje ha sido útil. Hemos viajado mucho por Suíza y por las provincias francesas fronterizas, la Savoya y el Delfinado, espléndidos paisajes y con pequeñas ciudades encantadoras, casi medievales del todo hasta la última guerra, y que, ahora, conservándose en parte con ese carácter, se amplían con construcciones nuevas por la prosperidad económica de estas regiones.
La arquitectura, en general, de las ciudades suizas y la de esa parte de Francia no es demasiado brillante. Buenos Aires, pienso, está mejor, si se sacan algunos ejemplos muy particulares, sobre todo de la Suiza del norte, Zurich, Basilea, Winterthur. Muchos de estos nuevos edificios están muy bien en fotografías, pero no vistos directamente. La fotografía siempre nos ofrece una selección parcial de la obra. Creo que en Lausanne están, en cambio, haciendo construcciones notables y cumpliendo un plan de urbanización muy importante con motivo de la feria de productos suízos que se celebra cada veinte años y que se realizará el año próximo. Hemos visto algo y nos pareció extraordinario. Su presupuesto es de 500 millones de dólares. Las torres que se levantan para hoteles serán convertidas, pasada la feria, en grandes edificios para escritorios y habitación.
Maruja goza, aún ahora en la primavera, del poncho que le regaló Emma*.
Bueno, éstas son algunas noticias, muy pocas, de nosotros y de lo que vemos. Simplemente, queremos decirles que les recordamos con cariño.

Un saludo muy cordial de Maruja y mío para los dos:

1963-06-05
Carta de Seoane a Winizky. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Winizky. 1963 en 05/06/1963


Ginebra, 5 de junio de 1963

Sr. Ignacio Vinizky
Buenos Aires

Querido amigo:

Llevamos tres meses aquí en Suiza, con viajes por su interior y a Francia, y saldremos dentro de unos días para España. No queremos dejar este país sin enviarles un saludo a ustedes y decirles algo de nuestra vida. He trabajado bastante, pintando y quedan dos exposiciones en proyecto para la próxima temporada, en Basilea y en Ginebra, además de que una galería importante de esta última ciudad, Galerie Edwin Engelberts, representará mis grabados en Europa. Veré que puedo hacer en España. Las noticias de Buenos Aires no nos animan a un regreso inmediato. Trataremos, pues, de estar todo este año por Europa como nos hemos propuesto cuando salimos de ahí, y algo más. Por lo de pronto, dependo de esas exposiciones proyectadas aquí, adonde regresaremos quizás en septiembre u octubre. Estos países están en plena prosperidad, seguramente demasiado indiferentes, su población, al menos, de lo que ocurre en gran parte del mundo. Resulta grato vivir en ellos aunque a veces sintamos nostalgia del desorden, de los cielos de Buenos Aires, y siempre de los amigos. Recibimos su despedida con la referencia a Jiménez de Asúa la víspera de nuestra partida. Causó sensación la noticia entre los hispanoamericanos de Ginebra.
Hoy o mañana también daremos noticias nuestras a sus tíos. Que todos los amigos nos perdonen nuestra pereza para escribir.

Un abrazo para Maruja y Ud. de Maruja y mío:

[Seoane]

1963-06-05
Carta de Seoane a Muñoz Manzano e Dieste. 1963
Xenebra
Rianxo
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Muñoz Manzano e Dieste. 1963 en 05/06/1963


Ginebra, 5 de Junio de 1963

Sres.
Carmen y Rafael Dieste
Rianjo

Queridos Carmen y Rafael:

Estamos a dos o tres días de marcharnos de Ginebra, donde estuvimos viviendo estos tres meses con escapadas a las otras ciudades suizas y a la Savoya y al Delfinado en Francia. Trabajé bastante, pinté, y quedan organizadas algunas muestras para el otoño o invierno que viene, aparte de haber establecido relaciones con una Galería muy importante de aquí, Galería Edwin Engelberts, dedicada a grabado, que va a representar mis obras de este género en Europa. En todo este tiempo no hemos escrito a nadie, dejando el escribir de un día para otro hasta ahora, que estamos en vísperas de nuestra ida a España. A mediados de mes estaremos en Madrid y después de estar con mi hermana en Gijón nos marcharemos a Galicia. Calculamos estar en La Coruña a mediados de Julio y entonces os iremos a visitar. Nuestra pretensión es hacer lo posible por quedarnos en España. Las noticias que vienen de Buenos Aires son tremendas. Se calcula que actualmente hay aproximadamente un millón de desocupados. Por aquí pasaron hace pocos días María Teresa y Rafael con Aitana, que van a vivir a Milán y las gentes que pueden dejan Buenos Aires. Por ellos supimos noticias desastrosas. Pero ya hablaremos de todo esto. De aquí a Julio casi seguro que todo empeorará allí y nadie crée que las elecciones se realicen. De Suiza no podemos sino decir que nos gusta mucho, pero, para vivir, creemos que más el norte, Basilea.

Por hoy nada más que estas pocas líneas. Tenemos la esperanza de veros pronto. Un abrazo grande de Maruja y mío para los dos:

[Seoane]

1963-06-07
Carta de Seoane a Varela. 1963
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1963 en 07/06/1963


Ginebra, 7 de junio de 1963

Querido Varela:

El domingo saldremos para Madrid. Volveremos aquí en septiembre y entonces será cuando pasemos por París. Las gentes que a uno le interesan salen de Suiza para pasar vacaciones en alguna parte y yo me voy a España a ver a los míos y a ver qué se puede hacer. No te extrañe que pase una semana sin enviarte noticias. No creo pueda hacerlo la semana que viene. Luego alterné las de España y Europa, Francia, como ahora.
Ahí van algunas:
El pintor español Saura, que acaba de exponer en París, clasificado como informalista por uno y nuevo figurativo por otros, pero perteneciente al arte negro español y concretamente al grupo El Paso de Madrid, hizo las siguientes declaraciones en una entrevista que le hizo una cronista parisién: “Para expresarse los pintores españoles han recurrido siempre a medios muy simples con el fin de establecer una presencia humana. En general y en su pintura existe un desinterés total por lo accesorio. Si me abro a todo lo que pasa en el mundo, quedo ligado a esta pintura como a la realidad social de mi país. Así soy capaz de pintar otra cosa que la estructura humana. No creo interesar por la anécdota y estoy en contra del oportunismo de la nueva figuración. Exprimo el contenido del hombre, su contenido estructural, ensayando de expresar la realidad que veo”. “El gran problema del pintor que crea es no separar su concepción política de su pintura, es poder comunicar sus opiniones sin traicionar el lenguaje plástico de su tiempo”. Refiriéndose a la actual pintura española expresó: “Por necesidades de la causa (con fines de propaganda oficial), se han colectado pintores como patatas y se ha fabricado artificialmente una pintura falsamente austera, falsamente violenta... Después de la guerra existen sobre todo Tapies y la fuerte realidad de los grabados de Ortega”. “Pintar –añadió– es trabajar por aquello que el pintor desea, es un medio de acción política, aunque el pintor sea el artista más limitado para influir sobre la sociedad. Su posición social, su sentido moral importan tanto como su obra”.
En el Museo Pedagógico de París, se celebra la exposición del Grupo de estudios Françoise Mintowska, que emplea el dibujo como medio inmediato de aprehensión de la personalidad profunda, en la línea de las búsquedas modernas de la psicología por la cual toda forma de expresión tiene un significado y se refiere a una realidad subyacente. Utilizan como tests los dibujos infantiles y por ello nos enteramos muy groseramente que el epileptoide sensorial tiende a la vehemencia, a lo explosivo, ligado a algo concreto, etc., y el esquizoide-racional dominado por la abstracción, el alejamiento, rotura, recurriendo al símbolo. He aquí como el crítico de arte, al mismo tiempo que juzga la obra del artista, puede suministrarle su diagnóstico y posiblemente métodos de curación. Ejemplo de epileptoide-sensorial sería Van Gogh y de esquizoide-racional Seurat, según Mintowska. Por nuestra cuenta, pensamos que Kandinski o Picasso reunirían en ellos, a través de sus dibujos, grabados y pinturas al epileptoide-sensorial y al esquizoide-racional.
Según el crítico Pierre Schneider (L´Express), “El grabado, por su técnica misma, es un arte de maníaco”, se refiere a los grabados de Bresdin, un notable grabador romántico que Baudelaire calificó de genial. “Es en la manía, en la obsesión donde reside la singularidad de Bresdin”, escribe Schneider. La crítica parece de Mintowska.
Jean Giono, en el prólogo de un álbum de croquis de Marruecos de Ives Brayer, afirma: “Nada más inteligente que un dibujo; es la impresión misma de la inteligencia”. “La palabra existe –añade Giono– tal como uno la emplea, en la memoria o en el diccionario; pero no hay catálogos para el trazo, hace falta inventarlo en el instante y nace a la existencia en el momento mismo que uno lo realiza”.
Otro pintor español, Pelayo, exilado en París, expone en esta ciudad (Galería Synthese) una serie de óleos que titula Retratos apócrifos. Se trata de personajes literarios o históricos españoles realizados brutalmente, a la vez gestuales y mediados. Algunos críticos señalan su preferencia por los paisajes austeros, secos, calcinados, que representan La Mancha y que caracteriza su obra anterior.
El escultor argentino Marino di Teana realizó gran parte de las esculturas de la actual exposición de Arte Contemporáneo que se celebra en el Gran Palais de París. Una, de acero inoxidable, tiene 13 metros de largo por 6 de alto y otra, 7 metros de alto por 18 de largo. En el catálogo de esta exposición se afirma la abstracción comienza con El Greco y Goya. Es un punto de vista, como escribe Michel Ragón.
He aquí algunas afirmaciones de Braque contestando a unas preguntas de André Parinaud: “En pintura es lo imprevisto lo que da lugar al acontecimiento”. “En arte no existe más que una sola cosa que valga: aquellas que uno no puede explicar”. “Lo que interesa a Picasso es un juego de formas. Él juega... él juega siempre por otra parte. Viene a ser un caricaturista de la pintura en el sentido grande y noble”. “El renueva el destino y la novedad de todo hasta la caricatura, bien sabido que en el sentido pictórico de la palabra”.
“La naturaleza muerta debe estar sujeta al control del tacto”.
“Después de Cezanne es la gran aventura la que comenzó, la libertad. La libertad, sabemos, se conquista, no se otorga”.
“Se ha terminado el cuadro cuando se borró la idea”.
“Con la edad, arte y vida son uno”.

He aquí todo por hoy. Dile a Marika que los grandes compradores de antigüedades en Suiza son los árabes que se levantaron con el tesoro de su país o que cobran un tanto por ciento por la extracción extranjera del petróleo en sus países. Os recordamos. Escribid. Un gran abrazo de Maruja y mío:

[Seoane]

1963-06-12
Carta de Paz Andrade a Seoane. 1963
Nova York
Vigo
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Paz Andrade a Seoane. 1963 en 12/06/1963


12
junio
1963

Sr. D. Luis Seoane
4-6 Rue du Lac. Ap. 59
GINEBRA

Querido Luis:

Sabía de vuestra llegada a Suiza. Pepe Núñez me trasmitió después noticias más directas. Excuso decirte cuanto nos complacen los propósitos de radicar en Galicia, que animan vuestros actuales pasos de Europa.
Con Pepe hemos hablado bastante sobre las posibilidades de desarrollar aquí algunas artes dormidas, para las cuales Galicia pudiera ser un clima altamente estimulante. En carta que en estos días recibí de Buenos Aires se refiere concretamente a la fundación de una industria del mobiliario, últimamente revolucionada en los gustos europeos, por los creadores escandinavos.
En Londres, y especialmente en París, he visto modelos de sorprendente simplicidad y elegancia, dotados al mismo tiempo de las condiciones más apetecibles en cuanto a comodidad y utilidad. Estuve en la mañana del domingo visitando la Exposición de Artistas Decoradores Franceses, en el Gran Palais. Aunque no es muy copiosa ofrece algunas aportaciones sorprendentes.
En Madrid existe una industria del mueble danés, orientada desde Copenhague, por los arquitectos autores de los modelos. Las piezas son carísimas, casi el doble de su costo en Francia, pero las logran con pureza de líneas y calidades.
Parece que Pepe también tiene el propósito de regresar definitivamente. Sólo lo haría a base de encontrar encaje en algún negocio holgadamente rentable. Sospecho que tiene contactos, con tal finalidad, con un hermano de Pepe Villamarín, residente en Sevilla.
De Isaac carezco de noticias recientes. Le he escrito hace unos días desde el avión París-Madrid. Dieste ha venido con alguna frecuencia en estos últimos meses, y se considera anclado sólidamente en el país.
Excuso decirte cuanta alegría nos producirá vuestra llegada. Pilar ha tenido en esta última temporada contratiempos familiares serios: el fallecimiento de un hermano de su madre, que era un hidalgo gallego excepcional, y una hemorragia copiosa que puso a mi suegra en trance casi mortal. Estos impactos, el segundo relativamente superado, han dejado su huella en el ánimo de mi mujer. Por si no fuera bastante Alfonso tuvo que incorporarse a las milicias universitarias en Burgos, con lo cual nos espera un verano sin él.
Supongo que a mediados o fines del actual nos trasladaremos a la casa de Samil. Se encuentra aún falta de detalles, y en parte sin terminar, por consecuencia del accidente que he sufrido y de la dureza del último invierno, que no permitió hacer cosa alguna. Tal vez nos encontréis en esta faena durante el mes de julio.

Nuestras mejores expresiones para Maruxa con un abrazo cordial de tu siempre incondicional amigo,

Valentín

1963-06-19
Carta de Seoane a Tschumi. 1963
Madrid
Xenebra
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Transcripción da epistola Carta de Seoane a Tschumi. 1963 en 19/06/1963


Madrid, 19 de junio de 1963

Sr. Eric Tschumi
Ginebra

Mi querido amigo:

Estamos desde hace más de una semana en Madrid y no hemos salido hasta ahora del círculo familiar. Podemos decir que desde nuestra llegada no hemos hecho nada más que charlar y comer con gentes de nuestra familia. Andamos invitados de un lado para otro sin tiempo siquiera para digerir conversaciones y comidas. Creemos que esta semana empezaremos, si podemos, a normalizar nuestra vida. El primer síntoma de normalidad es el intentar redactar esta carta. Nos habíamos propuesto, cuando salimos, escribirles a ustedes y a Amparo antes que a nadie en Suiza, pues a los tres les debemos atenciones que nos hicieron muy grata nuestra estancia en Ginebra y aunque en esa ciudad no hubiésemos conseguido otra cosa que la amistad de ustedes, ésta nos satisface de tal manera que nos parece superior a cualquier beneficio de otra índole que hubiésemos obtenido. Sólo así, por carta, podemos expresar Maruja y yo este sentimiento. Nos acordamos de ustedes y esperamos volver a verles antes de septiembre. En Zurich, hemos estado con Víctor Bossard y su esposa que estuvieron muy atentos con nosotros. Bossard me mostró la pared a la que destina el mural mío. Realmente, hacía falta verla para poder encarar su proyecto y me encargó lo ejecutase a mi criterio. Me presentó a la persona que amuebla los escritorios. Una persona muy agradable que apenas entendíamos, pero a quien notamos talento en sus juicios. Bossard estuvo espléndidamente amigo y muy bien. Estos días comenzaré a escribirle con calma, pues tengo mucho interés en hacer algo que me represente lo mejor posible. Aquí recibí muy bien la valija y el caballete enviados por ferrocarril, pero, en cambio, aún no sé nada de los cajones de cuadros. La empresa de aquí no tiene noticias y ayer a la tarde iban a poner un cable a Ginebra sobre este problema. Le escribiré sobre esto si pasan unos días más sin noticias. Hablaron por teléfono con Barcelona y Port Bou y en estos sitios no saben nada sobre los cajones. Nada ha llegado. Esperamos que en Ginebra hayan cumplido correctamente con lo establecido y que todo sea culpa de la carga en el ferrocarril.
Escríbannos algo sobre ustedes. Como anda Tschumi y su trabajo que nosotros trastornamos en los últimos días, sobre su escultura, etc. Nosotros les contestaremos enseguida.

Un abrazo para los dos, Gladys y usted y besos para Adrianita y Victoria de Maruja y míos:

[Seoane]

1963-06-22
Carta de Seoane a Alvajar. 1963
Madrid
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Transcripción da epistola Carta de Seoane a Alvajar. 1963 en 22/06/1963


Madrid, 22 de junio de 1963

Sra. Amparo Alvajar
Ginebra

Querida Amparo:

Debimos haberte escrito hace unos días, pero desde que llegamos todos fueron, como se dice, de locura. Hemos andado hasta ayer de restaurant en restaurant y entre parientes, acompañando a nuestro tío que vive en Méjico, que tiene 82 años y volvió a España a pasar una temporada. Madrid confirma la impresión de nuestras conversaciones de Ginebra y las gentes rebosan en general simpatía. Es cordial y amable en la calle y en cualquier parte y dan ganas de quedarse a vivir para siempre en un país de gentes como estas. No olvides nuestro tiempo y causa de ausencia y toda la grosería ambiente soportada en Buenos Aires durante muchos años. Italia y España creo que son los únicos sitios donde nosotros viviríamos a gusto. En otro orden que no sea el estrictamente popular se confirman tambien nuestras presunciones. Pero no es de España de lo que quiero ahora hablar. Te estamos profundamente agradecidos Maruja y yo por todas las atenciones que tuviste con nosotros y por el tiempo que te hemos hecho perder. Yo creo que no perdí el mío en Suíza. Tengo que hacer el mural para Zurich, se confirmó en encargo en las horas que pasamos allí antes de embarcarnos para Madrid. No sé aún dónde lo ejecutaré, si aquí en España o en Suíza pues voy a hacerlo de hierro y bronce o en duroaluminio, pero, con cualquier procedimiento, tengo libertad para su ejecución, debo entregarlo en setiembre. Volveré seguramente por esta fecha a Ginebra y Zurich. El envío de los cuadros desde ahí resultó en cambio una complicación. Ayer me enteré que están todavía en Port Bou y que no los tendré seguramente hasta mediados de la semana que viene. Casi un mes desde Ginebra a Madrid y la culpa no es exclusivamente española. Este retraso nos hace perder mucho tiempo. En la próxima semana iremos a visitar a tu hermana. Perdóname que no lo hubiésemos hecho hasta ahora pero los días pasados hasta ayer fueron disparatados. Para matar nostalgias “americanas” Madrid está lleno de marisquerías gallegas y para nuestro caso de familiares. El departamento que tenemos es suficiente para nosotros de momento, pero preferíamos el de Ginebra en el que podía trabajar con más holgura aún siendo éste de Madrid quizás mayor. Bueno, estas son simplemente unas letras de saludo. Marcial Suárez te va a enviar sus obras de teatro. Hablé con él de vuestro esfuerzo. Contéstame. Un abrazo de Maruja y mío:

[Seoane]

Te agradecemos el envío de las cartas, que recibimos.

1963-11-15
Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1963
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1963 en 15/11/1963


Ginebra, 15 de noviembre de 1963

Queridos Maruja y Luis:

Espero que esta “tercera” carta no se traspapele. Al recibir la vuestra de Galicia tuve que hacer un rápido viaje a París. El mismo día que volví, se me presentó la oportunidad de alquilar un departamento que me convenía y tuve que ponerme “en danza” inmediatamente, de un lado para otro en mis pocos momentos, porque todos tienen los mismo horarios de trabajo que yo y además no es tan fácil que “te den” un departamento. Lo conseguí (pagando 3.000 francos por algunos muebles que en él había y de casi todos los cuales ya me he deshecho), me mudé, y ya sabéis lo que son las “pequeñas” mudanzas, que crees que puedes hacer tú sola en el auto y luego resulta que es un pequeño mundo , y luego, suponiéndoos ya en Madrid, escribí, y al mismo tiempo a otros amigos que tienen en Madrid una dirección parecida. La libreta de direcciones estaba en un cajón cerrado, porque en la casa todavía no había una biblioteca ni un mueble con cajones, y confiando en mi memoria, puse las direcciones equivocadas. Mis amigos recibieron “su” carta, no sé cómo, porque son personas conocidas en Madrid. La vuestra todavía no me la ha devuelto el correo. Todo esto llevó su tiempo, y me preguntaba si realmente estaríais en Madrid, cuando mis amigos me advirtieron del error. Os escribí enseguida, y os envié, como veis, la carta que iba para mi hermano y mi cuñada, que a lo mejor recibís por intermedio de la hermana de Maruja, porque resulta que mi cuñada Mary ha vivido en casa de Maruja y que Maruja y yo resultamos parientes por “interpositísimas” personas, puesto que el difunto marido de su hermana la viuda por primo de mi cuñada y Mary tiene veneración por la madre de Maruja.
Os decía en las “perdidas” de las cartas que no recibía noticias de Núñez Bua, que me encargaba cosas, le contestaba y se quedaba mudo. Ahora escribió, y me decía que sabía que estabais en Madrid. Que la mujer de Tchamig me había telefoneado para preguntarme con ansia por vosotros e invitarme a cenar; que con la mudanza me había quedado momentáneamente sin teléfono y la había perdido “de oídos”, y luego que había cenado con ellos en su casa, estando también invitado Roque, el único argentino de la obra, y que resulta que vivimos a 200 metros los unos de los otros; que no había recibido los libros de Luis pero que suponía que no habías tenido tiempo de mandármelos, que qué pensáis hacer, etc, etc.
Otrosí; mi casa de París ya tiene las cañerías arregladas, y Mary, que tiene la llave, estará “encantada” de prepararla para vosotros, si vais. La de Ginebra ya está a medio poner. El sitio es precioso; hay una entrada grande (para ser entrada), una cocina muy buena, dos habitaciones grandes, un buen cuarto de baño y un balcón terraza andar de cerca de once metros de largo. Por el momento, una cama pequeña en una habitación y otra un poco más grande (disfrazada) en la otra. Esto por lo de dormir. Y hasta lo necesario. La cama pequeña desaparecerá pronto y será sustituida por una verdaderamente grande. Las dos habitaciones, que se comunican con puertas correderas grandes, quedan, si se las cierra, absolutamente independientes, y cada cual con su paso al cuarto de baño. Esto es para deciros que si venís y queréis quedaros aquí, esta es vuestra casa, francamente. No está lejos del centro, y en la esquina hay un autobús que en 5 minutos deja en el centro de la ciudad. Hay mucha luz y un sol directo, y nadie enfrente; una gran explanada. Este barrio, que ahora está en Ginebra, hasta hace un año estaba “en Suiza”, lleno de quintos , de árboles grandes, de grandes parques particulares, y algo de eso queda.
No contestaba a lo que me decíais de la gente de La Coruña porque habría sido muy largo. Y la causa de estos trastrueques de cartas es el excesivo trabajo que he tenido esta temporada. Falta de tiempo. Ya otra vez me pasó algo parecido. Recibí una carta con un sobre de la Unesco en la que me encargaban una serie de cosas que ya le habían encargado a otro amigo de aquí y no había hecho. Escrita a máquina. La leí rápidamente, se la atribuí a un amigo, hice las cosas, respondí, y resulta que era una amiga la que me escribía. Felizmente se conocían; el que recibió la carta la comentó lleno de asombro y todo se arregló.
Magnífico lo de la exposición de Luis. Ya sé que para él lo de las exposiciones es pan de todos los días, pero es una vuelta a España y es, de todas manera, algo sentimentalmente diferente.
Si tenéis tiempo, decidme que pensáis hacer. Los Tschumig os quieren mucho y no hacen nada más que hablar de vosotros. La mayorcita de las chicas recuerda mucho a “Maruxa”, como ella la llama, y al parecer Maruxa es cosa de todos los momentos, porque ella leva a Maruxa de vacaciones, y cuando juega, juega con Maruxa, habla con Maruxa, y todo el día así.
No he recibido nada de las obras de teatro de vuestro amigo. Creo que Víctor de la Serna, al que parece que entusiasmó la representación de Buero Vallejo, le escribió a éste elogiándola. Decidle a vuestro amigo que yo, personal y humildemente, querría leer sus cosas, que no tengo nada que ver con las representaciones (y cada vez menos), y si podéis conseguirlas, me gustaría que me las mandarais.

Y cierro, aunque queda mucho por decir, con un abrazo.

Amparo

Y aunque es de noche y llueve, salgo a echar la carta, porque “parece que andan meigas” en este asunto. No se vaya a meter en otro sobre.

[Escrito na parte superior:] El teléfono, ya puesto, es el mismo:35-89-14
Mi nueva dirección:
15, avenue Krieg, 1er étage, ap. 12-Genève.
Basta 15, av. Krieg. Genève–Suisse, o, como siempre, “Bureau du Travail- Genèveetc.

1963-12-14
Carta de Seoane a Tschumi. 1963
Madrid
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Tschumi. 1963 en 14/12/1963


Madrid, 14 de diciembre de 1963

Sr. Eric Tschumi
Ginebra

Mi querido amigo:

Estoy avergonzado de no haber escrito antes, pero estuve metido casi tres meses en una villa marinera de Galicia pintando y grabando para una gran exposición que acabo de celebrar en Madrid con mucho éxito –se cierra mañana– y debo ahora cartas y noticias a todos los amigos. Antes de esta exposición, hice otra de grabados en La Coruña, en septiembre, también con éxito. Estamos, pues, muy contentos del resultado de las dos exposiciones y ahora nos disponemos a ver con calma museos y lo que podamos de Madrid hasta enero que iremos nuevamente a Galicia a despedirnos de familiares antes de regresar a Buenos Aires, seguramente para volvernos a últimos de 1964 o a principios de 1965 e instalarnos en Europa. De Bossard no sé nada. Le escribí y no me contestó. Pienso que ha decidido seguramente no hacer el mural o encargárselo a otro, de modo que no pasé d de los bocetos, pues me costaría mucho dinero el ejecutarlo sin saber cuál sería en definitiva el destino de la obra. En cuanto a los afiches para Swissair, me gustaría saber si estoy a tiempo de realizar los bocetos, pues me agradaría hacerlos ahora que quedé libre momentáneamente de cualquier preocupación en cuanto a exposiciones inmediatas. Nosotros nos acordamos siempre de vosotros, de todas vuestras amabilidades y de los paseos por los alrededores de Ginebra en lo que fracasé lamentablemente como fotógrafo, pues no salieron las fotografías de algunas de las excursiones que hicimos y otras no supimos más de ellas a partir de que las enviamos a revelar. Es posible que, si podemos, volvamos a pasar unos días, muy pocos, a Ginebra antes de nuestro regreso a Buenos Aires. España nos llevó más tiempo del que pensábamos y la verdad es que estamos encantados en ella, lo único que continuamos rechazando es su política, toda su mentira, pero estamos encantados de estar en contacto con este pueblo, de su cordialidad y simpatía aunque, a veces, pensemos que no vendría mal un poco de la seriedad y del orden suizos. Pero un poco nada más. Todos los extremos, en cuanto a costumbres, son nocivos. Nos gustaría saber qué estás esculpiendo y pintando, al mismo tiempo que realizas tus trabajos gráficos. Creo que si lo haces, debieras dedicarte a hacerlo. Es posible que consagrarse a estas vocaciones traigan consigo disgustos y desilusiones, pero también es seguro que es la única manera que tiene un artista de cumplir con su vida, aunque se equivoque. Tengo presente la sensibilidad y el rigor con que hacías sus formas concretas e incluso los pequeños bocetos para las ilustraciones de los libros. Yo creo que nunca he visto bocetos más exactos y pulcros, ni formas mas justas en sus proporciones y líneas. Si te lo propones, puedes conseguir hacer obras notables. Me gustaría saber estimularte en ese camino. No me refiero a ninguna dirección estética en vigencia, sino a que esculpas y pintes hasta crearte tu propia dirección o seguir la que más sientas y está de acuerdo con tus propósitos. Bueno, yo no sé si debiera hablar de esto, pero ya está. Lo que quería deciros es, de cualquier manera, que os recordamos siempre Maruja y yo a Gladys y a ti, que recordamos los meses de Ginebra, vuestra casa y las niñas y que nuestra amistad, la que sentimos por vosotros, es verdadera.

Ahora, recibid, con los mejores augurios para 1964, un abrazo para los dos de Maruja y míos, con saludos a tus padres y besos para Victoria y Adrianita.

[Seoane]

1964-01-27
Carta de Alvajar a Seoane. 1964
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Seoane. 1964 en 27/01/1964


Ginebra, 27 de enero de
¡1964, ay!

Querida Marujiña:

En este momento recibo tu carta, y no me lo creerás, pero “ayer” por la noche pensé: “A Maruja se le debe de estar terminando el Té Midros , y te iba a escribir preguntándote si lo necesitabas y querías que te lo mandase o si tenías hasta tu “hipotético” paso por aquí, que todos deseamos.
Como me interrumpieron, sigo hoy, día 29. Ya te compré el té, que tuve que encargar porque, como ya sabes, no suelen tener cajas de las grandes. Hoy me lo han dado y mañana saldrá. Te lo mandaré por avión. ¿Cómo no me lo dijiste antes? ¡Eres más tonta...! Va por avión, no por la prisa, sino porque es más conveniente y más seguro. No quitaré la caja, si no hay inconvenientes en el correo, porque va más protegido, y si realmente pasa un kilo el contenido sólo con el papel de embalar pasa y tienes lo mismo que llenar formularios para que pase por los servicios de aduana, así que no se gana nada. No me mandes los 23 francos con que me amenazas, en primer lugar, porque no son 23 francos sino mucho menos y, en segundo lugar, porque es más el trabajo que te daría a ti que me daría a mí que lo que vale la cosa. Además, no habiendo en España cambio libre, no creo que te vendan francos y, verdaderamente, Maruja, sé sensata: no vale la pena. Como no veo muestras de que aparezcáis por aquí, te digo “desde ya” que, siendo probable que en todas las cosas que tenéis que arreglar en Buenos Aires os gastéis más tiempo del que vez desearíais, me recuerdas por anticipado que te lo siga mandando de manera que no te falte nunca. Ya sabes que no me cuesta nada hacerlo, mientras siga aquí, y aunque me vaya a París, siempre se lo podré encargar a alguien.
¿Venís o no venís? Ya me han traído casi todos los muebles del dormitorio y tenéis una cama de un metro cuarenta, que supongo que os bastará. Ya os he dicho que el sofá de la sala es también cama o puede serlo y que yo tendré sitio.
Hace unos días llamó por teléfono una amiga vuestra para saber de vosotros. Me dijo su nombre, pero ya sabes lo que te pasa con los nombres que te sueltan de repente: que los entiendes mal y los olvidas pronto. Por la voz, estoy casi segura de que era aquella chica que os llamaba de Juterlaken , y el propio hecho de haberme llamado lo confirma. Dijo que se iba pronto para Buenos Aires y que si no llegabais casi en unos días ya no tendría oportunidad de veros. Le di las noticias, un poco vagas, vuestras (me refiero a vuestros proyectos) que por entonces tenía.
Me alegro muchísimo de que lo de Bandi haya sido una equivocación. No recuerdo si la noticia de la muerte de Cholo os la di yo misma o no, porque en esos días estaba bastante mal. Lo que tuve era pasajero aunque muy doloroso y, muerto el perro se acabó la rabia. Quiero decir que son esas cosas como las gripes y tal, que una vez que se van las olvidas y no las puedes llamar enfermedades serias, aunque te joroban de mala manera durante unos días. Dicen, sin embargo, que pueden requerir una intervención quirúrgica, y en otros casos, se pueden reproducir varias veces con unos días de intervalo. No me ha hecho ninguna de esas dos formas. Y ya es la tercera vez que me pasa. ¡Santa Penitencia, ora pro nobis!
¡Os envidio, malvados gallegos! Eu ben quixera ter unha leiriña, botar unha parolada co meu amigo Carrê na súa casa do Ponte do Pasaxe e aínda un sono na praya de Santa Cristina. Pero son deseos momentáneos, es morriña pura, que casi me enfermó en Buenos Aires, un sentimiento vegetal, si así se puede decir, de árbol desarraigado. La verdad es que no quiero ir a España, y cuando digo “no quiero” no hablo con la cabeza, sino con las ganas. Más aún, quiero no ir. No solamente por las razones que cualquiera que no fuerais vosotros supondría. La única forma de expresar mi manera de sentir es esa, que no es muy explicativa ni muy matizada: “quiero no ir”. Lo cual no quiere decir, etc., etc.
El otro día recibí una carta que dice textualmente: “Conocí a Maruja. ¡Hermosa mujer, vive Dios!” Y agrega luego que, dicho sea sin malos pensamientos de ninguna clase, sólo “por amor” de admiración, en lo que coincido. Es de Quiroga, el padrino de mi hermano, a quien yo quiero tanto y que ahora está en Ecuador, me dice también que le fue imposible ir a la inauguración de la exposición de Luis (supongo que la de La Coruña) por un impedimento que surgió a último momento, y que lamentándolo, tuvo que irse sin veros de nuevo.
Luis: ¿No me podrías mandar los catálogos o lo que sea de tus exposiciones en España?
Y ambos a dos: ¿No me podríais dar vuestra nueva dirección en Buenos Aires, que no la tengo? Esto en previsión de que no paséis por aquí.
No olvidéis que si vais a París no tenéis más que avisar, o no avisar. Tienen las llaves de mi casa mi hermano Javier y mi cuñadísima, Mary Castelo, que viven en 17, Quai aux Fleurs, Paris IV, y siendo vosotros mi necesidad hay de prevenirlos. Obrad con toda confianza y seguridad. Y que esos queridos tontos os calienten la casa, etc., etc.
Por si os vais directamente y no tenéis tiempo o ganas para escribir:
Cariños a los amigos, y si veis a Arturo, un gran abrazo y que escriba:
Mandadme vuestra dirección; que Maruja me avise para que le mande una tonelada de Té Midrós, y aquí estoy “para lo que queráis mandar”.
Ojalá vinierais. Si tardáis algún tiempo, ya os mandaré fotografías, no mías (líbreme Dios) sino del departamento. No sé si os he dicho que pedí una plaza que quedó vacante en la Unesco, pese a que ya llevo metidos en este apartamento, aunque parezca mentira, más de 16.000 francos. Como la han pedido muchos (París, je t´aime) no creo que me la den, sobre todo porque quieren que se traduzca del ruso y yo lo tengo bastante abandonado a causa del dichoso teatro, y luego porque desean “formación técnica o científica”, y resulta un poco feo decir que los documentos económicos o científicos de la Naciones Unidas me los daban a traducir a mí, porque los economistas y otros “titulados” lo hacían muy mal, y los trabajos de revisión y edición que estoy haciendo en el BIT me lo han casi impuesto porque hay una cantidad de publicaciones técnicas, pseudo científicos y económicos que con gran sorpresa para ellos corrijo, rehago, publico mucho mejor que los hombres que tienen allí para hacer eso, doctores de toda clase de cosas, pero que no saben traducir, no saben trabajar. Bueno, estoy hablando tonterías.
Escribí a Antonio Baltar con mucho retraso, porque esperaba tener datos más concretos, y me temo que con excesiva prolijidad. No sé si después de esa carta no me odiará, pero, como yo, cuando me vine de Buenos Aires, no había tenido ni siquiera la idea de que las organizaciones internacionales eran algo en donde no podía trabajar. Tengo un “despiste” no tan grande, pero sí despiste en los demás. Si está enfadado, por favor, “desenfadádmelo”, que tanto él como Mireya son dos seres “à aimer”, y yo, que no sé decirle a la gente que la quiero, cuando la quiero, meto mucho la pata.
Mil cariños. ¡Noticias! ¿Qué vais a hacer? ¿Venís o no venís? Bastan dos palabras y vuestra dirección en Buenos Aires. “And so, to supper and talk” como diría Samuel Pepys.
Me olvidaba de deciros, por si Núñez Bua sigue con su proyecto, que los muebles que he comprado ahora son de madera de teca, como los que tiene la Boutique Danoise que tanto le entró por el ojo. Que la casa que me los ha vendido, sin tener una tienda tan visible, sigue un poco el mismo procedimiento. Principalmente muebles, que se fabrican en la Suiza alemana; luego “algo” de lámparas, de adornos, de jarrones, de alfombras, de colchas, etc.; lo suficiente para ayudar al cliente con ideas, pero no como para competir con las casas que sólo venden una de esas cosas. Sé ahora también otros detalles que le podéis decir a Núñez Bua (en primer lugar, que de su ahijado “nunca más se supo” y que si sigue interesado en venir a Suiza, no tiene más que escribirme): la casa Altamira vende, por ejemplo, con el cuádruplo de su precio los mantos de Lorca que utilizan aquí como alfombras (y bien bonitos), una de las cuales nos prestaron (que utilizamos como mantel) cuando hicimos El mejor alcalde. Que casi todas las cosas que tiene esa casa son simples imitaciones (hablo de muebles); te lo demuestra que para esa misma obra nos prestaron (gracias a los buenos oficios de condesa de Cabarrús) cuatro o cinco “viejas” sillas, que a una, porque evidentemente en de madera “fresca”, se le rompió una pata, que yo, personalmente, aunque no era culpa mía, le dije a la gente del grupo que, costara lo que costara, yo pagaba la silla, y que esta gente de Altamira dijo que (al parecer la dueña o la encargada general) ya la arreglaría y que no tenía importancia... Amigos míos se han traído de Madrid imitaciones mucho mejores. No sé si recordaréis un mueble de esquina que salió en Las cartas boca abajo. Fue el único mueble de esquina que pudimos conseguir. No era absolutamente necesario, pero yo había montado los movimientos de la obra pensando en que un mueble de esquina era fácil de encontrar, y no. Y todo estaba prendido con alfileres y la gente que trabajaba en la obra estaba haciendo, durante todo el tiempo de los ensayos, dobles jornadas de trabajo, por una u otra razón. Mejor que cambiar movimientos era buscar el mueble. Bueno, pues el mueble, “soi–disant” español, tenía todas las apariencias de un mueble portugués y además “no iba”, pero no había otro. Pues, ese mueblecito de nada, que parecía hecho en cartón piedra, y no en madera, tenía como precio en Altamira 4.500 francos, si he de creer a Aída Cabarrús que mentir no miente, pero que, a veces, te dice y augura cosas que te hacen dudar de todo. Ella lo consiguió, y ella previno, puesto que o no nos hacen un seguro por esas cosas que tenemos en préstamo para el hecho o no sé qué otra dificultad hay.
A parte de eso, “he renunciado a las tablas”, como una vedette cualquiera. No me gusta hacer las cosas mal. Y no puedo ser el hombre orquesta. Si mi sueldo, por importante que sea, no me da con holgura para satisfacer las necesidades de otros, que tienen que ser satisfechas, tengo que renunciar a hacer “mal y en malas condiciones” una cosa que me gusta, para hacer otra que es necesaria hacer. No es sacrificio; no quiero ponerlo así. Siempre me ha jorobado eso tan español de “la intuición”, el, llamémosle talento personal. “Yo” estoy por los oficios, por el conocimiento lo más profundo posible de la profesión que uno ejerza, y no por “moralismo”, sino por placer. Sólo se gusta de lo que se conoce. Y cuanto más se lo conoce, tanto mejor.
Cuando me vine de Buenos Aires, quise hacer algo en París, seguir cursos de dirección escénica, etc., pero empecé a trabajar inmediatamente y ya no pude, porque me tuve que venir a Ginebra, ¡Qué se le va a hacer!
No dejéis de mandarme vuestra dirección en Buenos Aires ni de avisarme si queréis algo.

Mil cariños.

Amparo

1969-12-30
Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1969
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1969 en 30/12/1969


Ginebra, 30 de diciembre de 1969

Queridos Luis y Maruja:

Después de cuatro años de infierno que he pasado con mis vértigos y mis enfermedades “despistantes” para los médicos, las cosas van mejor y ya puedo escribir, cosa que hasta hace poco me era casi imposible. Parece haberse tratado de una cosa psicosomática que necesitó la ayuda de un psicólogo para uno de los llamados hoy “tratamientos de apoyo”. Todo parece ir mejor.
Hace mucho que no sé nada de vosotros ni de Mireya y Antonio. Les he mandado una tarjeta de año nuevo a La Rioja, porque supongo que siguen allí.
En el mes de octubre pasado fui por vez primera a España después de más de treinta años. No estuve más que nueve días en Madrid, conociendo a mis sobrinos y viendo a mis hermanas. Es bastante probable que para dentro de unos meses me traiga para acá a una de mis sobrinas, a que continúe sus estudios aquí. No os hago comentarios acerca de España porque sería un prodigio de inconsciencia querer dar impresiones tras sólo nueve días d presencia allí. De los españoles y su ambiente sigo pensando lo mismo, y, claro está, de la situación política. Pero la verdad es que no sentí ni la menor emoción al encontrarme en eso que llaman “mi patria”, posiblemente porque soy poco madrileña y muy gallega.
Sigo en Ginebra, trabajando como siempre, sólo que en las Naciones Unidas desde hace ya cinco años.
Me gustaría saber si tenéis el propósito de volver por acá. Si tenéis unos minutos, ponedme unas letras diciéndome qué hacéis, y dónde están Antonio y Mireya.
De Arturo también hace más de un año que no sé nada, pero supongo que está bien, ya que es inmortal e invejecible.
No quería dejar pasar estos días sin deciros que os recuerdo mucho y con mucho cariño y que os deseo un inmejorable 1970.

Un fuerte abrazo de

Amparo

1971-07-25
Carta de Payró a Seoane. 1971
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Payró a Seoane. 1971 en 25/07/1971


Ginebra, 25 de julio de 1971

Muy estimado Seoane:

Supongo que ya se habrán enterado ustedes por algún conducto de que papá se sometió a una operación a fines de junio y de que no sobrevivió a las diversas complicaciones que se produjeron a un ritmo implacable, determinando nuevas intervenciones. Hubiésemos querido hacerles conocer la noticia paulatina y suavemente, pero difícilmente puedo ahora, después de los días que pasé en Buenos Aires para ponerme al servicio de María Inés y Anita y reunirme con mis hermanos, contar lo que pasó en otros términos que los de una cruda realidad, acaso más difícil de prever para todos nosotros que para mi propio padre.
Todos sabemos que entre ustedes existían lazos muy firmes, reforzados por manifiestas afinidades. Al lado de José Luis Romero, Giangrande y Eduardo González Lanuza, nos faltó en efecto el amigo Seoane.
Sé con que confianza puedo hablar con usted y por eso me permito hacer el siguiente ruego. La situación de María Inés ante la ley argentina probablemente necesite algún respaldo en vista de la compleja serie de problemas planteados por la ausencia de una ley de divorcio atenta a auténticas necesidades sociales. Hasta el último momento, preocupó a papá la amenaza de que la ley privará a María Inés del beneficio de la pensión e incluso de las posibles ventajas de su patrimonio, pues sabía que de las tinieblas del pasado podía surgir en cualquier momento la esposa legítima de la que se divorció en 1930.
Quisiéramos precavernos de cualquier riesgo de esa suerte y poner a salvo la situación de María Inés en ciertos aspectos. Hay uno en que usted puede ayudarnos. Hace años regaló a papá y a María Inés un cuadro suyo, por lo demás sumamente preciado por María Inés. Se trata de la Figura sentada, de 1958 (0,92 x 0,73 cm). ¿Quisiera usted redactar una carta, con fecha bastante anterior a 1971, regalándolo expresamente a María Inés? Le recuerdo su dirección: Alsina 2065. Usted juzgará si conviene hacer lo que propongo.

Un gran abrazo.

Roberto Payró

57 Chemin Ami-Argand
1290 VERSOIX
Suiza

1971-10-17
Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1971
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1971 en 17/10/1971


Ginebra, 17 de octubre de 1971

Queridos Luis y Maruja:

Acabo de recibir una carta de Quiroga, de Torremolinos, en la que no da esa dirección aproximada vuestra y me dice que pensáis iros a Buenos Aires a principios de noviembre, por lo que me apresuro a escribiros, claro está que interesadamente. Comprendo que con el viaje tan cerca (¿hasta cuando estaréis en Buenos Aires?) no estará Luis para ocuparse mucho de las cosas de los demás, pero tengo que aprovechar esta última oportunidad y darle la lata, mal que me pese.
Se trata de que quisiera poner en escena, en los gallegos de aquí, Os vellos non deben de namorarse, de Castelao: He leído hace poco que las máscaras de la obra están ahora en el Museo Maside. Supongo que se conservarán los dibujos de los decorados y de los trajes. Me interesaría mucho conseguir buenas fotografías en colores de las máscaras y copias de los dibujos. ¿Cabe esa posibilidad? Correría la cosa “cierta” prisa, no excesiva, y pienso que a lo mejor Luis podría hacer algo o dejárselo encomendado a alguien. Necesitaríamos unos vente ejemplares de la obra (yo tengo uno y el grupo tiene otro, y nada más), y desearía saber si se los puede conseguir allá o si tengo que ponerme urgentemente a copiar el texto, lo que sería un trabajo monstruoso, puesto que también tendré que “sacar” cada papel, ya que los demás no saben hacerlo, y es muy poco el tiempo que me queda y mucho el trabajo.
¿Podríais contestarme con cierta rapidez, para saber con qué puede contarse? No quisiera que los demás perdieran el entusiasmo, como suele suceder cuando se pasan meses hablando de una cosa y no se hace nada.
Veo con mucha frecuencia cosas de Luis en La Voz de Galicia.
Cabe la posibilidad de que dentro de unos meses vaya a Buenos Aires. Se celebra en Chile una gran conferencia a la que irá gente de aquí, y tengo esperanzas de que me manden, aunque son esperanzas y no seguridad. Si me mandaran (que sería en abril y mayo), me quedaría luego, a la vuelta, en Buenos Aires tres o cuatro semanas, siempre y cuando no me resultara ruinoso. Quiero decir, que no influyera en mis posibilidades de trabajo para el resto de año. Me gustaría, pues, saber cuáles son vuestros planes.
Os ruego que me respondáis a lo de Castelao para no tener durante mucho tiempo en la incertidumbre a la gente que trabajaría conmigo. Ya sabéis lo difícil que nos resulta una cosa así en Ginebra.
Supongo que estáis bien, ya que no veo motivo para que no lo estéis.
Saludad a los Dieste de mi parte, y mandadme la dirección de Mireya, que no sé si recibió la carta que le escribí, puesto que ella me hablaba vagamente de sus planes, sin darme fecha ninguna, y le escribí a Buenos Aires sin saber si seguiría allí.

Mil cariños.

Amparo

1971-11-05
Carta de Seoane a Alvajar. 1971
A Coruña
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Alvajar. 1971 en 05/11/1971



La Coruña, 5 de noviembre de 1971

Sra. Dña. Amparo Alvajar
Ginebra

Querida amiga:

Nos llegó tu carta hace unos días cuando, por indicación de Domingo Quiroga, pensábamos escribirte. Marcharemos dentro de pocos días para Buenos Aires y no volveremos hasta dentro de algo más de un año. Nos hubiese gustado haberte encontrado o visto en La Coruña, pero para el próximo viaje trataremos de ponernos de acuerdo contigo para que así ocurra. Por Quiroga o por algún amigo común, sabrás lo que Díaz Pardo y yo hemos hecho en estos últimos tiempos: una fábrica de porcelana en Sargadelos, cerca de Vivero en la provincia de Lugo, donde hubo una famosa de loza y un gran complejo industrial a fines del XVIII, y un Museo, el Museo Carlos Maside, en El Castro, al lado de Sada, a 15 kilómetros de La Coruña. Este es ya un centro cultural muy importante el más dinámico quizás ahora en La Coruña pero situado en una aldea de muy pocos vecinos y donde hay otra fábrica de porcelana fundada por Díaz Pardo. Todo esto, la fábrica de Sargadelos y el Museo nacieron en Buenos Aires con una institución que Díaz Pardo y yo fundamos con el nombre de Laboratorio de Formas y que hubiésemos llamado Laboratorio de Iniciativas si no nos hubiese parecido muy chestertoriano el título. En el Museo hay ya alrededor de 200 obras en las paredes y unos 1500 dibujos y grabados en el archivo, conseguidas a base de donaciones. Yo traje muchas obras de Buenos Aires y compré algunas aquí. Todo esto es muy largo para contártelo por carta. Ya hablaremos con calma en cualquier oportunidad, quizás en Ginebra en 1973. De cualquier manera, no queremos, de momento, dejar Buenos Aires. Es la ciudad en que más nos gusta vivir. La Coruña sigue el destino tremendo de Galicia entera. No quedan gentes de 18 a 45 años. Amamos el mar de la ciudad y la ciudad, cada año sin embargo más desfigurada, pero nos faltan muchas cosas, desde luego la inquietud anterior a la guerra.
En cuanto a lo que nos pides, se van a encargar de enviártelo desde El Castro, se encarga de ello Díaz Pardo. Van a hacerte las fotos y te mandarán las de las caretas de Castelao y las de las que hice yo para una agrupación de teatro de estudiantes de Coímbra, dirigida por el director catalán Ricart Salvat, y que por razones policiales, expulsaron a Salvat de Portugal, no pudo estrenarse. Es seguro que todo esto puede serviros. Las caretas pueden hacerse remodelando caretas corrientes de cartón y pintándolas nuevamente. Por mi parte lo había hecho así y quedaron bien. Muchas veces nos acordamos de tí. No escribimos por esta maldita pereza en escribir cartas que en España se hereda de padres a hijos. Supimos que habías estado en España, al menos en Madrid, y los Dieste lamentaron que no hubieses venido a Galicia. A mí es ya lo único que me interesa de la península aparte los monumentos y las obras de arte. Quizás tambien Barcelona para alcanzar una vida cultural más completa que la de aquí, pero nada más. La gente aquí continúa siendo estúpidamente bondadosa. Ojalá fuese esta una tierra capaz de organizar “La mano negra” o cualquier maffia que la defendiese. Pero no, la gente emigra. Y cada vez más los prados y las huertas se convierten en tojales y proliferan los funcionarios, los caballos salvajes y los lobos.
No te doy más la lata. Escríbenos a Buenos Aires. De aquí te enviarán todo lo que necesitas.

Un gran abrazo de Maruja y mío:

[Seoane]

La dirección de Buenos Aires: Montevideo 1985, piso 13, Dto 68. Bs. As.


1972-01-11
Carta de Seoane a Alvajar. 1972
Bos Aires
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Alvajar. 1972 en 11/01/1972


Buenos Aires, 11 de Enero de 1972

Sra. Dña. Amparo Alvajar
Ginebra

Mi querida amiga:

Te envío las diapositivas de las caretas de Castelao que me las enviaron a Buenos Aires en lugar de hacerlo directamente a tí como les había pedido. Creo que están muy bien. Estamos aquí desde hace un mes y nos toca un verano como parece no hubo otro desde hace medio siglo. Estuvimos con algunos de los amigos comunes, aún no con todos, y, en general, perdieron toda esperanza. Galicia está cada vez más abandonada. La gente joven marcha. En las aldeas apenas quedan hombres y mujeres de 18 a 45 años y crecen en las huertas y prados los tojos y las retamas. Aumentan los lobos y caballos salvajes. Un sociólogo italiano la da como un país europeo moribundo, al igual que Irlanda y Sicilia. Un país moribundo maravilloso de paisaje, con ciudades que se modifican por el giro del emigrante. La Coruña es otra, y Vigo y Santiago. Pero no se trabaja la tierra, la explotación pesquera está en quiebra y no hay apenas otras industrias fundamentales. Debemos coincidir en La Coruña el año próximo. Yo trabajo lo que puedo, pinto, grabo, hago porcelana y monté un Museo, el Museo Carlos Maside, con Díaz Pardo, que es un éxito de público. Está a 15 kilómetros de La Coruña, en El Castro, ayuntamiento de Sada.
Estuvimos con Domingo Quiroga, con los Dieste, ya coruñeses, los Martínez Barbeito, etc. Hablamos de tus artículos de La Voz, debías continuar escribiéndolos. Hace falta que la gente que está fuera ayude a quienes como pueden hacen algo en Galicia. Todos estaban contentos con tu colaboración. Bueno, Amparo, te escribo de prisa. Quiero que esta carta salga hoy con las diapositivas. Un gran abrazo de Maruja y mío. Escríbenos.

[Seoane]

1972-02-19
Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1972
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1972 en 19/02/1972


Ginebra, 19 de febrero de 1972

Queridos Luis y Maruja:

Recibí la carta de Luis del 11 de enero con las diapositivas de las máscaras. Mil gracias.
No escribí hasta ahora esperando a saber con más certeza si iba a Chile o no, y hasta ahora no he tenido el contrato en firme. Ahora ya puedo deciros que, si no sucede nada que lo impida, iré a Chile a principios de abril y a eso del 20 de mayo a Buenos Aires por un par de semanas. Me gustaría veros en seguida, y supongo que vosotros podríais darme un teléfono con que comunicarme con Arturo, ya que tengo una dirección que no sé si seguirá sirviendo, pero no tengo su teléfono. Si lo veis o le habláis, anunciarle mi viaje, por favor.
Dada la proximidad de la visita, no me extiendo mucho en ésta, porque como voy a hacerme antes una pequeña operación, estoy terriblemente atacada, y la presencia aquí de mi sobrina no hace sino aumentar mis trabajos y mis obligaciones.
Ya hablaremos pronto. Cuando sepa en Chile la fecha exacta de llegada a Buenos Aires, escribiré. Si es que se puede saber algo seguro, porque en último momento pueden prolongar la conferencia y pedirle a uno que se quede algunos días más.
Espero que hasta pronto.

Un abrazo.

Amparo

1972-07-17
Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1972
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1972 en 17/07/1972


Ginebra, 17 de julio de 1972

Queridos Luis y Maruja:

Ya ha empezado de nuevo esta marcha normal de la existencia, aunque costó trabajo reorganizarse. Llegué muy cansada y me encontré aquí con el fin de curso de mi sobrina Marta, las fiestas de colegios y conservatorios consiguientes, su viaje inmediato a España, a pasar las vacaciones con su madre, la asistenta que se fue de vacaciones, montañas de trabajo en la oficina, etc., etc. El caso es que yo llevo aquí casi cuatro semanas y aún no he podido empezar a ocuparme de los asuntos grandes o serios. El mes de agosto será todavía peor, porque se va de vacaciones el jefe de la división lingüística de otra organización y me deja todo el trabajo de la sección española para hacer por las noches en casa, y, como os digo, es enorme el trabajo que hay en la oficina y vuelvo bastante cansada.
El resto de mi viaje fue muy bien. En cuanto llegué a Lima me di cuenta de que los limeños, poetas y escritores compañeros míos aquí (¡parece mentira!) me habían dado una clase de información que no correspondía a la verdad. Me habían dicho que para ver Lima sobraban dos días. Estuve tres y no vi ni la décima parte de lo que hay que ver. Pero no bien me di cuenta de eso, decidí no llamar ni ver a ningún conocido y dedicarme a los museos y a la ciudad, de la que he quedado verdaderamente enamorada. Corrí por todas partes. Fui a Cuzco, que no me impresionó tanto como esperaba. Sí, en cambio, el paisaje que rodea a Machu Pichu. Volví a Lima y salí por Quito. Allí llamé solamente a un amigo, gran poeta y escritor, compañero nuestro, que ha sido secretario de Relaciones Exteriores en Ecuador y que no me dejó sola ni un instante de los tres días que pasé allí, con un taxi a la puerta del hotel y recorriéndolo todo el día entero en taxi, y sin dejarme pagar nada. Se portó muy bien, puesto que no tenía por qué hacer tanto. Tengo en Quito otros amigos, entre ellos el actual Presidente de la Corte Suprema, que era Embajador de su país y en uno de esos cambios políticos en que lo pusieron en la calle pasó durante cierto tiempo a trabajar con nosotros, aunque yo ya lo conocía de Nueva York. Ni le hablé por teléfono, porque el otro no me dejó ni a sol ni a sombra, con su ansia de hacerme conocer su pueblo, como él le llama.
En el viaje compré varias cosas bonitas o curiosas, tanto para mí como para mis múltiples niños. Todo tuvo un gran éxito.
Cuando llegué aquí me encontré con que A Nosa Galiza que es aquella asociación que quería representar la obra de Castelao, había habido los acostumbrados e inevitables líos internos, y el proyecto se ha quedado en el aire. En cambio, el grupo Artístico Hispanoamericano que es el que yo dirigí in illo tempore y que ahora está dirigiendo (desde el punto de vista escénico, se entiende, porque hay una comisión directiva que es la que al fin y al cabo decide). Sara Ventura (una argentina que es ayudante de dirección en el Gran Teatro de aquí y que monta ella a veces como directora tales o cuales óperas) había decidido poner Fuenteovejuna. Fui a una reunión de los “cabecillas” en que se trataba de la obra y me di cuenta de que esta mujer (que es amiga de amigos míos de ahí, entre ellos Emma González Ledo) no sabe un carajo del teatro clásico español, un pito de Lope y medio pito de Fuenteovejuna. Los otros que allí estaban, incluso un amigo que sí había estudiado la obra y llevaba preparado un plan de adaptación bastante bien hecho si se reduce la obra al punto de vista anecdótico, se pusieron a hablar mal de Lope y del pueblo de Fuenteovejuna (chupacomedias del rey, acciones paralelas en la obra “que (según ellos) no vienen a cuento”, que si escenas inútiles que son un verdadero tostón, etc.). Yo iba dispuesta a callarme la boca, porque la verdad es que no me había puesto a estudiar el asunto en serio, pero en vista de eso no me quedó más remedio que rebatir todas esas estupideces y decirles que había mucho que estudiar la cosa si se quería actualizar la obra, darle el sentido revolucionario que tuvo en su tiempo la propia idea de la monarquía, pensar en el nacimiento de las nacionalidades, no suponer que la toma o no toma de Ciudad Real no tiene un pito que ver con el asunto, porque sí lo tiene, y que una vez estudiado todo eso se podría ver de universalizar y actualizar lo revolucionario de la obra entera, y no solamente tocarle el corazón al público con la anécdota visible, que esa sí que no es más que un pretexto. En vista de lo cual, no se pondrá Fuenteovejuna este año, sino más adelante, y el caso es que me he quedado yo encargada de buscar material, estudiar la obra y discutir la cosa con Sara Ventura (que al parecer no piensa darse ni el mínimo trabajo de esos y esperará a que le den las cosas masticadas) y otros. He pedido algún material a España y yo tengo varias cosas que pueden ayudar, pero me pregunto cuándo y de dónde voy a sacar el tiempo para eso. El caso es que Fuenteovejuna me interesa y prefiero que hagan algo más “consciente”, aunque mi nombre no figure para nada. ¿No os parece?
Además de saludaros y deciros que os tengo mucho cariño, “ésta” tiene otro objeto y ahí va.
Hay aquí unos gallegos que tienen un taller mecánico en el que hacen cajas de relojes finos (oro y piedras preciosas) y otras cosas por el estilo. Es gente de bien, muy gallega y muy obrera , además, de hacer dinero. Tienen también una sociedad de importación y exportación. Hablé con ellos y se mostraron muy interesados en vender aquí y en Francia cosas gallegas, empezando por los productos de vuestras fábricas de cerámica. Respecto de las demás cosas, habría que darles ideas, y yo le he oído a Luis interesado, y mucho, en el fomento de la artesanía y la industria gallega con un sentido moderno y que haga ganar dinero a la gente de allá. Se trataría, si vosotros estáis de acuerdo en vender lo que sea, con buena propaganda, en casas buenas y caras y no en bazares al por mayor o menor. Si vuestras fábricas tienen catálogos con reproducciones o cualquier otro material de propaganda, todo el que sea, y si el asunto os interesa, ¿podríais hacérmelo llegar lo antes posible? Si os interesa el asunto y Luis ve otras posibilidades para Galicia, os pongo en contacto con esta gente, que ha llegado el caso bien puede ir allá, y a lo mejor la cosa marcha bien. Contestadme algo a esto, porque esa gente va a andar preguntándome a todas horas, qué hay de ello.
Decidle a Marika, la mujer de Lorenzo, que pasé dos veces por Guermantes para saludarla y que las dos veces lo encontré cerrado. Después no pude ya volver.
¿Se casó Arturo? Todavía no he podido ocuparme de la separación de bienes, que según me dicen no es cosa tan sencilla en matrimonio ya contraído. También tendré que mandarle copia de esa sentencia de divorcio, pero antes tengo que averiguar si basta una copia fotográfica o si tiene que ser un documento legalizado por el Consulado argentino. Como mi horario de trabajo es el de todo el mundo, no llego a tiempo a ningún sitio, y hasta comprar leche o pan se convierta en un problema. Y luego, con mi sobrina aquí, pese a que está en el colegio, se complican las cosas, porque tengo el triple de trabajo. Aprobó el bachillerato elemental francés (en su examen, de 600 alumnos, franceses en su mayor parte, sólo aprobaron 100), el examen de francés para extranjeros y tuvo 2º premio en matemáticas y en guitarra.
Por favor, contestadme a lo de la exportación, aunque sea para decir que no interesa, y decidme vuestros planes, si ya están más cuajados. Uno de estos días (cuando pueda) le escribiré a Pillado, al que quisiera encomendar un par de artículos. ¿Podré? Aquí seguimos prácticamente en invierno. Tiempo de perros.

Amparo

1972-08-13
Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1972
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1972 en 13/08/1972

Ginebra, 13 de agosto de 1972

Queridos Luis y Maruja:

Hasta ahora no he tenido tiempo para poneros unas letras y deciros que recibí una carta de Sargadelos y los catálogos hace tres o cuatro días. Todavía no he podido a los directamente interesados, pero quería que supierais que ya llegó todo eso.
Está aquí Aurora, aunque supongo que ya lo sabéis, puesto que me dijo que había cenado con vosotros poco antes de salir para Buenos Aires. Está viviendo en casa. Pasará aquí un mes y luego irá a París.
Tampoco he tenido tiempo de escribirle a Mireya, pero pienso hacerlo el sábado o el domingo que viene, que son los días en que me queda un rato, aunque el sábado suele ser también un día de mucho atacamiento. Es el único que nos queda para hacer las compras necesarias y todo lo que no se puede hacer durante la semana.
Uno de estos días le mandaré también a Pillado una revista que le había prometido, donde hay textos importantes sobre el movimiento de liberación de la mujer, que al parecer le interesa.
Estamos pasando unos calores que se hacen tremendos a causa de la mucha humedad, pero no hay casi sol.
Aurora os manda grandes saludos. Come bien, duerme mejor y está espléndida. Yo, como siempre.

Mil abrazos

Amparo

Ya están enmarcados y colgados los ángeles de Luis.

1972-10-22
Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1972
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1972 en 22/10/1972


Ginebra, 22 de octubre de 1972.

Queridos Luis y Maruja:

Sigue la marea de trabajo, en forma tal que no me queda tiempo para descansar. Pero debo escribiros, aunque la carta será menos personal que imaginarse pueda, por lo que a continuación veréis.
Sale en estos días para Buenos Aires Anita Neugebauer, periodista y fotógrafa de Basilea. Hace tiempo vivió en la Argentina durante años, pero se ha quedado completamente desvinculada ahora. Una gran revista de la Suiza alemana le reserva varias páginas para publicarle un reportaje sobre la vida cultural de Buenos Aires. Es mujer muy vinculada con el teatro. Ha estado y sigue estando vinculada con galerías de pintura de Basilea, y en una de ellas está su hijo. Esta mañana de domingo, sacando tiempo al tiempo, me he sentado a escribirles a algunas personas para ver si la pueden orientar. Yo sé que vosotros pensáis como yo que Buenos Aires no está muerto, sino todo lo contrario. Muchos hay por aquí que andan diciendo que todo eso se acabó, que no se hace nada interesante, etc., etc., y para mí que confunden los sentimientos políticos con otras cosas que nada tienen que ver con ello. Yo me paso el tiempo discutiendo con esa gente, porque opino lo contrario, y en el poco tiempo que ahí estuve, saqué una impresión muy diferente de las cosas, de manera que me tomo un interés casi personal, por el cariño que le tengo a esa ciudad que tanto ha sido para nosotros, en ese reportaje. Os ruego que la orientéis. Tal vez podríais explicarle lo que se está haciendo ahí en todos los aspectos. Habría que decirle entre otras cosas dónde están los murales de los grandes pintores argentinos, no sólo en edificios oficiales sino en galerías comerciales y casas de departamentos. La última exposición de Luis. Lo que se hace en teatro. Tal vez, en poesía, podríais ponerla en contacto con Girri, que también le podría explicar algunos de los programas de radio que se están haciendo por Radio Municipal. En fin, mil cosas, que vosotros sabéis mejor que yo.
Quisiera tener tiempo para comentar detalladamente con vosotros la representación aquí de Hair por la gente de París, y sobre todo el paso muy reciente del grupo argentino TSE, que hacen cosas verdaderamente interesantísimas. Todo esto me llevaría el día entero, y bien lamento no poder pasármelo relatándoos lo que creo que os interesaría.
Veré a Anita el miércoles, día en que pasará fugazmente por aquí. Y no tendremos ni una hora para charlar de Buenos Aires antes de su marcha. Ella tiene que volver a Basilea esa misma noche y yo tengo que pasarme el día en la oficina. Desde que llegué, no he hecho más que trabajar, tanto en la oficina como en casa, porque no puedo decir que no a los trabajos que me ofrecen, para no desvincularme de otras organizaciones y por deber para conmigo misma de no rechazar trabajo. El caso es que estoy cansadísima, porque ya llegué cansada de Buenos Aires y del viaje posterior, y no he tenido ni un día de descanso. Parece ser que dentro de tres o cuatro semanas podré contar con cuatro o cinco días para mí, pero es demasiado poco para irme a una playa a tenderme al sol, de modo que me quedaré en casa y trataré de dormir. Estoy en pie a fuerza de vitaminas, tónicos, reconstituyentes y estimulantes cerebrales, pero me pregunto cuánto tiempo se puede o es sensato vivir a base de eso. Miro las pildoritas y pienso con ansiedad cuándo será el día en que desaparezcan de la mesa de la cocina en que me esperan todas las semanas, pero materialmente no puedo prescindir por el momento de ellas. ¡No saben Rafael y Carmen la suerte que tienen pudiendo vivir en Rianjo! Además, el clima de Ginebra es desvitalizador en grado sumo, y es verdaderamente necesario cortar de vez en cuando todo esto para marcharse al mar, que es la única forma de poder luego resistir otros cuantos meses, y yo pocas veces puedo hacerlo. Siempre hay algo urgente o necesario, o algo que te retiene aquí, o tienes unos cuantos días en el momento más inoportuno del año, cuando llegar al sol te cuesta tanto dinero que es verdaderamente insensato.
En fin, no hay que quejarse, porque lo principal es tener trabajo y fuerzas para hacerlo. Le he escrito hoy a Arturo, porque non lo había hecho desde que salí de ahí, y ya sé que se casó de verdad, porque me lo dijo Aurora, que ha pasado un mes aquí en casa. Ahora está en París y volverá a Buenos Aires a finales de año.

Os recuerdo mucho y os abrazo muy fuerte.

Amparo

1973-02-04
Carta de Alvajar a Seoane. 1973
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Seoane. 1973 en 04/02/1973


Ginebra, 4 de febrero de 1973

Querida Marujiña:

Recibí tu carta. No te molestes en certificarlas porque llegan todas y ninguna se pierde. Además, como no hay nadie en casa no las dejan, y te ponen un papelito para que vayas en el término de tantos días (pocos) a buscarlas al correo. Si no vas a tiempo, las devuelven. Y nuestro horarios, que casi coinciden con las del correo, no nos permiten la mayor parte de los días llegar a tiempo.
Antes de pasar a contestar tu carta, y para que no creas que soy como aquel individuo que el día del cumpleaños de sus amigos les regalaba una fotografía de él, te diré que esas fotografías son para que se las hagáis llegar a Domingo Antonio Quiroga Ríos, que tanto os adora y admira, que no pasan quince días sin que se ponga a hacer loas de vosotros por correspondencia. Si no lo veis con frecuencia, las podéis dejar a su nombre en La Voz de Galicia o dárselas a Pillado para que se las pase a él. En el momento que más cómodo os venga. Reconocerás, Maruja, el vestido que me compré en Buenos Aires. El otro está hecho con dos pedazos de trapos de colgar en la pared que vendían en una tienda de cosas típicamente bolivianas que pusieron en el lugar donde estábamos trabajando en Chile y que me costaron cuatro perras. Tienen muchos más colores que los que se ven en las fotos: azules y morados, por ejemplo. Lo negro es un albornoz árabe. Las mando porque son las primeras fotografías de mi vida donde no estoy espantosa, y como los Quiroga “nos ponen en álbum”...
Ahora paso a tu carta, empezando por decirte que cada día estoy más admirada de las cosas que hace la gente ahora a las edades de tu suegra. Es estupendo. En cuanto a lo tuyo, te diré que la gripe de este año agarra generalmente fuerte, con mucha fiebre y secuelas de todas clases. Especialmente deja muy agotada. Yo, por ahora, no la atrapé. Lo que sí atrapé fue un ataque de reuma en el brazo derecho que no me deja ni levantar un cenicero o una taza de café. Felizmente me permite escribir a máquina. Pero, en fin, no me preocupa mucho porque supongo que es cosa pasajera. Otras cosas más permanentes me inquietan más. Ya llegaremos a eso.
Le he escrito ayer a Anita transmitiéndole detalladamente todo lo que me decías en tu carta. Espero respuesta, pero además le he dado vuestra dirección en La Coruña por si quiere, además, escribiros.
Asunto viaje a La Coruña. Excuso deciros cuánto os agradezco la hospitalidad, y sobre todo la buena voluntad, porque ya sé que lo hacéis pensando hacerme bien. Es decir, que es una invitación “activa” y no “pasiva”. Por el momento no puedo contestar concretamente. Pasa esto. Sigo mal, con mi famosa enfermedad, que empezó hace siete años y no quiere dejarme. Va mejor, pero no bien. No empiezo a explicárosla porque se necesitan cinco volúmenes para relatar mis peregrinaciones de médico en médico (que sostenían que no tengo absolutamente nada), y luego de psicólogo en psiquiatra, porque, como no tenía nada, tenía que ser psicólogo. Ahora parece ser que han descubierto que casi todas estas cosas tienen, como yo he sostenido siempre, un origen orgánico, y no psíquico. Parece ser que se trata de depresiones endógenas. Las células de la corteza cerebral se ponen de repente a producir no sé que cosa que anula la acción de no sé qué otras dos, necesarísimas. Los médicos mexicanos, tratando de encontrar un remedio para la tuberculosis, descubrieron unos medicamentos que la tuberculosis no la curaban, pero sí lo otro, y los tuberculosos de las clínicas se sentían de repente animados, vitalizados e inclinados a la organización de terribles bailongos. Desde entonces, tanto en América (Estados Unidos sobre todo) como en otras partes, están utilizando estos medicamentos con gran éxito. Otra de las cosas que da resultados muchas veces, sin que se sepa por qué, es el agua litinada (los antiguos litines), que estoy tomando a litros. Los otros medicamentos no me atrevo a tomarlos sin vigilancia médica, porque tienen efectos secundarios fuertes. Tengo los medicamentos, porque una amiga me los ha dado, pero no los tomo. Mi médico actual se puso furioso cuando le hablé de emplear medicamentos para hacer desaparecer lo que resta de mi enfermedad, porque dice que “está absolutamente seguro” de que lo mío es de origen psicológico: sentimiento de inseguridad, etc. En fin, mentalidad de refugiada. En vista de eso, pedí hora con una delas notabilidades de aquí con la que ya he estado en tratamiento hace años, cuando más grave era la cosa. Pero aunque pedí hora hace tres meses no he podido conseguirla antes del lunes próximo. Iré a verlo, porque es un hombre en cuya inteligencia confío y que tiene todas las calificaciones necesarias para el caso: médico general, neurólogo, psiquiatra y psicólogo, profesor de la Universidad, etc. Claro está que la última cuenta que le pagué cuando estuve en tratamiento con él ( que no pensó para nada en cuestiones psicológicas) fue de cinco mil francos, pero la salud es ante todo. Voy a pedir su opinión y su consejo, y luego obrar en consecuencia. En mi estado no me atrevo a hacer planes de viajes, porque hay días y temporadas largas en que no puedo ni andar, y simplemente me arrastro para venir a la oficina y apenas me las arreglo para seguir trabajando. No digo nada a nadie, pero paso por un verdadero infierno. Cuando fui a Chile lo pasé muy mal; no así en Buenos Aires, donde sólo tuve dos días malos. Durante mucho tiempo he tenido que trabajar sentada en el suelo, disimulando y haciendo pasar eso por una originalidad, porque no me tenía en las sillas. En fin, para que seguir...
Espero, pues, la opinión de Feldmann, aunque esa opinión me cueste un ojo de la mismísima cara. Luego está, además, la cuestión de mi trabajo. En principio, debería seguir trabajando hasta eso del 19 de mayo, y luego tendría que interrumpir un mes, en el cual tengo forzosamente que ir a París por unos días para renovar mis papeles, que caducan. En ese momento, de estar bien, me quedaría cierto tiempo para ir a La Coruña, si vosotros pensáis estar ahí y en ese momento no os estorbo. Vosotros me lo diréis. Si es posible pronto, para poder hablar con mi jefa de estas cuestiones de trabajo y saber con un poco más de seguridad si interrumpo en mayo o si tengo que interrumpir antes (cuestiones reglamentarias largas de explicar). Así que cuando tengáis un momento, contestadme dándome una idea de esto.
Uno de estos días en que me siento mejorcita (hay veces, como os digo, en el que no puedo andar a causa de los vértigos) quiero ir a buscaros dos discos que creo que os gustarían: una canción de Brassens sobre todos y cada uno de los reyes que quedan en el mundo, y otra que me gusta mucho, aunque ésta no sé cómo se llama ni de quién es la mujer que canta, pero estoy segura de que os gusta. Si los encuentro, os lo mandaré.
También, de ir allá, quiero que me digáis si queréis algo de aquí, para buscarlo con tiempo. Pregúntale también a Pillado si quiere o necesita algún libro que pueda llevarle o mandarle, y saludadlo de mi parte.
Espero respuesta vuestra para ir tomando las disposiciones necesarias por si llego a encontrarme bien, y digo “por si” porque ya os imaginaréis lo que es para mí la idea de encontrarme en un aeropuerto sintiendo que me caigo y que, cueste lo que cueste, tengo que aguantar, retirar mis maletas o facturarlas, llegar a donde sea, etc., etc. Os pido información con tiempo porque, dadas las condiciones en que trabajo en las Naciones Unidas, necesito preparar las cosas con bastante anticipación, para que no digan que les creo problemas.

Mil cariños a los dos y muchas gracias.

Amparo

1973-02-14
Carta de Alvajar a Seoane. 1973
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Seoane. 1973 en 14/02/1973


Ginebra, 14 de febrero de 1973

Marujiña querida:

Ni bien hube echado la carta en que te decía que aún no había atrapado yo la gripe que por derecho correspondía, tuve que llamar corriendo al médico para pedirle un certificado para quedarme en casa, porque tenía 40 de fiebre. Así que antibióticos, pastillas para la tos, supositorios para la fiebre y toda la parafernalia de la gripe. Ahora ya va bien y mañana regreso a la oficina.
¿Cómo va tu flebitis? No me extraña que te haya dejado la gripe esa secuela, porque la que yo tuve hace dos años me dejó una neuritis en el brazo izquierdo que me pasé tres meses viendo y contemplando todas las estrellas de firmamento. Todavía que queda de eso un temblor en los dedos que a veces no lo puedo dominar. Espero que estés mejor.
Aún así me las arreglé para ir a ver a mi notabilidad de profesor Feldman, a causa de lo otro que es más importante. Al principio estaba un poco picado, porque después de todo yo lo había abandonado en el año 1967, y eso a nadie le gusta. Me dijo con un ligero retintín: “Yo pensé al ver que usted volvía: “Afortunadamente, Mme. Alvajar es inteligente y comprende”. Le contesté: “Dr. Feldmann, eso es lo que pensé yo: “Afortunadamente el Dr. Feldmann es inteligente y comprende”. La verdad es que uno tiene tendencia a suponer que todo médico, y especialmente todo psicólogo o psiquiatra, es un hombre inteligente y comprensivo, y yo te digo por experiencia que de los muchos que he visto ninguno me ha dado la impresión de una verdadera inteligencia, salvo éste. A pesar del fracaso de su tratamiento anterior, siempre he pensado en él como el único hombre inteligente que he visto aquí. Luego todo marchó muy bien, tanto que, ¡oh, sorpresa, sobre todo viniendo de un suizo!, al despedirse de mí hasta dentro de quince días me dio un tiernísimo beso en la mejilla, y aún no he salido de mi asombro. Comprendió muy bien todo lo que le expliqué, me dijo (lo que yo ya sabía) que desde el año 1967 en que yo había interrumpido el tratamiento con él hasta ahora la psiquiatría y ramas conexas de la medicina habían hecho enormes progresos, que había muchísimos medicamentos nuevos, que comprendía mi necesidad de recuperar la “joie de vivre” y de sentirme bien, que “qu´est que c´est que cette histoire de se coucher à sept heures du soir?”, etc., etc. Me dio dos misteriosísimos medicamentos, uno de ellos que fui a buscar en la farmacia, donde me contaron las pildoritas una por una y me las dieron en un frasco en el que no hay ni el nombre del medicamento, y otro que se sacó el mismo como quien dice del bolsillo del chaleco, y que debe de ser un medicamento que está todavía en experimentación, porque no viene de ningún laboratorio médico, sino de un instituto de investigaciones sobre Lípidos, y me dijo que volviera dentro de quince días. También me dijo, “Pero tiene usted una cara estupenda”, y le contesté: “Dr. Fielmann, esta cara que tiene usted delante tiene encima catorce colores mezclados, así que no le extrañe que el resultado sea decente”. Claro está que se echó a reír. Ahora hay que tener paciencia, porque estos medicamentos (que creo que son de los que llaman “imaos”) son de actuación lenta.
Ahora voy a ver si os digo todo lo que tengo que deciros, que siempre se me queda alguna cosa en el tintero.
Me contestó Anita diciéndome que os escribía directamente y que ya había recibido carta vuestra. Parece que vuelve a Buenos Aires en marzo, peor que antes pasará por aquí.
Recibí una carta de Aurora Cortázar, que debe de haber venido por sus propios pies, puesto que debe de ser así como mandan las cartas que no traen ni un solo sello, ni siquiera el nombre del remitente. Fecha de la carta: 11 de diciembre. Llegada: 10 de febrero. Todas las noticias que me da ya las había recibido, claro está, de los propios interesados, en cartas con sus debidos sellos, salvo la noticia del nacimiento de la niña de Arturo. Dice Aurora, entre otras cosas, que tenéis la intención de venir por aquí. Os quiero prevenir antes. Lo que está sucediendo en este país es un verdadero escándalo. De un día para el otro suben las cosas, a veces de repente un 230%, aunque parezca mentira. Tenéis que contar con que todo está por lo menos el triple más caro que la última vez que pasasteis por aquí. Y digo “por lo menos”. A mí me parece un verdadero disparate pagar estos precios. Mi casa es pequeña (no es la de las fotografías que mandé para Quiroga, que están tomadas en casa de los Fernández Buján, que él es de Corcubión), pero hay dos habitaciones, una de ellas con una cama grande. En la otra hay un sofá cama, donde yo duermo muchas veces y donde he dormido todo el tiempo que Aurora estuvo aquí. Trataría de no molestaros por las mañanas, porque me levanto muy temprano (a eso de las seis menos cuarto). Me voy a las ocho y no vuelvo hasta las seis o las seis y media. Tendríais la casa para vosotros, con absolutamente todo lo necesario para vivir. Las tiendas necesarias están cerca. Hay autobuses en la esquina que os llevan a todas partes de la ciudad. La Ciudad Vieja está a un paso, con las galerías de arte y los museos. Aunque no sea época de vacaciones de verano de Marta, la cosa tiene arreglo. Viene los jueves a bañarse y arreglarse y a asistir a sus clases de latín, solfeo y guitarra, y ese día tampoco duerme en casa. Sólo duerme aquí los sábados, y los Fernández Buján están encantados de tenerla con ellos ese día, tanto que tengo a veces que pelearme para que me la dejen en casa. Sonia, su hija, es muy amigota de Marta y les gusta mucho estar juntas. Me gustaría mucho que las conocierais, porque tiene excelentes cualidades, y además hace mucho tiempo que tengo ganas de hablar con vosotros acerca del porvenir y los estudios de esta niña, porque creo que Luis puede darme buenos consejos. No entro ahora en el asunto porque pienso que de una manera o de otra os veré pronto.
La Galería Kreuger sigue mandando las invitaciones para los “vernissages” a nombre de Luis acá a casa. Medio se disolvió. Tiene fama de ser un hombre muy competente en lo suyo y honrado, pero insoportable en el trato con sus asociados. Una socia de él, una italiana casada con un suizo sobrino de Le Corbusier, llamada Ana María no sé cuantos (he estado buscando los catálogos donde está su nombre, pero me los debe de haber robado Marta, que es museómana y galeriómana) acaba de abrir una galería nueva que se llama Arte Moderno, aquí cerca de casa. Está en un piso alto, y son dos “dúplex” unidos, una casa lujosísima. Inauguró la galería con una exposición de Fernando Maza, que al llegar aquí lo primero con que se encontró fue con mi nombre en la lista de invitaciones a los “vernissages”, claro está que a casa de Luis. El ya traía mi dirección, que se la había dado su madre; llamó en seguida y pasamos varios ratos juntos. Acababa de exponer en la Bienal de Venecia, con mucho éxito, y ahora tiene una exposición en París y otra creo que en Turín. Aunque está separado de su mujer, que es norteamericana, pasa largas temporadas con ella y con su hijo en un pueblecito que está a unos kilómetros de Palma de Mallorca, un pueblecito muy sencillo, poblado de artistas, al parecer. Me ha invitado a ir allá, pero dudo de poder hacerlo.
Sigo recibiendo La Voz de Galicia, que está mucho mejor informada que La Tribuna de Ginebra o cualquier otro periódico de aquí, y sobre todo trae muchas noticias de Buenos Aires y Chile. Hace unos días sacaron una fotografía del Perón con un aspecto de apolillado que da miedo, diciendo que se va a Rumanía a hacerse un tratamiento gerontológico, lo cual no deja de ser una especie de “pajueranada”, porque el tratamiento de la Dra. Aslam nos lo estamos haciendo todos desde hace mucho tiempo, a título preventivo, porque tan apolillados todavía no estamos. Hace más de veinte años que tengo yo correspondencia con ellos y de vez en cuando me hago el tratamiento, y también Aurora lo emprendió, aunque con pildoritas, porque le tiene verdadero pánico a las inyecciones. También otra vez sacaron como gran novedad una fotografía de una pianista que se acababa de hacer un lifting, una “cara nueva”, como ellos decían. Supongo que sacan esas cosas cuando no encuentran otras con que rellenar un hueco, pero no dejan de asombrarte.
Me tienen prometidos para el sábado los dos discos de que os hablé. El de Grassens es el último y estaba agotado. Así pasaron la canción de los reyes por radio un par de veces, y luego no volvieron a pasarla más, porque como tienen tanto miedo de ofender a los jefes de Estado de otros países... Tanto que está seriamente penada cualquier ofensa pública a cualquiera de ellos. El otro resulta que es de Juliette Greco, cosa rara, porque esa mujer se ha dedicado a cantar las mayores estupideces del mundo desde hace varios años, de modo que no respondo de la clase de canciones que hay en ese disco, a parte de la que se llama “Mon fils, chante”. Os lo mandaré por correo la semana que viene.
Ahora os dejo, porque aprovechando estos días que he pasado en casa me estoy haciendo un pijama “serio”, es decir, sencillo. Todo lo que se encuentra por aquí está lleno de froufrous y de chichis, y no comprendo por qué razón hay que vestirse de idiota para meterse en la cama. Ya veremos lo que sale, porque hace muchos años que no coso en serio.
Y ahora dejo de daros la lata. Ya me avisaréis cuando recibáis los discos, para que me quede tranquila y sepa que no os los robaron por el camino.
Saludos a Rafael y Carmen. Ya sé que estuvo aquí Mireya, porque me escribió. Le contesté, pero no sé si mi carta llegó a tiempo, porque estaba a punto de volverse a América.

Saludos igualmente a Pillado y mil cariños para vosotros.

Amparo

1973-02-14
Carta de Alvajar a Seoane. 1973
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Seoane. 1973 en 14/02/1973


Ginebra, 14 de febrero de 1973

Marujiña querida:

Ni bien hube echado la carta en que te decía que aún no había atrapado yo la gripe que por derecho correspondía, tuve que llamar corriendo al médico para pedirle un certificado para quedarme en casa, porque tenía 40 de fiebre. Así que antibióticos, pastillas para la tos, supositorios para la fiebre y toda la parafernalia de la gripe. Ahora ya va bien y mañana regreso a la oficina.
¿Cómo va tu flebitis? No me extraña que te haya dejado la gripe esa secuela, porque la que yo tuve hace dos años me dejó una neuritis en el brazo izquierdo que me pasé tres meses viendo y contemplando todas las estrellas de firmamento. Todavía que queda de eso un temblor en los dedos que a veces no lo puedo dominar. Espero que estés mejor.
Aún así me las arreglé para ir a ver a mi notabilidad de profesor Feldman, a causa de lo otro que es más importante. Al principio estaba un poco picado, porque después de todo yo lo había abandonado en el año 1967, y eso a nadie le gusta. Me dijo con un ligero retintín: “Yo pensé al ver que usted volvía: “Afortunadamente, Mme. Alvajar es inteligente y comprende”. Le contesté: “Dr. Feldmann, eso es lo que pensé yo: “Afortunadamente el Dr. Feldmann es inteligente y comprende”. La verdad es que uno tiene tendencia a suponer que todo médico, y especialmente todo psicólogo o psiquiatra, es un hombre inteligente y comprensivo, y yo te digo por experiencia que de los muchos que he visto ninguno me ha dado la impresión de una verdadera inteligencia, salvo éste. A pesar del fracaso de su tratamiento anterior, siempre he pensado en él como el único hombre inteligente que he visto aquí. Luego todo marchó muy bien, tanto que, ¡oh, sorpresa, sobre todo viniendo de un suizo!, al despedirse de mí hasta dentro de quince días me dio un tiernísimo beso en la mejilla, y aún no he salido de mi asombro. Comprendió muy bien todo lo que le expliqué, me dijo (lo que yo ya sabía) que desde el año 1967 en que yo había interrumpido el tratamiento con él hasta ahora la psiquiatría y ramas conexas de la medicina habían hecho enormes progresos, que había muchísimos medicamentos nuevos, que comprendía mi necesidad de recuperar la “joie de vivre” y de sentirme bien, que “qu´est que c´est que cette histoire de se coucher à sept heures du soir?”, etc., etc. Me dio dos misteriosísimos medicamentos, uno de ellos que fui a buscar en la farmacia, donde me contaron las pildoritas una por una y me las dieron en un frasco en el que no hay ni el nombre del medicamento, y otro que se sacó el mismo como quien dice del bolsillo del chaleco, y que debe de ser un medicamento que está todavía en experimentación, porque no viene de ningún laboratorio médico, sino de un instituto de investigaciones sobre Lípidos, y me dijo que volviera dentro de quince días. También me dijo, “Pero tiene usted una cara estupenda”, y le contesté: “Dr. Fielmann, esta cara que tiene usted delante tiene encima catorce colores mezclados, así que no le extrañe que el resultado sea decente”. Claro está que se echó a reír. Ahora hay que tener paciencia, porque estos medicamentos (que creo que son de los que llaman “imaos”) son de actuación lenta.
Ahora voy a ver si os digo todo lo que tengo que deciros, que siempre se me queda alguna cosa en el tintero.
Me contestó Anita diciéndome que os escribía directamente y que ya había recibido carta vuestra. Parece que vuelve a Buenos Aires en marzo, peor que antes pasará por aquí.
Recibí una carta de Aurora Cortázar, que debe de haber venido por sus propios pies, puesto que debe de ser así como mandan las cartas que no traen ni un solo sello, ni siquiera el nombre del remitente. Fecha de la carta: 11 de diciembre. Llegada: 10 de febrero. Todas las noticias que me da ya las había recibido, claro está, de los propios interesados, en cartas con sus debidos sellos, salvo la noticia del nacimiento de la niña de Arturo. Dice Aurora, entre otras cosas, que tenéis la intención de venir por aquí. Os quiero prevenir antes. Lo que está sucediendo en este país es un verdadero escándalo. De un día para el otro suben las cosas, a veces de repente un 230%, aunque parezca mentira. Tenéis que contar con que todo está por lo menos el triple más caro que la última vez que pasasteis por aquí. Y digo “por lo menos”. A mí me parece un verdadero disparate pagar estos precios. Mi casa es pequeña (no es la de las fotografías que mandé para Quiroga, que están tomadas en casa de los Fernández Buján, que él es de Corcubión), pero hay dos habitaciones, una de ellas con una cama grande. En la otra hay un sofá cama, donde yo duermo muchas veces y donde he dormido todo el tiempo que Aurora estuvo aquí. Trataría de no molestaros por las mañanas, porque me levanto muy temprano (a eso de las seis menos cuarto). Me voy a las ocho y no vuelvo hasta las seis o las seis y media. Tendríais la casa para vosotros, con absolutamente todo lo necesario para vivir. Las tiendas necesarias están cerca. Hay autobuses en la esquina que os llevan a todas partes de la ciudad. La Ciudad Vieja está a un paso, con las galerías de arte y los museos. Aunque no sea época de vacaciones de verano de Marta, la cosa tiene arreglo. Viene los jueves a bañarse y arreglarse y a asistir a sus clases de latín, solfeo y guitarra, y ese día tampoco duerme en casa. Sólo duerme aquí los sábados, y los Fernández Buján están encantados de tenerla con ellos ese día, tanto que tengo a veces que pelearme para que me la dejen en casa. Sonia, su hija, es muy amigota de Marta y les gusta mucho estar juntas. Me gustaría mucho que las conocierais, porque tiene excelentes cualidades, y además hace mucho tiempo que tengo ganas de hablar con vosotros acerca del porvenir y los estudios de esta niña, porque creo que Luis puede darme buenos consejos. No entro ahora en el asunto porque pienso que de una manera o de otra os veré pronto.
La Galería Kreuger sigue mandando las invitaciones para los “vernissages” a nombre de Luis acá a casa. Medio se disolvió. Tiene fama de ser un hombre muy competente en lo suyo y honrado, pero insoportable en el trato con sus asociados. Una socia de él, una italiana casada con un suizo sobrino de Le Corbusier, llamada Ana María no sé cuantos (he estado buscando los catálogos donde está su nombre, pero me los debe de haber robado Marta, que es museómana y galeriómana) acaba de abrir una galería nueva que se llama Arte Moderno, aquí cerca de casa. Está en un piso alto, y son dos “dúplex” unidos, una casa lujosísima. Inauguró la galería con una exposición de Fernando Maza, que al llegar aquí lo primero con que se encontró fue con mi nombre en la lista de invitaciones a los “vernissages”, claro está que a casa de Luis. El ya traía mi dirección, que se la había dado su madre; llamó en seguida y pasamos varios ratos juntos. Acababa de exponer en la Bienal de Venecia, con mucho éxito, y ahora tiene una exposición en París y otra creo que en Turín. Aunque está separado de su mujer, que es norteamericana, pasa largas temporadas con ella y con su hijo en un pueblecito que está a unos kilómetros de Palma de Mallorca, un pueblecito muy sencillo, poblado de artistas, al parecer. Me ha invitado a ir allá, pero dudo de poder hacerlo.
Sigo recibiendo La Voz de Galicia, que está mucho mejor informada que La Tribuna de Ginebra o cualquier otro periódico de aquí, y sobre todo trae muchas noticias de Buenos Aires y Chile. Hace unos días sacaron una fotografía del Perón con un aspecto de apolillado que da miedo, diciendo que se va a Rumanía a hacerse un tratamiento gerontológico, lo cual no deja de ser una especie de “pajueranada”, porque el tratamiento de la Dra. Aslam nos lo estamos haciendo todos desde hace mucho tiempo, a título preventivo, porque tan apolillados todavía no estamos. Hace más de veinte años que tengo yo correspondencia con ellos y de vez en cuando me hago el tratamiento, y también Aurora lo emprendió, aunque con pildoritas, porque le tiene verdadero pánico a las inyecciones. También otra vez sacaron como gran novedad una fotografía de una pianista que se acababa de hacer un lifting, una “cara nueva”, como ellos decían. Supongo que sacan esas cosas cuando no encuentran otras con que rellenar un hueco, pero no dejan de asombrarte.
Me tienen prometidos para el sábado los dos discos de que os hablé. El de Grassens es el último y estaba agotado. Así pasaron la canción de los reyes por radio un par de veces, y luego no volvieron a pasarla más, porque como tienen tanto miedo de ofender a los jefes de Estado de otros países... Tanto que está seriamente penada cualquier ofensa pública a cualquiera de ellos. El otro resulta que es de Juliette Greco, cosa rara, porque esa mujer se ha dedicado a cantar las mayores estupideces del mundo desde hace varios años, de modo que no respondo de la clase de canciones que hay en ese disco, a parte de la que se llama “Mon fils, chante”. Os lo mandaré por correo la semana que viene.
Ahora os dejo, porque aprovechando estos días que he pasado en casa me estoy haciendo un pijama “serio”, es decir, sencillo. Todo lo que se encuentra por aquí está lleno de froufrous y de chichis, y no comprendo por qué razón hay que vestirse de idiota para meterse en la cama. Ya veremos lo que sale, porque hace muchos años que no coso en serio.
Y ahora dejo de daros la lata. Ya me avisaréis cuando recibáis los discos, para que me quede tranquila y sepa que no os los robaron por el camino.
Saludos a Rafael y Carmen. Ya sé que estuvo aquí Mireya, porque me escribió. Le contesté, pero no sé si mi carta llegó a tiempo, porque estaba a punto de volverse a América.

Saludos igualmente a Pillado y mil cariños para vosotros.

Amparo

1973-10-19
Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1973
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1973 en 19/10/1973


Ginebra, 29 de octubre de 1973

Queridos Luis y Maruja:

Me había dicho Quiroga que os habíais ido a Buenos Aires, pero hace unos días recibí una carta suya diciéndome que su proyectado viaje a Ginebra quedaba en la nada y contándome que habéis tenido un accidente de auto y que Luis está todavía con una pata tiesa. Supongo que ya estará pasando todo, porque Quiroga no me lo cuenta con un aire de alarma demasiado grande.
Hace mucho tiempo que tenía que escribiros, y no lo hacía precisamente porque tenía que ser largo y no estaba ni en estado de salud ni con tiempo para hacerlo. Aprovecho hoy, día excepcional. Porque resulta que, renunciando a unas vacaciones que me hacían mucha falta y que tenía ya perfectamente programadas para Túnez, me vine a trabajar este mes al BIT para no perder completamente el contacto con ellos. Querían que viniera por más tiempo, pero no puedo porque tengo que volver a las Naciones Unidas el día 1. Dado que la gente aquí traduce seis páginas por día y que yo he estado haciendo un promedio de 30 diarias, me creo autorizada para robarles estos momentos y escribiros, guardándome un trabajo ya terminado para entregarlo por la tarde, y no por la mañana.
No podré explicar las cosas muy detalladamente, porque por carta no se entienden bien y me arriesgo a que me se dé una mala interpretación, pero trataré de resumir lo sucedido desde la última vez que supe de vosotros, que fue cuando Maruja me telefoneó. Ese mismo día, dos horas después, me tuvieron que llevar de urgencia al hospital, porque no podía dar un paso nin moverme. Estaba casi paralizada. Ni podía llegar al teléfono para pedir auxilio. Sólo arrastrándome. Me tuvieron un día entero en el hospital haciéndome toda clase de análisis, radiografías, exámenes, etc. El Hospital Cantonal de aquí es de lo mejor que existe. Los ricachones vienen de todos los países del mundo a que los examinen aquí, en el Hospital. Diagnóstico: el mismo de siempre, el que vengo oyendo desde hace ocho años a todos los médicos y especialistas que he recorrido. Usted no tiene nada, absolutamente nada. Parece ser que son síntomas simbólicos, de carácter neurótico, es decir psíquico. Y que esa última crisis fue provocada por la inminencia del viaje a España. Dicen los médicos y psicólogos que como a una persona que no puede moverse no se la puede hacer viajar, me defendía contra la enorme resistencia interior que tengo a volver a Galicia, el miedo enorme que le tengo psicológicamente a semejante shock, desarrollando esos síntomas simbólicos de imposibilidad de andar y de moverme. Bueno, el hecho es que la cosa fue muy seria y no me ha quedado más remedio que reemprender el tratamiento de apoyo psicoterapéutico, a ver si con paciencia logro vencer mis problemas interiores y sacarme de encima mil cosas que me hacen la vida imposible. Tuve que ir a París por un solo día a arreglar mis papeles, que caducaban. Mi hermano fue a buscarme al aeropuerto y a llevarme hasta allá nuevamente. Fui en agosto, antes no podía arriesgarme a hacer ninguna clase de viaje por obligatorio que fuera.
Ahora las cosas andan mejor. Ya puedo sentarme en una silla, trabajar y hasta ir al teatro. Pero estoy haciendo una vida de soldado. Primeramente, duermo muy mal. Me han prohibido terminantemente acostarme temprano, apago la luz a media noche o más tarde, y después de haberme despertado cinco o seis veces en la noche ya estoy de pie a las cuatro y media o a las cinco. Media hora d gimnasia fuerte. Todos los días que puedo, esto es, casi todos, media hora de natación por la tarde al volver a casa. Tratamiento médico dos veces por semana. Medicinas para poder resistir. Y trabajo, mucho trabajo. Ya veis que la cosa no es nada divertida. Pero veremos si con paciencia, como os digo, logro resolver dentro de mi misma, con ayuda del psicólogo que es un hombre, gracias a Dios, muy inteligente, multitud de problemas que se han ido acumulando a través de los años y que me hacen la vida muy difícil.
Quise mandarle una nota a Pillado sobre una cosa interesante que había cerca de aquí. Os explicaré lo que era, porque a Luis ha de interesarle, y por qué no puede hacer la nota. Hay aquí cerca, pero en Francia, en un pueblecito llamado Plateau d´Assy (más bien se llama así todo el lugar), una iglesia muy interesante. El cura, hace ya de esto bastantes años, decidió hacer algo distinto. En el frente hay un fresco enorme de Leger, dentro de vidrieras de Chagall, de Rouault, etc. Pinturas murales de Chagall y otros pintores. Una pila bautismal hecha por un judío, y todas cosas por el estilo. Es decir, que recurrió a artistas de distintas religiones. El Cristo del altar mayor despertó verdaderos escándalos, y durante cierto tiempo tuvieron que meterlo en una capillita apenas alumbrada, por lo moderno que era. Ahora lo han vuelto a poner en el altar mayor, pero no en el centro. Las tapicerías son excelentes. Este último año decidieron hacer en ese lugar una cosa que llamaron Escultura en la montaña. Diseminaron por los alrededores, en un paisaje verdaderamente maravilloso de montañas y bosques, toda una serie de esculturas. Desde Calder para abajo. Había dos de Otero, de Santiago de Compostela, y varias de un argentino que me parece recordar que se llama Fernández, que además pintó las carreteras de mil colores. También por las carreteras había pintada poesía. Me pareció que podía interesar una nota sobre eso, sobre todo habiendo mezclado en ello un gallego. Allá me fui, pidiéndole a una amiga que me llevara, porque yo no me atrevo a conducir por la carretera todavía, y sabe Dios cuándo volveré a largarme a mis antiguos viajes de kilómetros y kilómetros. Tengo miedo a los vértigos y miedo a los medicamentos que estoy tomando, de modo que sólo utilizo el automóvil en la ciudad. En el camino se nos echó encima una de esas tormentas de padre y muy señor mío que nos tuvo detenidas en un pueblo dos horas y media. Nos decidimos a seguir, a ver si más lejos hacía mejor tiempo. Efectivamente, mejoró, pero ya habíamos perdido la mañana entera. Al llegar allá nos encontramos con que, como os digo, las esculturas estaban en plena naturaleza y desperdigadas a la redonda en trayectos de treinta o cuarenta kilómetros. El auto de mi amiga era viejísimo y no quería subir esas cuestas empinadas. Preguntamos y nos dijeron que parte de las cosas podríamos verlas yendo a pie. Mentira podrida, como dicen los niños. Anduvimos horas y horas y lo que nos decían que estaba a media hora de distancia a pie estaba a dos o tres horas. Total, que lo que vimos fue lo que estaba en el pueblo mismo y algo de lo más cercano. En tales condiciones no se puede hacer ninguna nota, como os podéis imaginar. Me conformé con comprar fotografías y catálogo, que si le interesa mucho a Luis puedo enviarle. No tenéis más que decírmelo. Ya eran los últimos días de esa exposición, si queréis llamarle así, aunque quedarán algunas cosas, como creo que la puerta de Calder y alguna otra cosa más.
Yo, si sigo mejorando de salud o por lo menos manteniéndome, creo que voy a volver a dirigir teatro. Han dejado llegar aquello del grupo a un punto tan muertísimo que va a costarme mucho trabajo echarlo a andar nuevamente. Por otra parte, tanto ha cambiado el teatro en los últimos diez años que todo hay que encararlo de otra manera. Estoy con los preparativos que, como os digo, van a ser largos. He pedido a España que me busquen algunos textos (todos ellos inéditos) que parecen interesar. Habrá que buscar a los autores uno por uno y pedírselos, y todo esto tendrán que hacerlo otros por mí, y claro está que no le dedicarán todo el interés necesario. Será lento. Tengo pensado hacer una adaptación de La Celestina para hacerla estallar por las cuatro costuras, y eso me llevará sólo de preparación varios meses de trabajo. Tengo que ponerme en contacto con gente de teatro de aquí que yo conozco para ver salas, saber con qué puede contarse y con qué material cuentan esas salas mismas. Ahora es muy difícil. Cada vez hay más teatro y más manifestaciones culturales interesantes en Ginebra, y todo está ocupadísimo... Luego se presentará el problema de los colaboradores, actores, electricistas, etc., que como todos trabajan en otra cosa y además no se lo toman suficientemente en serio es una labor de gigantes. De hacer algo, quiero hacerlo bien. Sólo así compensará el esfuerzo enorme que significará para mí. Para hacer tonterías más vale que descanse y aproveche los pocos momentos que me quedan en el día para reponerme. Marta, mi sobrina, que felizmente es excelente y no me da quebraderos de cabeza, si que da trabajo, y como todo cuesta tan horriblemente aquí, no puedo dejar de trabajar porque se va el dinero que verdaderamente da espeluznos. Como no puedo además mandarla a un colegio público (por circunstancias de residencia aquí, etc.) todo me cuesta un ojo de la cara, y luego está lo de Madrid, el colegio de la otra chica y mil cosas más. De modo que no puedo hacer como otros compañeros que trabajan varios meses al año y se dejan otros varios para hacer sus cosas. A mí no me queda más remedio que seguir tirando.
Compré un piano, bueno, pero de segunda mano, para estudiar que es lo que me distrae. Hace cuatro meses que lo tengo, y sentarme a estudiar, lo que se dice sentarme a estudiar, no he podido hasta ahora hacerlo sino cuatro veces. Me descansa mucho y pienso que si algún día trabajo menos, me sería muy bueno haber hecho dedos cierto tiempo para poder estudiar o tocar algo. Pero creo que lo que me sucederá será lo que a otros refugiados que estaban en condiciones parecidas será lo que a otros refugiados que estaban en condiciones parecidas, que trabajaron hasta la víspera misma de su muerte y cayeron como quien dice fulminamos encima del escritorio.
En fin, ya veremos. Ya que estáis todavía por aquí no pierdo las esperanzas de que se os ocurra hacer un viajecito. A Ginebra, quiero decir. Ya sabéis que, aunque un poco apretados, podéis estar en casa.
Dad mil recuerdos a Rafael y Carmen de mi parte.
Cuando tengáis un poco de tiempo y ganas, escribid y decidme si le interesa a Luis que le mande las fotografías de algunas de las cosas de la iglesia de Plateau d´Assy, el folleto con fotos grandes de Escultura en la Montaña y fotos de las esculturas, que se lo mandaré con mucho gusto.
Mil abrazos a los dos, y a ver si algún día, resueltos mis problemas, se define esta situación y se sabe de una vez por todas si puedo o no puedo volver por ahí. Por el momento es no. Tanto el médico como yo lo consideramos un riesgo psicológico excesivamente grande como para andar haciendo pruebas, dadas las circunstancias de mi caso.

Amparo

1973-11-12
Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1973
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1973 en 12/11/1973


Ginebra, 12 de noviembre de 1973

Queridos Luis y Maruja:

Ayer recibí la carta de Maruja y ahora mismo os envío lo siguiente:
Dos postales con la fachada de la iglesia del Plateau d´Assy, con el mosaico de Léger; una foto del Cristo que está en el altar mayor de la misma iglesia y que no tiene letrerito ninguno; una postal con la pila bautismal del escultor Signori; una postal con el mosaico de Chagall que está en el baptisterio; dos postales con dos de los vitraux de Rouault; una postal con la tapicería de Lurcat que está al fondo del altar mayor; el tubérculo y el Cristo de Claude Mary que está en una capilla subterránea de la misma iglesia. Hay muchas cosas más, de las que va reseña en los papeles que están metidos en el plástico (el cual robé en la puerta de la iglesia).
De Escultura en la montaña:
El catálogo grande (no os dejéis engañar por el dibujito que tienen las tapas por dentro del recorrido que hay que hacer, porque cada escultura dista de la otra a lo mejor tres o cuatro horas de marcha a pie. Los poemas estaban pintados por el suelo o en las carreteras con colores. Veinte postales con fotos de las esculturas, que como tienen sus letreritos por detrás no las describo.
Va también un reportaje sobre el Chablais y sus esculturas.
Ahora a otra cosa, mariposa.
Vuestro accidente me recuerda el mío, que tuve la víspera de mi marcha de La Coruña a Madrid, antes de la guerra, y a consecuencia del cual me quedó rota la nariz. Como el shock me dio por reírme nadie me hizo caso ni quiso creer que me dolió horriblemente, y toda la familia se fue al cine. Iba con papá en el coche de un amigo, y esa lluviecita fina nos hizo también patinar, pero nosotros nos fuimos por un barranco y dimos varias vueltas de costado. Nos paró un pino. Tuve bastantes días toda la cara negra, como cuando te operan de la nariz.
Va a escribirle a Luis el chico de Díaz Edreira para pedirle creo que dibujos para un libro. Están editando aquí (pobrecitos, con el dinero de ellos, de unos cuantos jovenzuelos) libros que no se pueden editar en Galicia. Les he comprado seis de las xerografías de pintores gallegos que trajeron para exponer en la sociedad que van a inaugurar uno de estos días (están ellos mismos pintando el local y aún no está terminado), entre ellas una de Luis. Me parece muy buena esa señora o señorita DANS.
Seguiré con el estilo telegráfico porque tengo apenas unos minutos para escribiros. Estamos con un trabajo que es una barbaridad. Por si fuera poco, del BIT no me dejaron salir sin meterme debajo del brazo un libro de 350 páginas para traducir, lo que quiere decir que trabajo, además de todo el día, toda la noche y no paro ni lo fines de semana.
Está aquí Julio Cortázar, que se pasó el otro día cinco horas en casa charlando de lo divino y de lo humano. Os recordamos mucho. Está trabajando por dos meses en la Conferencia sobre la Seguridad Europea.
Ahora viene bastante teatro por aquí, para lo pequeña que es Ginebra. Hemos tenido recientemente un espectáculo de expresión corporal del Estudio 2 del Odin Teatre, que dirige Barba, el que trabajó durante tanto tiempo con Grotowski. Excelente: dos individuos y una sábana y maravilloso. El grupo Pão e Circo del Brasil que había venido al Festival de Nancy y pasó por aquí para poner la Boda en casa de los pequeño burgueses, de Brecht excelentemente y escandalosamente. Acaba de pasar el Bread and Puppet con sus enorme muñecos de seis metros de alto. Aprovechó, claro está, para hacer teatro también en la calle en contra de la guerra. Vendrá este año el Piccolo Teatro de Milán a poner el Rey Lear. Viene el espectáculo Fracasse de París, que es uno de los mejores del año. Mañana iré a ver Gospel por la compañía que lo ha estado poniendo en París. Pasó el Teatro del Ridículo, de Nueva York, que puso una especie de parodia de La Dama de las Camelias, en la que un hombre hacía el papel de Margarita Gautier saliéndosele todos los pelos del pecho por los monumentales escotes. Pusieron además otra obra que era una mezcla de Frankestein y Fausto, también caricatural en la que no faltaba ninguno de los elementos de las películas de terror y con un segundo acto que es la cosa más desvengonzada que he visto en mi vida, y eso que por aquí (sobre todo en la Sala Patiño, que es de la Ciudad Universitaria) ya hemos visto montañas de gentes más desnudas que Adán y Eva en el Paraíso Terrenal. Pero este segundo acto era genial. Resulta que el médico (alemán) que hace unas operaciones “tenebrosas” porque quiere crear un tercer sexo, decide casarse por un ritual sui generis con la dama de compañía de la joven a la que ha atraído arteramente para operarla. Le pone un anillo, dice dos o tres fórmulas mágicas, se aparta de ella, lanza un rugido y se vuelve a tirar encima de ella para arrancarle la ropa, dejándola solamente con una fajita negra que le cubre exclusivamente el estómago, las ligas que sostienen las medias negras bastante cortas y esas medias. De modo que la señora, gorda, blancuzca y celulítica, está en cueros justo por todas partes por donde debería estar tapada. Luego, dando rugidos, se arranca él toda la ropa, tira a la señora encima de una especie de cama o de diván ancho, se lanza sobre ella y comienza la sesión con todas las variantes imaginables y por imaginar y todas las expresiones de asombro y desconcierto y demás imaginables de la pobre señora. Verdaderamente increíble. Yo veía eso tal como estaba, en un escenario pequeño, pero me imaginaba al mismo tiempo un enorme público alrededor que acompañara la escena con rugidos, porque os aseguro que era una verdadera corrida de toros. El público suizo, de estudiante y artista, impertérrito.
Y así andamos por aquí. Hay, claro está, muchas otras cosas más que no os describo, entre ellas los espectáculos del Teatro Móvil que son muy de crítica y generalmente buenos.
Vi hace poco una película estupenda. Se llama El tren rojo y está hecha por un suizo. El tren rojo es el tren que toman los emigrantes italianos de toda Suiza para ir por un día a Italia, gastándose sus ahorros tan difíciles de juntar, para votar por el partido comunista. Banderas rojas, Internacional por todas partes, proselitismo, explicación de los males del capitalismo, etc. Todo esto en parangón y paralelo con la historia de Guillermo Tell representada en una representación campestre, en la Scala de Milán (la ópera) y por un grupo popular estilo commedia dell´arte italiano. Todo entremezclado. Lo que quiere decir el autor a los suizos es que ellos están muy orgullosos de haberse liberado de una tiranía y admiran mucho a Guillermo Tell, pero que estos otros señores que son los emigrantes obreros también están luchando contra un tirano que es el capitalismo y que son tan dignos de respeto como ellos. En el final, que es la representación en italiano, commedia dell´arte, de la historia de Guillermo Tell, el que hace de Guillermo Tell, que se ve que es un obrero, obligado y forzado a disparar contra su hijo (no tiene nada en las manos sino que “hace como qué”, pide que antes le permitan hablarle. Y en una escena estupenda, en primer plano, las caras de los dos de frente al público, empieza a predicarle la revolución violenta y el asesinato del tirano. Luego, efectivamente, dispara contra él la imaginaria flecha y esta vez lo mata, y entonces apuñala al tirano y termina la película dando vivas a la revolución. No me negaréis que para un suizo no está nada mal.
Se que se me quedan mil cosas en el tintero, pero siempre es así. Hay ahora una exposición de Leonor Fini y otra de Tapies, y no sé de dónde voy a sacar el tiempo para ir a verlas, dado mi programa de trabajo. Tengo sobre la mesa doce obras de teatro para leer, entre ellas una inédita de Araquistáin que me la dio Finky, su hijo, para que la leyera, aunque le falta el epílogo que su padre dejó sin terminar. No he podido empezarlas. Aún espero las de España, a ver si me las consiguen.
A ver si podéis poner unas letras antes de iros para acusarme recibo de toda esa postalada.

Mil abrazos

Amparo

Muchos cariños a todos los amigos y mil saludos a los conocidos.

1975-07-15
Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1975
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1975 en 15/07/1975


Ginebra, 15 de julio de 1975

Queridos Luis y Marujiña:

Quiroga acaba de escribirme desde “la aldea” y por él me entero de que estáis ahí, y de que Luis está con una ciática terrible que le impide hasta salir de casa. También yo la tengo. Durante cinco meses fue bastante furiosa, pero ahora es soportable, y aunque supongo que Luis está en buenas manos y sé lo buenos que son los médicos amigos, por si acaso, os digo que la mía proviene de la artrosis, que ha aplastado dos discos de la columna lumbar que pellizcan el nervio, por si no bastara con los seis de la columna cervical que me provocan dolores en el pescuezo y en el brazo. Esto se ha visto, claro está, en las radiografías. Y lo que verdaderamente han hecho soportables los dolores son los masajes que me da un masajista muy bueno, y sobre todo la natación, porque en cuanto la dejo se recrudecen. Os lo digo por si la información vale de algo.
Yo también estoy por el momento prácticamente recluida en casa. Estaba en una buena temporada; los vértigos que me traen constantemente a mal traer parecían desaparecer cuando estando con el automóvil parado vino otro de atrás y me dio un golpe. Como tenía las manos apoyadas en el volante, se produjo lo que los ingleses llaman backlash y los franceses corp du lapin, con una ligerísima conmoción, al parecer, porque el golpe no fue muy grande. Pero el resultado fue la reaparición de los vértigos, con dolores de cabeza. Tuve que quedarme en casa una primera semana, por orden del médico. Reanudé el trabajo, pero no lo pude resistir, y aquí estoy, de nuevo, en casa. Además, lo asustan a uno tanto relatándole las consecuencias a corto y hasta a muy largo plazo de una pequeñísima cosa de éstas que me tienen alarmada. Supongo que me concederán las dos semanas de vacaciones que he pedido luego de esta nueva semana de “permiso por accidente”. A ver si con eso basta. Para los vértigos y demás otros síntomas que me hacen la vida imposible, sigo con el tratamiento de apoyo psicoterapéutico, porque ninguno de los médicos de medicina general ni de los múltiples especialistas en toda clase de cosas que he ido a consultar encuentra nada físico.
¿Qué está haciendo Luis? ¿Cuánto tiempo pensáis quedaros todavía ahí?
Hacedme el favor de dar recuerdos de mi parte a todos los amigos, especialmente a nuestro ilustre Director de La Voz y a los Dieste. ¿Qué sabéis de Mireya? ¿Qué podéis decirme de Arturo? Sobre todo, no dejéis de ponerme aunque sea unas letras, para saber de Luis.

Mil cariños para los dos, de

Amparo

1977-02-13
Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1977
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1977 en 13/02/1977


Ginebra, 13 de febrero de 1977

Queridos Luis y Maruja:

Sin meterme en largos relatos, porque no sé si estáis ahí, os mando esos recortes. Herrera murió el 8. Llevaba años en muy mal estado de salud y en estos últimos había tenido ya varias cosas bastante graves. No sé si en los demás periódicos habrá salido algo. Por radio habló Haldas, escritor y poeta ginebrino que era muy amigo suyo, y creo que traductor de sus cosas, con mucho sentimiento y mucho elogio. De la televisión no sé. La iglesia, en el servicio fúnebre, estaba llena de gente, y vinieron de París algunos viejos amigos suyos. No fui hasta el cementerio porque no sé cómo se desarrollan esas cosas de cremación. Como sé que erais amigos de él, quiero enteraros.
Tenemos un año horroroso de trabajo; nunca se ha conocido un año igual. Ya veremos cómo lo aguantamos, porque se trata además de trabajos dificilísimos.
Mucho me gustaría saber por lo menos dónde estáis, pero supongo que habréis hecho algún arreglo para recibir la correspondencia.

Un gran abrazo

Amparo

[Manuscrito:] Un actor del teatro de Caronge leyó un poema de Herrera traducido al francés, que también fue leído en español. Es el que se llama algo así como La poesía en exilio.
Si me es posible, haré copias y las mandaré a La Coruña, por si acaso.
[Manuscrito na marxe esquerda:] Tuve que volver por segunda vez a Kenya a la Conferencia General de la Unesco. Estuve con Julio y Aurora Cortázar.

1977-05-24
Carta de Seoane a Alvajar. 1977
A Coruña
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Alvajar. 1977 en 24/05/1977


La Coruña, 24 de Mayo de 1977

A Amparo Alvajar
Ginebra

Querida Amparo:

Te debemos carta desde hace meses, la última con la noticia de la muerte de Herrera que nos dolió a todos. Es, a juicio nuestro, una más de las vidas frustradas por el exilio, frustración que alcanza a los que hemos regresado y, por cuestiones distintas desesperamos con el regreso, aunque en nuestro caso, hasta ahora, mientras podemos, regresamos y volvemos. Pero no quiero hablar de esto. Algún día tendremos que renunciar a uno de los dos países. En éste estamos muy contentos con la compañía de los amigos anteriores a la guerra civil, tambien con los otros más jóvenes y que conocimos después, pero de éstos algo nos separa, quizás su indiferencia por el pasado que nosotros vivimos, por el exilio y por los muertos. Nos gustaría mucho que este verano, cuando tengas vacaciones, vinieses a La Coruña. Creemos que te sentirías a gusto y haríamos algunas excursiones por la costa, por las otras ciudades y visitaríamos juntos y con amigos comunes, iglesias y monasterios románicos, o lugares de leyenda como S. Andrés de Teixido, etc. Galicia es bellísima, pero es tambien un país donde no quedan jóvenes, que está políticamente convulsionado como consecuencia de la pobreza de su economía, de su subdesarrollo industrial, pero todo esto debes verlo y juzgarlo por tí misma. De Buenos Aires no queremos hablar, vive un tremendo período político y la muerte alcanza a la gente más insospechada. Pero ahí debes tener noticias constantes por funcionarios o familiares de éstos que acuden a Ginebra. Cuadrado estuvo aquí el año pasado, consiguió su jubilación y regresó a Buenos Aires, no sabemos desde que hemos llegado nada de él. Varela lleva meses en España y aspira a instalarse en París con su mujer, dedicándose a traducciones para editoriales españolas y americanas y a la colaboración en diarios. Yo pinto y grabo. Nuestra vida se repite en cualquier parte donde estemos.
Te recordamos siempre y agradecemos mucho tus cartas. Nos gustaría que vinieses.

Recibe un gran abrazo de Maruja y mío:

[Seoane]
A carta orixinal presenta arriba á dereita un labirinto celta que non se ve con nitidez. Seguramente está impreso por atrás, arriba á esquerda, e enxérgase na cara en que Seoane escribe.

1977-07-03
Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1977
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Alvajar a Luís e Maruxa Seoane. 1977 en 03/07/1977

Ginebra, 3 de julio de 1977

Queridos Maruja y Luis:

Recibí con mucha alegría la carta de Luis, porque hacía mucho tiempo que no sabía ni dónde estabais.
Os haré una brevísima descripción de mi vida, para teneros un poco al tanto. Desde hace cosa de un año que no paro. Primeramente, fui a Manila, a una conferencia del Grupo de los 77 (países insuficientemente desarrollados), preparatoria del cuarto período de sesiones de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo. Luego (claro está que en todos los intervalos he seguido trabajando en las Naciones Unidas, sin un solo día de reposo, desde el día mismo del regreso) estuve en Kenya, en Nairobi, para ese período de sesiones. Luego vuelta a trabajar en Ginebra; luego, aprovechando mis vacaciones, para no perder contacto durante tanto tiempo con la Unesco, vuelta a Nairobi (aquí trabajamos en combinación con el Satélite Sinfonía) a la Conferencia General de la Unesco; vuelta a las Naciones Unidas a Ginebra, sin un solo día de intervalo; luego que las Naciones Unidas necesitan que vaya a Viena a la Conferencia sobre la sucesión de Estados en materia de tratados, de plenipotenciarios, para lo cual hicieron un extrañísimo arreglo administrativo que les permitió “despacharme” a Viena y traerme de vuelta para que continuara mi contrato aquí, que se dio por interrumpido y no cortado. Renuncio a contaros lo que me pareció Viena y lo que me pareció Austria, por falta de tiempo. Ya hablaré de cosas gratas en otra. Aproveché (era la primera vez que iba a Viena) para saludar a viejos compañeros que son ahora jefes en el Organismo Internacional de Energía Atómica, en la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial y en el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. Vuelta a Ginebra a las Naciones Unidas. En vísperas de mi salida para Viena llegó a Ginebra mi sobrina Marta, que tuvo que adelantar su viaje a causa de mi salida para Viena se adelantó en un día, y tuvo la suerte de que le ofrecieran en las Naciones Unidas un pequeño contrato de tres meses, como guía trilingüe, que le convenía mucho. Arréglalo todo, déjala instalada, y sola con su primer trabajo, que es bastante difícil. Vuelvo: que le prologan el contrato y que la asistenta me deja plantada de la noche a la mañana. Desde entonces friego, lavo, plancho, cocino, etc., porque Marta viene muy cansada y tiene que seguir estudiando en casa. Al mismo tiempo, la oficina Internacional del Trabajo me pide que les traduzca un libro. No puedo decir que no, por razones largas de explicar. Ya lo he hecho, levantándome a la una de la noche para trabajar, con dos horas de sueño, y con un trabajo en las Naciones Unidas durante el día verdaderamente agotador, porque lo que se está viendo este año no se ha visto nunca. Tengo forzosamente que cortar mi contrato (cuestiones de reglamento de personal) por un mes, en septiembre, y pensaba que podría tomar vacaciones. Imposible. Primeramente, cabe la posibilidad de que la tomen a Marta más permanentemente, pero no se sabrá hasta finales de agosto, de modo que tendremos que estar pendientes de eso. Segundo, el Organismo de Energía Atómica me mandó ya hace más de un mes un contrato por dos semanas para su Conferencia de Viena, y voy a ir (última semana de septiembre y primera de octubre). Lo mandó con tanta anticipación para estar seguro de que no decía que no a último momento. Por otra parte, el BIT me ha pedido que en septiembre les traduzca uno de sus manuales de educación obrera (que ni han tenido tiempo de decirme de qué trata, que lo mismo puede ser de contabilidad que medicina de trabajo) de 400 páginas, y tampoco puedo decir que no, de modo que me pasaré los días que me quedan libres trabajando 14 o 16 horas por día. Quieren que les traduzca otro a mi vuelta de Viena, e inmediatamente, pero es algo más corto. Me traje de Viena documentación sobre el Organismo de Energía Atómica, porque hace años que no trabajo en eso y hay muchas cosas nuevas, y aún no he tenido tiempo de leer un solo papel. Llevo tres meses sin poder leer más que el periódico. Además, por recomendación del jefe de la División Lingüística de la Oficina Internacional del Trabajo, me llamaron el otro día de la sección de asistencia técnica porque quieren iniciar un nuevo procedimiento de trabajo, que aún están discutiendo, para ver si a partir de octubre o algo así me puedo ocupar de los informes de la Organización sobre los programas de asistencia técnica para América Latina, trabajo que puede consistir en poner en castellano claro los informes de los expertos o en estudiarse expedientes de más de un metro de alto porque la Organización duda de la veracidad de los informes, lo cual significa que hay que hacer el informe. Será un trabajo que estará mal pagado, por comparación con el tiempo que va a llevar, pero les he dicho que en principio sí, porque es un trabajo que me interesa. Claro está que tendré que hacerlo en casa, después de la oficina, y calculan que cada informe lleva, por lo menos, 120 horas de trabajo. Pero esto todavía no está decidido, porque andan discutiendo internamente cuestiones de dinero.
He llegado en estos últimos tiempos a un grado tal de cansancio que a veces me encierro en la cocina y me pongo a llorar, de fatiga. He empezado a tomar un medicamento contra el surmenage que parece ir bien. No es el trabajo lo que me cansa, sino la dichosa casa, porque me hace daño ese tipo de movimientos y me ponen tan enferma que no puedo ni andar por la calle, de mareos y de vértigos. Estaba mucho mejor, porque he descubierto lo que me pasa y estaba tratando de no hacer las cosas que me ponen peor, pero con esta situación de la asistenta retrocedo a pasos de gigante y vuelvo a sentirme muy mal. No se resolverá hasta finales de agosto, y me pregunto si voy a poder aguantar hasta allá. Pero se trata del porvenir de mi sobrina y hay que resistir. La situación temporaria en que está no nos permite alquilar un estudio para ella, porque es muy corto su contrato y no se lo alquilan. Ahora estoy aprovechando que la han dejado libre este fin de semana para que fuera a Normandía en un viaje relámpago, al casamiento del hermano de su novio, para escribiros y escribirle a mi hermano, que hacía seis meses que no le escribía, y como he terminado el libro del BIT para ver si (aunque os parezca mentira) me puedo bañar como Dios manda, y no en cinco segundos, y echarle una mirada al Newsweek de hace tres meses, que lo llevo atrasado. Lo más probable es que sea hoy el único día de vacaciones que tenga, si se le pueden llamar vacaciones a preparar la comida para mañana y planchar ropa, que ayer fue el primer día que hemos visto aquí el sol, aunque no se sabe cuánto va a durar.
Estando en Viena, me enteré por Le Monde del asesinato de dos amigos en Buenos Aires y por el Herald Tribune International de la muerte de Policho Córdova Iturbara. No pude escribirle a Carmen en ese momento porque no tenía allí su dirección. Le escribí al volver a Ginebra. Con quien estoy en relativo contacto es con Clement Moreau. Hace cosa de un año me enteré de que estaban aquí. Nelly hace psiquiatría infantil en Saint Gall, de donde ella es, y Yup tiene cursos en St. Gall y pasa el resto de la semana en Zurich, porque colabora en varias revistas y hace no sé qué otras cosas. Han vuelto a publicar el libro de dibujos sobre Hitler que le costó la nacionalidad, y están preparando un libro de 300 grabados de él, que llevará un largo estudio de Fritz, el escritor suizo que es muy amigo de él y que lo admira mucho. Ha venido a Ginebra (yo no estaba en ninguna de esas ocasiones) para la preparación de algunas obras de Brecht que han puesto aquí. Desde hace un año cambiamos breves cartas y a veces nos hablamos por teléfono, pero todavía no me ha sido posible ir a ver a Nelly y a Tina, su hija, porque las cosas se complican, y ya dice Yup que está bien eso del amor platónico, pero que a ver si nos vemos.
¿Qué está haciendo Luis y cómo estáis vosotros? ¿Y los amigos? Mi hermano está ahora establecido en Tabeayo. Como hace siglos que no le puedo escribir a Quiroga, hacedme el favor de darles a él y a Aida un fuerte abrazo de mi parte.

Cien para vosotros.

Amparo

1985-09-14
Postal de José Quero Molares e a súa muller Manuela Gallar Latorre a Lois Tobío Fernández e María del Carmen Soler Ponce de León, 1985.
Xenebra
Madrid
Orixinal Transcrición

Transcripción da epistola Postal de José Quero Molares e a súa muller Manuela Gallar Latorre a Lois Tobío Fernández e María del Carmen Soler Ponce de León, 1985. en 14/09/1985

14.IX.1985

Tuvimos una gran alegría al veros y charlar un rato con vosotros. Hemos venido aqui a terminar el verano. Manolita se ha sentido peor que de costumbre, de manera que el viaje no se puede decir que haya sido, hasta ahora, un éxito. Os esperamos el verano próximo. Con nuestros recuerdos y afectos
Manolita [sinatura autógrafa]
J. Quero Molares [sinatura autógrafa]