PROXECTO EPÍSTOLAS

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Epístolas
Mencionado/a [3]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
1948-11-02 Mencionado/a
Carta de Serrano Plaja a Seoane. 1948
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Serrano Plaja a Seoane. 1948 en 02/11/1948


2 noviembre 1948

Querido Seoane:

Como te dije en mi última carta, vuelvo a escribirte ahora, con mayor frecuencia, ya que me parece que así debemos hacerlo en relación con nuestros proyectos. Además y no sé bien porque irracionado optimismo, en estos últimos días, tengo la impresión de que todo puede salir bien y de que podemos hacer algo interesante tanto en general como para nosotras.
Y ahora quiero darte algunas noticias de carácter concreto. El domingo –hoy es martes y ayer lunes día 1 fue fiesta, de modo que escribo sin perder tiempo– reuní a todo el grupo de pintores españoles en casa de Gondoy para hablarles del proyecto colateral de la posible venta de grabados y dibujos ahí. Los que se hallaban presentes –pues hay algunos en Estocolmo, que el colectivo pictórico español, desde Praga no para y hace exposiciones generales y particulares en toda Europa– asintieron y estuvieron conformes en dar toda clase de facilidades. En principio, en esta semana, tendré preparado un primer envío que te haré en cuanto llegue a mis manos. Con respecto a esto –yo, por mi parte, trataré de volver a escribir acerca de ello en La Nación– creo que será conveniente subrayar por todos los medios un creciente éxito del grupo español de París el cual no sólo recorre toda Europa, como te digo, sino que está creando imitadores y ya hay –aunque informe y sin la fuerza de manifestación del español– de otros grupos nacionales que pretenden ser de su nación en París, el inglés y el húngaro. Están asombrados de la cohesión del grupo español, de su consistencia y su fraternidad –y de su éxito–, naturalmente, de modo que una agrupación por el solo hecho de que está basada, no en algo externo y ajeno a cada uno de sus componentes, sino en la apreciación general que cada uno tiene por los demás, aunque entre ellos, como es lógico, haya sus cosas, pero que no trascienda afuera. Bueno, todo eso digo, así como el éxito del grupo español de la escuela de París, creo que conviene subrayarlo, tanto por motivos generales como en relación al proyecto de introducir sus cosas –pictóricas, se entiende–, ahí.
En dicha reunión, estaba entre otros, Palmeiro, con quien hablé largamente de ti y de tus proyectos. El me confirmó lo que tú me dijiste que te había escrito, pero se mostró dispuesto a echarnos una mano en lo que pueda. Y en todo caso, se comprometió, formalmente, a prestarle su taller, como vivienda, a tu llegada por un tiempo de socorro, hasta que tú veas y busques algo. Desde luego, te repito que la cuestión vivienda es el hueso; pero si tienes donde llegar, luego algún hotel pensión sin la angustia de tener que encontrarlo el día de tu llegada etc., creo que podrás arreglar por ti mismo lo que te convenga. O en el supuesto de que tengas dinero y de que consideres la posibilidad de instalarte aquí en serio, con plata de ahí, podrás comprar un piso o un taller por el mismo precio, o menos de lo que ahí cuesta ahora, alquilar uno. De todo ello, espero que me hables y que no pese en tu ánimo más de lo debido. Que acaso cuando llegues, pueda yo si nos pusiéramos de acuerdo –que sí que nos pondríamos– intentar buscar una solución común, ya veremos, dependerá de varias causas el que yo pueda estar o no en condiciones de volver a hablarte de esto. Por otra parte y en relación con todo esto, dentro de un mes o dos piensa ir ahí otro del grupo, Parra. Si todavía estás tú ahí, ya le daré cartas para ti o en tu falta para los amigos. Lástima que yo no haya sabido antes ni que el se iba ni que tú persistías en tus proyectos, que de otro modo el te hubiera dejado su taller por el tiempo que permaneciese fuera.
Lo digo porque aun cuando me dijo que ya lo tiene comprometido, quizá no sea imposible volver sobre eso. Y, en fin, aunque yo no sepa decirte ahora cómo, tengo la evidencia de que una vez aquí, tras un tiempo no muy largo, conseguirás resolver las cosas. Te repito que no sé cómo, pero que todo el mundo arregla de modo que tú harías como todo el mundo. Bueno, volviendo al envío, el primero incluirá, por lo menos, cosas de Clavé, Domínguez, Palmeiro, Gondoy, Parra, Manuel Peinado y Viñes, mas, eventualmente –o para el segundo– de Flores, Bores, etc. Luego te mandaré cosas de franceses y de un checo, Sokol, muy bueno que ahora expone aquí con mucho éxito.
Con mayor relación o más directa con lo nuestro, quiero decirte dos cosas: una, que lo de Paralelo 50, aunque todavía no se ha resuelto, está por resolverse y casi con toda seguridad, positivamente. Por otra parte, el éxito de la venta anual de libros que aquí realiza el Comité Nacional de Ecrivains, me ha persuadido de que es el momento para hacer lo que proyectamos: no te puedes dar una idea de lo que fue. Elsa Triolet, por ejemplo, en el transcurso de la tarde, vendió libros por valor de un millón setecientos mil francos. Y así mucha gente. Y como entre lo vendido había mucho, por no decir casi todo, el libro de lujo, ya te figuras que me ha dado una especie de índice de nuestras posibilidades que, aunque nunca sería lo mismo, pero de alguna manera tendría que ver con lo que yo vi. Creo, por ejemplo, que con el ofrecimiento que los mismos pintores me han hecho –ilustrar todos un libro mío– ya podría intentarse un negocio o poco menos, por primera vez en mi vida –o si no es que me equivoco de medio a medio– pero, naturalmente, por el momento y mientras no sepa mejor el estado de tu viaje, no pienso hacer nada sin contar contigo y sin volver a hablar de colecciones, etc. Otro dato de interés general es que Octavio Paz, que está aquí, tiene concluido un libro y quiere editarlo sin que por el momento esté decidido a dárselo a nadie. Otro dato es que el embajador de Venezuela aquí ha resultado ser admirador mío; que el encargado de negocios que estos días va a Praga, es un poeta Otto de Sola, muy amigo mío. En fin, que estoy optimista y que lo que necesito es que me des noticias de ahí.
Lo necesito y con urgencia entre otras razones por la siguiente: Ussía piensa permanecer aquí, un plazo que por lo menos irá hasta mediados de diciembre y quizá más; pero nosotros debemos contar conque quizá no se quede más. De tal modo que hasta esa fecha, pero no más tarde, tengo yo para hablar con él de nuestro proyecto. Mas para ello y en función de las razones que te daba en mi última carta, necesito saber, con la urgencia que se pueda, lo que resolvéis ahí. ¿Has hablado con Coppola? ¿Y Torrallardona? ¿Te parece bien –debo o no hacerlo– que yo vuelva a escribir a Cóppola? Creo que te darás cuenta de que el hecho de que Ussía esté aquí es una suerte grande y que, por lo tanto, en principio no podemos perderla, creo; mas por ello, para dar seriedad al asunto, me parece imprescindible poder ofrecerle algo ya concreto, en marcha, de modo que vea él que la suya sería una aportación a algo y no una mera iniciación hecha sólo en nombre de la amistad, ¿no te parece? Contéstame a todo esto, aunque sea dos letras, pero en las que me digas, escuetamente, lo que hay de cada cosa y lo que tú piensas de ellas.
De mis cosas particulares que te hablé el otro día, dos preguntas. Primera –y para que me contestes un poco abultímetro– ¿cuántos ejemplares de Paralelo 50 crees tú que podrían venderse ahí y en Montevideo, contando con una propaganda más o menos buena y con el hecho de saber que tendría buenas colaboraciones de aquí y de ahí? Ya sé que es muy arriesgado decir alguna cifra, pero de todos modos te agradecería que me la digas para tener una idea. La otra pregunta, ¿has podido hacer algo en relación con los ejemplares del Avila Camacho que te pedía en mi anterior? Creo haberte dicho que me los mandases por avión; pero no estoy seguro de haber dado por supuesto, como es natural, que lo que materialmente suponga ese envío –forzosamente caro– corre por mi cuenta y del modo que tú me indiques. A título de indicación o sugerencia, alguien me ha dicho que la Fama de ahí acepta encomiendas aéreas, las que naturalmente saldrían más baratas que el envío por avión normal, siempre que acepten como encomienda algunos libros. Te agradecería mucho que me tengas al corriente de esto también. Y con ello, creo que por hoy no tengo nada que añadir, sino que estoy deseando recibir carta tuya y, mucho más, saber en qué fecha te embarcas. Muchos recuerdos a los amigos. Y para Maruja y para ti, un abrazo de vuestro

Arturo Serrano Plaja

1961-01-21 Mencionado/a
Carta de Azcoaga a Seoane. 1961
Madrid
Nova York
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Azcoaga a Seoane. 1961 en 21/01/1961

Madrid, 21 de enero de 1961

Luis Seoane
Montevideo 1985, P. 13, Dº 68
Buenos Aires

Querido Luis:

Muchas gracias por la tuya del 29 del pasado, llegada a los cinco días. La echaba de menos, para qué decirte otra cosa, aunque la vida se nos pase como una exhalación. Celebro que estés tan trabajador, tan productivo. En mi caso, después de la traducción de Verlaine que publicó EDAF, y que nos permitió a María y a mí pasarnos todo agosto en Ibiza, no he hecho demasiado. Versos sueltos. Alguna crónica; muy pocas... Y el trabajo fatigante y obligado de la Editorial. Hace días, sin embargo, TAURUS lanzó ESPAÑA ES UN SABOR. A ver si consigo enviártela.
El capítulo quizá más interesante para un “ausente” sea el de recién llegados. En primer lugar, –¡la bomba!–, Mariano Perla, con quien antes de ayer conversé unos minutos en el café, de esa manera un tanto “al paso”, que tú desgraciadamente conoces. Está en Madrid recién llegado, Eduardo Blanco Amor. Hoy habla en el Ateneo, Vicente Salas Viu, a quien no he visto. Javier Farias, vino y se fue. (Lo encontró todo muy mal, para irse a Buenos Aires a esperar la cobranza de su pensión. ¡Conmovedor!). Trata de organizar su vida, después de un extraño premio, Eulogio Muñoa. Me gustaría mucho ver por ésta a Antonio Baltar. Si aún es tiempo, dale mis señas y mi teléfono, aparte mi encargo. De los Dieste, nunca he vuelto a saber una palabra.
Las galerías y las exposiciones madrileñas, por las que me preguntan, no han dado muestras de gran novedad en estos tres meses y pico que llevamos de temporada. Expuso el sobrino de Picasso verdaderas “caquitas”. Se habla de no sé cuantas cosas por parte de la Agrupación de Críticos de Arte, que luego no se hacen. Zurbarán no me llenó como pensaba. Y así como cuatro o cinco cuadros me parecen de lo mejor que se ha hecho pictóricamente en el mundo, muchos de los que incluso son famosos personalmente me decepcionaron... Ayer, inauguró su tercera exposición Pedro Flores en Grifé & Escoda. No sé si porque hizo frío, no fue un alma. Flores, siempre flores... El gitano tenía mucho interés que yo diera una charla en su muestra, para la que había yo pensado el siguiente título: “Cualquier tiempo pasado fue vanguardia”. Pero a la vista de lo que ayer ocurrió, a lo mejor desisto de complacerte...
En cosas literarias, intentó armarse un pequeño alboroto por el premio Barral a un castrista que desconozco. (Todo quedó en agua de borrajas). Se le dio el Nadal a un chico muy joven, del que no tengo muchas referencias... No se ha estrenado nada teatral que merezca la pena, en lo que a lo nacional se refiere. Y todos hicimos un poco el burro en las conmemoraciones unamunescas. En un acto que celebramos en los “Amigos de la Unesco”, Enrique Tierno Galván se proclamó “socialista”. Y el que suscribe, se soltó el pelo con un romance, que fue aplaudido “a la manera de las Casas del Pueblo”. Esta noche se estrena por Paco Rabal una cosa que se titula ¡Muchos payasos! Y nuestro bueno Casona, de regreso de Atenas, proyecta campañas y campañas con sus conocidas cositas. En honor a la verdad, es mucho más lo que se proyecta, lo que se discuta, lo que intimamente se trajina, que lo que sale a la superficie. Aunque...
Te me muestras muy circunspecto respecto a la “realidad argentina”. Aquí está siempre en primer plano, por los corresponsales, y por todo lo presentido alrededor de la operación “Retorno”. Mis comunicantes, que siguen siendo en su casi mayoría argentinos, cuentan y no acaban. Los tilingócratas, encantados con que el dólar esté a 215 en bolsa negra. Los más realistas, cogiendo el petate y yéndose por esos mundos, por aquello de que “pasear” ha sido siempre el deporte predilecto de los argentinos...
Dile a Varela que me debe carta. Cuadrado me envió un libro y le contesté. Debo carta a los Laxeiro, que parece que vienen. A vosotros, os esperamos siempre. El día 1 de este mes, no sé cual de mis hijos, pregunto de repente: “¿Os acordáis que el año pasado estuvimos en casa de Maruja y Luis...?” Porque se os quiere. Particularmente.

Enrique

1963-12-19 Mencionado/a
Carta de Seoane a Varela. 1963
Madrid
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1963 en 19/12/1963


Madrid, 19 de diciembre de 1963

Sr. D. Lorenzo Varela
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Recibí tu carta con el resultado de vuestra encuesta para la distribución de ángeles, con respecto a Índice. Me falta comunicarme con los de esta última publicación, aunque supongo que ya les habréis escrito. Azcoaga estuvo en Alicante pronunciando una conferencia y regresó estos días. Allí encontró con José Súarez que huía de la lluvia de Galicia. Las gentes se pasan una gran parte de la vida huyendo de algo. Clausuré la exposición el domingo día 15, te enviaré una nota especial para la radio del novelista y poeta López Pacheco. El último cuadro que vendí fue al Museo de Arte Contemporáneo, una naturaleza muerta de gran tamaño. Como resumen ahí va la opinión del corresponsal en Madrid del Diario de Barcelona del 7-XII-63: “La exposición de Seoane constituye sin duda una de las más brillantes manifestaciones artísticas realizadas últimamente en Marid”. Y ahora, noticias:
Lauro Olmo, el autor gallego que obtuvo brillante éxito en 1962 con el estreno de La camisa, una pieza teatral cuyo tema lo constituyen los emigrantes españoles en el norte europeo, acaba de obtener el premio de novela Elisenda de Montcada, instituido por la revista Garbo. Se trata de un premio muy discutido al cual se presentaron en el presente año 103 obras de las que fueron seleccionadas 15. Los finalistas fueron, El gran sapo de Lauro Olmo, y Las moscas, de Cati Juan de Corral. En el último momento El gran sapo terminó tragándose a Las moscas.
Una de las exposiciones de la temporada en Barcelona fue la del pintor Pedro Flores, conocido del público de Buenos Aires a través de cuadros suyos expuestos en galerías porteñas. La obtención del premio Ciudad de La Habana en la II Bienal Hispanoamericana y la ostentación de un misticismo que, según dicen, suena a falso, le abrieron muchas puertas españolas. En 1961, terminó la gran decoración de la cúpula del santuario de la Virgen de la Fuensanta, en Murcia, su ciudad natal.
En los salones de la Sociedad Española de Amigos del Arte, de Madrid, se exponen estos días 75 obras de 39 pintores jóvenes italianos, selección organizada por la Bienal de Venecia. El Secretario General de esta institución, Gian Alberto Dell´Acqua y uno de sus seleccionadores presentan en breves líneas la exposición en el catálogo y expresa: “Para algunos de ellos –los pintores– el dato fundamental de la investigación se basa todavía en el ámbito del grande y extenso movimiento de lo informal. En otros es clara la adhesión a poéticas de realismo expresionista que tienden en parte a unirse a propuestas de nueva figuración que emergen del seno mismo de lo informal”. La verdad es que la exposición no difiere demasiado de otras similares realizadas por jóvenes de otros países. En todo caso, debemos señalar la influencia de los recientes neofigurativos de Estados Unidos en algunos de ellos, de Tapies en otros, y de Dadá en los menos, uno o dos. Se destacan los neofigurativos Ugo Attardi, con Andrómaca, un gran cuadro preocupado de matices en el color; Franco Francese, con La bestia encima y A los de Kronstadt; y Sergio Saroni, con Figura en campo verde y Casi un saludo. Casi todo lo otro resulta infinitamente aburrido y nada original.
En una memorias de Adolfo Menjou que se publican estos días en la prensa madrileña narra el gran actor de cine de Estados Unidos el siguiente diálogo:
“Un día –dice Menjou– dije a Adolf Zukov:
-Debería pagarme mejor.
-¿Qué significa esto?
-Nada más que lo que digo: No quiero ser una estrella de menos de 5.000 dólares semanales.
Él –Zukov– se enfureció:
-¿Para qué diablos necesita usted tanto dinero?
-¿Y usted, para qué quiere guardárselo? Respondió Menjou”.
Ejemplo de diálogo eterno, generalmente inútil, y tratándose casi siempre de menos cantidad de dólares, entre actor y empresario, escritor y editor, artista y coleccionista, etc., etc.
En Viena, se anuncia el estreno de una obra inédita de Calderón, El Gran Duque de Gandía, cuyo manuscrito fue encontrado en un viejo palacio por el profesor Vaclav Cerny. El Teatro de Cámara de Viena la presentará el próximo verano en el festival de teatro de la ciudad austriaca de Breganz. Según el profesor Kindermann, Director del Seminario de Historia del Teatro de la Universidad de Viena, “constituye un magnífico ejemplo de obra maestra del arte teatral”.
En un artículo de Gastón Baquero publicado el 12-XII-63 en Informaciones de Madrid, que se titula Hay que incorporar al español los típicos modismos americanos, el autor se pregunta: “¿Se ofenderá alguien si recordamos que así como hay cepas americanas que haciendo el viaje de regreso después de cuatro siglos han salvado y salvan regiones vinícolas españolas, hay regiones idiomáticas de América que pueden ser consideradas como santuarios del idioma y como hablantes más puras de la lengua de Castilla que muchas regiones españolas?”
Éstas son algunas noticias. Otra es de que hoy se estrena en Madrid Los árboles mueren de pie, pero no vale demasiado la pena, ya no es noticia, creo yo. En la próxima te enviaré el resumen del teatro español en 1963 hecho por Marcial Suárez.

Abrazos a todos y otro de Maruja y mío para Marika y para ti:

[Seoane]