PROXECTO EPÍSTOLAS

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17 MENCIóNS A Enrique Rotzait (-1971)

Arquitecto arxentino de orixe xudía. En moitas das súas obras incluíu murais realizados por Luís Seoane. A súa muller foi a artista plástica Perla Rotzait.
Epístolas
Destinatario/a [1]
Mencionado/a [17]
Remitente [4]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
1951-08-24 Mencionado/a
Carta de Salazar Bondy a Seoane. 1951
Lima
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Salazar Bondy a Seoane. 1951 en 24/08/1951


Lima, 24 de agosto de 1951

Mi querido Luis:

Sólo salgo del laberinto de los reencuentros y los saludos de bienvenida, almuerzos, cenas, tes, todo el tráfago del recién llegado. Pude, sin embargo, antes librarme unos minutos y ponerte una postal que supongo llegaría a tu poder, pero necesitaba escribirte una carta, primero, para hacerte llegar mis recuerdos y, luego, para comunicarte algo que, dejando aparte un poco tu modestia, puede interesarte.
Aquí ha estado una profesora yanqui de filosofía que durante una corta estada en Buenos Aires visitó tu casa y quedó encantada con tu pintura. La llevó Ayala y quizá la tengas en la memoria. Ella se ha mostrado sumamente interesada en tus cuadros y me dijo que le gustaría tener uno. El nombre de la profesora es Elisabeth Flower y su dirección, la siguiente: Pennsylvania University, Departament of Philosophy, Philadelphia, Penn. USA. Me pidió que le escribieras para concertar la manera de enviar un cuadro pequeño. No sé, puesto que en su media lengua se expresaba dificultosamente, si la compradora sería ella, otra persona o una institución. La gringa es una estupenda persona, inteligente, y sensible, y he hecho con ella muy buenas migas. No dejes de escribirle y, para ser más expreso, alude a mí. Hazlo (Maruja: te ruego que lo obligues a hacerlo), pues, aparte de significarte unos dólares, la amistad con Elisabeth es un vínculo importante en los Estados Unidos.
En cuanto a tu cuenta aquí, creo que podré girarte algunos pesos, a pesar de que la moneda argentina ha sufrido una baja terrible (0,55 centavos de sol por peso) y nadie quiere venderla. En estos días, tendré una entrevista con el doctor Fernández Soler, el amigo de Frontini, y con él trataré de tu venida. La gente rica de aquí, no sé si por snobismo o afición, está comprando cuadros a todo meter... Es un buen agente y fue quien hizo de Parra una sensación limeña.
La Compañía Nacional de Comedias, que ahora encabeza Nélida Quiroga, ha incluido en su repertorio de este año mi comedia Como vienen, se van y se estrenará, según calculo, a mediados de septiembre. Hasta su estreno, me quedaré aquí, pues me interesa vigilar los ensayos. Los ojos del pródigo ha sido elogiado –su aspecto gráfico, se entiende– muchísimo. Es un éxito más de tu talento, del cual me enorgullezco ser el mejor –por lo menos el más intransigente– propagandista. Escribo mi Rodil (he visitado el fuerte del Callao y lo he encontrado sencillamente hermoso, digno marco pétreo para una tragedia nuestra, americana y española) y algún poema. Recuerdo a los amigos y los extraño muchísimo. Parece que mi naturaleza es la del pródigo, pues donde voy, encuentro seres, como ustedes, por ejemplo, que son mis familiares.

Saluda con un abrazo a la sin par Maruja. Para Arturo –a quien escribiré pronto–, para Girri y Aurorita, para Perla y Enrique, para Frontini, para Lipa y Esther, para todos, mis saludos. Tú recibe el abrazo apretado de

Sebastián

Mi dirección es: Enrique Barrón 984, altos, Lima. Escríbeme.

1952-05-26 Mencionado/a
Carta de Seoane a Cohen. 1952
Bos Aires
Caracas
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Cohen. 1952 en 26/05/1952


Buenos Aires, 26 de mayo de 1952

Sra.
Violeta Cohen
Caracas

Estimada Violeta:

He recibido sus dos cartas y el número 1 de Cruz del Sur. La primera carta y el primer número de la revista los he recibido con un gran retraso y el número 2 no lo recibí, y coincidiendo todo ello con una salida mía de Buenos Aires hacia el sur, de modo que esperaba hacer, cuando regresé, alguna gestión de las que me encomendaba de contestar.
He solicitado colaboraciones hasta la fecha a Alberti al que entregué la carta estos días, a Héctor Agosti, ensayista extraordinariamente interesante, a Laura Onetti, escritora, a Enrique Rotzait, uno de los arquitectos jóvenes más destacados, a Cuadrado, Lorenzo Varela y continúo gestiones. Harían falta más números para poder enseñar, a mi se me quedaron con el primer número. Creo que en plazo no mayor de quince días podré mandar algunas de las colaboraciones. La distribución podría estar a cargo de Cuadrado en Botella al Mar, en Perú 613, a quien hablé de esto, pudiendo Udes. enviar para comenzar 100 ejemplares de cada número, pudiendo disponerse de 15 o 20 de ellos aproximadamente para posibles colaboradores y propaganda. De aquí enviaremos tambien noticias de interés general para América, sobre todo referidas a literatura, teatro, cine, música y arte. Si Udes. quieren me encargaré de centralizar esta labor de corresponsalía.
Recibí con su carta el cheque de Magalí. Ella no nos escribió y tampoco sé bien a la venta que grabados o grabado corresponde. Desearía que me escribiese y me informase.
Tiene que perdonarme Violeta por esta demora un poco involuntaria, en contestar, sospecho que a partir de ahora todo irá bien. A los colaboradores les he ofrecido el precio por su trabajo que Ud. me indica en su primera carta, pago que a mi juicio debe efectuarse a la llegada a esa del original por medio de giro.
¿Cómo van todas las cosas? Yo trabajo mucho, pinto, y en Agosto inauguro una nueva exposición. Tengo ganas de ir a Méjico.
Contésteme pronto y hábleme de planes. Reciba con el abrazo de Maruja el cordial de:

L. Seoane

1952-10-21 Mencionado/a
Carta de Salazar Bondy a Seoane. 1952
Nova York
Lima
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Salazar Bondy a Seoane. 1952 en 21/10/1952


Lima, 21-X-52

Mi querido Luis:

No sé bien cuántas veces inicié esta carta y las cuántas ocasiones enmendé mi falta con una postal. Ello no significa, sin embargo, que os haya olvidado. A Maruja y a ti os echo de menos a menudo. Recuerdo bien en forma viva, toda vuestra generosidad, las pruebas de afecto que me habéis brindado, y lucho todo lo que puedo con mi inveterada pereza para mover la pluma. Discúlpame con tu peculiar indulgencia. No es fácil vivir y creo que estoy condenado a postergar los actos que con más afán deseo realizar. Sigo, a través de las escasas informaciones que me llegan, tus pasos. Sé que has tenido éxito en tu última exposición y eso me ha alegrado como si se tratara de un triunfo mío. ¡Tanto he deseado que se viera en tu obra al gran artista que eres! Pero ello no es fácil. La gente, por envidia, mala fe o prejuicio, tarda en despojarse de sus anteojeras. Tarda, pero, al fin, no deja, ante una evidencia tan definitiva, de hacerlo.
A Arturo le escribí hace unas semanas y en mi carta le consultaba sobre una factura de la Imprenta López que me llegó acá. La carta se la envié a Editorial Nova y, a pesar de que dudo que me conteste, alguna esperanza aliento aún. Dile que lo haga, pues a ti te hace caso. A Alberto, al recibir su último libro, también le escribí. En ambos casos, te mandé especiales saludos. También deben haberte entregado un ejemplar de Rodil que envié con un compatriota que se fue a incorporar a la Embajada. ¿Lo recibiste? De esto hace algún tiempo ya.
Cuántas veces desearía ir –un día sábado, como antes– a tu casa a conversar, discutir, aprender. Esas tardes, esas noches me son inolvidables, Luis. Tu inteligencia viva, nerviosa, tan activa, y la mano cordial y diligente de la sin par Maruja, hacían de esas reuniones un rito amistoso, entrañable. Me queda en la memoria –en la memoria del corazón– todo ello y a veces cierro los ojos para recuperar eso que me parece perdido para mí.
En general, los hombres disimulan estos arranques sentimentales y se entiende que aquí he hecho eso. En fin, que os quiero y os tengo presente. Me encantaría saber de ti por una carta. ¿Puedo esperarla?

Saluda a los Rotzait, a los Burd, a todos los amigos. Recibe para ti y para Maruja el más estrecho abrazo de

Sebastián

Enrique Barrón 984, altos.
LIMA / PERÚ.

1952-12-14 Mencionado/a
Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1952
Bos Aires
París
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1952 en 14/12/1952

Buenos Aires, 14 de diciembre de 1952

Sres. Esther y Lipa Burd
París

Queridos Esther y Lipa:

Hace ya muchos días que debiera haber contestado la espléndida carta que nos enviaron, tan llena de alegría y de entusiasmo. El no poder contestar de igual manera, porque nos sentimos precisamente alejados de toda esa vida que Uds. Van ahora conociendo y que con pequeñas variantes es aproximadamente igual, creo yo, en toda Europa, hace que deseemos fervientemente las cartas que vienen de ahí, de cualquiera de esos países y que luego sintamos una gran pereza para contestarlas. Buenos Aires es una ciudad de seres desarraigados y nosotros somos unos desterrados más que no podemos olvidar ni esconder nuestro destierro, lo recuerda nuestro acento, nuestras preocupaciones, y los demás se encargan tambien, a veces por maldad, de recordárnosla. Cada hombre está en esos países de alguna manera afincado a la tierra, pueden tener una vida sórdida, ser sórdidos ellos mismos, pero su vida es una vida humana con un sentido oculto en cada uno que le orienta hacia la colectividad. La obra de sus manos está destinada al hombre para hacerle gozar o para herirle pero es una obra humana. Todo aquí es demasiado nuevo, recién estrenado, para que tenga ese calor, el calor del uso, de la costumbre que tiene una ciudad europea adaptada por los siglos al hombre y que París tiene como tantas otras y más que algunas. Pasear por sus calles, bordear el Sena, detenerse junto alguna pequeña iglesia gótica o románica, lo mismo que pasear por sus avenidas construídas en el siglo pasado, o pasar una tarde en ese jardín tan solitario y silencioso a pesar de estar en el centro mismo de la ciudad, como es el del taller que perteneció a Delacroix, vale bien el viaje a esa, aunque no hubiese museos, teatros y cafés, basta sólo ese aire gris, esa vieja atrabiliaria, tallada como una gárgola que pasea la calle, ese mendigo que podemos ver que aunque lo sea no dejó de ser hombre por serlo. Pero además están los museos, y los espectáculos y los cafés. Ahí están reunidas en los museos las obras de centenares de generaciones hechas cada una de ellas con amor y con sabiduría, con ese saber que se viene transmitiendo de maestros a aprendices y que para nosotros los pintores, los artistas plásticos en general, es la verdadera escuela. ¿Qué puede enseñarnos nadie más que esas esculturas egipcias o asirias, románicas o góticas con su sola presencia? Por mi parte participo, Lipa, de su misma admiración ante ellas y creo sinceramente que la escultura desde entonces no ha hecho más que retroceder o por lo menos no hacia delante un solo paso hacia delante. ¿Cómo podemos comparar el móvile de Calder, puro juego gracioso e intrascendente por bello y decorativo que él sea, con el sarcófago tallado a que Ud. Se refiere? Algunos dicen que cada época lleva consigo un estilo y no es verdad, porque en cada época se cruzan y chocan uno o más estilos y el de Calder, y este es un ejemplo, no es el estilo de nuestra época sino uno más entre muchos que quizás mueran dentro de cinco, diez, veinte años y pasen al capítulo de curiosidades. En Buenos Aires estamos iniciando nuestra época Calder, una fiebre que durará seguramente algún tiempo, todo el tiempo que tarde en llenar el marcado de monografías de algún otro escultor más reciente o haga Romero Brest un viaje al exterior para beneficio de sus discípulos; e iniciamos nuestra época Clavé en pintura y todo lo que en éste pintor es personal, lucha consigo mismo, pasa a ser en las galerías de esta capital del dominio común por la ligereza torpe de algunos que fueron últimamente a París y que no vieron lo que Vd. Vió porque estaban excesivamente preocupados por la novedad, la moda, que en el arte tiene sus raíces en el fondo de la historia y que Marc-Chagall o Picasso, o Rouault han venido encontrando sus medios y sus soluciones en el estudio de las obras del pasado más que en ninguna otra fuente. Picasso sobre todo ha extraído lecciones, las más fecundas del arte de nuestros días a mi juicio, precisamente del pasado.
Aquí hubo una buena exposición de dibujos y óleos de Spilimbergo en la que se destacaban a mi juicio los dibujos, firmes, vibrantes de línea, expresivos que ahí, en París, hubiesen alcanzado verdadera resonancia. Y casi nada más, una exposición del grupo “La Jaula” que como este apelativo se encarga de revelarnos nos dá cuenta de un grupo de artistas encerrados por propia decisión en puras fórmulas, en reglas consideradas actualmente muy “art d´aujour´hui”, en general bastante mal digeridas y de las que se copia la apariencia externa. Una buena exposición del grabado alemán “degenerado” en la que se destacaban los expresionistas. Ahora a fin de año en Plástica y en Bonino un mercado de las pulgas de objetos viejos antes de su estreno en donde en Bonino hay algunas realizadas por mí de las que me arrepiento, por ellos mismos y por haber aceptado entrar de esa manera en esa especie de comercio al menudeo.
Estoy bastante de acuerdo en lo que Vd. Dice refiriéndose a Lhote, ejemplo de pintor que cada día se desvanece más a pesar de su perfecto conocimiento de todas las reglas, pero esto que como pintor no ayuda a su obra le hace útil, a mi entender, como maestro.
En resumen, estamos aquí envidiosos de Vds. Y esperando pacientemente irnos a nuestra vez mientras sea tiempo. Por mi parte trabajo lo que puedo, hice algunos cuadros nuevos y estoy contento, sino de los resultados, de trabajar. Estos días a pesar del tiempo desigual lucen los árboles y las flores de Buenos Aires, los jacarandás de la calle Santa Fé y de Caballito Sur, los paraísos y las retamas. A Perla y Enrique los vemos a menudo y a Vds. Les extrañamos mucho. Perla nos cuenta de Vds. Y por ella vamos recordando de París todo lo que Vds. Ven. Nos alegró mucho que hubiesen simpatizado con Angeles Ortiz que es un espléndido amigo además de ser un gran artista.
Este mes saldrá el tomito de retratos de Botella al Mar, les enviaré un ejemplar tan pronto como salga. Bueno, creo que por el momento esto es todo. No se olviden de nosotros y a Lipa le recuerdo además el encargo de [Le] Crapouillot, si tienen tiempo y ganas de hacerlo. Un gran abrazo nostálgico de:

[Seoane]

1953-01-20 Mencionado/a
Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1953
Bos Aires
París
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1953 en 20/01/1953


Buenos Aires, 20 de enero de 1953

Queridos Esther y Lipa:

A través de las cartas a Perla y Enrique venimos siguiendo las inquietudes de Uds. en Francia y alegrándonos por cada nueva sorpresa que experimentan, por cada nuevo conocimiento que entablan. De aquí no podemos contarles nada que Perla, según parece en su afán de relatora de los hechos diarios, no hubiese contado. Todo está aproximadamente lo mismo que cuando Udes. marcharon y ningún acontecimiento importante altera la normalidad de la vida porteña. Por mi parte continúo trabajando con el ritmo parecido a cuando Uds. se fueron y tengo algunos cuadros nuevos de los que no sé hasta ahora si estoy o no contento. De momento siento, más que satisfacción por el resultado de mi trabajo, el placer del trabajo por sí mismo. Un hallazgo por minúsculo que sea se va encadenando a otro y el resultado puede ser esa misteriosa X que los matemáticos inventaron para intrigar a los profanos y cuyo significado uno mismo con el trabajo trata de ir descubriendo. A veces resulta sorprendente como uno se encariña con hallazgo de apenas importancia y que puede malograr, o que a veces malogra, el propósito inicial; pero en esto reside la parte de aventura, y de ventura, que tiene el trabajo intelectual, la parte gozosa que no puede arrebatarnos nadie. La gente en general, no comprende que buscar esa misteriosa X sea más aventura, y en oportunidades a lo largo de una vida de más riesgo, que escalar una montaña inédita para los pies del hombre de los Andes o de los Alpes o que adentrarse en el interior del África desconocida y es que a la aventura intelectual le falta aquella parte de decoración, de teatro, de argumento, que los hombres amamos. A veces el resultado puede ser otro, pues el destino, o la fatalidad, o lo que sea, puede jugarnos una mala pasada, descubrir América en lugar de las Indias Orientales y en este caso desconoceremos siempre el significado de la misteriosa X.
No sé porque (sic) escribo todo esto, pero ya está hecho y así queda. Mi propósito inicial era el decirles otra vez que nos alegramos de que lo pasen lo mejor posible y que tarden lo que puedan en regresar, aún contra nuestro deseo de verlos, y presentarles a Maria Rosa Vaccaro, una de las propietarias de la Librería Letras de esta y a quien creo que Uds. conocen, gran amiga nuestra y de quien no vamos a hacer el elogio, pues ella misma, por su simpatía, por su llaneza y por su generosidad, se abre el camino a las amistades más hondas.

Y enviarles por ella el abrazo cordial y siempre amigo de Maruja y mío:

[Seoane]

1953-01-27 Mencionado/a
Carta de Frontini a Seoane. 1953
Pequín
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Frontini a Seoane. 1953 en 27/01/1953


Pekin, 27 enero de 1953

Querido Seoane:

Aquí estoy, desde Moscú. Maravillado. Un pueblo estupendo, cordial. Un mundo nuevo. Con un aire a familia que atrae. Gentes como no he visto en otra parte. Sencilla y con el corazón en los ojos. No puedes imaginar que variadas y profundas emociones estoy viviendo. Porcelanas, estampas antiguas, imágenes, etc. Sobre el pasado, un futuro que se construye a pasos agigantados. La tierra es como la nuestra. El Sol y el paisaje como en estas viejas estampas. Las mujeres sonríen con una gracia y una levedad enternecedora. Estudiamos todo lo que queremos. Estaremos un mes y viajaremos por el norte y noroeste. Los chinos son señores. Suaves, respetuosos y agradecidos por nuestra presencia. Nung es un pueblo conmovedor. ¡Y como comen, por Dios! Dos mil años o más hoy detrás de esta comida que llevamos a la boca con los clásicos palillos.

Cariños a Maruja y un [escrito na marxe esquerda:] abrazo para ti. Por favor, entrega esta tarjeta a Rotzait.

Norberto

[Anexo.]

LES TRESORS CULTURELS DES GROTTES DE TOUENHOUANG
Ces fresques et sculptures sont la création collective du peuple laborieux chinois dans une période de plus 1.500 ans, et offrent une description fidèle des instables conditions de vie de cette période.
Les premières fresques datent du milieu du IVe siècle au temps des Dynasties du Nord et du Sud. Touenhouang était devenu à ce moment là non seulement le centre d´affluence de l´influence artistique de l´Indebouddhiste, mais aussi la base pour la propagation de la culture chinoise à l´étranger. Dans les fresques de Touenhouang se retrouvent les traditions tant chinoises que hindoues.
Une influence hindoue prononcée peut être décelée dans la fresque Histoire de la vie du roi Sivi. On dit que le roi Sivi s´était tailladé un morceau de chair sur sa cuisse pour racheter la vie d´un oiseau blessé par un vautour. Ne pouvant pas résister à la douleur, il tomba évanoui et mourut.
Telle est l´idée de sacrifice propagée à dessein par les seigneurs de guerre de la Dynastie Wei du Nord, pour persuader le peuple à accepter plus promptement les sacrifices que celui-ci était appelé à faire dans les guerres incessantes de cette époque.
La culture féodale atteignit son apogée à l´époque de la Dynastie Tang. Les fresques de cette époque dépeignent le travail d´édification de la Dynastie, les banquets extravagants des dignitaires et le labeur des haleurs. Le loisir et la richesse demeurent côte à côte avec le labeur et la misère. Un poète de la Dynastie Tang dit en ces termes:

A l´intérieur des portes laquées en rouge,
Répand le fumet des viandes et des vins,
Cependant, dehors, sur les routes,
S´étalent les os de ceux vaincus par le froid.

Les guerres et les famines caractérisent également la période des Cinq Dynasties et les premières années de la Dynastie Song. Touenhouang qui se trouve dans le lointain Nord-Ouest n´était pourtant pas troublé par ces calamités. Deux fresques de cette période: Labourage, récolte et vannage et La traite et la cuisson du lait dépeignent une vie de paix et de travail créateur, la vie d´un peuple se consacrant à la production agricole.

THE CULTURAL TREASURES OF THE TUNHUANG CAVES
The murals and sculptures are the collective creation of the Chinese labouring people over a period of 1.500 years, and present a faithful portrayal of the changing conditions of life during this period.
The earliest paintings date from the mid 4th century at the time of the Northern and Southern Dynasties. Tunhuang at this time became not only the centre for the influx of Indian Buddhist artistic influence, but also the base for the spread of Chinese culture abroad. Both Chinese and Indian traditions are to be found in the Tunhuang paintings.
Marked Indian influence is to be found in the painting The life story of King Sivi. King Sivi is said to have cut off a piece of flesh from his thigh to redeem the life of a bird wounded by a vulture. Too delicate to stand the pain, he fell to the ground in a swoon and lost his life.
Such was the idea of self-sacrifice deliberately propagated by the warlords of the Northern Wei Dynasty, in order to induce the people to accept more readily the sacrifices which they were called upon to make in the continual wars of the period.
Feudal culture reached its zenith during the Tang Dynasty. Paintings of this period portray the constructional work of the dynasty, the extravagant banquets of the dignataries and the toiling of the boat trackers. Wealth and leisure exist side by side with toil poverty. In the words of a Tang poet:

Inside red-lacquered doors,
Wafts the fragrance of meat and wine,
While on the roads outside,
Lie the bones of those frozen to death

Wars and famines also marked the period of the Five Dynasties and the early years of the Sung Dynasty. Tunhuang, however, in the remote Northwest, was undisturbed by these calamities. The paintings of the period, Ploughing Harvesting and Winnowing and Milking and boiling milk, depick a life of peace and creative labour, the live of a people devoted to agricultural production.

1953-02-07 Mencionado/a
Carta de Frontini a Seoane. 1953
Shanghai
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Frontini a Seoane. 1953 en 07/02/1953


Shanghai, 7 de febrero 1953

Querido Luis:

Aquí, de paso, con las gentes y las cosas en tránsito, en cambio. Los viejos edificios ingleses o los franceses, hoy museos, palacios de cultura para obreros, centros políticos. Rocas, marfiles, porcelanas, sedas. Cinco y pico millones de trajecitos azules. Con sol, con clara luz blanca, con leves verdes naturales, con ríos hijos del Yant-Se-Kiang. Arroz, naturalmente. Y sobre todo, la amplia, esperanzadora, humorística, sonrisa de chinos y chinas. (China, es palabra japonesa). El babel donde estoy se llamaba (oh, tiempos de Colón!) Katay; y en la URSS se la llama Kitay. (Aquí, el nombre es Chong-Ki). Es esta una experiencia que se está haciendo sin tapaderas. El pueblo dirá, pues, algo de gran sentido humano. Ha sufrido mucho, ha tenido muchos muertos. Pero la liberación la sienten hasta los niños. Los chinos hacen las cosas a su manera, no reniegan de su tradición que es riquísima en artesanía, y mientras construyen modestos y eficaces barrios obreros, montan, como aquí, un museo encantador. La revolución la hacen lentamente, pero todo el pueblo la va haciendo. La reforma agraria ya está hecha. Y por donde se mire el país, todo aumenta. Sobra comida, y la gente está toda vestida, aunque con simplicidad. De aquí en adelante habrá que establecer contactos frecuentes entre este país y los de Latinoamérica. Ya dejamos algo planteado.

Cariños a Maruja, un abrazo fraternal para ti. (Saludos a los Rotzait).

Norberto

1953-05-04 Mencionado/a
Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1953
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1953 en 04/05/1953


Buenos Aires, 4 de mayo de 1953

Queridos Esther y Lipa:

Hace mucho tiempo que les debemos carta y debería hoy comenzar ésta con la obligada disculpa, sino fuese que no tengo –mejor no tenemos Maruja y yo– disculpa alguna. Ni siquiera recuerdo en este momento si les agradecí el envío de los libros aunque estoy seguro de haberle ofrecido a Perla y Enrique el importe de ellos para que se lo hiciesen llegar, sé por experiencia propia lo que es hacer encargos que cuestan dinero estando fuera y no quisiera de ninguna manera haberles molestado y serles además gravoso. Me gustaría, pues, que le dijesen a Perla o Enrique el importe de ellos y le ordenasen que me admita ese dinero.
De Buenos Aires no tengo apenas nada que contarles que Uds. no conozcan. Todo continúa igual y nuestra vida viene siendo la misma de siempre. Pinto no sé si adelantando algo o no. Tengo algunos cuadros nuevos de los que estoy contento hasta ahora, veremos en el futuro. La lucha bastante elemental y primaria entre abstractos y figurativos parece haber amainado en los meses de verano. No se habla tanto de eso o por lo menos no me entero. A los abstractos, por un número de la revista de Maldonado1 [Nueva Visión] que leí últimamente, continúa obsesionándolos la idea de un arte cosmopolita olvidando que la naturaleza no puede hacerse cosmopolita y que fatalmente al hombre lo modifica el ambiente que lo rodea, quizá fundamentalmente la cantidad de sol que le alumbra, que por algo sin proponérselo el artista o el escritor, o el músico, los caracteres particulares de su arte vinieron entroncándose con los de su pueblo. Sin saberlo ellos e incluso a pesar de ellos. Pero Ud. Lipa sabe más de eso que yo pues es Ud. más sensible a la música, el arte más abstracto de todos y sin embargo las características nacionales –no nacionalista, esto es otra cosa, el arte el gran arte nunca es nacionalista–, se vienen marcando a pesar de los autores.
Buenos Aires continúa creciendo y sus árboles, barrios y parques están en su mejor época, pero por Perla sabrán incluso como está en cada semana el rostro urbano de la ciudad. Pasamos unos días preciosos en Miramar con Perla y Enrique los últimos días, y el mar nos hacía desear emprender cualquier viaje, ir hacia no se sabe donde, pero en primer término a Europa, en esta época más que nunca Europa, desnuda, y sobre el toro furioso como en la mitología antigua. Sabemos que dentro de pocos días comienzan su gira por el resto de Europa. Quisiéramos que en España fuesen a Galicia, a Santiago de Compostela. Para Madrid creo que Maruja les va a pedir que vean a su hermana, yo tengo en esa muchos amigos, pero no estoy en contacto con ellos desde hace quince años y de algunos no sé siquiera si han cambiado. Pero en Galicia quiero que vean de mi parte y yo les escribo anunciándoles su visita, a Carlos Maside y Ramón Piñeiro en Santiago, (Maside. Vive en Rua del Villar 42). (Piñeiro, Bar Conde, Fuenterrabía, nº 1). En Vigo a Francisco Fernández Del Riego, calle Progreso, nº 12, 5º izquierda. Maside es pintor y Uds. me oyeron hablar de mi admiración por él en Buenos Aires, es además una persona extraordinaria. Del Riego y Piñeiro son escritores, con una obra hecha en la adversidad y los dos son además grandes personas. Los tres serán amigos de Uds. inmediatamente, les presentarán a amigos comunes a ellos y a mí y les harán comprender ese país que estoy seguro les ha de resultar distinto a todos los otros de España, en una gracia aldeana que los siglos consolidaron. A los tres le escribo estos días anunciándoles la visita de Uds.

Por hoy reciban el gran abrazo de Maruja y mío con la expresión del cariño de su amigo:

[Seoane]

1 Tomás Maldonado, director da revista Nueva Visión

1954-09-16 Mencionado/a
Carta de Fernández del Riego a Seoane. 1954
Vigo
Bos Aires
Orixinal Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Fernández del Riego a Seoane. 1954 en 16/09/1954

Vigo 16-set. 1954

Querido Luis:

Hace un par de días que llegamos a Vigo, y quiero apresurarme a poneros estas líneas, para deciros con cuanto cariño os recordamos, y la inolvidable impresión que traemos de vuestra compañía. Unos momentos antes de partir el barco nos dimos cuenta de vuestra ausencia, y llevamos el tremendo disgusto que podéis imaginaros. Preguntamos a todo el mundo por vosotros, y nadie supo darnos noticia. No sabíamos que pensar, ni a que atribuir un hecho así, y nos invadió una inmensa amargura. Sólo en el momento en que fuimos al camarote, nos dimos cuenta, al encontrar la nota que nos dejásteis, de las razones que os incitaron a iros sin despediros. Creednos que, de todos modos, nos dolió mucho no poderos dar el gran abrazo que pensábamos.
El viaje ha sido demasiado largo, sobre todo la etapa de Bahía a Las Palmas. Sin embargo, lo hemos hecho felizmente, y llegamos aquí sin ninguna novedad. Ya entregué a sus destinatarios, los libros de poemas dedicados. Tanto a Piñeiro como a García Sabell les han producido una enorme impresión. Supongo que a Maside, cuando se lo entreguen, le ocurrirá lo mismo. Me prometieron los dos hacer un artículo para la prensa de aquí, y excuso de decirte que cuando se publiquen, te las remitiré inmediatamente. También les han entusiasmado el cuadro y el libro de estampas que, con toda generosidad, me regalaste. No sabremos como agradeceros nunca la prodigalidad en las atenciones que con nosotros tuvisteis. Pienso que en este caso huelgan las palabras, pues estáis siempre vivos en nuestros sentimientos. Sólo ansiamos que podamos vernos pronto de nuevo, esta vez en Galicia, para que podamos resucitar las inolvidables horas que pasamos a vuestro lado. También recordamos con gran afecto a todos los amigos que, en muchas ocasiones gratísimas, nos acompañaron; a Lorenzo y Marica, a Novoa y su mujer, a Esther y a Lipa, a Enrique y Perla, a Torres Agüero y su mujer, y a todos los demás. Transmitidles muchos saludos de nuestra parte, y ya cuando esté un poco más holgado de tiempo les escribiré.
Aquí hemos charlado mucho de vosotros dos, y todo el mundo os quiere y os admira como merecéis.
Con estas líneas, escritas sobre la marcha y con la emoción de los días pasados juntos, te envío los dos poemas de maldizer que te había prometido. Más adelante, cuando pueda ir sacudiendo el cúmulo de trabajo atrasado que aquí encontré, te escribiré extensamente e iré cumpliendo todos los encargos que me hiciste. Mostré a varios los números de la revista, incluso el tercero, que ya tenía en casa a mi llegada, y a todos les han gustado muchísimo. Creo que aquí se lograrán bastantes suscriptores, pero sobre ello ya te hablaré en la próxima carta.
La monografía de Maside ya está terminada. Sólo faltan las reproducciones en color, porque la cuestión de las tintas ha sido un verdadero problema. Ahora se han conseguido unas bastante buenas, y sólo falta que Maside dé su conformidad para que el libro salga a la calle. Parece ser que tu monografía saldrá antes de la de Eiroa por la dificultad que se encuentra para localizar las fotografías de varias esculturas de éste. Conviene que mandes inmediatamente que te sea posible, los grabados para color de dos de tus cuadros, del mismo modo que hiciste con los de Maside, pues García Sabell ya está en trance de terminar la monografía.
Y nada más por hoy. Lo mismo Evely que yo os recordamos con enorme cariño, y extrañamos vuestra compañía. Recibid un abrazo muy fuerte y muy expresivo de

Paco
[Manuscrito]
Mis queridísimos amigos: Ya Paco os dice la pena tan grande que hemos sentido al no podernos dar el abrazo que deseábamos al separarnos de vuestro lado, aún hoy me duele. Os recordamos constantemente y no olvidaremos jamás los días tan agradables que pasamos en vuestra compañía. ¿? en Las Palmas, os compré las blusas y creo que para finales de octubre tengo quién las lleve. Pensad siempre en que tenéis que venir a estar una temporada grande con nosotros. ¡Qué alegría! A todos esos simpáticos amigos que hemos conocido a través de vosotros, dadles muchos cariños y vosotros recibid miles de abrazos de vuestra amiga que no os olvida.
Saludos a vuestros padres y hermanos.
Evelina

1954-10-19 Mencionado/a
Carta de Seoane a Fernández del Riego. 1954
Bos Aires
Vigo
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Fernández del Riego. 1954 en 19/10/1954

Buenos Aires, 19 de octubre de 1954
Sr. D.
Francisco F. Del Riego
Vigo.
Querido Del Riego:
Como siempre, es irremediable, estoy en deuda contigo. Desde vuestro regreso, hace aproximadamente dos meses, nosotros nos sentimos nuevamente lejos, muy lejos de Galicia. Con vosotros, hablando de los amigos, despertando recuerdos comunes, nos sentíamos como si los años no hubiesen pasado, como si todo hubiera sido lo mismo que entonces y al separarnos nos fuésemos cada uno a nuestra casa compostelana para encontrarnos al día siguiente a la puerta de la Universidad, o en el café, o en el paseo de la Rúa del Villar. Con vuestra visita venía para nosotros un poco Galicia y el pasado, ese pasado que es para los emigrados oro brillante que como el avaro acaricia en la soledad; sumando recuerdo a recuerdo y gozando en cada uno aún en el más triste, aquel que hubiésemos querido olvidar y que ahora, capitalizado en nosotros, nos alegramos en su tristeza no haber olvidado. Cuando marchásteis fuimos al barco para daros a Evelina y a tí un abrazo de despedida. Cuando marcharon Elena y García Sabell hicimos lo mismo y pasamos algún tiempo fuera de nosotros, doliéndonos en ese abrazo que parecía separarnos. No queremos desde entonces que ni siquiera un gesto cariñoso nos separe de Galicia y de vosotros, los amigos. No tenemos que despedirnos. Estamos en Galicia, jamás hemos salido de ella, estamos con vosotros, con todos desde donde tenemos que estar, desde nuestras acciones y desde el fondo de nuestro corazón. Si no la vemos con nuestros ojos es por una incapacidad física, si no sentimos vuestra voz, es por lo mismo, Galicia y vosotros estáis en nosotros y ningún abrazo puedo separarnos.
Supongo que desde entonces habrás ido teniendo noticias de los asuntos de la colectividad. Aquí estuvo Rof Carballo; antes conseguí que la Asociación Medica del Centro Gallego le invitase y se adhiriese a esta invitación la Junta Directiva de la entidad. No pudo pronunciar algunas de las conferencias proyectadas para un público extenso y tuvo que limitarse a las médicas. De cualquier manera su estancia constituyó un éxito. Todo lo otro marcha lo mismo. Se van a editar los libros de poemas de Pura Váquez y de Valentín. Por mi parte continúo con la revista que va obteniendo cada día más éxito y más número de lectores y hace dos semanas iniciamos con motivo de su propaganda, con su nombre, una audición radial de media hora que se transmite todos los domingos a las dos de la tarde (Galicia Emigrante). Necesito que me envíes colaboraciones, reportajes, notas gráficas y literarias que sean inéditas. El artículo de Piñeiro que gustó mucho, era conocido de algunas gentes de aquí porque se había publicado –y yo no lo sabía– en una revista de esa y nosotros lo dimos como original. Tu tienes la lista de encargos. Te ruego que le dediques algún tiempo libre, necesitamos retratos y breves autobiografías o biografías. Diles a todos los amigos que colaboran en las condiciones de que te hablé. Todo es muy urgente pues los meses pasan rápidamente y la revista “traga” en cada número su buena cantidad de colaboraciones. Envíame un reportaje sobre “Galaxia” con fotografías.
En cuanto a mi monografía ya encargué las reproducciones en color, espero enviartelas, dentro de un mes aproximadamente que es cuando pueden estar impresas, por algún propio si tengo la suerte de encontrarlo para entonces. Me gustaría que cuando tuviéseis las pruebas de los grabados que van, me las enviáseis para ponerle los nombres de los propietarios de los cuadros y tambien añadir la fotografía de algunos cuadros últimos, así como del mural que tu viste. Dime si estoy a tiempo. Estoy deseando que salga, tengo una gran curiosidad por verla y me parece que ella, gracias a García Sabell y a vosotros, me incorpora nuevamente a Galicia. Agradezco esta reincorporación con toda el alma.
Te ruego que las noticias que me dabas en tu última carta –la tercera que recibí, no la cuarta como tu dices– sobre los libros proyectados por el Centro Gallego, le des cuenta de ellas al Presidente de la Junta Directiva, alegando el encargo que te hizo la sub-comisión de Ediciones y publicaciones de la Comisión de Cultura. Tambien es urgente que lo hagas para oficializar todas esas gestiones emprendidas. A mi me parece muy bien. En cuanto a los dibujos de los diarios, de Daniel, no hacen falta a mi juicio clisés, sino fotografías de ellos con los pies al dorso. Lo otro sería muy lento y su envío tendría más dificultades. De todas maneras pueden dejar esto para decidir por esa subcomisión. Haré que ella te conteste inmediatamente y que trate de habilitar fondos para estos trabajos, debiendo referirte en la carta tambien a esto.
La Guía de Galicia de Otero Pedrayo no la recibí, espero que quizá llegue alguno de estos días. Recibí las direcciones y los poemas de maldizer. Me alegró mucho el saber que había gustado mi carpeta y el libro de Varela, sobre éste me gustaría que enviases los recortes de las notas que se publiquen para entregárselas a él. Todos los amigos os recuerdan con cariño, Lorenzo y Marika, Novoa y Chela, Rotzait y Perla y Lipa y Esther. Todos tienen para vosotros un recuerdo y preguntan noticias vuestras.
Pongo punto final a esta carta para no hacerla interminable. Continúo pintando, estos días intensamente, y tengo algunos proyectos de los que te daré cuenta.
Recibid Evelina y tu de Maruja y mío el fuerte abrazo de vuestro amigo:
Seoane

1954-11-23 Mencionado/a
Carta de Seoane a Fernández del Riego. 1954
Bos Aires
Vigo
Orixinal Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Fernández del Riego. 1954 en 23/11/1954

Buenos Aires, 23 de noviembre de 1954
Sr. D.
Francisco F. Del Riego
Vigo

Querido Del Riego:
Recibí tus dos cartas con los dibujos de Maside, las notas tuyas, las fotografías del reportaje sobre “Galaxia” y la crónica sobre Otero Pedrayo de Alvarez Blázquez. Todo él constituye un valioso material de interés para la revista, del que estaba muy necesitado. Te adjunto las tres copias de cada uno de los grabados para la monografía con el objeto de adelantar los trámites necesarios para su publicación.
Convenía que en el tomo de [Antonio] Vilar Ponte incluyéseis el discurso de él a la Academia, que fué, lo recuerdo muy lejanamente, un gran discurso. Estoy seguro de que el tomo de Ponte ha de constituir un libro fundamental de nuestra bibliografía. Fué uno de los hombres a quienes todos, sin darnos cuenta muy bien de la deuda a veces, debemos más. No importa que sea grande la cantidad de dibujos de Daniel, es necesario recoger todos los que se puedan. Se pueden hacer fotografías de varios juntos para enviar a ésta y se pueden tambien incluir en una misma página más de uno en la edición que aquí se haga. Si no los recogemos nosotros, probablemente los que vengan atrás nuestro no lo harán y hay que aprovechar tambien hasta donde sea posible el acuerdo del C. Gallego de editar su obra completa. Comunica al Centro todas tus gestiones. Son importantes las breves prosas de Daniel, algunas “cousas”, entre otras las de los domingos de El Pueblo Gallego y creo que de Galicia, no recogidas en sus tomos. Hay que clasificarlas. Tambien los afiches y fotografías, si se encuentran, de los decorados para Valle Inclán y para la Polifónica. Todo lo que se pueda de él es necesario preservarlo de un posible olvido de su labor más importante, la del dibujante y escritor, y tambien de que esa obra se conserve únicamente en unos archivos cuyo destino es siempre incierto.
Siento profundamente la noticia que me dás de Cebreiro, me pareció siempre un valor nuestro malogrado por la pereza y por el escepticismo. Por mi parte le profesé, desde que le conocí, una honda amistad.
Con saludos cariñosos para Evelina y para tí de Maruja y míos, recibe el gran abrazo de:
Seoane
Saludos para los dos de Perla, Enrique [Rotzait], Esther, Lipa, Marika, Lorenzo, etc., de todos los que son en ésta, desde vuestro viaje, amigos vuestros y nuestros. Te agradezco tambien en nombre de Nóvoa y mío la nota de La Noche; por tus crónicas se pueden ir sabiendo que Galicia existe fuera de Galicia. Elena Colmeiro debe de llegar a esa uno de estos días.
[Manuscrito]

1958-09-22 Mencionado/a
Carta de Scheimberg a Seoane. 1958
Agrigento
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Scheimberg a Seoane. 1958 en 22/09/1958


Agrigento (Albergo dei Templi), 22 sept. [1]958

Querido amigo Seoane:

Mañana a las 8 salimos pª Siracusa, desde donde quiero despacharle esta carta pª que Vd. la reciba no más tarde del día 27. Así estaremos presentes, Aída y yo, el día de la clausura de su Exposición. Deseamos que haya tenido éxito. Con Vd. y Maruja, pues, y los amigos que van a rodear su mesa... Y ahora, pª que nos sigan en esta etapa de n/ viaje, ahora va el prontuario de los últimos días. El 18 llegamos a Palermo, a las 17 y 15, después de un vuelo de 1 hora y cuarto desde Nápoles, sobre un mar tranquilo como un lago y con el espectáculo de los Apeninos a n/ izquierda. Cuando descendimos del avión, el sol comenzaba a ocultarse detrás de las montañas que encierran a Palermo dentro de una herradura perfecta, presagio de buena suerte. Palermo es como una hermana menor de Nápoles, pero sin la obsesión de lo monumental, tan común a casi todas las grandes ciudades de Italia. Influencia castellana, con su sobriedad natural en todos los órdenes de la vida?, o debido a la proximidad de los Templos griegos, maravilla de proporción? Lo ignoro. En Sicilia, lo mismo que en Nápoles, abundan los apellidos españoles y el siciliano está orgulloso del legado español –que es aquí más pronunciado que en Nápoles, sobre todo en la edificación. Si no fuera por el idioma y los gestos exagerados, al cruzar las aldeas de Sicilia uno se creería atravesando poblachos de Castilla. Hasta su misma aridez y el mismo color de su tierra seca. –Vía Maqueda, nos dice un comerciante de la calle Venezia (con la que aquella se encuentra), tratando de darle el acento castellano; y agrega, orgulloso –como si se tratara de un título nobiliario: –É un nomme spagnuolo. En cuanto a lo demás, el mismo hablar a gritos de los napolitanos y una suciedad aún mayor, si cabe, que en Nápoles. Una suciedad que no se recata y que no crea que tenga igual en ninguna ciudad civilizada. Los sicilianos pobres viven prácticamente en las calles. Calles sucias, que nunca se barren, y donde tienen sus negocios o sus pequeños talleres. Allí trabajan, o se pasan las horas del día jugando a la barajas, o mirando pasar –o no mirando siquiera. Donde hay una puerta y una mesa, hay hombres –y aun niños, jugando a las cartas–. En Palermo y en las aldeas próximas, que atravesamos dos días después. Y en todas partes, abundan los niños. Aquí los niños se reproducen como las moscas y trabajan casi desde que pueden andar sobre sus pies, como mandaderos, o ayudantes de mozos y camareros, o simplemente pidiendo monedas a los extranjeros: –Hay que enseñarles a trabajar desde chicos, nos dice la dueña de una Trattoria donde entramos a cenar, refiriéndose a un gurrumín que no debía tener más de 8 años y que nos alcanzaba los platos de comida. La cuenta sumaba 1.050 liras. Dejé 1.100 y le dije al chico: “50 liras son para ti”. El chico, que no conocía el valor de las monedas todavía, pretendió quedarse la moneda de 100 liras, lo que le valió una paliza, y que la patrona (creo que tía del chico) se guardara el vuelto. Los italianos son ladrones, me dijo el mozo, pretendiendo congraciarse con nosotros, mientras el niño pasó corriendo hacia la calle y mirándonos con rencor, convencido de que yo le había querido jugar una mala pasada. Me acordé de Don Quijote y del zagal que quiso librarse de la paliza que le daba su amo... Pero que no conozcan el valor de la moneda no es frecuente. Desde chicos ejercen el comercio a su manera, o se ejercitan jugando por dinero a la vista de los policías. En las casas sólo entran pª dormir. Generalmente, se trata de una sola pieza, donde rara vez se enciende la luz, que es dormitorio y comedor y cocina y donde toda la familia duerme en promiscuidad –casi siempre sin desvestirse y, naturalmente, sin bañarse. Con todo, Palermo es una ciudad hermosa y, como Nápoles, llena de color, ese color que atrae a los turistas y que a los sicilianos pudientes (que, como en todas partes, viven bien –aunque sin preocuparse mucho, también ellos, de la higiene) les avergüenza. Se extiende, Palermo, como un arco sobre un golfo de agua azul, cortada por 4 o 5 avenidas modernas y –éstas sí limpias–. Y entre una y otra avenida, las callecitas estrechas y sucias donde los negocios casi se dividen por ramos: la calle de las bicicleterías, la de marquerías y cromos del peor gusto, la de tallercitos de carpintería, etc. Y la más característica de todas: la calle Venezia, que va de la vía Roma a la de Maqueda, materialmente cubierta de pescaderías y freedurías y de puestos de verduras y frutas... En una de estas calles está el Museo Nacional, hoy nada más que Arqueológico, donde se encuentran piezas de escultura y de arquitectura, casi únicos, extraídas de las excavaciones que se están realizando en gran escala en toda Sicilia, sobre todo en Segesta, Selinunte y Agrigento, bien clasificados y con notas explicativas de suma sencillez. Otras cosas dignas de verse y que, naturalmente, visitaos, son su catedral y, sobre todo, el Palacio Real cuya Capilla Palatina, totalmente revestida por dentro de mosaicos de los siglos XII o XIII, de una belleza extraordinaria. Como lo son de igual belleza los mosaicos de la Igl. la Martorana. Y ya en otro orden, la pequeña Igl. S. Cataldo, de estilo normando y con gran influencia musulmana, de un interior severo, casi ascético. Es realmente notable aquí la cantidad de Iglesias con influencia de estilo normando (por ejemplo, la Catedral de Agrigento) –que mi ignorancia de la historia no me permite explicar. De los mosaicos de la capilla Palatina y de la Martorana, llevo unos pocos diapositivos que pasaré en Buenos Aires para regalo de los amigos.
El 20 nos levantamos muy temprano pª salir pª Agrigento en un ómnibus de la CIAT. Desde la ventana de n/ hotel y a esa hora, el monte Pellegrino, que encierra a la bahía por uno de sus lados, se veía como una enorme mancha carmesí, como si se le hubiera volcado un tintero de tinta roja encima. A las 8 salimos pª Agrigento, adonde debimos llegar casi a las 8 de la noche. Total, unos 380 km (contando las vueltas y revueltas), costeando un mar casi siempre maravillosamente azul, o internándonos, por momentos, un poco tierra adentro, y con la compañía de sus montañas áridas, grises o amarillentas, y con un paisaje que igualmente nos recuerda el paisaje castellano. Aquí la tierra es seca y el agua poco abundante, y hay que trabajarla mucho pª obtener un rendimiento casi siempre nada más que discreto. Solamente en las pequeñas zonas donde las tierras se han distribuido en virtud de una ley agraria que el gobierno democristiano sólo aplica con cuentagotas, las obras de riego se multiplican y la producción ha aumentado visualmente –al mismo tiempo que se ha abandonado la monocultura (uvas y/o aceites) –tan fatal pª el campesino, al mismo tiempo que provechosa pª los acopiadores de la ciudad. Hemos visto abundantes parcelas con siembras de algodón, hermosas con sus capullos blancos, algunas ya listas pª cosechar. Este año parece ser que la cosecha de la uva ha sido particularmente abundante, y durante mi trayecto era interminable la fila de carretas o de mulas cargadas de enormes cestos de uvas –como una procesión báquica, pero en la que en vez de Baco, hinchado de vino y encendido en deseos lúbricos, los que los transportaban eran campesinos sucios, miserablemente vestidos y de aspecto casi siempre miserable sus rostros. Esa uva será mañana el vino de los otros mientras a ellos les faltará quizás pª cubrir los precios de los arrendamientos y el pago de los impuestos cada vez mayores. A las 11 y media llegamos a Segesta. Alguna vez, en tiempos de la colonización griega, debió ser un centro de población importante; hoy es nada más que una colina y, en su parte más alta, los restos, admirablemente conservados, de un templo dórico, con sus 36 columnas casi sin retocar y sus metopas y cornisones (Rotzait le dará los nombres técnicos, que yo desconozco). Qué maravilla, Seoane, de proporción y de majestad! No le miento si le digo que casi caigo de rodilla de la emoción. Era mi primer encuentro con Grecia... Era tal mi entusiasmo que tomé un ligero apunte a pluma –que, felizmente, no tendré que utilizar, pues en una taberna y fonda hay, perdida en esa soledad, próxima al Templo, encontré unas buenas postales– y, ya aquí, en Agrigento, un diapositivo perfecto. Ya verá Vd. almorzamos en Èrice, en una hostería emplazada sobre el monte Giulia, a unos 500 ms. sobre el nivel del mar y desde donde se domina –como bien dicen las guías turísticas– una hermosa vista. En Èrice termina el mar Tirreno, mar italiano, y después de Trapani viajamos teniendo casi siempre a la vista el mar Mediterráneo –encuentro y camino de tantas civilizaciones ilustres. Es un mar con sabor a hogar, a cosa propia. Luego, Selinunte, donde se levantan restos de otro templo dórico –que arquitectos y arqueólogos tratan de reconstruir con la montaña de piedras que, como un mar revuelto, allí están amontonados–. Luego Sciacca y Puerto Empédocles y ya, con la noche encima, entramos en Agrigento, guiados por los restos de un Templo de Hércules, el de la Concordia (uno de los mejor conservados, según la Guía Azul) y el llamado de Juno –emplazados en una de las colinas que rodean a Agrigento y que esa noche (no sé aún por qué) nos esperaban profusamente iluminados y haciendo de embajadores maravillosos pª recibirnos en Agrigento.
Yo me he preguntado muchas veces, Seoane, durante este viaje por qué ha sido tan fuerte en mí el impacto ante la visión del Templo Dórico de Segesta y porqué, en cambio, no me conmueve en igual medida la escultura griega. Como respuesta provisioria, me he dado ésta: Que los griegos han tratado al cuerpo humano como una arquitectura ideal y si en ésta, la arquitectura, basta el equilibrio de las proporciones, que yo llamo gracia, en el cuerpo humano, lejos de ser una cualidad, puede ser un defecto...
Pero dejemos esto. Ya estamos en Agrigento, centro de una época de cultura griega. Nos alojamos en un hotel que está a la entrada de la ciudad, a unos 50 ms. del camino Nacional y a casi 200 ms. más abajo del punto más alto, donde está su Catedral. Es un viejo caserón de estilo castellano, en medio de palmeras y pinos y otros árboles cuya especie ignoro, y con un algibe de piedra, en desuso, realmente hermoso. Un de las ventanas de n/ pieza, en un 4º piso, mira hacia la colina de los Templos. Más allá, se ve el mar: una línea gris en el horizonte. Desde este balcón nos quedamos a contemplar los Templos hasta que las luces que los iluminan se apagaron.
Hace dos días que no leo un diario, y por un momento, me olvido de las cosas que nos rodean y pienso que soy nada más que un contemporáneo de aquellos hombres que concibieron y levantaron esos Templos. Y me siento orgulloso de ellos... O, ya luego, pero siempre ajeno al calendario, pienso que es el 29 de abril, cuando Aída y yo nos embarcábamos en Buenos Aires, llenos de inquietud por el temor de que no le dejasen a Frondizi hacerse cargo del gobierno, pero también llenos de esperanzas en la obra que va a realizar. Qué hermosos discursos los suyos, colmando la medida sin de nuestros sueños, por lo menos de nuestras más inmediatas aspiraciones. Pero el silencio absoluto que nos rodea y la noche me devuelven a mí mismo, Dios mío! Qué fueron de nuestros sueños, qué de nuestra fé? Y todo el amargor y la desesperanza de su tan honda carta del día 4 me contagian y me devuelven a la triste realidad de n/ calendario argentino. Que el cielo, o el diablo, nos den fuerzas pª resistir. Al día siguiente, volveré a recuperar esperanzas al contacto con estas piedras ilustres –que son historia–. Y dejo para otro momento la descripción de n/ caminatas en esta Agrigento que tan extraordinaria impresión nos ha producido a Aída y a mí.
Perdóneme, Seoane, esta pesada crónica y piense que se la escribo nada más que para sentirme más cerca de los amigos. A todos ellos, a Maruja y a Vd., de parte de Aída y n/, un grande y cordial abrazo.

Scheimberg

1960-03-29 Mencionado/a
Carta de Scheimberg a Seoane. 1960
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Scheimberg a Seoane. 1960 en 29/03/1960


Buenos Aires, 29 de marzo, 1960

Querido Seoane:

El sábado 26, en casa, en reunión de amigos, leímos sus dos cartas dirigidas a Aída y a mí (recibió Vd. mi respuesta a la primera, que le despaché en vísperas de carnaval?) y la segunda que escribió a Falcini. Algunos días antes, leímos, también en reunión de amigos, en casa de Lipa Burd las que Vd. escribió a éste y a Rotzait y la primera que escribió a Falcini. Como Vd. ve, sus cartas toman estado público apenas llegan (Sofovich me leyó la suya): primero, porque vienen de Vd. y nos interesa todo lo que a Vd. le afecta; y luego, por el interés de las mismas –por las muchas cosas que dice. Me olvidé de decirle que recibí el catálogo de la exposición Corot –uno de mis viejos amores–. Gracias. Nos encantó el motivo en virtud del cual ha sido diferida su exposición: Una gran exposición de obras suyas (óleos, dibujos, tizas, grabados, estarcidos, etc.) con el espaldarazo de un Museo, es una cosa para no desperdiciar (independientemente del hecho de que Vd. se lo merece). Pero dejemos esto: Vd. sabe cuánto lo queremos y admiramos los amigos... De lo que hoy quiero hablarle es de otra cosa, a saber: de las elecciones del día 27 y de las que, a pesar de la carencia de noticias argentinas en Europa, Vd. ya debe tener algunas a título de anticipo. En estas elecciones ha habido dos grandes derrotados: la UCRI (léase el Gobierno) en primer término, y el peronismo, después. Los peronistas esperaban que los votos en blanco (en los que hay que incluir alrededor de 250 mil comunistas) totalizarían más del 50% del electorado: y se hablaba incluso de un gran movimiento golpista para el momento en que se conociese este resultado. Esto puede no ser exacto, pero entra dentro de lo verosímil. Pues bien, los votos en blanco andan entre el 25 y el 30%. Los peronistas han sido los primeros sorprendidos de este resultado. Y es mejor que así sea. Vd. sabe hasta dónde me indignan las traiciones de Frondizi; pero prefiero un mal gobierno constitucional antes que el retorno de Perón o un nuevo gobierno de botas (aunque bien sé hasta qué punto mandan éstos ahora; pero los prefiero en un segundo plano y no como dueños del boliche y en actitud de salvadores de la patria. De modo, pues, que no lamente mucho que no haya podido votar. Los que están que se relamen son los Radicales del Pueblo, que han obtenido la mayoría en casi todo el país y en algunas provincias van a constituir mayoría en los parlamentos y los conservadores en dos provincias. Desgraciadamente, y por algún tiempo, el país no tendrá otra salida si no es la vía de los radicales. Esperemos que este repudio a la traición de Frondizi algo les enseñe... Y aquí dejo. Sigo terriblemente ocupado con las cosas del Banco Israelita del Río de la Plata, cuya situación aún no se ha aclarado y me toma un tiempo enorme –al punto que casi no tengo tiempo para otras cosas, salvo los escasos minutos que robo para algunas lecturas y para ver de vez en cuando a los amigos. Ayer terminé la lectura en castellano de El último justo (Le dernier des justes) de [André] Schwartz-Bart que me ha aplastado. Es terrible, además de ser buena la obra, literariamente. Es de una grandeza trágica impresionante. Realmente el alemán es un pueblo que da motivos para el odio. Y lo peor es que no hace nada –o muy poco– para que olvidemos.
Esto es todo por ahora. Aquí todos bien. Aída recibió la carta de Maruja y le va a escribir. Para ella y Vd. un gran abrazo de Aída y mío. Suyo, y hasta pronto.

Scheimberg

1960-04-12 Mencionado/a
Carta de Rotzait a Luís e Maruxa Seoane. 1960
Bos Aires
Roma
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Rotzait a Luís e Maruxa Seoane. 1960 en 12/04/1960

Buenos Aires, abril 12 de 1960

Queridos Luis y Maruja:

Catalina está cantando como loca. Está más rosado que nunca y sucio. Los canarios de raza no se bañan nunca. Me reconoce y cuando oye mi voz, o alguna música o también... el ruido de la enceradora se enloquece de todo y canta los cantos más gregorianos que mente canario pudo inventar.
Catalina es feliz. Yo también. Y Enrique, hermoso.
Debo pedirte humildemente perdón, Luis, pese a que en Pascuas judías, como hoy, no es de rigor: tu desaparición al sótano del caballero aún con las lastimaduras que perdurarán en el tiempo me hizo reír a carcajadas. No me la puedo imaginar a Maruja buscando alrededor a su bien amado y encontrando el vacío más absoluto, levemente interrumpido por unas manos y un rostro, que quiero imaginar con una expresión beatífica digna de una escultura de la Edad Media.
Ah, Luis Seoane! Las cosas que te exige tu admiración por las películas del oeste.
¿Cómo se encuentran en Roma? Cómo la encuentran a Roma? Contesten, hablen, cuenten, que es lindo recibir impresiones. Y ya que de impresiones se trata, va para vos, Maruja, un chimento que tiene impresionado a Bs. Aires: Sofovich se separó de Berta y se casa con Elsa Balza. La separación se produjo en diciembre, y él anunció su casamiento en marzo, aún cuando no especificaba con quien.
Elsa se fue de su casa sin las nenas.
Ya ves, Maruja, que yo sea de Catalina o de Elsa, siempre tendré una que otra noticia de Bs. Aires para contarte.
De mí: Leo, como, duermo, vivo, rezongo, y hoy vamos a ver Un rey en N. York con toda la flia uruguaya que está en Bs. Aires.

Los ama.

Perla

Nota: Hoy martes y ayer lunes hace e hizo un día lleno de sol, fresco, cielo, verde y otoño en el aire. (Parte meteorológico: vale)

P. R.

1963-04-17 Mencionado/a
Carta de Sofovich a Luís e Maruxa Seoane. 1963
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Sofovich a Luís e Maruxa Seoane. 1963 en 17/04/1963


Bs. As., 17-4-1963

Queridos Luis y Maruja:

Hemos recibido vuestras cartas. Utilizo el doble plural, porque junto con Chola leímos también las que recibieron Falcini y Enrique y Anita Goldstein; nos falta la de Scheimberg que seguramente veremos hoy o mañana. Todas tuvieron la virtud de acercarnos casi físicamente a Uds.; Maruja escribe como habla y Enrique tiene razón cuando dice que se escucha su acento gallego. Además, y a mi especialmente, me llenaron de hambre de viaje, este viaje siempre postergado por los avatares de la vida. A Chola le vendría estupendamente bien hacerlo, de tal manera que me comprometo a tener los ojos abiertos para no perder la primera oportunidad que se nos presente pro domo viaje.
Comparto, Luis, todo lo que Ud. dice sobre Hodler y Valloton, desde luego, lo comparto a través de las reproducciones. En un tomo que tengo sobre la revista La revue blanche, de una hija del fundador, muy bien ilustrado, se puede ver, junto a los grabados y litografías de Bonnard y Vuillard que Valloton ha conseguido el milagro de ser frío hasta cuando grava en madera, que ya es difícil conseguirlo; pero los grabados son perfectos de dibujo y de limpieza. –Hodler resulta más cálido–.
Suiza descripta por Uds. da la sensación de que en cualquier momento podríamos recibir una carta de Maruja contándonos que al abrir una puerta del departamento salió un cu-cú cantando la hora, aunque todos sabemos que eso le va a pasar a Ud., Luis, sacando la envoltura de una tableta de chocolate.
Tuvimos una revolución la misma noche que salió para Ginebra Núñez Búa; tuvo características especiales, esta vez los golpistas se jugaron enteros, hubo batallas, bombardeos por aire y por tierra, centrados en lo fundamental en Magdalena, Punta Indio, City Bell, Córdoba (en la ciudad) y Jujuy; la lista de muertos y heridos es de cierta importancia. El cielo de La Plata se veía, por la noche, iluminado por las luces de bengala que tiraban los aviones de la marina para ametrallar las columnas de tanques y artillería que desde Campo de Mayo avanzaban contra Punta Indio y Río Santiago. La derrota de los golpistas en la guerra fue total, pero a medida que avanzaban las fuerzas azules –es decir, el orden constitucional y las elecciones–, estas mismas fuerzas azules retrocedían políticamente emitiendo comunicados que cada vez las acercaban más a la filosofía política y social de los colorados: antiperonismo y más antiperonismo.
De cualquier manera, pienso que el saldo final con la derrota más o menos fulminante de esta revolución dirigida por capitanes de submarinos es un hecho positivo. La marina ya no va a poder asustar por algún rato.
Pasemos a otras noticias; la primera es un bomba, cobré los $60.000 m/n del Museo, que ya se los giré por la casa de cambios Baires, vía aérea, a la Societé de Banque Suisse, Zurich, esta casa que supongo tendrá sucursal en Ginebra, lo citará para hacer efectivo el giro. Bernárdez pagará los intereses en estos días y con ese dinero abonaré el pagaré de réditos; el saldo, juntamente con una cuota de $10.000 m/n, que he obtenido, mejor, que obtendré la semana que viene del doctor Bruetman, se lo enviaré por la misma vía, si Ud. n dispone lo contrario o algún otro medio. La semana que viene visitaré a Eudeba para ver que pasa.
Los $10.000 m/n de la Hebraica tienen mucha anécdota en su alrededor, pero que no merecen el tiempo de contarla. Obtuve la promesa de otro tanto para el mes que viene.
El precio del librito de Picasso mete miedo, con todo veré si Peralta Ramos tiene interés en él. En cuanto a otros Picasso aunque aquí no hay muchas novedades, por ahora me he cortado la coleta, salvo que Ud. encuentre el número 7 de DU, primer número de esa revista especialmente dedicado a Picasso y que, supongo, rareza y todo, estará más al alcance de mi agujereado bolsillo.
Ranelagh los sigue extrañando, más ahora que Ghersinich obtuvo del intendente de Berazategui un ejército de máquinas que han mejorado de tal manera la calle que han dado en llamarla La Avenida Plátanos.

Queridos Luis y Maruja, basta por hoy; con un fuerte abrazo.

Sofovich

Reabro esta carta el 22-4-63

Las detenciones a las que se refiere Chola son las de Musich, Merchensky, Gringauz, Ernesto Sábato y otros, estando prófugos Dardo Cuneo, Narciso Machinandiarena, Ramón Prieto, Isidro J. Odena y otros, todos ellos inculpados por decreto de constituir un grupo “marxista-leninista de tipo insurreccional latinoamericano”, vinculado al señor Rogerio Frigerio y bla, bla, bla. Interpuse recurso de habeas corpus por todos que estoy tramitando en estos momentos. Todo esto confirma lo que decía en la etapa anterior de la carta: la victoria colorada por encima de su derrota militar.
Si uno de estos días tengo algún rato de descanso, les haré una carta más extensa sobre todo esto. Ayer domingo pude descansar en Ranelagh de tanto ajetreo, el día fue maravilloso, tanto que por momentos me hizo olvidar nuestra soledad.

Nuevamente, un abrazo de quien les quiere mucho.

Sofovich

[Manuscrito:] Cobré los intereses de Bernárdez

1970-02-19 Mencionado/a
Carta de Rafael e Emma Lifschitz a Luís e Maruxa Seoane. 1970
Bos Aires
A Coruña
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Rafael e Emma Lifschitz a Luís e Maruxa Seoane. 1970 en 19/02/1970


Buenos Aires, Febrero 19-1970

Muy queridos Maruja y Luis:

Se darán cuenta por el encabezamiento que Rafael y yo nos estamos “castigando” en Buenos Aires. La verdad que así como Bua [Buenos Aires] es fantástica en verano cuando no hace calor, pues no hay gente que moleste, así se pone de insoportable cuando hace esta humedad y calor infernal. Les agradecemos mucho vuestra carta que amén de hacernos saber algo de Uds. nos pasa una información sobre todo lo que ocurre por allá. Les cuento nuestra vida: Yo me fui el 19 de Diciembre a Punta, Rafael y Poly, unos días después. Yo, luchando contra los uruguayos para que el arreglo de la casa termine. Me pusieron tan furiosa que pensé escribir un libro “de como empecé a odiar a los uruguayos”. Bueno, la 1ª semana de Febrero ya dormíamos en Siddhartha aunque todavía hay obreros terminando. La casa quedó muy agradable y alegre. Esperamos la podamos ver todos juntos, encender la chimenea y escuchar todo lo que Uds. nos tendrán que contar.
Como novedades malas: Noemi [Gerstein] los 1os días de Enero se rompió el brazo derecho cerca de la muñeca. Ya le sacaron el yeso y precisa hacer rehabilitación. La hermana Betty estuvo bastante mal, no se sabía que era, le hicieron una especie de trepanación en el cráneo. Ahora se cree que fue presión arterial excesiva que actuó sobre un nervio óptico. Se repone lentamente. Bueno, basta de cosas malas aparte del choque de trenes con gran cantidad de muertos, aluviones en Mendoza, desmoronamiento de un edificio de 15 pisos semiterminado en calle French a 3 cuadras de casa etc., etc.
Bueno, termino con las cosas malas. Aquí se casó [Rogelio] Polesello con frac, iglesia y todo. En Punta estuvimos con Lena y Pablo Edelstein, con Anita y Enrique Goldstein (Anita estuvo enferma, pleuritis o algo así, Enrique queda regular). Nosotros estamos muy bien, contentos de tener el jardincito y un living donde puedan entrar un poco + de gente que en el Vanguardia. Desfiló bastante gente por casa en pequeñas camadas, entre otros, Rotzait y su mujer, que estuvieron muy entusiasmados.
El tiempo se nos pasa con rapidez increíble entre no hacer nada allá y aparentar que hacemos algo acá. Julia les llevó cariños nuestros? Bueno, está demás decirles que los extrañamos mucho, que queremos tenerlos acá, pues no creo que esta vuelta nos podamos ir allá. Esperemos que Marujita esté repuesta de la gripe.

Abrazos, besos y cariños de los chicos y de Rafael y mío

Emma

1971-07-07 Mencionado/a
Carta de Scheimberg a Luís e Maruxa Seoane. 1971
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Scheimberg a Luís e Maruxa Seoane. 1971 en 07/07/1971


Buenos Aires, 7 de julio de 1971

Queridos amigos Luis y Maruja:

Estaba esperando tener alguna noticia que contarles de este Buenos Aires tan querido y tan vapuleado, y tengo muchas, algunas muy tristes y otras alegres. Empezaré por las primeras para poderlas contrarrestar con las segundas.
Amigos, en menos de 3 semanas murieron Policastro, que estaba muy enfermo, Nali Roselo que de toda la vida no estaba bien, Payzonzas, Israel Hoffman, un escultor judío que vivía en Entre Ríos y Julio Payró; muy sensibles todas esas muertes. Hoy en noticias fúnebres de La Nación, he visto que ustedes figuran, entre otros amigos, participando la muerte de Payró.
El sábado 3 estuvimos en el cumpleaños de Sofovich; cumplía 60 años y los dueños de casa tiraron la casa por la ventana porque también la inauguraron. ¡Qué piso, uno no sabía dónde mirar primero; nosotros, que llegamos los primeros, tuvimos ocasión, llevados de la mano de Elsa, de admirar el lujo y buen gusto de todo. La dueña de casa vestía de gran fiesta, un modelo de color ciruela de riguroso largo, lo mismo que Claudia; el pibe parecía un principito y Bernardo, radiante y feliz. Entre la concurrencia estaba, por primera vez, toda la familia de Bernardo, la hermana y los sobrinos y las hijas, Laura y Alcira, ésta con su último punto, bien hippie. La fiesta, servida con generosidad y exquisitamente; los amigos de siempre, el matrimonio Enrique y Anita, ella como siempre deliciosa, su hermana y el marido; Lola Madanes y su esposo; Regina Rubinstein y su esposo, el matrimonio Mantero, y otros que yo conozco y no me acuerdo el apellido; todos, todos muy contentos y alegres de gozar de esa hermosa fiesta. Nosotros estuvimos con Varela, Marica no fue, no se porqué. A las dos de la mañana, cuando nos fuimos, todavía quedaba mucha gente para seguir de farra. Yo creo que Elsa debe pellizcarse todo el día para saber si lo que vive es realidad o lo sueña. Me alegro por ella y, sobre todo, por Bernardo, se lo ve muy contento. Ahora, hablando de otra cosa, le contaré que estuvimos en Art Gallery en la inauguración de la retrospectiva de Urruchúa. Mucha gente, sobre todo, sus alumnos que lo quieren mucho; le financiaron un libro Memorias de un pintor, muy bien presentado; las ¾ partes son sus memorias y el resto, muy robespierosamente, juzgando el nuevo arte y castigando el intelectualismo en el mismo. Fuimos también a la inauguración de Margot Parker, en el Triángulo, muchos amigos, todos, una concurrencia distinguida y elegante; estaban los Lifschitz, que se acercaron a nosotros muy simpáticamente; los Rotzait, él acaba de salir de una operación muy delicada de hígado; ella, muy bonita y elegante; los Melella que en septiembre se van a Europa y piensan encontrarse con ustedes; y a propósito, me olvidaba de decirles que los Sofovich también se van a Europa y tratarán de ir en una fecha para poder estar con ustedes.
Y ahora, las cosas de acá; como siempre, la incertidumbre y la carestía de la vida que va en aumento escandalosamente; el dólar a 570$, que le parece? Hablando con Lifschitz nos dijo que en Europa son los mismos problemas, pero que allá no los siente el turista sino los habitantes de cada país. Ya se inauguró la calle Florida, la calle peatonal, como la llaman ahora; la calle es preciosa, sin veredas, con macetones en el centro; las vidrieras se engalanaron en homenaje a la calle. La inauguró el intendente y Lanusse, nuestro Presidente, en sus respectivas comitivas. Nuestro Presidente se detuvo en un café al paso y pidió un café; le preguntó al mozo que le servía si era casado, –no–, le dijo, –pero me voy a casar pronto–; entonces, nuestro Presidente, muy generoso, le dijo que lo va a ayudar un poco y le regaló 2 billetes nuevos de 10$ (2.000$) como propina. Les aclaro que un escobillón para barrer la casa vale 1.500$ de los viejos, no es verdad que estuvo grande nuestro Presidente? Esto se publicó en La Nación, en un recuadro.
Nosotros estamos bien, los amigos, mi familia, los hijos, los nietos, todos; la vida corre sin pena ni gloria esperando siempre tiempos mejores. Vendrán? Fuimos al cine y vimos películas hermosísimas. Si tienen oportunidad de verlas allá, no las pierdan: Una investigación de un ciudadano sobre toda sospecha1, italiana; Tristana, de Buñuel; Mi padre, un extraño, americana. Y nada más por hoy, cariños a todos, todos los amigos, especiales a los Díaz Pardo, a tus hermanos y ustedes reciban nuestro cariño de siempre, los extrañamos muchísimo. Hasta la próxima.

Aída.

[Escrito por Scheinberg:] Queridos Maruja y Luís Seoane: Gracias por v/ cartas del 2 de junio. Se cruzó seguramente con una anterior de Aída, en la que les agradecía el llamado telefónico en la noche de su cumpleaños. Me preparaba para escribirles pero nuevamente Aída me ganó de mano. Quiero aclararles que la cotización del dólar a que se refiere la carta es la del mercado paralelo –que es el que cuenta. Como Vds., estamos cada vez mejor. Cuándo saldremos del pozo? Con todo –y a pesar de n/ gobiernos, Buenos Aires sigue siendo agradable para vivir. Yo, aguantando. En medio de la pena de estas muertes a que se refiere la carta de Aída, me alegró que Policastro y Julio Payró se hiciesen cremar: es un desafío a los timoratos –sobre todo en el caso de Payró. Yo no sé si Vds. están de acuerdo, pero a mí –repito– me alegró. Y aquí termino. Por hoy basta. Abrazos, de Aída y míos.

Scheimberg

1. O título correcto é: Investigación sobre un ciudadano libre de toda sospecha dirixida por Aldo Petri en 1970