PROXECTO EPÍSTOLAS

----

1 MENCIóNS A Percy Shelley (1792-1822)

Escritor, ensaísta e poeta romántico.
Epístolas
Mencionado/a [1]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
1969-01-31 Mencionado/a
Carta de Seoane a Shand. 1969
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada]
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Shand. 1969 en 31/01/1969


Buenos Aires, 31 de enero de 1969

Sres. Susana y William Shand
Buenos Aires

Mis queridos amigos:

Recibí la carta de ustedes hace ya unas dos semanas y quedé muy agradecido por ella. Estoy deseando tener noticias de ésa y sé que ahora es la peor época de Buenos Aires para noticias. En verano, no pasa nada en Buenos Aires. Pareciera que el país entero se tomase vacaciones por estas fechas. Aquí leo La Nación aérea y apenas trae otras noticias que fallecimientos. En cuanto a mi carta anterior hubo un mal entendido, quizás no supe expresarme, yo no desprecio determinado tipo de turismo, el que se hace para conocer. A éste no debería llamársele turismo. El turismo, hoy, tal como se entiende aquí, es otra cosa, es la salida de un país hacia otro sin interés alguno por ninguna clase de cuestiones culturales, solamente para escapar de una vida mediocre de rutina y tratando de encontrar, fuera de cualquier vigilancia, todo lo corrompido de otro país para satisfacer las más bajas necesidades. Ir a Florencia o tratar de conocer Coimbra, o Atenas, o un país entero que nos interesa por muchas cuestiones referentes a la cultura en general, o a la industria, o al comercio, no es exactamente hacer turismo desde mi punto de vista. Marco Polo no fue un turista, ni Lord Byron o Shelley. Tampoco estoy de acuerdo con lo que el hombre crea es más grande que el hombre mismo. El hombre soñando en crear, sin haber creado nada, es más importante que un monumento cualquiera. Malo o bueno, o mezcladas en él la bondad y maldad, como ocurre generalmente, el hombre es por sí mismo un mundo extraordinario, un micromundo. A mí me gustaría tener la capacidad de poder leer el pensamiento de las gentes con sólo ver el rostro de ellas. A muchos les gustaría lo mismo por utilidad. A mí no, me gustaría por curiosidad. En cierto modo, fue este el deseo de la ciencia fracasada de los fisionomistas del siglo XIX. El pensamiento de un hombre, las vueltas de su pensamiento, las dudas, los sueños que no expresa, las intenciones fallidas y las que llevará a cabo, todo cuanto se le ocurra son múltiples monumentos, obras de arte, construcciones inverosímiles. Joyce no describió más que muy pocos personajes tratando de buscar mejor de este modo en sus almas. Un personaje o dos bastan: Don Quijote, o Don Quijote y Sancho. Por sentarse en un parque y ver pasar todos esos mundos sería extraordinario. Ir leyendo en los demás a través de los ojos, de la contextura de sus cabezas, de las arrugas de sus rostros, el porvenir que espera, sería un viaje tan sorprendente como el de ir a otro planeta. Se dice “cada hombre es un mundo” y es verdad. Un mundo que no podemos descubrir en su totalidad. Y cada obra de arte es obra de esos múltiples mundos.
Nos alegró mucho el premio de la Municipalidad. Es un premio justísimo al talento y al profundo humanismo de quien vive como usted, Shand, su tiempo. Entre tanto premio injusto a gentes sin interés, al fin un premio bien merecido. Lamentamos no haber estado con ustedes para festejarlo. Los festejaremos al regreso. Estos días les envié un álbum de grabados, Homenaje a un pájaro. Se trata de un pájaro, un hornero, que Maruja y yo guardamos en el recuerdo. Cuando regrese, se lo traduzco. El texto está escrito en gallego. Escríbannos.

Un gran abrazo para los amigos comunes, para Bernardo, para todos y para ustedes dos de Maruja y mío:

[Seoane]