PROXECTO EPÍSTOLAS

----

28 MENCIóNS A Antoni Clavé i Sanmartí (1913-2005)

Pintor, gravador e escultor. Tras acabar os estudos, iniciou traballos como cartelista e obtivo un gran éxito no mundo do cine. Tamén colaborou na revista Pocholo. Ao rematar a Guerra Civil exiliouse a Francia, realizando a súa primeira exposición en Perpiñán en 1939. Máis tarde trasladouse a París, cidade na que residiu até 1956, ano en que se trasladou a Saint-Tropez.
Epístolas
Mencionado/a [28]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Mencionado/a
Carta de Serrano Plaja a Seoane. Sen data
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Serrano Plaja a Seoane. Sen data

Querido Seoane:

Cuando recibas estas línea, debes de estar por llegar de regreso ahí, Carlisky. Supongo que te irá a ver, sin contar las propias razones que él tenga, para hacerlo, de mi parte, y para dos cosas.
Una, la primera, es para entregarte el texto de un libro mío de poemas. Y con relación a esto quiero especialmente hablarte. El libro en cuestión es una especie de antología que yo he hecho de mis poemas escritos hace unos diez años y sólo publicados, algunos de ellos, en revistas, aquí y allá –nunca mejor empleada la expresión– y que hoy desearía recoger en un libro. Como ves, poco fruto para tantos años, y menos mal si aún se pudiera decir, poco y bueno. En fin, ese libro, que de pronto, por no sé que ansias, que espero a pesar de todo que no serán mortales, se me aparece ahora como de urgente e impostergable publicación (me refiero, claro está, a mis intenciones de hacerlo así), lo he mandado también a México.
Por una serie de razones entre las que se cuenta que nunca he publicado allí nada y el proyecto que alimento (ya te habrás dado cuenta de que todo proyecto necesita ser alimentado, como cualquier hijo de vecino) aunque no estoy seguro de que no se muera –y sería de hambre, en ese caso– antes de ponerle en práctica, de ir allí, a México algún día, con lo cual tengo la ilusión –un tanto cándida, es cierto– de que tener publicado ya un libro allí, me facilitaría las cosas. Releo el párrafo y veo que ha salido de un barroco casi incomprensible, de modo que le traduzco a lenguaje más llano. Digo que he mandado el libro a México con intención de que se publique allí, si es posible. Al parecer, por lo menos, no es imposible. Y por las razones apuntadas arriba, yo lo desearía así. Pero...
Pero, suponiendo que no cuaje mi proyecto mexicano, y tras de habértele expuesto –así como también las razones de mi preferencia en principio– te quiero someter el libro en cuestión, para preguntarte: ¿Hay ahí alguna posibilidad de publicarle? ¿Te parece publicable –total o parcialmente–? ¿Sería posible para ti en Botella al mar, hacer algo por mi libro? Por el momento, y por las ya repetidas razones de que estoy esperando a saber que pasa en México, no quiero más que preguntarte la cosa, así, en principio; porque, en principio, para lo de México, tengo buenas esperanzas –que algo es algo–. Mas supuesto que fracasaran ¿crees tú que se podría hacer algo ahí? ¿Crees tú que un prefacio que hiciese Bergamín facilitaría la publicación?
De otro modo, ¿sería posible publicar una parte del libro como la plaquette que vosotros mismos me hicisteis de Phokas el Americano? ¿El hecho eventual de hacerla ilustrar por alguno de los pintores de aquí añadiría alguna facilidad? De manera más precisa, si lo posible fuera sólo parcial, me gustaría, particularmente, que se publicase ante todo el poema que verás incluido y que se titula Lo que le sobra a la sepultura, muertos desconocidos y españoles vivos de hambre. Ha sido ya traducido en francés y en italiano, pero no sé si políticamente cabría hacerlo ahí. En fin, con respecto a todo esto, si tienes tiempo y ganas de contestarme, te lo agradecería muchísimo. Cualquiera que fuese tu contestación, naturalmente. Porque incluso si hubiera de ser por completo negativa, para mí sería útil en el sentido de intentar por todos los medios conseguir lo de México; por contra, si tú me dices que algo o todo podrías hacer ahí –independientemente de la fecha– me dejaría más holgura para tratar de resolver lo de México, puesto que siempre podría contar contigo. Repito, pues, que, por el momento, tu sola contestación de principio –y, por supuesto, sin que signifique ningún compromiso para vosotros, tendrá ya muchísima utilidad para mí y, en consecuencia, te ruego que lo hagas. Creo –y es un dato que te doy pensando que acaso pudiera facilitar la cosa– creo, digo, que Seghers va a publicar aquí una parte del libro en edición bilingüe. Aunque con estos cabronzuelos nunca sabe uno a que atenerse. Dejémoslo, por el momento, en que creo.
De la otra cuestión de que supongo que te hablará Carlisky, es lo siguiente: él tiene la intención de volver y la necesidad, para hacerlo, de ganarse aquí la vida. Me propuso hacer algo así como una academia para la enseñanza del español y, eventualmente, la literatura española, con algún punto de vista que quizá sea útil; por mi parte, hablando de todo ello, saqué yo a relucir el que fue un día proyecto nuestro, que algo se podría hacer que permitiese luego la edición de autor, etc. Como tú eres viejo experto en la materia, yo le recomendé que hablase contigo y hasta que vieseis si de algún modo pudiéramos trabajar en colaboración o cosa parecida. Él, Carlisky, parece persona muy práctica y eficaz en todo lo administrativo, de modo que yo creo, aunque moderadamente, en el tal proyecto. Con todo, si una vez que hayas hablado con él acerca de esto, me quieres escribir también, cuando tú puedas decirme (y si lo consideras necesario, en un plano puramente confidencial) tendría para mí importancia de consejo mayor, y creo que, muy de verdad, decisivo para lo que a mí respecta. Mas acaso, paradójicamente, por lo mismo que esto tiene aire de ser cosa práctica e inmediata, me interesa menos o menos urgentemente, que tu contestación a todo lo que te pregunto acerca del libro.
Tú lo verás todo. (Ah, y entre paréntesis, de no ser vosotros, ¿crees tú que hay alguien a quien yo pudiera proponer el libro en cuestión ahora en Buenos Aires?)
Que quedo esperando tu carta, ni necesito decirlo. Más de una vez alguien me ha dicho que estáis pensando volver por aquí. Supongo y espero que aún no habrá nada de cierto, ya que de otro modo me habrías escrito para decirme algo, ¿no? De todos modos, dime lo que haya de esto, aunque sea en estado de proyecto. Ultimamente tuve ocasión de recordarte particularmente, con motivo de un viaje aquí, de Rossi, que estuvo unos ocho o diez días. Sé que sigues pintando cada día más y que, por lo tanto, cada día pintas más, también, en Buenos Aires. Tal vez sería el momento para darte otra vuelta por aquí a ver si tienes la suerte que ha tenido últimamente Clavé que hizo una exposición en Drouant David y el mismo día de la apertura, el muy animal, había vendido todo, teniendo en cuenta además que casi todos los cuadros eran grandes! No sé si tanto éxito será bueno para él; quizá no. En todo caso, como tú sabes que yo tengo mucho aprecio por él, me alegré y de veras. Aquí veo de vez en cuando a Colmeiro, que sigue lo mismo que siempre. Dime de los amigos de ahí y, para empezar, de vosotros. Saluda cariñosamente a Maruja y tú recibe un buen abrazo, como siempre, de

Arturo Serrano Plaja

Mencionado/a
Carta de Serrano Plaja a Seoane. Sen data
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Serrano Plaja a Seoane. Sen data

Querido Seoane:

Para empezar, te digo que escribo con una máquina que no es mía –la mía la tengo a limpiar, y por lo tanto habrá al final muchos errores que tu buena voluntad subsanará).
Finalmente llegué a París. Lo digo porque contando los 5 días de parada en Montevideo, he tardado 31 en llegar a Francia lo cual casi se aproxima al récord establecido por Cristóbal Colón. Por lo demás, aun cuando apenas hace cuatro días que he llegado; ya me he puesto en campaña: he visitado imprentas, tengo algunos datos acerca de los grabadores, he hablado con Claire, etc. Todo, como comprendes, por lo apresurado, un poco provisional y más a título de identificación que de verdadera información. Pero, por una parte, yo, ahora, como creo haberte anticipado, voy a irme afuera de París durante el mes de agosto; por otra, en ese mes, todo el mundo está fuera de París con lo cual muchas cosas no se pueden hacer y entre ellas ni siquiera conseguir la información un poco precisa que se podrá obtener en septiembre; y, finalmente, por la misma inestabilidad de todo, la que podría determinar que datos tomados ahora no sean válidos a comienzos de temporada, una vez que se produzca –según todo el mundo espera– un reajuste –uno más– de salarios, etc. Hechas todas esas salvedades, paso a decirte lo que hasta ahora he conseguido saber:
Anoche estuve cenando con Clavé y luego vi a la mujer de Palmeiro el cual no está ahora en París. Por Clavé, he sabido que Palmeiro recibió tu carta y la mía; y por el tono del comentario de Clavé comprendí que no puedes hacerte la menor ilusión en cuanto al taller de Palmeiro, que ahora vuelve a ocupar él, y que su oferta en Buenos Aires, mas debió ser de cazurro que de generoso –cosa, dicho sea de paso, que no me sorprende demasiado–. Además, en ese terreno –vivienda– las cosas ahora parecen que aún están peor de lo que yo las dejé, de modo que cualquier decisión que tomes ha de estar fundada en esa dificultad grande, salvo que tú veas otras posibilidades por alguna relación que pudieras tener aquí. De no ser así, me parece prudente que te hagas a la idea de tener que vivir por el momento en algún hotel y, una vez aquí, explorar tú mismo las posibilidades, conseguir para trabajar que algún pintor (eso no lo creo imposible ni siquiera difícil) te deje ir a trabajar a su mismo taller y estar dispuesto a soportar la molestia que todo eso signifique.
Como ves, empiezo por lo más desagradable. Pero me atengo a lo de los malos tragos, que cuanto antes, etc. Con respecto a Claire, ayer estuve con ella y el jueves, es decir, pasado mañana, sale en avión para ahí, de modo que caí justo. Tan justo que como yo vi que no disponían de mucho tiempo, por estar en los días de maletas, preparativos, etc., no pude hablar con ella, sino en líneas generales, dejándote encomendado la tarea de, en caso necesario, exponer tú con Coppola todos los detalles necesarios. En líneas generales, le expliqué nuestros proyectos y le di cuenta de mi conversación con Horacio; le insinué posibilidades, le hice ver las circunstancias favorables de toda índole que, dada nuestra situación y conocimientos en América, nuestra experiencia de todo ello, nuestras relaciones aquí y allí, etc. podríamos capitalizar; le hablé, también, de la colaboración que Horacio podría prestar a la empresa; le hablé –a pregunta de ella– de la cifra mínima de treinta mil pesos para empezar a cubrir por una o varias personas en forma de una sociedad, etc. En fin, le hablé en líneas generales, pero durante hora y medida y la impresión que saqué de la entrevista es la siguiente: creo que ha comprendido las posibilidades reales del asunto; habría, tal vez, que insistir, en este sentido, en el hecho de que nosotros no haríamos una editorial de aquí –que andan mal ahora– sino una editorial para ediciones de lujo, que son las únicas que andan bien; ve con mucha mayor claridad, según parece, que para Horacio es una posibilidad de trabajar y hacer cosas más interesantes que plantar árboles en Muñiz, lo cual para ella es de sumo interés, tanto por Horacio como por ella misma, ya que de trabajar él con nosotros, su propia labor justificaría los viajes de Horacio a Europa. Tratando de resumir, aun cuando ni ella dijo más ni yo mismo –dado el carácter un tanto apresurado de la conversación, le pregunté– creo que le ha interesado de verdad y que una vez en Buenos Aires, hablando con Horacio y con vosotros, como le pediré a Horacio que haga, creo que realmente se decidirán y pondrán, si no todo el capital, una parte sustancial. Repito que no es más que una impresión, pero fundada en toda una serie de reacciones y demás imponderables, como se dice, que no me parecen fuera de camino ni mucho menos.
En este sentido –de busca de capitales– los días en Montevideo me sirvieron para algo: estuve con Bergamin, quien es amigo de Ussia, y por el primero supe que el segundo, digo Ussía, llegará a Francia de nuevo hacia fines de septiembre lo más tarde; ya creo haberte dicho en Buenos Aires que tengo mucha esperanza en su posible aportación, de modo que considero una suerte que venga; yo sé que él me buscará en cuanto llegue, porque le dije a Bergamin, quien había de escribirle, que le anunciase mi regreso a Francia, de modo que estará al corriente de su llegada y enseguida hablaré con él del asunto y te diré lo que haya. De modo que, por el momento, con respecto a esto me siento tan optimista que ni considero necesario hablar con otras personas –posibles capitalistas– hasta ver qué resultados dan las gestiones ya hechas. En relación con todo esto, también las conversaciones con Bergamin me han puesto en contacto con algo que eventualmente podría ser interesante para nosotros, bien que indirectamente para no correr el riesgo de perder la independencia: no sé si sabes que en París existe una revista –La Licorne– en francés y en español que financia una señora uruguaya. Colabora lo mejor de París y hasta ahora la parte española la dirigía de hecho Callois; pero justamente ahora parece seguro que se encargue de ello Bergamin, de lo cual, en principio, no hay más que felicitarse, y mucho más cuanto que de una manera general y vaga me dijo que puesto que yo venía a París contaba conmigo. De ser realmente así, quiero decir, de tener yo alguna intervención en eso, siempre será para nosotros algo útil, usado con moderación por la consideración que antes hacía con respecto a nuestra independencia. De cualquier modo, esto es aún algo lejano y aleatorio que sólo te comunico por el gusto de comentarlo y nada más.
Ahora, como datos un poco concretos, paso a darte los que he conseguido de imprentas etc:
1.000 ejemplares de un libro papel ilustración, formato 25/10 centímetros y 32 páginas, 25.000 francos en papel couché.
1.000 ejemplares, 64 páginas formato 19/12 y medio, de 30 a 35 mil. Con relación de derechos de autor de los pintores: a veces hay para los marchands, a veces no hay en absoluto y en general se supone que hay tolerancia.
Para la composición en español, en principio, como en francés.
Reproducción de documentos de bibliotecas, museos, etc. no hay derechos y basta con una autorización que se obtiene en un lugar determinado.
Precios de papel: se necesitaría alrededor de 500 gramos por libro y los precios de las clases respectivas son las siguientes: papel Japón, 20 francos por hoja; Rives et Arches de 300 a 400 francos el kilo y de 10 a 15 mil francos la resma.
Encuadernación: por lo menos 50 francos ejemplar encuadernación en cartón tipo libro de arte.
Distribución: 30% a los libreros normales; una distribución tipo Hachette (monopolio de la distribución francesa) un 20 a 25% más.
De precios de taller de fotograbado de diversas clases, te mando el folleto tarifa que va con esta: me parece más cómodo que lo leas con Varela, que intentar hacer resúmenes de las diversas cosas, que serían incompletas; como verás, en la portada, hay escrito a lápiz una anotación que dice: “más un 5% de impuestos”. Es un poco complicado y hay que leer previamente las instrucciones generales acerca de las diversas categorías; pero supongo que tú tendrás cierta experiencia y que muchas cosas que para mí resultan complicadas, por tener que consultar y que muchas cosas que para mí resultan complicadas, por tener que consultar dos otros cuadros de la tarifa, quizá para ti –auxiliado eventualmente por la gente de López o Rossi– resultarán claras y normales.
Con eso termino la parte informativa. Repito que es más que nada una anticipación de datos que una verdadera información. Pero no creo que valga la pena insistir ahora en hacer una cosa absolutamente precisa hasta no estar tú aquí y ver entonces más de cerca todo el conjunto. A ese respecto, contéstame, por favor, como van tus cosas y dime si sigues considerando la cosa –digo tu viaje– lo mismo que cuando yo estaba ahí. En cualquier caso, dame detalles y dime si necesitas o necesitarás al llegar aquí alguna gestión que yo pueda hacer por ti.
De mis cosas particulares, he encontrado a mi chico lo menos mal posible, hasta el punto de que, por el momento, le han quitado el yeso hasta ver que resultados de la primera cura; de todos modos, tiene que hacer una vida llena de limitaciones físicas por el momento y dicho se está que ha enflaquecido y se ha desmejorado horriblemente, aun cuando tengo la esperanza de que este verano, con agua y sol, que le han recomendado, más el tratamiento interno especial, se reponga. Por lo tanto, hasta donde es posible, si no puedo decir que esté contento, al menos estoy menos deprimido de lo que esperaba. Todo el mes de agosto voy a estar en la dirección siguiente: La Merigote. Poitiers (Vienne), France. Te ruego que me escribas con la rapidez que te sea posible, dándome tus impresiones acerca de todo. En estos días, voy a escribir a Coppola diciéndole, entre otras cosas, que para todo lo relacionado con el asunto de las ediciones te vea a ti que ya tienes los datos que he podido recopilar, etc. Si te llega a llamar, como espero (o si crees útil llamarle tú a el) se me ocurre que será bueno hacer una reunión con carácter de tal para entrar en detalles de cómo se podría constituir la sociedad –desde el punto de vista legal– acerca del plan mínimo a realizar, etc., etc., comprendiendo en los etc., cuantos detalles te parezcan oportunos. O si, por el contrario, te parece mejor que tras la primera carta meramente alusiva que yo voy a escribirle, sea yo quien le exponga todo, dímelo. En el primer caso y con objeto de que Claire pueda asistir, como sé que al llegar a Buenos Aires tiene mucho trabajo, quizá fuese lo mejor esperar unos quince días y entonces escribirle a Coppola (Corrientes 3060) pidiéndole una entrevista para una noche, que es cuando Claire está libre, de no ser la buena impresión general que tengo de todo, salvo lo de tu presunto taller. ¿Cómo anda lo de Varela? ¿Estela va a intentar algo? ¿Lo ha hecho ya? Vuelvo a pedirte que me des noticias de todo y cuanto antes puedas hacerlo mejor.
Para terminar, creo que desde ahora debemos adoptar el famoso lema de Calderón: “A reinar Fortuna, vamos: no me despiertes si sueño”.
Saluda de mi parte a los amigos. A los Dieste les escribo en estos días. Un abrazo a Varela. Y tanto Maruja como tú recibid el mejor recuerdo de la amistad que mi segundo viaje a Buenos Aires me ha hecho sentir más íntima y cordial con vosotros y un fuerte abrazo en prenda del que cuento daros cuando me anunciéis vuestra llegada, que espero y deseo lo más rápida posible.

Arturo Serrano Plaja

Mencionado/a
Carta de Serrano Plaja a Seoane. Sen data
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Serrano Plaja a Seoane. Sen data

Mi querido Seoane:

El mismo día que por Colmeiro tuve noticias indirectas tuyas y supe que todo seguía en pie, me llegó por la tarde tu última carta. Colmeiro, aparte de por otras cosas que luego te diré, me pidió que le diese mis impresiones para ti acerca de nuestro famoso negocio y así es posible que muchas de las cosas que haya de decirte aquí ya las sepas por él. Ocurre que luego no he podido volver a verle, como yo hubiera querido, porque he tenido una recaída de gripe de lo más molesta que me ha tenido días en cama. Bueno, así pues, voy al grano de la editorial.
No sabes la alegría que me ha dado saberte ya en marcha o, al menos, con el pie en el estribo. Como tú dices, ese trascaluerdo –me gusta mucho esa palabra– a veces nos pilla a todos, celtas o no. Pero en este caso, y no sé yo si será la gana de que todo salga según lo deseo, yo por mi parte no veo en todo sino señales para ser optimista. Me dirás acaso que en que me fundo para serlo y no sé si estaré en condiciones de decirlo muy por lo claro, ya que la realidad americana (fíjate que ya empleo esos giros realistas de comerciante nato) no la conozco ya. Pero sí sé que aquí lo único que se hace, o poco menos, son ediciones de lujo, lo que quiere decir que en alguna parte se venden. Creo haberte hablado del último libro ilustrado por Clavé –Cándido, de Voltaire– del que se han hecho sólo 250 ejemplares de los cuales los más caros a 20 mil francos y los más baratos a 12 mil. Claro que la firma de Calvé se cotiza ya de una manera un poco excepcional (para darte idea, te diré que un decorado para un ballet de Londres que le han encargado se anuncia, por la compañía, de la siguiente manera: “decorados de Picasso, Braque, Matisse, Clavé, etc”). Pero con Clavé, al menos, para algunas cosas contamos.
Por otra parte, la idea yo la siento que está al caer en manos de mucha gente y que si acaso no ha madurado, ya es únicamente por lo que nosotros podemos tener: “la experiencia americana”. Por otra, lo de Ussía, cada vez estoy más convencido –aunque todavía no le he dicho palabra– de que le interesará: tanto por ser nosotros quienes se lo propongamos como por el hecho en sí, que representa para el una oportunidad de hacer algo interesante con su dinero o el de su mujer –que tiene tanto o más que él–. Por otra, aún, tengo ya apalabrado un negocio y es el siguiente: Octavio Paz, poeta mexicano, a quien debes conocer de oídas, tiene en este momento terminado un libro de poemas. Desea particularmente editarle este año, porque este año hay en México un concurso nacional de literatura y dado que ya han tenido el premio Alfonso Reyes y las dos o tres personas susceptibles de concurrir con él, tiene muy buenas esperanzas de obtener el premio. Estaba incluso dispuesto a editarlo él de mala manera si en Buenos Aires no encontraba editor. Entonces yo le he pedido que aplace todo unos meses para editarlo nosotros y él está de acuerdo. No necesito subrayar la importancia que tendría para nosotros iniciar nuestras ediciones con un libro que sobre ser bueno en sí mismo, fuese un premio nacional en un país de América. Las señoras con quienes contamos, etc. No te voy a hacer el artículo, pero creo realmente que es muy importante. Por otra parte aún, he conseguido ver a Claire Coppola –luego te diré porque digo he conseguido– y tras una conversación con ella muy a fondo, todos mis cálculos psicológicos acerca de esto se han visto confirmados. De acuerdo con ella, yo voy a escribir a Coppola insistiendo, haciendo presión para que echamos a andar en esto, de manera que hay un indicio más de que esa posibilidad se realizará. Yo sé que, al parecer, está realizándose la venta en lotes de la quinta de Ramos Mejía de la madre de Horacio lo cual debe de darle a él una suma muy importante. Si a eso unes de nuevo Zervos, le ha dicho a Claire que Coppola debe venir, que él le daría trabajo, y que la misma Claire, por muchas y sutiles razones, desearía más bien eso, creo, terminará por andar, pese a lo suelto y alocado e inconcreto que a veces es Horacio. No te digo nada si además de todo esto tú ves la posibilidad de añadir a nuestro negocio el ramo de libras de texto.
Concretando: más optimismo que nunca. Y, por lo tanto, más apremio que nunca para que acabes de llegar de una vez, condenado. Ocurre que Ussía lo mismo puede estar aquí quince días más que siete meses. Naturalmente, yo sabré la noticia de su viaje siempre con tiempo suficiente para hacer yo la gestión si veo que aún no estás tu en el horizonte que se va a ir sin que hayas llegado tú; pero prefiero, y de acuerdo a tu carta, tú también, que estés aquí para lanzar entonces toda la artillería gruesa. Y de ella creo yo que sería particularmente eficaz si al llegar tu puedes traer, de Coppola, algo más que una promesa vaga, como las que él suele hacer. Por eso, en ese terreno, cuanto puedas concretar, será más que importante. Claire se va el día 20 de modo que va en avión, llegará el 22. Si para esa fecha aún te has embarcado, trata de ver de nuevo a Coppola –a quien yo, por mi parte, voy a escribir –por Claire o directamente– para tratar de atar cabos hasta donde sea posible. De serlo, sería también bueno que estudies y aun realices, si es posible, algo de la parte legal del asunto. Eventualmente, Baudi, por ti y por mí, creo que podría arreglar las cosas de la manera más fácil, cómoda y simple. Tú lo verás. Por mi parte, y siempre sobre la base de tener tú y yo la responsabilidad técnica del asunto, tienes carta blanca para hacer y deshacer si algo hay que se pueda ya hacer o deshacer en mi nombre.
Bueno, ahora otras cosas: Primero, lo de la imprenta: la famosa gripe me ha impedido hasta ahora hacer nada. Cuento informarme en esta semana –hoy es domingo 6–. En cuanto sepa algo, te lo diré.
De los Dieste, no sabía o no me imaginaba que su viaje fuese ya cosa al caer. Acerca de esto, por ti, por ellos, por Coppola y por mi voy a darte algunos detalles importantes. Colmeiro llegó aquí, como tú decías contando con tener lo equivalente a 500 pesos. Pero resulta que Coppola había hecho eso con toda su irresponsabilidad y resulta Claire no tenía ya dinero suficiente –lo había invertido todo en sus compras y billete de avión, etc.– de modo que sol –ha podido ofrecerle los mil francos que Colmeiro ha rehusado. Es muy típico de Horacio hacer las cosas así sin contar con Claire, etc. Lo digo no por hacer una crítica inútil, sino por prevenir a Dieste, si aún hay tiempo para ello, de que yo no he recibido carta de Horacio ni sé nada de ese dinero, ni Claire me ha dado noticias de él. Y también que si tú has pensado contar con él en ese sentido, que precises bien todo, ya que él con la mejor buena voluntad es capaz de hacerte la faena que le ha hecho a Colmeiro. En todo caso, creo mejor que él te diga como se las arreglará él para mandar plata aquí y que ponga a tu disposición el mismo conducto, pero poniéndote a ti en relación directa con la entidad o persona que sea para que tú puedas atar cabos.
Tenme al corriente –pero hazlo de veras– de tus proyectos en cuanto a la parte material del viaje. Intenta informarte como mejor puedas acerca del punto de llegada que si es el Havre yo casi seguro podré ir a buscaros. Dime fechas. Luego como los barcos a veces se retrasan un día, dime porque compañía viajas para poder estar al corriente de la fecha de llegada desde aquí. Y en último término, cuando estéis tierra a la vista, infórmate en el barco mismo y telegrafíame desde a bordo diciéndome la fecha de desembarco para organizar yo mi plan de búsqueda. Del Ávila Camacho, siento haberte dado tanta lata. No recuerdo de nadie a quien yo le haya dado tal libro de no ser, creo, Melella. Si tienes oportunidad de ver a Cimorra, acaso pudiera ser que él lo tenga por la relación que ellos tenían con el editor. Si tienes noticias de lo de Parra, no dejes de dármelas.
Para terminar: te agradezco muy de veras el ofrecimiento de traer alguna cosa. Y así, siempre que sea con la condición taxativa –¿no se dice así?– de que luego arreglemos aquí –pero de verdad– me dispongo a hacerte algún encargo siempre que no te procure dificultades manifiestas, ya que suele haber muchas pegas. Así y aparte de esos dos pares de medias nylon –tamaño grande– que cuesten alrededor de 18 o 20 pesos. Y para mí –¡asómbrate!– si te acuerdas, me gustaría tener un libro de Borges: la antología de literatura fantástica o algo así que editó creo [manuscrito:] en Emset . Insisto en que nada de lo que pido es imprescindible y por si lo traes, no puede haber cuestión en cuanto que yo te devuelvo aquí todo. Ya es muy molesto encargarte cosas como para dejar la parte material de ella en suspenso. Muchísimas gracias de antemano. Abrazos a los amigos y para vosotros los muy impacientes de iros a buscar al Havre de vuestros

Arturo S. Plaja

Mencionado/a
Carta de Serrano Plaja a Seoane. Sen data
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Serrano Plaja a Seoane. Sen data

Querido Seoane:

Aprovecho una tarde de domingo, tranquila, municipal y espesa, como es de rigor, para poder quedarme en casa y tener un mínimo de tranquilidad para contestarte aunque casi no sea necesario, ya que cuando llegó tu carta has debido de recibir tu otra mía, que sin ser contestación, si lo era. Pero de todos modos, me complazco en volver a escribirte ahora aunque no sea más que para desearte muy felices pascuas, con Maruja y tu familia y darte con ese motivo un abrazo a corto plazo, que yo le quisiera muy corto –el plazo– tanto por el gusto de verte como por el negocio.
Tiene de malo el estar tan alejado, que aún para estar de acuerdo resulta incómodo. Lo digo porque según tu carta todo anda como habíamos previsto y aún, en cierto modo, mejor. Coppola, efectivamente –ya te lo decía– me ha escrito; pero ni él ni tú me dais más precisiones. Lo cual, en principio no tendría importancia de no ser en lo relativo a otras gestiones que yo pueda hacer aquí. Por las mismas razones –levantada la liebre, como dirían ahí los porteños– que tú señalabas para concretar las gestiones tuyas para ampliar el capital, no me ha parecido hasta ahora prudente hablar con Usía. Pero lo haré, puedo hacerlo si tú crees que ya hora. Por mi parte –y el consultar tu opinión sobre este punto es el motivo central de esta carta– creo que también es mejor dejarlo para última hora, para cuando pueda hablarla de algo lo más concreto posible, como ser un plan mínimo ya determinado, fecha de tu llegada, monto del capital inicial, etc. Es más, si fuera posible –quiero decir: si tú lo consideras posible y oportuno– yo no le hablaría hasta que tú estuvieses ya aquí, estuviésemos ya en plana marcha, con algo entre manos. Por lo mismo que, en principio, tengo mucha confianza en esa gestión (lo malo sería que fracasase a pesar de mi confianza) creo que sería mucho más eficaz, de mucho mejores resultados haciéndole así como te digo. Todo el conjunto de circunstancias aludidas y muy principalmente el hecho de que tu llegada segura, creo que darían un aire de empresa lanzada que evitaría, por lo mismo que media mucha amistad personal, todo carácter ambiguo, en lo que a mi sola capacidad de negociante pueda él ver y que seguramente le llevaría a creer que, aunque de buena fe, yo no conseguiría hacer nada porque pensaría que son ilusiones mías, desconocimiento de lo que es eso etc., cosa que siendo ya dos, aludiendo a tu experiencia editorial, no conociéndote personalmente y estando recién venido a París para eso aumenta la verosimilitud y la realidad del asunto en proporciones muy grandes. No sé si he conseguido explicarte bien lo que pienso, pero no tiene mayor importancia. Si la tiene, en último término, que tú me digas qué te parece mejor –para obrar en consecuencia– que le hable desde ahora o que espere a tener noticias tuyas más precisas o incluso a que tú llegues. Dímelo, pues, y haré como te parezca mejor.
Otra cosa: lo del impresor español, si es cierto, es como te imaginas una cosa de la mayor importancia. Por lo tanto, si sabes la dirección, dámela para ir a verle enseguida. Si no la sabes, dime como se llama y porque vía te parece que puedo intentar localizarle. La galería de los catalanes que te hablaba ha hecho ya una primera exposición con las litografías de Clavé ilustrando el Cándido de Voltaire. Un éxito, por lo menos aparente. Es esa un liebre que corre mucho y que por lo tanto creo yo que en lo posible tendríamos que empezar a correrla cuanto antes. De lo del viaje de los Dieste, no sabes la alegría que me ha dado. Me ocurre con ellos que a fuerza de querer escribirles como es debido, es decir, con toda la calma y sosiego que querría yo poner con ellos, aún es la hora que no les he escrito. Y aunque estoy muy seguro que ellos no me lo tomaran en cuenta yo me lo tomo a mí mismo, ya que por mi culpa estoy sin noticias directas de ellos desde un horror de tiempo. Dales de mi parte un gran abrazo y diles que ahora, aprovechando las vacaciones que comienzas dentro de tres días les voy a escribir largo y tendido. De todo cuanto me dices acerca de Paralelo 50 y de lo del maldito Avila Camacho, te agradezco enormemente. Y más aún si a pesar de todas las dificultades logras dar con algún ejemplar del librito en cuestión.
Manolo Ángeles llegó y ha tenido –como suelo– una suerte punto menos que increíble. Picasso le acogió con la misma amistad que ya tenía de antes, lo cual, como te imaginas, es cosa de importancia. Para darte idea hasta el punto de esa amistad sólo te diré que la última exposición de Picasso, la de las cerámicas, que tanto ruido está haciendo, se la confió a Manolo en lo que al montaje de la exposición se refiere. Por otra parte, este condenado gitano de Manolo ha revivido no sé que antiguas amistades y ha dado con un taller independiente, pero perteneciente a su vieja amistad, que se le alquila y además le da pensión, todo ello no muy caro: no le saldrá con comida y ropa limpia por más de 22 o 23 mil francos, lo cual ahora es realmente muy barato y mucho más si se tiene en cuenta la imposibilidad absoluta de encontrar otro alojamiento en París que el de hoteles. Te lo digo por lo mismo que subrayo la dificultad: a pesar de ella ya estás viendo que no es imposible.
De los dibujos e ilustraciones prometidas, aunque siempre prometidas, los puñeteros pintores no acaban de reunir el primer envío. Creo que ahora con las vacaciones por delante y con la oportunidad de ocuparme yo directamente podré hacer el primer envío enseguida. Lo de La Nación y La Prensa ha sido una mala noticia, ya que me disponía a enviarle a Mallea unas notas acerca de exposiciones –Picasso, Miró– que es magnífica y que ha sido un éxito, ya que era la primera que hacía aquí después de la guerra –teatro– etc. De todos modos, acaso lo haga, pues creo que tendría interés para ahí. Si algún día tienes humor como para preguntarle por teléfono a Mallea si a pesar de todo le interesa algo por el estilo, me gustaría saber lo que te dice.
Y termino con la información que me pides acerca de cambios. Cuando yo llegue, no pidieron nada relativo las divisas que traía cada cual. Y en principio, tengo entendido que sigue la misma disposición. Pero como en ese terreno las disposiciones suelen variar todos los días, lo que me parece aconsejable es lo siguiente: traer una cantidad –mínima– en divisas dispuesto a declararla si te piden que lo hagas –lo cual suele ocurrir, digo lo que digan a ese respecto– el día antes de llegar a puerto y el resto de extranjis. Dada mi experiencia personal, lo mejor es traer francos suizos, que siguen siendo una moneda muy fuerte y, sin embargo, menos molesta en cuanto a la vigilancia central, etc., que el dólar. El franco suizo se ha cambiado aquí –cuando yo tuve oportunidad de hacer el último cambio– a razón de 114 francos de aquí por uno suizo –y eso teniendo la clara sensación de que por tratarse de una cantidad muy chica me robaban el cambio. No creo que sea difícil obtener 120 o cosa así por cada franco suizo. Para completar este capítulo haría falta saber lo que te cuestan ahora ahí los francos suizos, pero eso tú lo puedes ver –y eventualmente– tratar de obtener una parte al precio oficial de ahí, que yo sé que en ciertos casos se puede hacer, aún cuando yo no pude, lo cual te dará una diferencia que una vez traducida será de consideración. Aunque mucha gente es partidaria de eso, yo no creo que te convengan los famosos travelers cheques (supongo que se escribe así) que aún cuando son moneda fuerte, están más controlados. Para gente como nosotros –salvo que el plural no te corresponda si acaso pensáis venir con una fortunita– me parece que sigue siendo la mejor la manera aldeana de traer tus billetes suizos contantes –aunque no sonantes– sobre los cuales en cantidades no grandes como digo no hay nada más que la molestia de cambiarlos– y no hay tal molestia porque hay gente que no se dedica más que a eso. Nada más de política financiera.
Entérate –o, si te has enterado ya, entérame a mí– de como piensas venir, quiero decir en barcos de que compañía, etc. y a que puerto piensas llegar. Si en iguales condiciones puedes llegar a Le Havre, sobre ser más barato, ya que está mucho más cerca de París que los otros puertos, tendría la ventaja de que, salvo imprevistos, si se la fecha precisa en que llegáis, os iría a buscar al puerto y trataría de echaros la clásica mano en el desoriente primero de cuando se llega por primera vez a un país que no se conoce, como, según creo, es vuestro caso. De no ser así, dime de todos modos adonde cuentas llegar y yo veré si me es posible ir de todos modos. Y nada más. Contéstame enseguida –el porvenir es nuestro– con el único inconveniente de que el tal no se acabe de hacer presente.

Un abrazo fuerte para los dos de vuestro

Arturo Serrano Plaja

1948-10-25 Mencionado/a
Carta de Serrano Plaja a Seoane. 1948
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Serrano Plaja a Seoane. 1948 en 25/10/1948


25-10-48

Querido Seoane:

Hace unos días, recibí tu carta y, tan pronto como puedo, quiero ponerte unas letras aunque no sean, propiamente hablando, contestación exacta y precisa a las diversas cosas que me preguntas. Y antes de ello y para empezar, también deseo decirte que me ha alegrado mucho tu carta así como el estado de ánimo que me deja entrever. Estupenda la correlación de precios que me dices que nos permitirá trabajar más fácilmente. Estupenda, igualmente, tu gestión para buscar otros capitales. Y aunque te agradezco mucho la delicadeza de preguntarme si me parece bien lo que hayas hecho, dicho se está que me parece doblemente bien por el solo hecho de hacer así. Por lo tanto y una vez que digo eso, no tomarás a impertinencia, ni con respecto a ti –en ningún caso– ni con relación a nadie en particular, que te haga un aclaración –aclaración, que no reserva– y que es la siguiente: así como en lo material ni me importa ni me preocupa una participación en los hipotéticos beneficios de nuestro negocio de cuantas personas, por una u otra razón, deben participar –y aún sin deber en ello– si me agradaría que en la parte de trabajo, a la hora de tener que tropezar con dificultades, etc., tuviéramos que tener relación de responsabilidad con el menor número de personas posible. Y aun no sólo de responsabilidad, sino de colaboración. En un plano abstracto, yo diría que casi me gustaría que, una vez tú aquí, fuésemos tú y yo, de ser ello posible y siempre que tú estuvieses de acuerdo, quienes tuviésemos las tareas de dirección, ya que de una manera concreta, además somos quienes vamos a encargarnos de ello. Repito que no debes ver en ello más que eso que se dice del ideal remoto, etc., y no motivado por causa alguna que yo pueda explicar muy bien en este momento, sino por una especie de misantropía –¿se dice así la manía de no encontrar mucho gusto en ver a mucha gente?– que a veces me hace dudar de mi capacidad (para) sostener relaciones claras y abiertas con la gente. Dicho esto, que encomiendo desde luego a tu juicio y discreción, tú, a la hora de tener que organizar legalmente papeles y cuestiones, resolverás contando, desde luego, con mi confianza mayor. ¿Necesito insistir en lo infundado de todo esto?
Bueno, paso a hablar de otras cosas. La cuestión vivienda, claro que es lo más grave. En cuanto a pensiones y precios, me enteraré tan pronto como pueda y te diré lo que sea. Por otra parte, ahora comienza a haber muchos anuncios de venta de departamentos a treinta y cuarenta mil francos por pieza. Lo cual no significa que sea una ganga –sobre todo porque, al parecer, los de esos precios no tienen comodidades. Pero eso puede darte una idea. Desde luego no siendo en París mismo, yo sé que es mucho más fácil y, si Palmeiro que tienen muchas más relaciones prácticas que yo en París te ayuda seriamente, tampoco creo que insoluble, aunque sí, complicado. Por el momento, y pese a que yo averiguaré lo (que) pueda, insisto en que todo plan debe de estar basado en el supuesto de que para empezar habríais de resignaros a hacer vida de hotel –pensión– durante cierto tiempo y luego volver vosotros mismos.
De cuestiones generales y políticas. En lo de ser buen o mal momento con relación a la vida material de aquí, no creo que ya en este momento de la historia se pueda hablar de eso. Todos son buenos o malos, según se quiera. Clave, en esto días, ha vendido absolutamente todo lo que tenía pintado en París, hasta el punto que para conservar un cuadro suyo, ha tenido que comprarlo el mismo. La vida sube, siempre; pero, como dices, eso parece que ocurre en todas partes, de manera que hay que suponer que todo se arreglará. Además porque, al subir la vida, suben los precios automáticamente, claro, y nosotros haríamos como todo el mundo, dicho se está. En lo político de aquí, estos días se está ventilando una crisis decisiva; yo creo que del resultado de las huelgas mineras depende, provisionalmente al menos, toda la situación. Si esta, de un modo o de otro se estabiliza, así quedará; si estalla la guerra civil, ya lo verás por los periódicos. Yo –aunque a lo mejor para fastidiar mi pronostico el destino me desmiente– no creo en ella. En cuanto a la otra guerra, aunque ni Truman ni Stalin se toman la molestia –ya sabes que son unos groseros– de comunicarme su opinión, supongo que a ti tampoco, tampoco creo, ni la gente que se tiene a sí misma por bien informada, que pueda haber guerra –salvo imprevisto– antes de algunos años –tres o cuatro como mínimo–. Pero, naturalmente, todo esto es pura opinión, como bien se te alcanza –que, por lo demás, tampoco tú me pedías otra cosa–. Entre tanto, lo que sé es que ayer Elsa Triolet en la fiesta que aquí es equivalente del Día del Libro o algo así vendió libro por valor de un millón setecientos cincuenta mil francos entre las cuatro de la tarde y las ocho y media de la noche; que París, haciendo abstracción de todo lo demás, de las famosas procesiones que van por dentro, etc., está maravilloso en un otoño hasta ahora suave. Que hay dificultades para todo, evidentemente, pero que la gente vive como si no las hubiera –lo cual puede ser igualmente avestrucismo, si luego resulta que hay guerra o simple buen sentido, si ocurre que no la hay y que no valía la pena estar preocupados por fantasmas: vaya usted a saber.
Hace poco días, ha llegado Ussía. Pero aún no le he hablado ni le hablaré de nuestro proyecto hasta saber en que estamos ahí en lo de Coppola y demás. Por la importancia que concedo a su posible aportación, hasta diría yo que casi sería preferible –siempre que se pueda– aplazar este aspecto hasta que ya hubiese algo mandado: creo que sería mucho más positivo y eficaz. Tú me dirás lo que piensas en la seguridad de que, en principio, yo tengo la mayor confianza en la gestión que pudiera yo hacer con él.
Y ahora, para terminar esta carta, te quiero hablar de dos cosas. Una, de carácter personal, es un favor que tengo que pedirte. Y que, aunque sea un poco molesto y aburrido, cuento contigo, estoy seguro, para realizarlo si es posible: imagínate que de un libro que yo escribí, y de cuyo nombre quisiera olvidarme, lo he intentado en vano, y que siempre me ha molestado, ahora necesito recordarle: Avila Camacho ¿te puedo pedir que me busques, con la prisa que te sea posible, unos cuantos ejemplares –mínimo tres, máximo cinco– y que me los envíes por avión? El libro en cuestión está editado por Americale, editorial que no sé si continúa existiendo. No sé si se encontrará el libro o si lo habrán tirado a la basura. Ahora lo necesitaría, me sería muy importante –por razones surrealistas– tenerlo y, por tanto, te encomiendo esa lata –dicho de esta que de la parte material no, y que espero que me digas lo que sea y que allí o aquí, como te sea más cómodo a ti, arreglaremos la cosa–. Aunque te parezca pintoresco, insisto en que para mí es algo importante, de modo que en función de la importancia te agradeceré que me digas lo que hay de esto y que, de ser posible, me envíes los libracos tan pronto como puedas, por avión.
La otra cosa de que quiero hablarte, por el momento no lo hago aún –aunque dentro de muy pocos días espero que ya no será necesario– en el plano de la mayor confianza, puesto que aún no hay nada concreto: ocurre que los checos aquí hacen un seminario literario, que tiene toda la mejor colaboración de París –de los escritores de izquierda, el mismo grupo de firmas conque cuenta Les Lettres Francais– y probablemente me voy a encargar yo de hacer la misma revista en español, para América. Dispondría, en ese caso, de toda la colaboración francesa y aparecida en francés, más el material en español que yo buscaría en América entre americanos y españoles refugiados, para publicar en la edición española y también en la francesa que se hace aquí en París –lo cual creo que interesaría a mucha gente–. Como te digo, aún no es seguro, peor es muy probable y en la semana que viene voy a saberlo con certeza. Dispondré de medios, se pagará bien. Se enviará en principio ahí, a Montevideo, a México y Caracas. El problema más serio sería el envío que habrá de ser por avión seguramente, lo cual es carísimo. La revista se llamará Paralelo 50 y en español, para empezar saldría una vez por mes. Como ves, sería muy interesante en sí mismo, pero además para nosotros tendría, creo, un doble interés, por la posibilidad que nos daría, si anda bien, de tener un medio de contacto con los medios literarios de esos países. Si se concreta el asunto, te escribiré enseguida para pedirte una mano, en el sentido de que, mientras esté ahí, me ayudes a todo lo que de organizar la distribución ahí y en Montevideo, me des consejos que te parezcan útiles en todo lo referente a eso y en la busca de colaboraciones, así como en la publicidad y difusión de la revista. Para ello, en cuanto sepa algo más concreto, te enviará ejemplares de la revista en francés. Creo que en algunos periódicos me podrían dar la clásica manita o empujón. Y luego, desde otro punto de vista, estoy seguro que tendría el apoyo político que merece. Aunque, como ves, esto aún no es demasiado preciso, me gustaría que me dijeses qué te parece. Yo empezaría a trabajar pronto en todo ello, pero la revista no aparecería hasta marzo, para coincidir con el verano ahí. ¿Crees que tendrá alguna posibilidad? A mí me parece que una vez que lectores y escritores se percaten de que se les ofrece en español un revista mensual que es semanal en París y que tiene las mismas colaboraciones que aquí alguna chance, como dicen aquí, no deja de tener. Ya me dirás tu opinión. Por el momento, no lo comentes, puesto que repito que aún no hay nada fijo.
Y con esto termino. De mi personalmente, tendría tanto que decirte que más vale no decir nada, porque si no sería el cuento de nunca acabar. Si como espero y deseo vienes pronto, ya tendremos ocasión de hablar, y por los codos. Ah, añado una noticia: se hace aquí estos días una exposición de la Resistencia española. Entre el poco material interesante que hay, se cuentan muchos libros que personalmente he prestado yo y que se exhiben en la rue de Recamie entre ellos, los de Dieste y el de Varela. Díselo. Acaso les resulte agradable saberlo.

Un abrazo para Maruja y para ti de vuestro amigo

Arturo

[Manuscrito:] No sé si anoche, cuando escribí esto, me acordé de decirte que ahora trabajo ya en el Liceo, que me quita no poco tiempo. Hasta pronto. Abrazos.

1948-11-02 Mencionado/a
Carta de Serrano Plaja a Seoane. 1948
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Serrano Plaja a Seoane. 1948 en 02/11/1948


2 noviembre 1948

Querido Seoane:

Como te dije en mi última carta, vuelvo a escribirte ahora, con mayor frecuencia, ya que me parece que así debemos hacerlo en relación con nuestros proyectos. Además y no sé bien porque irracionado optimismo, en estos últimos días, tengo la impresión de que todo puede salir bien y de que podemos hacer algo interesante tanto en general como para nosotras.
Y ahora quiero darte algunas noticias de carácter concreto. El domingo –hoy es martes y ayer lunes día 1 fue fiesta, de modo que escribo sin perder tiempo– reuní a todo el grupo de pintores españoles en casa de Gondoy para hablarles del proyecto colateral de la posible venta de grabados y dibujos ahí. Los que se hallaban presentes –pues hay algunos en Estocolmo, que el colectivo pictórico español, desde Praga no para y hace exposiciones generales y particulares en toda Europa– asintieron y estuvieron conformes en dar toda clase de facilidades. En principio, en esta semana, tendré preparado un primer envío que te haré en cuanto llegue a mis manos. Con respecto a esto –yo, por mi parte, trataré de volver a escribir acerca de ello en La Nación– creo que será conveniente subrayar por todos los medios un creciente éxito del grupo español de París el cual no sólo recorre toda Europa, como te digo, sino que está creando imitadores y ya hay –aunque informe y sin la fuerza de manifestación del español– de otros grupos nacionales que pretenden ser de su nación en París, el inglés y el húngaro. Están asombrados de la cohesión del grupo español, de su consistencia y su fraternidad –y de su éxito–, naturalmente, de modo que una agrupación por el solo hecho de que está basada, no en algo externo y ajeno a cada uno de sus componentes, sino en la apreciación general que cada uno tiene por los demás, aunque entre ellos, como es lógico, haya sus cosas, pero que no trascienda afuera. Bueno, todo eso digo, así como el éxito del grupo español de la escuela de París, creo que conviene subrayarlo, tanto por motivos generales como en relación al proyecto de introducir sus cosas –pictóricas, se entiende–, ahí.
En dicha reunión, estaba entre otros, Palmeiro, con quien hablé largamente de ti y de tus proyectos. El me confirmó lo que tú me dijiste que te había escrito, pero se mostró dispuesto a echarnos una mano en lo que pueda. Y en todo caso, se comprometió, formalmente, a prestarle su taller, como vivienda, a tu llegada por un tiempo de socorro, hasta que tú veas y busques algo. Desde luego, te repito que la cuestión vivienda es el hueso; pero si tienes donde llegar, luego algún hotel pensión sin la angustia de tener que encontrarlo el día de tu llegada etc., creo que podrás arreglar por ti mismo lo que te convenga. O en el supuesto de que tengas dinero y de que consideres la posibilidad de instalarte aquí en serio, con plata de ahí, podrás comprar un piso o un taller por el mismo precio, o menos de lo que ahí cuesta ahora, alquilar uno. De todo ello, espero que me hables y que no pese en tu ánimo más de lo debido. Que acaso cuando llegues, pueda yo si nos pusiéramos de acuerdo –que sí que nos pondríamos– intentar buscar una solución común, ya veremos, dependerá de varias causas el que yo pueda estar o no en condiciones de volver a hablarte de esto. Por otra parte y en relación con todo esto, dentro de un mes o dos piensa ir ahí otro del grupo, Parra. Si todavía estás tú ahí, ya le daré cartas para ti o en tu falta para los amigos. Lástima que yo no haya sabido antes ni que el se iba ni que tú persistías en tus proyectos, que de otro modo el te hubiera dejado su taller por el tiempo que permaneciese fuera.
Lo digo porque aun cuando me dijo que ya lo tiene comprometido, quizá no sea imposible volver sobre eso. Y, en fin, aunque yo no sepa decirte ahora cómo, tengo la evidencia de que una vez aquí, tras un tiempo no muy largo, conseguirás resolver las cosas. Te repito que no sé cómo, pero que todo el mundo arregla de modo que tú harías como todo el mundo. Bueno, volviendo al envío, el primero incluirá, por lo menos, cosas de Clavé, Domínguez, Palmeiro, Gondoy, Parra, Manuel Peinado y Viñes, mas, eventualmente –o para el segundo– de Flores, Bores, etc. Luego te mandaré cosas de franceses y de un checo, Sokol, muy bueno que ahora expone aquí con mucho éxito.
Con mayor relación o más directa con lo nuestro, quiero decirte dos cosas: una, que lo de Paralelo 50, aunque todavía no se ha resuelto, está por resolverse y casi con toda seguridad, positivamente. Por otra parte, el éxito de la venta anual de libros que aquí realiza el Comité Nacional de Ecrivains, me ha persuadido de que es el momento para hacer lo que proyectamos: no te puedes dar una idea de lo que fue. Elsa Triolet, por ejemplo, en el transcurso de la tarde, vendió libros por valor de un millón setecientos mil francos. Y así mucha gente. Y como entre lo vendido había mucho, por no decir casi todo, el libro de lujo, ya te figuras que me ha dado una especie de índice de nuestras posibilidades que, aunque nunca sería lo mismo, pero de alguna manera tendría que ver con lo que yo vi. Creo, por ejemplo, que con el ofrecimiento que los mismos pintores me han hecho –ilustrar todos un libro mío– ya podría intentarse un negocio o poco menos, por primera vez en mi vida –o si no es que me equivoco de medio a medio– pero, naturalmente, por el momento y mientras no sepa mejor el estado de tu viaje, no pienso hacer nada sin contar contigo y sin volver a hablar de colecciones, etc. Otro dato de interés general es que Octavio Paz, que está aquí, tiene concluido un libro y quiere editarlo sin que por el momento esté decidido a dárselo a nadie. Otro dato es que el embajador de Venezuela aquí ha resultado ser admirador mío; que el encargado de negocios que estos días va a Praga, es un poeta Otto de Sola, muy amigo mío. En fin, que estoy optimista y que lo que necesito es que me des noticias de ahí.
Lo necesito y con urgencia entre otras razones por la siguiente: Ussía piensa permanecer aquí, un plazo que por lo menos irá hasta mediados de diciembre y quizá más; pero nosotros debemos contar conque quizá no se quede más. De tal modo que hasta esa fecha, pero no más tarde, tengo yo para hablar con él de nuestro proyecto. Mas para ello y en función de las razones que te daba en mi última carta, necesito saber, con la urgencia que se pueda, lo que resolvéis ahí. ¿Has hablado con Coppola? ¿Y Torrallardona? ¿Te parece bien –debo o no hacerlo– que yo vuelva a escribir a Cóppola? Creo que te darás cuenta de que el hecho de que Ussía esté aquí es una suerte grande y que, por lo tanto, en principio no podemos perderla, creo; mas por ello, para dar seriedad al asunto, me parece imprescindible poder ofrecerle algo ya concreto, en marcha, de modo que vea él que la suya sería una aportación a algo y no una mera iniciación hecha sólo en nombre de la amistad, ¿no te parece? Contéstame a todo esto, aunque sea dos letras, pero en las que me digas, escuetamente, lo que hay de cada cosa y lo que tú piensas de ellas.
De mis cosas particulares que te hablé el otro día, dos preguntas. Primera –y para que me contestes un poco abultímetro– ¿cuántos ejemplares de Paralelo 50 crees tú que podrían venderse ahí y en Montevideo, contando con una propaganda más o menos buena y con el hecho de saber que tendría buenas colaboraciones de aquí y de ahí? Ya sé que es muy arriesgado decir alguna cifra, pero de todos modos te agradecería que me la digas para tener una idea. La otra pregunta, ¿has podido hacer algo en relación con los ejemplares del Avila Camacho que te pedía en mi anterior? Creo haberte dicho que me los mandases por avión; pero no estoy seguro de haber dado por supuesto, como es natural, que lo que materialmente suponga ese envío –forzosamente caro– corre por mi cuenta y del modo que tú me indiques. A título de indicación o sugerencia, alguien me ha dicho que la Fama de ahí acepta encomiendas aéreas, las que naturalmente saldrían más baratas que el envío por avión normal, siempre que acepten como encomienda algunos libros. Te agradecería mucho que me tengas al corriente de esto también. Y con ello, creo que por hoy no tengo nada que añadir, sino que estoy deseando recibir carta tuya y, mucho más, saber en qué fecha te embarcas. Muchos recuerdos a los amigos. Y para Maruja y para ti, un abrazo de vuestro

Arturo Serrano Plaja

1951-08-07 Mencionado/a
Carta de Seoane a Dieste. 1951
Bos Aires
Cambridge [nac. Inglaterra]
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Dieste. 1951 en 07/08/1951


Buenos Aires, 7 de agosto de 1951

Sr. D. Rafael Dieste
Cambridge

Querido Dieste:

Tienes que perdonarnos por la demora en enviar el paquete de tus notas y trabajos. No tenemos disculpa alguna porque cierto es que desde pocos días después de recibir la carta donde nos encomendábais el encargo, lo retiramos de vuestra casa de la calle Lavalle con la intención de enviarlo inmediatamente. Y es que estos meses han pasado vertiginosamente sin que haciendo un balance de lo hecho en ese tiempo resulte muy favorable. He pintado mucho, todo lo que pude, no sé si con progresos o no, afirmando en cierta manera la dirección de mi pintura última, la de los pocos cuadros hechos en París y en Londres. Creo que he conseguido afianzar lo que puede tener de personal a la par que me planteé, me planteo, problemas más de acuerdo con el arte general de nuestros días, suponiendo que la síntesis y la visualidad sean dos de sus características más importantes y que desde luego vienen personalizando mis obras últimas. El 1º de octubre inauguro una exposición en Viau y aguardo pacientemente a que los pocos de siempre se fijen en ella. Toda la otra parte importante de mi tiempo está destinada a la edición de algún que otro libro que ahora faltamente tiene que pagarse el autor dado los precios inverosímiles que alcanzan las ediciones, y a mi trabajo cada vez mayor del Centro Gallego. Estos días está abierta al público una exposición de obras de siete artistas gallegos, seis pintores y un escultor, organizada por el Centro Gallego de acuerdo con gente de Galicia. De los pintores los más interesantes son Maside, Laxeiro y Prego de Oliver. Maside, aunque no envió obras muy destacadas, es seguramente a mi juicio el más inquieto. Sin embargo la sensación general que produce es de que unos y otros se detuvieron en 1936 y renunciaron a cualquier inquietud, a cualquier deseo de conquista artística. Cuadros de gran formato, aparatosos, excluyendo a Maside, sabidos de dibujo y de color. La mitad de los que trajo Laxeiro son aproximadamente del año 32 y son los mejores de él. Estos días tambien se celebra una exposición de Clavé y dentro de un mes se realiza una general del grupo español de París simultáneamente otra de Palmeiro que llegó nuevamente a Buenos Aires, su Eldorado. Esto es todo o casi todo. Me gustaría encontrarnos de vez en cuando con vosotros, Espasandín y Varela, pero no creo que esto vuelva a ser posible. Varela está en Montevideo, creo que estará todo lo que falta de este año. No sé bien como se defiende, alguien me dijo que dá clases particulares de castellano a algunos extranjeros. No sé si es cierto. De Espasandín no sé nada y vosotros estáis lejos. Buenos Aires que ha crecido, que crece, que se extiende, no es el mismo de cuando todo estábamos juntos, nos reuníamos en el Café Tortoni. Todo está peor que en esos años. Para cuando regreséis si aún tenéis deseos de volver, puede estudiarse la posibilidad de hacer algo con el Centro Gallego, artículos, conferencias o lo que sea si para entonces existe una Junta Directiva con el ánimo dispuesto a ello, pues vosotros sabéis bien que no existe una conducta fija ni una línea que ellos sigan para que pueda conseguirse en cualquier momento alguna de estas cosas. La única conducta permanente de ellos está referida a los banquetes que aunque por el precio actual de todo se organizan menos, no dejan de hacerse con cualquier pretexto. Todo lo demás les importa poco, incluso Galicia que ellos aparentan que les importa mucho.
Las últimas noticias de España son decepcionantes y hoy acabo de leer una procedente de Lisboa referida a una carta de Don Juan en la que parece que éste luego de pedir la implantación de la monarquía se refiere a su adhesión durante la guerra al programa del caudillo.
¿Qué tal el festival de Inglaterra? ¿Vistéis pintura contemporánea inglesa? Me gustaría que me escribiéseis sobre esto. Aquí estamos cada día con menos noticias del mundo. Tambien quisiera saber si has escrito algún nuevo libro, si trabajas mucho, si te deja tiempo libre la labor universitaria. Algunos amigos preguntan permanentemente por vosotros. El otro día encontré a Lisa en una sala de exposiciones y me pidió que, si os escribía os enviase saludos, etc.
Termino aquí. Recibid los dos un gran abrazo de:

[Seoane]

1952-12-14 Mencionado/a
Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1952
Bos Aires
París
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1952 en 14/12/1952

Buenos Aires, 14 de diciembre de 1952

Sres. Esther y Lipa Burd
París

Queridos Esther y Lipa:

Hace ya muchos días que debiera haber contestado la espléndida carta que nos enviaron, tan llena de alegría y de entusiasmo. El no poder contestar de igual manera, porque nos sentimos precisamente alejados de toda esa vida que Uds. Van ahora conociendo y que con pequeñas variantes es aproximadamente igual, creo yo, en toda Europa, hace que deseemos fervientemente las cartas que vienen de ahí, de cualquiera de esos países y que luego sintamos una gran pereza para contestarlas. Buenos Aires es una ciudad de seres desarraigados y nosotros somos unos desterrados más que no podemos olvidar ni esconder nuestro destierro, lo recuerda nuestro acento, nuestras preocupaciones, y los demás se encargan tambien, a veces por maldad, de recordárnosla. Cada hombre está en esos países de alguna manera afincado a la tierra, pueden tener una vida sórdida, ser sórdidos ellos mismos, pero su vida es una vida humana con un sentido oculto en cada uno que le orienta hacia la colectividad. La obra de sus manos está destinada al hombre para hacerle gozar o para herirle pero es una obra humana. Todo aquí es demasiado nuevo, recién estrenado, para que tenga ese calor, el calor del uso, de la costumbre que tiene una ciudad europea adaptada por los siglos al hombre y que París tiene como tantas otras y más que algunas. Pasear por sus calles, bordear el Sena, detenerse junto alguna pequeña iglesia gótica o románica, lo mismo que pasear por sus avenidas construídas en el siglo pasado, o pasar una tarde en ese jardín tan solitario y silencioso a pesar de estar en el centro mismo de la ciudad, como es el del taller que perteneció a Delacroix, vale bien el viaje a esa, aunque no hubiese museos, teatros y cafés, basta sólo ese aire gris, esa vieja atrabiliaria, tallada como una gárgola que pasea la calle, ese mendigo que podemos ver que aunque lo sea no dejó de ser hombre por serlo. Pero además están los museos, y los espectáculos y los cafés. Ahí están reunidas en los museos las obras de centenares de generaciones hechas cada una de ellas con amor y con sabiduría, con ese saber que se viene transmitiendo de maestros a aprendices y que para nosotros los pintores, los artistas plásticos en general, es la verdadera escuela. ¿Qué puede enseñarnos nadie más que esas esculturas egipcias o asirias, románicas o góticas con su sola presencia? Por mi parte participo, Lipa, de su misma admiración ante ellas y creo sinceramente que la escultura desde entonces no ha hecho más que retroceder o por lo menos no hacia delante un solo paso hacia delante. ¿Cómo podemos comparar el móvile de Calder, puro juego gracioso e intrascendente por bello y decorativo que él sea, con el sarcófago tallado a que Ud. Se refiere? Algunos dicen que cada época lleva consigo un estilo y no es verdad, porque en cada época se cruzan y chocan uno o más estilos y el de Calder, y este es un ejemplo, no es el estilo de nuestra época sino uno más entre muchos que quizás mueran dentro de cinco, diez, veinte años y pasen al capítulo de curiosidades. En Buenos Aires estamos iniciando nuestra época Calder, una fiebre que durará seguramente algún tiempo, todo el tiempo que tarde en llenar el marcado de monografías de algún otro escultor más reciente o haga Romero Brest un viaje al exterior para beneficio de sus discípulos; e iniciamos nuestra época Clavé en pintura y todo lo que en éste pintor es personal, lucha consigo mismo, pasa a ser en las galerías de esta capital del dominio común por la ligereza torpe de algunos que fueron últimamente a París y que no vieron lo que Vd. Vió porque estaban excesivamente preocupados por la novedad, la moda, que en el arte tiene sus raíces en el fondo de la historia y que Marc-Chagall o Picasso, o Rouault han venido encontrando sus medios y sus soluciones en el estudio de las obras del pasado más que en ninguna otra fuente. Picasso sobre todo ha extraído lecciones, las más fecundas del arte de nuestros días a mi juicio, precisamente del pasado.
Aquí hubo una buena exposición de dibujos y óleos de Spilimbergo en la que se destacaban a mi juicio los dibujos, firmes, vibrantes de línea, expresivos que ahí, en París, hubiesen alcanzado verdadera resonancia. Y casi nada más, una exposición del grupo “La Jaula” que como este apelativo se encarga de revelarnos nos dá cuenta de un grupo de artistas encerrados por propia decisión en puras fórmulas, en reglas consideradas actualmente muy “art d´aujour´hui”, en general bastante mal digeridas y de las que se copia la apariencia externa. Una buena exposición del grabado alemán “degenerado” en la que se destacaban los expresionistas. Ahora a fin de año en Plástica y en Bonino un mercado de las pulgas de objetos viejos antes de su estreno en donde en Bonino hay algunas realizadas por mí de las que me arrepiento, por ellos mismos y por haber aceptado entrar de esa manera en esa especie de comercio al menudeo.
Estoy bastante de acuerdo en lo que Vd. Dice refiriéndose a Lhote, ejemplo de pintor que cada día se desvanece más a pesar de su perfecto conocimiento de todas las reglas, pero esto que como pintor no ayuda a su obra le hace útil, a mi entender, como maestro.
En resumen, estamos aquí envidiosos de Vds. Y esperando pacientemente irnos a nuestra vez mientras sea tiempo. Por mi parte trabajo lo que puedo, hice algunos cuadros nuevos y estoy contento, sino de los resultados, de trabajar. Estos días a pesar del tiempo desigual lucen los árboles y las flores de Buenos Aires, los jacarandás de la calle Santa Fé y de Caballito Sur, los paraísos y las retamas. A Perla y Enrique los vemos a menudo y a Vds. Les extrañamos mucho. Perla nos cuenta de Vds. Y por ella vamos recordando de París todo lo que Vds. Ven. Nos alegró mucho que hubiesen simpatizado con Angeles Ortiz que es un espléndido amigo además de ser un gran artista.
Este mes saldrá el tomito de retratos de Botella al Mar, les enviaré un ejemplar tan pronto como salga. Bueno, creo que por el momento esto es todo. No se olviden de nosotros y a Lipa le recuerdo además el encargo de [Le] Crapouillot, si tienen tiempo y ganas de hacerlo. Un gran abrazo nostálgico de:

[Seoane]

1954-01-11 Mencionado/a
Carta de Serrano Plaja a Luís e Maruxa Seoane. 1954
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Serrano Plaja a Luís e Maruxa Seoane. 1954 en 11/01/1954


11-1-54

Queridos Seoane y Maruja:

Si yo no tuviera una confianza ilimitada en vosotros, creo que no me atrevería ni a escribirles. Mas como sí que la tengo, abuso de ella, viniendo así a ser esta carta un verdadero abuso de confianza. Lo peor de todo es que ni siquiera tengo una excusa para presentar por haber dejado de escribir durante tanto tiempo. No me ha pasado nada, no me he muerto ni he tenido cálico biliar, ni me han metido en la cárcel ni nada. Nada.
¿Qué, pues, deciros, a más de desearos y de muy verdad –aunque tal vez ya vosotros no creáis en verdad ninguna que venga de mi parte– que os vaya lo mejor posible en 1954? Bueno, sí, algo más puedo deciros –siempre con la intención de justificarme, si es que puede, ante vosotros y que será algo vago, pero que me permitiréis que lo deje así: digamos que he estado tan aburrido de mí mismo durante tanto tiempo que ni siquiera por correspondencia me atrevía yo a exponer a mis amigos al contagio de enfermedad que tan pesada resultaba ya para mí mismo.
En fin, yo pensaba ya escribiros estos días, de cualquier modo. Pero la puesta en marcha, o si queréis, el acicate para hacerlo de una vez ha sido la llegada, ayer, de una tarjeta postal de Schoemberg. Sí, figúrate tú, Luis, de él mismo. De manera que casi me dan ganas de sacar a relucir lo de los escondidos caminos de la Providencia, etc. Claro está que tú has comprendido ya y entonces no te extrañará mayormente: la dicha tarjeta era tuya, en el sentido de que era la reproducción de algo tuyo. Te aseguro que cuando he dicho antes lo del acicate, casi tiene un sentido literal, porque al verlo fue como si de verdad la vergüenza me diese un formidable espaldarazo para decirme: “de hoy no pasa”. Y aún con todo, pasó de hoy, ya que esto fue ayer. Pero al fin y al cabo aquí estoy. Y no sólo para escribiros y deciros que os deseo muy buen año y alegrarme de que os vaya lo mejor posible, y recordaros mucho más que mejor, sino también con la formidable pretensión que sigue: yo quiero saber que, a pesar de todo, no estáis enfadados conmigo. Lo cual quiere decir que, aun reconociendo que tendríais más que derecho a ello, yo os ruego que no sea así; y que si lo era, que me perdonéis y que tal manera de perdonar se manifieste aunque no sea más que en dos palabras –literalmente, dos palabras– pero que me lleguen pronto. Ale, sed buenos y hacedlo, pero ahorita, ya mismo.
Las tales dos palabras es lo que podríamos llamar la ración mínima; peor no está de ninguna manera prohibido que se multipliquen, como los panes y los peces. Ni –tampoco– que fueran para anunciarme o, mejor, confirmarme el anuncio que algunos amigos me dieron de que pensáis volver por aquí. Esa, por ejemplo, sería una excelentísima manera de desearme buen año para el 54.
De mí, no sé bien que podría contaros. Vivo, que no es poco, aunque como antes os decía, por momentos soportándome apenas, lo que es más que mucho, como pesadez. Escribo, no mucho, algunos poemas como resultado concreto. En prosa, tengo comenzadas tres novelas que han sido otras tantas derrotas para mí ya que ninguna he conseguido terminar. En los momentos de optimismo me da por echarle la culpa a Francia o, con más precisión, a mí mismo por seguir viviendo aquí. Pero ya digo que se me ocurre en los momentos de optimismo. Por lo demás, y por lo que sé de los amigos míos que andan por ahí (y ahí es desperdigados por América) parece que tampoco se sienten contentos, y entonces yo trato de consolarme con ello, por lo mal de muchos, consuelo de tontos, pero consuelo al fin. De vez en cuando traducen por aquí alguna cosa mía. Y en estos últimos meses que acaso siento una mejoría en el sentido de que me siento con mayor acopio de energía (que me da de sí por lo menos para tratar de escribir a los amigos de quienes me acuerdo con simpatía) me he hecho algunas promesas solemnes de las que no me atrevo a hablar, porque yo mismo no estoy muy seguro de cumplir. Por de pronto, hace algún tiempo mandé una novela mía a México donde, al parecer, la van a publicar. Pienso hacer otro tanto con algunos poemas. Leo lo que puedo. Voy a las exposiciones (a propósito, la última de Clavé que yo no sé si es buena o mala, aunque a mí me parece que es buena, ha tenido un éxito sin precedentes: el mismo día de la apertura, en Drouan David, había vendido todo) aunque no a todas. Alguna vez veo a Colmeiro, muy de pascuas a ramos y para jugar una partida de ajedrez que le gano invariablemente lo que le da una furia realmente divertida y me hace unas teorías formidables para demostrarme que, aunque yo le gano, él juega muchísimo mejor que yo. Es un tipo de lo más curioso aunque excelentísimo. Ya le conocéis.
Últimamente, estas Navidades he tenido dos buenas cosas: una, la visita de mi hermano que, al cabo de los años, ha conseguido un pasaporte y ha estado pasando unos días con nosotros; otra, que por esos mismos días cayó por aquí Rossi. Yo no sé si vosotros le teníais el mismo aprecio que yo, mas como el mío es grande, por eso digo que su venida, con su mujer, fue una buena cosa para mí: venía a organizar la Trienal de Milán y le estuve sirviendo de intérprete con mucha gente absurda, pero nos reímos mucho y lo pasamos bien. Él acaba de organizar en Milán la exposición de Picasso que quizá es la más importante que se ha conseguido hacer en los últimos treinta años picassianos, ya que ni en Roma, poco antes, consiguieron como logró Rossi presentar, simultáneamente, a más de los cuadros de aquí el Guernica del Metropolitan, y varios de los Picassos que están en Moscú. En consecuencia, el éxito ha sido fabuloso: 185 mil visitantes y 65 millones de liras. Y, en consecuencia, también, para Rossi un éxito de organización que cotiza, creo, en forma de autoridad y respeto.
¿Qué más? Yo creo que, de no ponerme a escribir un libro de memorias, así, en carta, no me queda más por decir. Ah, si: el chico este año es el primero de la clase por dos meses seguidos y, como yo, en general, nunca conseguí ser si no el último o poco menos, estoy de un orgullo paternal formidable; aunque en el fondo, en el fondo, casi desconfiado e inquieto: eso, ser el primero, me parece a mí tan anómalo que no sé, no sé...
Y termino. Recibid un abrazo mío bien fuerte y bien verdadero, como quisiera dárosle materialmente. Dad saludos de mi parte a los amigos que supongáis que los apreciarán como recuerdo y vosotros sed buenos, no me toméis en cuenta el que haya dejado de escribiros durante tanto tiempo y contestad. Por mi parte, prometo solemnemente que si veo que lo hacéis, es decir, que lo pasado pasado, me portaré como persona seria. Otro abrazo

Arturo Serrano Plaja

1963-04-07 Mencionado/a
Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1963
Nova York
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1963 en 07/04/1963


Ginebra, 7 de Abril de 1963

Sres. Esther y Lipa Burd
Buenos Aires

Queridos amigos:

Mañana o pasado se cumple el mes de nuestra llegada a Suiza. Hemos andado gran parte de este tiempo de una en otra ciudad de este país, con unos días de estancia hasta ahora en Ginebra y en Basilea. En Ginebra, donde estamos ahora, alquilamos un departamento de un ambiente por dos o tres meses para poder trabajar y al mismo tiempo ir cuidando lo mejor posible de nuestra situación financiera, que merece, como podéis imaginaros, le dediquemos una parte importante de nuestra atención. Establecí algunos contactos con galerías de Zurich y de aquí, de Ginebra, que espero sean útiles, aparte, naturalmente, de las lentas y largas relaciones que continúan con la Kunsthalle de Basilea. Esperamos que algo cuaje para el futuro próximo. Los museos han crecido considerablemente con espléndidas donaciones efectuadas por particulares desde nuestro viaje anterior. El de Basilea, que para mí continúa siendo el más importante, aumentó considerablemente en obras del período cubista de Picasso, Braque, Juan Gris, Leger, además de los puristas Ozenfat y Le Corbusier, y en Paul Klee. Este y Juan Gris continúan siendo en Basilea como en Berna los pintores que mejor se ven. Berna quizá tenga ahora más Juan Gris que Basilea y desde luego ya tenía una cantidad superior de Paul Klee, alrededor de setenta obras de éste son las que posée en la actualidad. Los tres museos han aumentado en piezas nuevas pero creo que más en proporción los de Basilea y Berna. A los nombres que os menciono de Basilea hay que añadir nuevos Matisse, Bonnard, Chagall, etc., y algunos norteamericanos, como Tobey, y españoles últimos. En Zurich hay un gran Tapies y dos o tres esculturas de Chillida; en Basilea, Chillida, y en Berna Clavé, aparte, naturalmente, los de escuelas de Alemania y norte de Europa que también en Suíza pueden verse seleccionados. Nos tocó de ver además cuatro espléndidas exposiciones en museos y galerías particulares: Jawlensky, Paul Klee, éstos en Ginebra y Basilea respectivamente, y Jacques Villón y Lurçat en los museos de Zurich y de ésta. Ahora, en estos días, se inauguró en Zurich otra retrospectiva de Max Ernst que pensamos ver el jueves o viernes próximo de paso que vamos a resolver una posible exposición de grabados en una galería particular de esa ciudad. El que me decepcionó, dejando a un lado la espléndida calidad de la artesanía en los tapices y la buena intención humana de sus temas, fue Lurçat. Es un muralista por el destino de la especialidad a que se dedica, pero no lo es como artista, como pintor. Cerca de doscientas obras se reúnen en Ginebra entre tapices, unos ochenta gouaches, litografías, cerámicas y vitrales. Tiene tapices de dimensiones extraordinarias, de catorce o quince metros por cuatro o cinco de alto, pero sin resolver en sus cartones como obra de carácter mural. En ellos se conjugan los más bellos colores de lanas que Lurçat entona con habilidad y la calidad del tejido, pero los espacios los llena con recursos fáciles y repetidos, con mariposas, estrellas, sobre todo estas últimas, empalagosas estrellas estilo 1920 o 1925 de un falso modernismo, y hojas de árboles, todo como una pirotecnia deslumbrante a primera vista pero que cansa en su insistencia. Pienso que lo que seleccionaría para mí sería uno de esos gallos suyos, que los ha dibujado casi siempre de perfil, siempre el mismo gallo pero algo distinto, cuando los hizo tejer en blanco, gris y negro. Por lo demás prefiero la serie de tapices góticos de la vieja Basilea del siglo XV, con sus temas bíblicos y sus bestias más bellas en su aparente ferocidad porque seguramente aquellos pintores conocían menos de la anatomía y zoología que Lurçat. Bueno, en cuanto a otro género de cosas aparte de ver arte y monumentos, sólo hemos visto alguna película del género menos intelectual, como El tirano de Siracusa, que llenaron algunas horas de nuestro tiempo y con ellas multitud de películas de publicidad francamente malas. Creo que están peor que en 1960 y muy mal con relación a lo que vosotros estáis haciendo en esa. Nada que se parezca a la vuestra de propaganda de Rosenthal.
Nos gustaría mucho veros por aquí, que extendiéseis vuestro proyectado viaje de París a Ginebra, esta ciudad encantadora donde se os advierte el paso del tiempo en infinidad de relojes. Las agujas de todos ellos realizan, implacables, una inacabable y cronometrada danza de la muerte.
Escribidnos. Os rogamos que nos mandéis noticias vuestras y de esa. Sin todos vosotros, los amigos, nos encontramos solos. ¿Cómo va Arroyo y vuestro departamento? Os rogamos que nos enviéis y, lo más pronto posible, la dirección de Jonquières y de Cortázar que nos olvidamos en Buenos Aires, y a quienes quiero escribir.

Un fuerte abrazo de Maruja y mío para los dos:

[Seoane]

N/dirección:
4-6 Rue du Lac. Ap. 59
Ginebra

1971-12-28 Mencionado/a
Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1971
Bos Aires
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada]
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1971 en 28/12/1971

Buenos Aires, 28 de diciembre de 1971

Sr. D. Isaac Díaz Pardo
El Castro

Querido Isaac:

Recibí tu carta muy tarde, seguramente por la fecha, fin de año, y los millones de tarjetas de felicitación de los carteros deben repartir. Estamos, efectivamente, contentos. Hemos podido ver tres o cuatro grandes películas, tuve que renunciar a participar en unas muestras internacionales en solidaridad con dos artistas censurados políticamente en el Salón Nacional y vendí en pocos días algunos cuadros, venta que nos permiten a Maruja y a mí esperar con tranquilidad que transcurra el año 72, o gran parte del año. Hice un pequeño retrato de Maruja, que con el de Picasso hecho ahí, es todo lo que pinté en el año. Aguardo el 72 para pintar sin descanso. En marzo o abril del 73 haré en Madrid una gran exposición antológica. Me la pidió González Robles y en estos primeros meses del año comienza a circular por España una de 30 grabados, que ya le pedí a José Luis se los enviase a Madrid. Estos son mis planes futuros. ¡Ah! Y preparar las monografías de Maside y Cao y un estudio sobre Ribas, Max Ramos y Bujados. Te tendré al tanto de todo. A La Voz le envié 5 nuevas “Figuraciós”. No he visto ni una desde que salí de ahí, el 19 de noviembre. A la gente de La Voz no debe costarles trabajo alguno cortar esta colaboración y enviármela por correo aéreo, sin embargo no lo hacen y nadie tampoco le sustituye. Sé que se publicó la de Piñeiro porque éste me escribió. Tiene dibujos hasta fines de febrero.
(...)En cuanto a la Argentina quizá te sirviese venir, aún para no ver a médico alguno, sino para pasar unos meses sin hacer nada. Buda, que es una fuente de sabiduría, se presenta siempre sentado, descansando no sabe uno bien de qué. Tú te exigiste demasiado a ti mismo. No trabajabas, te drogabas con el trabajo, que no es exactamente lo mismo y querías que los demás aceptasen como bueno ese abuso, por no decirte ese vicio. Nada de jornada de ocho horas. Me alegro mucho que hubiese tomado la decisión de buscar un jefe de empresa o como se llame. Va a ser útil a las fábricas y sirve a su ornamentación, liberándote a ti de un trabajo estúpido pero necesario para la existencia de las mismas. Las fábricas se beneficiarán con tus otros trabajos.
De Álvarez Blázquez no sé nada y nada de esa libreta que me dices de la Caja de Ahorros con “ingresos de rico”. ¿Cuál puede ser un “ingreso de rico” y cómo se controla esto? En Madrid estuve con Laxeiro y con Vidal Abascal. Cenamos juntos en nuestra última noche de Madrid. A los Rey solamente los vimos en el momento que fuimos a despedirnos. Salían ese día en “patota” para Zaragoza y acaban de venir en “patota” de Barcelona.
La noticia sobre Picasso en Vigo es triste, pero todo ahí produce tristeza y desaliento, todo menos el paisaje. Al poema que me enviaste le falta gracia, poesía, para estar firmado. No estaría mal como poema anónimo y acompañado de algún tipo de acción, algo que nunca ocurre ahí, por lo que sabemos. Alonso Montero me envío efectivamente las notas de Fole sobre el Rivera, pleno de erratas.
Etc. etc.
A José le envío el texto del catálogo de Clavé por si envían la exposición de Barcelona. Va en gallego y castellano.
Os recordamos siempre y deseamos para ti y los suyos un gran año 1972. A ti repuesto del todo, nuevamente optimista, sin más ruidos que aquellos con que nos agobia la civilización. (En este momento siento un ruido colectivo de bocinazos de autos en la Av. Libertador).

Un fuerte abrazo a todos de Maruja y mío y uno muy especial para ti.

Seoane

1972-01-11 Mencionado/a
Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972 en 11/01/1972

11.1.72

Sr. Don Luis Seoane
Buenos Aires

Querido Luis:

Confirmo mi última nota para enviarte documentación referente a la casa-administración Sargadelos, y otra anterior con lo de la pileta y la explanación, sobre esto espero traer un día aquí a Albalat.
Registro todo lo contenido en tu carta y celebro las buenas noticias que me das de los pocos días que el año 71 te encontró ahí y que abrió la tranquilidad de vuestra economía para el 72. Así puedes sentirte un hombre libre además de ser apreciado y respetado por todos, no solamente ahí pues aquí no es menos el aprecio y respeto que se te tiene muy por encima de los demás, y no contabilizo, no se puede ni se debe, el he[cho] de que aquí no vendas tantos cuadros como ahí. No caben además comparaciones. --- Contesto seguido la tuya: José Luis te envió eso de la Caja de Ahorros – A. Blázquez de Vigo, y me dice que te tiene al tanto de todo lo que es de tu interés. Mimina y Xosé quedaron encargados de enviarte las Figuraciós y me dijeron que lo cumplen. --- Xosé nada me dijo del texto de Clavé, claro está que a mí nada me dice como no sea “¡[h]ola!” y que “no pasa nada”. Las demás cosas que te pueda contar creo que carecen de interés. --- Yo sigo haciendo este trabajo “estúpido”, como tú dices, “pero necesario para la existencia de (las fábricas)” y para lo otro. El personaje ese “ornamental” que se busca aún no apareció, si bien se están haciendo pruebas selectivas a los que se presentaron.
La visita a García Sabell de 7 horas del día de reises sustituyó y aplazó de momento la consulta con un psiquiatra que había pensado podía ser Cabaleiro. De momento vamos a dejarlo así, salvo una exploración de laberinto de oído que me van a hacer en Coruña por descartar cualquier factor coadyuvante por ese lado. Las causas subjetivas del mal parece que están bastante claras sin necesidad de ir más allá. Él está de acuerdo en considerar el psicoanálisis como un exorcismo. Aplazo también mi consideración sobre el hecho de que Domingo conociendo las causas, o mejor, la etiología de mi proceso, y mientras está visto que a alguien más le había comunicado lo que sucedía, a ti por ejemplo, pretendiese curarme con la farmacopea esa y ocultarme a mí las causas. Hay que disculpar estas cosas en razón de ser un amigo de todos en el que pesan tanto todos como el enfermo. Afortunadamente esa coincidencia del de Leganés obligó a poner las cartas sobre la mesa. Todo eso que tú imaginas de drogarme con el trabajo corresponde solo a tu imaginación de la cual han salido también esas comillas que has puesto a “amigo de tus amigos”. Todos padecemos neurosis y la vida misma es una especie semejante que no podría vivirse sin esa neurosis, pero lo que para uno es causa positiva para otro es causa negativa. La soledad perturba a todos los amigos que tengo. A mí la soledad me reconstruye aunque no desdeñe que necesito perderla con alguna frecuencia para comunicarme lo necesario. La idiosincrasia de cada cual hay que respetarla al igual que sus principios. (intermezzo con desespero);
…............................................
sigo vendo sempre
o calexón da Tumbona
no fondal da rúa das Hortas.
A auga baixando pola Costa do Cristo,
a choiva que non cesa,
a lus eleutrica, esmorecida, que vaise;
e un cabo de vela,
e nos agardando a carón dela,
e os telóns do meu pai
asulagados no obradoiro
pingando as anilinas,
e as fintas que pegaramos todos
con engrudo desfeitas,
…...............................................
Como un hombre que anda en el bolsillo con una bomba de TNT montada con detonador y mecha, yo ando con una carta para Mimina desde hace varios meses en la cartera y que no envié fehacientemente, como principio de una ruptura, porque me duele también este ser humano enfermo. De momento seguirá en la cartera. Pero una copia ya la tiene Domingo en mi expediente, otra os la mando a vosotros, y un par de ellas más irán a parar a las poquísimas personas amigas que puedan ayudarla a ella; acaso también a los hijos. Y luego ya veremos por donde vienen las cosas. Es un círculo vicioso de dificultades que no sé cómo podrá vencerse.
No tengo ninguna novedad. Para sacarte el sueño lo que te envío hoy posiblemente te sea suficiente. Ve tú a saber si no seré un malvado además de un imbécil. En cuanto tema novedades te las iré refiriendo.

Sabéis como se os quiere. Un abrazo muy fuerte, vuestro

[Díaz Pardo]

1972-01-23 Mencionado/a
Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972 en 23/01/1972

23.1.72

Sr. Don Luis Seoane; - Bs. Aires.-

Querido Luis:

He leído, por fin, tu carta del 11 en la que me riñes mucho. Voy a tratar de contestar por orden:
Corredor Matheos.- A su propuesta, no nueva claro, me limitaba a preguntarle si podría ser el M[useo] C[arlos] Maside el intermediario porque ello facilitaría, en su caso, las cosas. Pensaba en ese momento, también y además, en algo de prestigio para el Museo, pues las muestras que hace el Colegio de Arquitectos son las más importantes que se hacen en España: Bauhaus, Picasso, Gatepac, etc. Él hablaba de arte, diseño, arquitectura, etc. no de arte solo. En el aspecto este, si no pensaba por lo menos no se me olvidaba que si los alemanes no tuvieron inconveniente en sacar las obras de la Bauhaus de su Museo para exponerlas en el Colegio de Arquitectos de Barcelona, al Museo C. Maside no le podía rebajar su categoría prestar una parte de su obra y de su colaboración para tal muestra. Tampoco podía ocurrírseme en ese momento pensar que eras enemigo de las exposiciones colectivas cuando en estos momentos y desde hacía varios meses están circulando por España muestras de arte gallego colectivo en el que tú aportas la mayor colaboración, supongo que voluntariamente. Me refiero a lo de la serigrafía. E incluso tú ofreciste la sala del Museo para que se realizase una de esas muestras. Y por otra parte para dos exposiciones colectivas que había organizado el Círculo de las Artes de Lugo tú pediste por carta que se enviaran cosas tuyas, incluso indicando cuales. (Además el mismo M. C. Maside es una exposición colectiva) (1) [Nota manuscrita na marxe esquerda: (1) Y yo tengo una carta tuya del año pasado mostrando tu conformidad con que, con las obras del M. Maside, se hiciese una exposición en el Círculo de las Artes de Lugo]. Pero aunque yo fuese contrario a hacer colaborar al M. C. M. en lo de Barcelona, hubiese contestado a C[orredor] Matheos exactamente lo mismo, pues en ese momento yo tenía la idea de que estaba interpretando tu pensamiento (y creo que no puede caber la menor duda que he respetado absolutamente todo lo que tú has hecho y que estuvo de mi parte el respetarlo, sin preguntarme si yo estaba de acuerdo con lo que estaba respetando). Y tenía esta idea de que estaba interpretando tu pensamiento porque el día que trajimos a Sargadelos a C. Matheos, tú y yo con José Luis al volante, C. Matheos nos expuso la idea, cuya aceptación por el Colegio luego nos confirmó, idea con la que tú te mostraste conforme, si es que los que íbamos hemos interpretado bien, que veo que todo es posible. ---- Pero no debes preocuparte porque puedes tener la seguridad de que eso queda en proyecto, como quedan tantas cosas, si no se les pone un motor, y yo el mío, desde luego no se lo voy a poner al saber que no estaba interpretando bien tu pensamiento, y que lo que podía armar era una “trangallada”, máximo cuando mi motor me está haciendo tanta falta emplearlo en mí mismo.
------ Para no perder el hilo del Museo: ayer me dijo Xosé que tú no querías que la exposición de Clavé se celebrase antes de marzo. Incidentalmente me entero de que cambiaste de manera de pensar. Mañana mismo llamaré a Gaspar.
Ejecutivo.- Estamos trabajando arduamente en su elección o selección. La cosa es muy difícil y me tiene molido. Ayer sábado tuve aquí durante todo el día a uno sometiéndolo a la última prueba y mañana voy a tener a otro. (La selección previa, a nivel psicotécnico, la hizo una empresa especializada en eso, con la que todos estuvimos conformes).
Pileta.- (Habría que buscarle un nombre más consecuente, más semántico, ni aquí ni ahí se denominan bien. Aunque sea denominar esta nuestra con un nombre propio. El lugar se llama Rato y el río del que se va a tomar el agua Xunco. A ver qué se te ocurre; Lagoa do Rato, etc.).- Bueno. Ten en cuenta, como te decía, que la pileta está ya excavada en la roca a golpe de dinamita y de topadora, y que las medidas de ella son 33,33 m. por 15 m., en forma rectangular, porque se trata de una pileta para competiciones deportivas, y entre las normas reglamentarias internacionales están las medidas y la forma. Como ves en el croquis que te mandé está situada paralelamente a la parte recta de la explanada. Cuando en mi carta te decía que acaso algún ingeniero de ahí te podía decir algo te estaba hablando de la permisión de las paredes rugosas. Ahora ya sé que los revestimientos han de ser de cantos romos. Pero este problema al darle más luz ya vimos que hay que aplazarlo para otro año, pues caso de que nuestros recursos nos permitan llevarla a cabo para este verano ni tiempo material habría que pensar en otra cosa que no fuese pintarla con cementos blancos y negros (como hicimos en la parte baja de los murales de los Irmandiños) y luego, pasado el verano estudiábamos su recubrimiento con pizarra y cerámica, pero ya no podrían ser trozos porque son cortantes y habría que pensar en unas cuantas formas de teselas troquela[da]s con cantos romos. Fíjate que son más de 700 m2 de superficie. Si el Ing[eniero] Díaz hace alguna cosa, y en formas curvas, pienso que podría ser una pileta para niños colocada cerca de la cabeza de la rectangular. Me parece muy bueno que el Ing. Díaz haga alguna cosa para esta industria del norte de Lugo y desde ahí (al Ing. Díaz y a su obra en el Lucense de Olivos y en lo que iba a ser lo de Belgrano lo conocí antes que tú y fui yo quien le sugerí tu colaboración en este último, lo que sigo solo para testimoniar el aprecio que le tengo). Pero en lo general creo que no podemos perder de vista a Albalat, autor del proyecto de la F[ábri]ca, miembro del L[aboratorio de] F[ormas] y otras cosas. Y tampoco puedo dejar de considerar a los demás socios de esta empresa para recabar su apoyo.
Cartas y velocidad.- No puedo contestarte a esa carta que dices de fecha 2 del XII, por cuanto no la he recibido. Tu primer carta tiene fecha del 10-XII-71, y parece ser que es la primera que escribiste en esta temporada. Todas tus cartas que recibí las he contestado. La mía del 2 cte., que era domingo, salió no antes del lunes 3 y a ti debió llegarte el sábado 8, a juzgar por las gestiones que ya habías hecho antes de contestarla el 11 del cte.; pero aún cuando la recibieses el 10 lunes habría tardado 7 días que es lo normal. Y, casualmente, Camilo nos dice en sus cartas que le llegan antes las de Sargadelos que las del Castro. De todos modos yo no dispongo de otro medio que enviarlas desde aquí, y como te decía en una nota que te puse a mediados de la semana última te suplico que me escribas aquí, para obviar lo que te exponía.
Mis acúfenos.- Me hicieron en Coruña una exploración completa hasta el octavo par del oído (dos horas de torturas inquisitoriales entre las que entró un intento de electrocutación). Hace un momento me acaba de llamar Domingo, a quien le quedó la documentación de tal investigación, para confirmarme que por ahí no hay nada como ya nos suponíamos. También para decirme que yo tengo razón en todo y darme confianza. La razón, claro está, puede dársele a los locos. Si así no es, la buena intención de Domingo no me hace feliz. Lo malo es que yo tenga razón y no sea yo el equivocado. Me “agonea” comprobar luego que la realidad es como uno la sospechaba.
Esto se hace muy largo y soy yo el que te estoy “agoneando” a ti. Perdóname. Un abrazo muy fuerte para ti y para Maruja, vuestro

[Díaz Pardo]

1972-02-07 Mencionado/a
Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972
Bos Aires
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada]
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972 en 07/02/1972

Buenos Aires, 7 de febrero de 1972

Sr. D. Isaac Díaz Pardo
El Castro

Querido Isaac:

Recibo tu carta del 23 y también te contestaré por orden.
Corredor Matheos: En tu carta anterior me escribes sobre una exposición de arte gallego en Barcelona y te contestaba que nunca fui partidario de las exposiciones colectivas. Esta fue una posición mía de toda la vida y es algo que se conoce muy bien en el ambiente artístico de Buenos Aires, donde no participé jamás en esta clase de exposiciones sino únicamente cuando ellas tenían finalidad política. Se publicaron algunas veces mis razones. Una exposición colectiva podía hacerse en el siglo XVIII o XIX, o mejor si quieres desde el renacimiento, cuando el arte obedecía a determinados cánones, existían primero talleres y después academias donde se formaban artistas siguiéndolos y no había entre ellos más lucha que la competencia para la consecución de encargos. A partir de finales del XIX todo cambió en arte, se rompió con los cánones y nacieron diversas escuelas y movimientos artísticos, en profusión a mediados de éste siglo. Una exposición colectiva resulta, pues, por su heterogeneidad, una especie de bazar sin objeto que únicamente sirve para desorientar al público. (La única vez que pude realizar una exposición colectiva fue cuando vosotros, Maside, Laxeiro, tú, etc., expusisteis en Bs. Aires y logré, en lucha con los directivos de aquí, que les parecía poco seis artistas, y con los amigos de ahí, que la muestra se redujese a un grupo).
Intermedio. Siempre supuse que todo esto estaba claro entre nosotros. Si ahora participo en la exposición de serigrafías es porque cuando me las encargaron no me dijeron que harían exposiciones de este tipo y luego de programadas yo no podía ser una excepción planteando problemas a algo hecho. En cuanto a mi participación a la muestra de Lugo ahí te remito una fotocopia de la carta tuya en la que te refieres a eso. También poseo las dos cartas de D. Ramón Varela Méndez, presidente del Círculo de las Artes, a las que contesté el 2 de Junio del 64, aceptando luego de la insistencia de él y de Valentín, desde Vigo, en carta del 20/V del mismo año. Como puedes notar si mi mesa de trabajo aparenta desorden, funciona bastante bien mi archivo. Nunca te he pedido nada que se refiera a exposiciones, no tuve necesidad de hacerlo, únicamente en una oportunidad te solicité que le escribieses a Gaspar de Barcelona para una y él contestó que no podían hacerla por lo que fuese. Te ruego, pues, que no me pases cuentas que no debo. En cuanto al Ing. Díaz le conocí en la biblioteca del C[entro] Gallego presentado por Eduardo Blanco Amor y me encargó los trabajos que hice para el C[entro] Lucense, el óleo de gran tamaño, la decoración de las baldosas de un patio interior y los bocetos para Arranz, porque conocía los trabajos que yo había hecho para Goldstein y Aslán y sobre todo por el éxito del mural del T[eatro] San Martín, y no porque tú se lo aconsejases como ahora me dices. Luego te lo presenté yo a ti en Magdalena un día que fuimos a la fábrica. Todo esto lo recuerdo perfectamente y también lo recuerda él, a quien se lo pregunté sin decirle naturalmente el por qué. Te escribo esto de paso, como tú me escribes a mí, y porque no me gusta aparecer como deudor de favores que no recibí. Además en el caso tuyo y mío supongo que estamos colaborando desde hace años en algo superior a todo esto, con discusiones a veces violentas, pero colaborando, y no debiéndonos nada el uno al otro pues cada uno aporta lo suyo. En septiembre pasado, tengo en mi libreta, hablamos con Corredor Mateos de la posible exposición en el Carlos Maside, de Artigas, de Miró y Artigas, de algunas que se realizasen en el Colegio de Arquitectos de Barcelona que a él le pareciesen interesantes y de una posible política de intercambio cultural de la periferia peninsular. No apunté nada ni recuerdo que se hubiese hablado entre nosotros sobre una exposición colectiva de arte gallego. Hablamos, eso sí, de una muestra de proyectos de la ciudad de las rías de Albalat. Desde luego nada del traslado de las obras del C[arlos] Maside, cuya primera noticia, asombrosa, me la das en esta carta que contesto del 23/ Con el argumento de que si el Bauhaus pudo trasladarse, etc. 1º. – El Museo Carlos Maside está haciéndose, no es aún el Museo que proyectamos y soñamos. 2º– Los museos no se trasladan. Los únicos traslados que conozco se efectuaron en casos de fuerza mayor, en casos de guerra para esconder las obras, etc., y así pudieron exponerse las obras del Museo del Pardo en Ginebra y las de Viena y Munich en París y Londres al sacar las obras de sus escondrijos y mientras se reparaban sus edificios. 3º– El Museo Bauhaus se constituyó a partir de las muestras realizadas en 1969 y 1970 en algunas ciudades europeas y americanas que reunía colecciones hasta entonces de autores o sus descendientes, de particulares y del Estado alemán. Bastantes de esas obras habían estado diseminadas por el mundo como producto de la persecución. En cuanto a exponer la obra del Museo en el Círculo de las Artes de Lugo continúo de acuerdo, pues se trata de Galicia, no de que nos juzguen en el exterior por algo que está haciéndose.
Museo.– La exposición de Clavé estaba proyectada por nosotros a continuación de la de Solana. No pudo ser porque Gaspar te escribió dándote sus razones. Ahí se me dijo que enero y febrero eran muy malos meses por el invierno y supuse entonces que podrían iniciarse las actividades en marzo. Si el 23/I cuando tú me escribes, Gaspar no había enviado aún las obras no comprendo por qué tenías que escribirle de esto a Gaspar. Si éste las envía en febrero tiene que exponerse o a fines de este mes o en marzo, pues hay que hacer propaganda y catálogos. Lo único reprochable en mí es el no habértelo participado. Espero que tú no tengas nada que reprocharte en cuanto a olvidos.
Pileta. – Efectivamente, como a ti, la denominación pileta a mí tampoco me gusta. Pero las otras que se usan no son exactamente eso. Estanque, supone agua permanentemente estancada, y piscina la existencia de peces. Quizá podría ser pila, de donde viene, que significó también lugar donde las gentes se bañaban aparte de sus otros significados religiosos, para depósito de agua bendita, para la sumersión del bautismo en el primitivo cristianismo, etc. Podría llamarse Pila do Xunco. Mejor que con el nombre del lugar, Rato, que lo disminuye. Lagoa indica laguna que viene a ser lago pequeño, etc. En la carta anterior no me decías que se trataba de una pileta para competencias deportivas, pues tanto el Ing. Díaz como yo sabemos, que tiene que ser rectangular y yo lo sé no porque me hubiese ocupado de averiguarlo, pues nunca me interesaron las piletas, sino por esa cultura supletoria que se adquiere en los cines. Ya le hablé al Ing. Díaz hoy mismo, pues estuvo aquí cuando había comenzado a escribirte ésta y le leí el párrafo de tu carta.

Ejecutivo. Me doy perfecta cuanta para la dificultad de encontrar una persona capaz de ese cargo en una empresa y lo cansador que debe ser realizar esa especie de examen necesario del candidato.
Bueno, creo que contesto todo lo referido a tu carta última. En esta respuesta la acidez que puedes notar nace de tus afirmaciones inexactas, que, por mi parte, hubiese querido no hubiesen sido nunca formuladas, pero habiéndolo sido conviene aclararlas. Por otra parte me dio lugar a revisar nuestra correspondencia de alrededor de 15 años, pareciéndome, pasado tanto tiempo y leída fríamente, bastante interesante.
Tomás Mariño. – Parece que fue un precursor de la aviación. Procede del Ayuntamiento de Xove, entre Vivero y Cervo y falleció en 1880. Realizó algunos proyectos de navegación aérea, algunos de ellos cuales mantenían principios muy actuales. A principios de este siglo se expusieron esos proyectos. Alguien de Vivero debe saber algo de este personaje, o en Galicia. Creo que el asunto es muy importante y debe averiguarse. Yo hice esta ficha hace años y no recuerdo de donde procede. Estaba estudiando inventores, mecánicos, relojeros, etc., para notas radiales y de Tomás Mariño nunca logré más datos que éstos que te doy.
Quizás tú puedas encontrar alguno más. Puede ser interesante reivindicar su figura cuando se acerca al siglo de su fallecimiento y que lo haga alguien como tú que te interesas de cuestiones mecánicas.
José María Cao.– Estoy consiguiendo más datos sobre él. Pronto te enviaré la monografía. Esto es todo por hoy. Trata, como trataré yo, de no dejarte por el minifundio mental heredado de nuestra condición gallega y recibe un fuerte abrazo de Maruja y mío:

Seoane

1972-06-06 Mencionado/a
Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972 en 06/06/1972

6 de xuño de 1972

Sr. Don Luis Seoane
Buenos Aires

Recibí tu carta del 22 de mayo último ayer al llegar aquí a Sargadelos de un viaje por Coruña y Lugo. De Barcelona regresé el 27 pero tuve que volver a salir a los dos días hasta ayer. Tengo muchas cosas amontonadas haciéndoles prácticamente frente yo solo. Llegar yo y mandar a Sineiro para Barcelona fue casi simultáneo. Queda mucho que hacer allí para organizar aquello en los diversos frentes legales y de los otros. --- A los pocos minutos de llegar de Lugo me llegaron aquí ayer Manolita, la hija de Nogueira, y su marido quien me contó todo lo referente a su visita a esa. Viene encantado de ti. Me contó de su entrevista en tu casa con Camilo, de su desesperación, (lo que me hace sospechar que las cosas no lo fueron bien y miente) y me trajo por tanto más pena de la que tengo de ver los disparates que se llevan hecho con mis hijos ¿en nombre de qué? Lo único que no me trajo, para agrandarme la incertidumbre y el dilema, fue un certificado de estudios de Camilo o las fotocopias de las papeletas, que jamás logré conseguir. --- Quedo pues informado de todo lo que me refieres en tu carta y de lo que me cuenta Antonio. Contesto lo justo. Blanco Amor tenía dos conferencias coincidiendo con la inauguración de Barcelona y se excusó con Del Riego de poder asistir. Pero aunque así no fuese supongo que Dieste sería tan digno representante de los que estáis fuera, pero hasta el momento se excusó. En un momento cualquiera te enviaré fotocopias de la prensa de Barcelona (aún están saliendo notas). Ahora me es imposible. Xosé, que dicho sea de paso está visiblemente a los ojos de todos mejorando mucho en eso de tener a la realidad como referencia, recibió tus dibujos para Blanco Amor que son francamente magníficos. Muy buena tu reacción al profesor Santamarina. De alguna forma he de hacérsela conocer sin decir que es tuya mientras tú no me autorices a ello.
Al volver de Barcelona almorcé con Álvaro Gil en Madrid y discutimos la forma de oponernos a los designios canallescos que patrocina el de Cuenca respecto de la Casa de la Administración. Quedamos en que lo mejor era formar un Patronato. Como tú y yo ya habíamos hablado de formar un Patronato para el Museo que presidiera Álvaro y la presidencia ejecutiva del Patronato de Sargadelos nos interesa tenerla en nuestras manos, o por lo menos en las manos de una persona que convoque y haga andar a ese cuerpo la cosa creo que podría hacerse de manera semejante a la que va en la fotocopia adjunta. Quedé en darles esta primera idea a Risco y a Celestino Fdez. de la Vega para que estudien los aspectos legales y políticos de la formación. Ya hablé con ellos y en principio encontraron la cosa bien enfocada y con grandes posibilidades de progresar. Albalat vendrá uno de estos días para estudiar un plan de realizaciones del Patronato. Aproximadamente el 18 cte. vendrá Álvaro a Galicia y si tenemos todo estudiado concretaríamos la fecha de entregar el proyecto en Madrid, posiblemente a un tal Falcón, que es de Lugo, y ocupa el más alto cargo que sigue a la D[irec]ción G[eneral] de B[ella]s Artes.
En cuanto a lo de Salvat ya te mandaré fotografías de los decorados. En conjunto la obra está teniendo éxito y creo que salvando a Salvat de la incomprensión casi total en que había caído. Pero la Administración de esa Compañía estatal es un desastre. El programa que yo había diagramado y dibujado la cubierta se sintieron con derecho a hacer lo que les dio la gana e incluso modificarme el dibujo de la cubierta, de manera que cuando lo vi me puse colorado, pero no ya porque modificasen los colores sino que modificaron hasta el dibujo. Luego, además de cargarse tu trabajo se cargaron el de Alfredo Matilla y el mío. El mío era el que te envío. ---- Otra cosa: Estuve cambiando impresiones con Paco del Riego y con Piñeiro sobre la posibilidad de llevar al Museo Maside (sala alta) la exposición del libro al retirarla de Barcelona. Aunque no fuese más que por unos diez días. De tener toda esta obra fuera de sus archivos es una pena perder esta ocasión antes que haya que lidiar nuevas batallas para sacarla. Pero al mismo tiempo pensamos en que podríamos hacer un Seminario sobre el Libro Gallego coincidiendo con la muestra que durase dos o tres días. Será útil para dar un poco de luz sobre el libro. Lo primero que hemos acordado es que además de que tú mandes tus sugerencias sobre este seminario tienes que enviar una comunicación. Piensa que el Seminario podría coincidir en los primeros días de julio como más tardar. Hablando de libros: las seis ilustraciones que le hice a la novela de Blanco Amor fueron prohibidas por el Dtor. Gral. Al fin consintieron dejar, autorizar, dos ilustraciones. Lo peor es que Galaxia ya tenía armado el libro y la mayor parte de las ilustraciones, o todas menos una, llevan texto en el anverso. Una delicia de país. ---- En Barcelona estuve con los Gaspar y comprometí su colaboración para un plan de exposiciones a realizar en el verano y otoño. La primera sería la de Clavé en julio en la que, además de la obra gráfica, mandarían unas cuantas telas. Luego una de los componentes principales de Les 4 Gats, en la que colaboraría Álvaro Gil, y otra del grupo Dau al Set, de cuando era grupo, aun cuando se exponga algo de la obra actual de ellos ya independizados. Creo que todo esto está dentro de los planes de exposiciones que habíamos hablado. Para la de Clavé ya están hechos hasta los clisés del cartel y catálogo, con texto tuyo. Manda las sugerencias que sobre esto se te ocurran. Todo esto se podrá hacer contando con la supuesta buena colaboración de Xosé. --- Para terminar va mi idea de alejarme directamente de la sociedades Cerámicas del Castro, Ltda. y Sargadelos, Ltda. He tenido unos serios tropiezos con Pepe Rey, responsable de muchas cosas de mi vida privada (un cristal como creador de discordias familiares, aunque no sea único). Esto que venía preocupándome desde hace tiempo creo que puede resolverse bien para todos con una idea que me enviaron las brujas a mi insistente llamada: transferir mi parte en ambas Sociedades a mis hijos. Le he propuesto ya a Mimina esto. Vamos a ver cómo reacciona porque Rey ha estado hasta hoy incordiando, supongo, con ella. La cesión o venta figurada tendría una cláusula que le garantizaría a Mimina el usufructo de la renta total correspondiente. Y tendría como contrapartida que uno de los hijos estuviese ocupando un puesto en una de las fábricas. La transmisibilidad de estas participaciones tendría un mecanismo técnico semejante al que tiene este capítulo en el Laboratorio de Formas. A través de este y de mi flamante Seminario de Estudios Cerámicos seguiría colaborando tácitamente y desconfiante pues a la menor reserva o falta de claridad en las intenciones finales terminaría independizándome definitivamente, y que cada palo aguante de su vela. Si Mimina acepta hacer esto conjuntamente con su parte y la mía la cosa será mucho más sencilla que si la tengo que hacer yo solo con mi parte. No se hará precipitadamente sino mediante un estudio que garantice la continuidad y la apuntale. Espero, además, que por aquí habré hecho algo positivo para acercar a los hijos. Y para su realización final necesitaré que cada uno de vosotros me autoricéis a ceder mis participaciones a mis hijos renunciando expresamente al derecho de tanteo que os corresponde. Si esto progresa te pediré esto formalmente. Pero antes me gustará saber si por tu parte estarás dispuesto a renunciar a ese derecho. Xosé está conforme con que yo haga esto. Yo necesito sacarme muchas cosas de mi conciencia. Confía que así la iré limpiando.
Perdóname la longitud de esta carta. Y aún se me quedan muchas cosas sin decirte.

Un abrazo muy fuerte para ti y para Maruja

[Díaz Pardo]

1972-07-18 Mencionado/a
Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada]
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972 en 18/07/1972

18 de julio de 1972

Sr. Don Luis Seoane
Buenos Aires

Querido Luis:

Te confirmo muchas cartas y notas mías, de fechas 20.6, 21.6, 5.7, 13.7 y 9.7. ---- Ayer estuve almorzando con Álvaro Gil en Vivero y Antonia me contó que Maruja andaba mal de la columna y que no sabe si la tendrían que operar. No estaba enterado de nada. ¿Qué pasa? Celebraré que la realidad de esta noticia sea menos alarmante y por ello hago votos. ---- Con Álvaro confirmé la casi segura calificación de Conjunto Histórico-Artístico, con posible nombramiento de Patronato, salido del Consejo de Ministros de Meirás. Él recibió tu carta en la que le hablas de lo del Patronato del Museo Carlos Maside. Así tiene que ser una asociación de amigos privada.
El suplemento de Informaciones del 13 cte. dedica una parte importante a la poesía gallega y lo ilustra con obra tuya además de publicar tu Oración del artista que regresa, etc. Sin duda esto te lo habrán enviado a ti directamente de Madrid. Si así no fuese dímelo para enviártelo yo.
Gaspar, como habíamos quedado, para este mes, envía 15 grabados de Clavé y dos pinturas; una de 100 x 73 y otra de 110 x 75. Esta última un homenaje al Greco. Mañana iré al Castro indicar cómo se han de montar los grabados y para poner en marcha el catálogo y el cartel de acuerdo a las instrucciones que dejaste. Haremos la inauguración el día 28. Voy a ver si consigo que venga Castro Arines a dar una conferencia. En todo caso no estaría nada de más que tú se lo pidas. Como la exposición estará un mes, hasta el 28 de agosto, si se te ocurre alguna cosa dila.
Aunque se haya pasado el Seminario del Libro no dejes de hacer un trabajo y contéstame sobre lo que te preguntaba de hacer un cuaderno.
La escuela libre funciona muy bien y con gran entusiasmo. Tenemos gente de todas las latitudes, desde el Japón pasando por dos profesoras de cerámica que ejercen en la Argentina, argentinas ellas, hasta algún gallego y muchos catalanes. En estos momentos tenemos una profesora californiana muy entusiasmada por todo lo gallego; que está aprendiendo gallego además de cerámica. Escribe y hará una cosa en un diario de Whassingtón [sic] sobre Sargadelos y el Museo Carlos Maside. Hará su tesis sobre Sargadelos y está muy interesada por toda tu obra.

[Manuscrito na marxe esquerda:] Espero tus noticias. Abrazos muy tensos.

Isaac

1972-07-27 Mencionado/a
Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972
Bos Aires
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada]
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972 en 27/07/1972

Buenos Aires, 27 de julio de 1972

Sr. D. Isaac Díaz Pardo
Sargadelos

Querido Isaac:

Contesto la tuya del 18/VIII que llegó aproximadamente cuando remitía una mía contestándote a dos o tres cartas atrasadas. Efectivamente, Maruja está a tratamiento médico con motivo de una afección a la columna, pero se encuentra ya mucho mejor. Creo que la única persona que le escribió sobre ello fue a Antonia no sé si a alguien más, precisamente porque nos habíamos propuesto no alarmar a los amigos con noticias de este tipo. La realidad es que, aparte mi correspondencia contigo no escribimos, cuando regresamos, a nadie durante los primeros meses, porque tanto Maruja como yo volvíamos enfermos de distinta manera, sin ánimos ninguno para nada, y, ahora se puede decir, en el caso de ella con fuertes dolores que callaba pero que venía sufriendo desde La Coruña. Para la exposición de Clavé creo que sería interesante que viniese a Galicia algún crítico catalán como Santos Torroella o Alberto del Castillo, aparte de que pronunciase una conferencia Castro Arines. Es importante la salida de Cataluña de Clavé y sus trabajos de escenografía e ilustración a su llegada a Francia en la que tiene mucho que ver su formación barcelonesa. Trataré de escribir a Castro Arines, como me pides, por la conferencia, pero creo que basta con que tú le hables. Me alegro mucho que con Álvaro Gil hubieses conseguido la calificación de conjunto histórico artístico para Sargadelos. En cuanto a los miembros para el Patronato del Museo Carlos Maside que propuse a Álvaro, naturalmente que se trata de amigos, una reunión o asociación de amigos, como tú dices, pues no otra cosa son sino en general amigos los que tienen iguales o parecidas preocupaciones, y, en este caso, amigos, muy amigos algunos, y las únicas gentes que en Galicia vienen luchando por sus cuestiones culturales con un tesón que no tuvo igual en cualquier otro grupo de amigos. Por otra parte se trata de un grupo de personas que propuse se juntasen para ayudar a trabajar por un museo realizado también por amigos. Tu no olvides que soy abogado y el poco tiempo que ejercí la profesión no lo hice tan mal. Sé lo que es un Patronato, reunión, en su acepción primera, de patrones, pero no conozco como es natural, no me preocupó nunca, su reglamentación española ni de ninguna parte, no la conocía nunca, creo, ni antes ni ahora, pero para eso solo basta con preocuparse por conocerla y si uno, por el motivo que sea, no quiere sujetarse a ella sobran figuras legales a que recurrir para no desnaturalizar el origen, en este caso del Museo. Si no sobran, siempre existen formas legales de garantizar un deseo honesto. De manera que cuando regrese, dentro de unos meses, estudiaremos juntos esta cuestión.
En mi carta última te contestaba sobre la publicación de un cuaderno, podría ser el segundo del Laboratorio de Formas, te enviaría de aquí la presentación gráfica, con el material de la Exposición del Libro. Te enviaría además una nota, como te decía en mi anterior, sobre la primera exposición del libro gallego efectuada en Buenos Aires, hace casi ya treinta años, y sobre el libro gallego en la Argentina y en el Uruguay con los antecedentes de fin de siglo en Cuba.
No sabes cuánto me interesa lo que me dices sobre la Escuela Libre de Cerámica. Pienso referirme a ella estos días en Montevideo, donde el Patronato de Cultura Galega me otorga la Vieira de Plata, algo que acepté, pues significa una respuesta, que agradezco, a la villanía cometida conmigo por el grupo de Buenos Aires el año pasado, que tú conoces en la que participó Flores, que ahora imita el título de uno de tus libros para una sección sin interés alguno que publica en la revista del C[entro] Gallego, “Cousas de calquer rueiro”. Es muy interesante que la Escuela se convierta en un centro internacional de aprendizaje cerámico.
Te envío los dibujos para el color de las ilustraciones a las farsas de Blanco Amor. Se trata de una especie de remiendos. Estos dibujos serán para siempre y para mí dibujos remendados donde va a sobrar un negro puesto originalmente con otro propósito. Ahí van.
Te ruego me envíes el suplemento literario de Informaciones sobre poesía gallega. No lo conozco. Tú sabes que las gentes suelen no enviar estas cosas, a mí también me ocurre eso, porque suponen que alguien lo hace y que tampoco ocurre generalmente nunca. De modo que por favor enviarme una fotocopia. Creo que te contesté a todas las cuestiones de que me hablas. Ahora me debes la respuesta a dos cartas. Contéstame a ellas. Un gran abrazo de Maruja y mío.

Seoane

1972-08-06 Mencionado/a
Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada]
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972 en 06/08/1972

6-8-72

Querido Luis:

Sé que el Ing[eniero]Díaz estuvo aquí el día que se inauguró lo de Clavé. Parece ser que hizo una película con la PIA y con mi casita. - Se está intentando traer también a Torroella. Castro Arines da su conferencia el 25.- El 13 se inaugura la PÍA DO XUNCO.- Esto, en largas discusiones con los representantes técnicos de Nogueira y Rey. Creo se veñen ao rego. El poner en duda mi autoridad con mis hijos, fue socavar la concordia familiar y [ILEXIBLE] monada como esa carta de Xosé que te va para que veas algo más del panorama.- [ILEXIBLE] Contestaré tus cartas luego del 15. Abrazos muy tensos a entramos.

Isaac

1972-08-21 Mencionado/a
Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada]
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972 en 21/08/1972


21.8.72

Sr. Don Luis Seoane
Buenos Aires

Querido Luis:

Dos líneas para acompañarte eso de la Calificación de Conjunto Histórico Artístico para el recinto del viejo Sargadelos. Pasado mañana Álvaro vendrá por aquí con el subdirector de Bellas Artes que es la persona por la que consiguió esto. Ayer hemos comido Mimina y yo con él en Vivero. Las cosas entre Mimina y yo están en vías de arreglarse siempre a base de que los chicos han de salir de casa. Ya los he perdido para mí, por lo menos vamos a ver si son capaces de valerse para ellos mismos. Por fin han aparecido algunos amigos conscientes que no se han dedicado a poner en duda la autoridad que me corresponde sobre mis hijos. Cuando los amigos no procuran reforzar la autoridad del padre con los hijos lo que están haciendo es crear discordia entre los hijos y el padre.
Perdóname que no haya contestado punto por punto tus cartas. Pero te he tenido informado de todas las cosas que han pasado por aquí. Castro Arines llega al Castro el 24. Vendrá a Sargadelos. No hubo forma de conseguir que viniese ningún catalán a dar una conferencia; ni siquiera han contestado por lo menos hasta ahora. Aún pueden hacerlo... Se llevan vendidos 8 grabados de Clavé. No hubo ni una sola crítica en la prensa sobre la exposición.
Tengo serias dificultades con los socios capitalistas, Rey, Nogueira y Varela. Cometieron torpezas verdaderamente estúpidas. Pretendieron marginarme (luego de que les falló una sonda nada velada para ver si me podían incapacitar) y enviaron a un tercero a hacer una investigación en los libros. Pretensión estúpida porque es ilegal, pero que es lo suficientemente provocadora como para que yo siga prestando mi colaboración en el Castro. Ahora esto ya no tiene más arreglo para ellos que firmar un acuerdo de estabilización para el Capital del Castro previniendo que algún día pueda contagiar a Sargadelos. Si no aceptan, dejaremos como mal menor que se diluya el Castro y acabar con la participación del Castro en Sargadelos, porque es de aquí de donde nacen todos los egoísmos y hasta mi discordia familiar.- Justifica mi silencio a un par de cartas que tengo sin contestar. Pero lo haré ampliándote noticias.

Abrazos muy tensos a entramos, vuestro

Isaac

1972-08-28 Mencionado/a
Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972
Sargadelos
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972 en 28/08/1972

[Ollo con esta carta. Nela aparecen varias notas manuscritas, superpostas ao texto mecanografado, do tipo “Non vai esta” (p. 1), “Non vai” (p. 3), “Non vai esta. Fíxena de noite” (p. 4). Polo mesmo motivo, hai lagoas grandes de texto. Polo que di Seoane en cartes posteriores, recibiu unha carta de Díaz Pardo con esta data. Pode tratarse de supresións feitas polo propio Díaz Pardo]
28 de agosto de 1972

Sr. Don Luis Seoane
Buenos Aires

Querido Luis:

Ayer me encontré aquí con tu carta del 21 cte. que se cruzó con la mía de la misma fecha, que te confirmo. Al menos de alguna for[FALTA TEXTO]. Lamenté mucho no ver al Ing[eniero] Díaz, también a Lipa Burd que también anduvo por aquí y por el Castro. ---- Excuso decirte cuánto celebro que trabajes y doy por descontado el éxito de todo lo que hagas y por supuesto de esa última muestra que inauguras el 30 en Bonino. ---- En efecto desde hace tres meses vivo en una casita muy chiquita que hice en el monte. Tenía la idea que te había hablado de ella en más de una carta. Es una cosa modestísima y no tiene ningún gran estudio. Te enviaré una fotografía y, además, alguno de los amigos que vinieron por acá le hicieron fotos y películas. Se trata del primer pequeño eslabón de lo que va a ser Seminario de Estudios Cerámicos. ---- Por las notas de la conferencia de Castro Arines te ente[ra]rás algo de como han andado las cosas. Aquí en Sargadelos quiso él dar una lección a los alumnos de la Escuela. Les leyó una sobre los nuevos materiales que es el tema que lleva este año a la Universidad Intern[acional] de Santander. Resultó muy bien. Castro Arines quedó entusiasmado con todo. Cree que lo de la Escuela de Cerámica puede ser lo más importante que se hace hoy en el mundo en el terreno de la investigación y de la enseñanza. Él quiere colaborar en esto. ---- Creo que se marchó muy contento. ---- Para la clausura de la de Clavé creo que contaremos con una conferencia de Ricard Salvat. Estoy esperando la confirmación. Los otros ni contestaron. Salvat es profesor de estética en la Universidad y dado su talento creo que está capacitado para tratar este tema.
Mi problema familiar está en vías de resolverse, al menos de revelarse en parte los límites de los campos de cada uno. El día de la conferencia de Arines, al fin, Rosendo y José abandonaron la casa del Castro. Desde entonces Mimina está conmigo. A producir esta situación contribuyeron algunos amigos, entre ellos Álvaro Gil, y le tocó la decisión más importante a Castro Arines y a su esposa en cuanto a convencer a Mimina. La descomposición de la conducta de los chicos, hecha evidencia, contribuyó, jugó, también una buena parte. Esta descomposición se manifestó, por ejemplo, en que Rosendo ni siquiera asistió a clase lo que se comprobó por una carta que me envió Fdez Alba y que llegó en esos momentos. Ahora nos proponemos cerrar la casa del Castro, yo quiero que con carácter definitivo, ella no. A partir de este momento los chicos estos tendrán que empezar a acostumbrarse a vivir en la realidad. Lo malo es que por lo de ahora aunque los mates no la ven. Figúrate cual será nuestro drama que tengamos que llegar a la conclusión de que es un mal menor echar a los hijos fuera de casa. No quiero pensar en las causas que han podido conducir a esta situación. Habría que analizar todo un proceso de brujería. Los dictados de la conciencia de cada cual no me justifican nada. ---- Te mando fotografías de la Pía. En una de ellas veréis a Mimina, y al fondo de otra mi casa en el monte. En la vista general de la pila verás el dibujo de los pulpos y verás que por refracción estos llegan a ocupar toda la superficie del agua sin que sea necesario, a mi manera de verlo ahora prácticamente, que se haga nada lateralmente. De todos modos tú verás esto cuando vengas y decidirás ya que a esto no le tocaremos hasta el año que viene. ---- Continuando cosas actuales, el conflicto con los socios capitalistas está pendiente de la decisión de Rey para arreglarse. Nogueira parece que entró en razón y prometió aceptar el convenio de estabilización. Digo parece porque por ahora es una promesa y yo ya no me fío más que del testimonio notarial. Rey se enganchó en el tren de sus equivocaciones y le costará trabajo salir de él. Yo puedo esperar. Tengo margen, creo, para tener paciencia. Si veo que se agota ese margen preferiré dejar morir el Castro antes de saber que se convierte en un peligro para el futuro de Sargadelos.
---
Contesto, al fin ahora, tus tres cartas de 11, 22 y 27 de julio. Me fue materialmente imposible hacerlo en los momentos de recibirlas. Pero mantuve, eso sí, la correspondencia contigo a base de recortes, fotocopias, etc. Recibí con ellas los dibujos para el color de las cosas de Blanco Amor. Yo me había limitado a transmitirte una petición de él que, naturalmente, no me arrancó ningún pronunciamiento. ---- También llegaron, efectivamente tarde, los figurines, hermosos, para el grupo de baile. Estos trajes tuyos se harán más adelante y cuando estés tú. Lo cierto es que yo les tenía preparados unos trajes muy parecidos en cierto orden: blusas y minifaldas. Las de las mujeres con un nudo delante como las peixeiras y los hombres con la camisa de fuera y el pantalón remangado, y para algunos bailes descalzos. Los colores para las muchachas falda violeta y blusa rosa-teja; para los hombres pantalón azul y camisa azul claro. La blusa de las muchachas, con una marca de Sargadelos (no del L[aboratorio de] F[ormas]) serigrafiada directamente en cada pecho, y los hombres una misma marca al lado izquierdo y otro en el lado opuesto en la espalda. Como contraste de esto tenía pensado formar un grupo de hombres, cuatro o cinco, gaiteiros etc. que constituyeran una masa barroco-pétrea roja y negra. Ya veremos. La actuación del grupo resultó una cosa limpia, muy geométrica y de buen gusto y tuvieron mucho éxito tanto en las actuaciones que tuvieron aquí en Sargadelos como en la del Castro. ---- Amparo Alvajar, ya esta[ILEXIBLE] en comunicación con ella. Va un programa de la obra de Salvat completo. La cubierta que va suelta la hicimos luego por nuestra cuenta en vista de los que había hecho con mi proyecto el Ministerio, que es lo que arma el programa. Pero ahí se quedó todo sin poder utilizarlo a la vista de la destitución de Salvat. Va también una copia del texto mío que prohibieron para el catálogo. El texto tuyo, que también prohibieron, había sido seleccionado por Ramón Piñeiro del texto de la Univ[ersidad] de La Plata. Creo que ya te dijera todo esto.
Segundo Cuaderno L[aboratorio de] F[ormas], completamente de acuerdo con tu propuesta. Espero en consecuencia tu diagramación, tu trabajo y todas las sugestiones que creas conveniente. ¿Cambiarías la tapa para este segundo? Acaso no estaría de más. Tú verás. La transcripción de lo del Seminario está casi terminada. Se enviaron los textos a la corrección de cada uno, y si te parece se pueden pedir algunos trabajos monográficos sobre el tema. Ilustraciones, etc. Algunas podemos utilizar, digo yo, del catálogo del libro, pero es mejor que las propongas tú. El trabajo del Seminario se ilustraría con [FALTA TEXTO].
Bueno, de tus cartas también tomo tu preocupación porque alguien trata de corregir tus originales y modificar tus planteamientos, observaciones que son, naturalmente, muy agradables de leer. ---- Quedan pues contestadas tus cartas.
---
Como en mi última te anunciaba estuvieron por aquí el Subdirector Gral. de Bellas Artes, el Comisario Adjunto del Plan de Desarrollo y Gobernador Civil acompañados de Álvaro Gil. Habíamos almorzado en casa de Álvaro y por la tarde vinimos aquí. El Gobernador Civil a regañadientes va aceptando las cosas y parece que renuncia a sus propósitos. El Comisario quedó con la boca abierta de esta organización y el de Bellas Artes está dispuesto a que el Ministerio proteja todo lo que nosotros programemos especialmente en la docencia y en la conservación. Quería que aceptásemos ya ayuda para la escuela que funciona ahora. Espera que nosotros les hagamos el proyecto para ordenar el Decreto de calificación de Sargadelos.
Y nada más por hoy. Te mandaré otras diapositivas mejores sobre lo del libro. Irán enseguida. ¿Cómo anda Maruja? ¿Cuándo venís? Todo el mundo pregunta por vosotros y pregunta esto.

Abrazos muy fuertes a entramos.

[Díaz Pardo]

1972-09-11 Mencionado/a
Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972
Bos Aires
Sargadelos
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972 en 11/09/1972

Buenos Aires, 11 de Septiembre de 1972

Sr. D. Isaac Díaz Pardo
Sargadelos

Querido Isaac:

Recibí hace unos días tu carta del 28/VIII acompañada de las foto grafías de la pileta y de tu nueva casa y la fotocopia de un artículo de Castro Arines. También recibí la fotocopia del artículo que te censuraron en Barcelona, el programa de Barcelona de la obra de teatro de Valle Inclán y la colección de diapositivas de la exposición del libro que da idea perfecta de lo magnífica que debió haber sido. Me falta por recibir, supongo que ya habrás enviado, el catálogo y afiche para la exposición de Clavé que dejé hechos antes de venirme.
(…)
Tu casa, de cuya construcción no me habías enviado noticia alguna, a pesar de lo que creas, y no tenías además si no querías por qué mandármelas, parece ser que es estupenda según me dijo el Ingeniero Díaz, que acaba de llegar y que viene entusiasmado de todo lo que vio, de la fábrica, de la pileta y de tu casa. Creo que tienes razón en desistir de decorar las partes laterales de la pileta o la lateral que tú decías. Para cuando vayamos te llevaré algunos proyectos referidos a ese terreno de la pileta. Digo cuando vayamos. Tú preguntas cuando vamos. Esperamos hacerlo seguramente en febrero, antes no podemos salir de Buenos Aires, pero faltan pocos meses y en febrero estoy invitado a exponer y quieren que vaya a Puerto Rico y entonces Maruja y a mí se nos ocurrió un plan que me gustaría se realizase y que consiste el pasar juntos, vosotros dos y nosotros, quince o veinte días en Méjico, un país espléndido por muchos motivos y del que estoy seguro que gozarás por todas sus creaciones del pasado y aún actuales. Vosotros irías de Madrid y nosotros lo haríamos desde Puerto Rico. Regresaríamos juntos. Creo que sería un viaje provechoso y nosotros estaríamos contentísimos de hacerlo con vosotros. Además te prometo que tendríamos largas discusiones sobre las cuestiones más diversas. La exposición mía va muy bien. Estoy vendiendo bastante y tiene mucho éxito de público y crítica. Dentro de unos días sale mi carpeta de grabados, Intentando matar ideas muy pocos ejemplares, 40, y el mes que viene o el otro saldrá un pequeño libro de poemas, A maior abondamento y estoy trabajando en una antología de las 900 crónicas que hice para la audición Galicia emigrante y de las que creo hay bastantes que realmente interesan por tratarse de gentes y sucesos desconocidos en esa, aparte las que se refieren a arte o literatura. Quiero, sobre todo, dar idea de la diversidad de cuestiones que fui tratando en tantos años como duró esa audición. Para ahí tengo otros proyectos de los que ya hablaré contigo. Lástima que tenga la vida dividida entre Buenos Aires y Galicia. Creo que será siempre así, por desgracia para nosotros, pero así es el destino de los emigrantes. Lo fue de mis padres. Me alegro también mucho de que se resuelvan los problemas con Nogueira y Rey. No me enteré en qué consistía la oposición o la posición de ellos. Supongo que lo más importante y también lo que más conviene es que crezcan Sargadelos y El Castro. Ninguna fábrica de Galicia ni en España, creo, llegó a tener en tan poco tiempo el prestigio, por ejemplo, de Sargadelos, su trascendencia cultural y el favor del público. Todo esto justifica holgadamente su conducción.
En cuanto al Cuaderno de L[aboratorio de] F[ormas]: te enviaré una nueva tapa, y, con una próxima, a partir de esta semana que termino la exposición y creo que también el cuidado de la edición del Martín Fierro, para el que hice veinte grabados, te mandaré el plan completo del cuaderno.
Siento hubiesen llegado tarde mis figurines a pesar de que te los envié casi a vuelta de correo de acuerdo con tu pedido de ellos. Me complace que te hubiesen gustado. Cuando vaya a esa ya hablaremos sobre esto. Maruja se encuentra mucho mejor, gracias por vuestra preocupación, creo que ahora para estar del todo bien es cosa de un poco de tiempo.
Buenos Aires está culturalmente espléndido. Lástima que no tenemos tiempo para seguir todo cuanto se ofrece. Se están haciendo muchas obras importantes en distintos terrenos sin que en esto tenga nada que ver el Estado. Bueno, estudiar lo de Méjico. Nos gustaría mucho que nos reuniésemos allí. No te justifiques con el trabajo. De aquí a febrero puedes hacer lo posible para tener quince o veinte días de libertad. Una visita a ese país puede ser de gran utilidad, excuso decirte, para diversas cuestiones. (…)

Muchos abrazos muy fuertes de Maruja y míos para los dos.

Seoane

1972-09-29 Mencionado/a
Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972
Bos Aires
Sargadelos
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972 en 29/09/1972

Buenos Aires, 29 de Septiembre de 1972

Sr. D. Isaac Díaz Pardo
Sargadelos

Querido Isaac:

Suponemos operada a Mimina, que todo haya ido bien, y por lo menos tú de vuelta en Sargadelos. Nosotros haciendo la vida de Buenos Aires post-exposición, sacando o tratando de sacar adelante el mucho trabajo acumulado. Contesto un poco rápidamente tu carta del 20/IX/72. Me parece muy bien el anteproyecto de actividades prácticas y pedagógicas para Sargadelos. De acuerdo a lo que hemos conversado muchas veces creo que faltarían algunos temas muy importantes y en relación con la vida en Galicia que, en definitiva, es a quien se dedica todo esfuerzo y que aún no pudiendo comprenderlos en los apartados del anteproyecto deben ser tenidos en cuenta y están en relación con la cultura de un país. Por ejemplo un cursillo anual sobre alimentación y la parte de agricultura que le corresponde. La gente debe conocer el valor de lo que “su” tierra produce. En Galicia las gentes campesinas no solamente no comen alimentos que son corrientes en la ciudad, como remolacha, zanahorias, calabacines, tomates, etc., sino que desconocen el valor nutritivo del hinojo, del cardo, de la acelga, de la espinaca, del apio, etc., de las algas entre los productos del mar, que son en cambio casi fundamento de la alimentación del mediterráneo y de Oriente. Están perdiendo noción del valor alimenticio de la fruta. En el siglo XV tuvieron que ir campesinos belgas a enseñar agricultura a Galicia y la conquista de América le proveyó de la mayor parte de su alimentación actual. Hoy, cinco siglos después, lo que fue novedad entonces se convirtió en rutina y medio de empobrecimiento al negarse las gentes a innovar métodos, por esta rutina, por falta de curiosidad, quizás por fatalismo y la comida, tan importante para la salud del hombre y para su economía, está absolutamente descuidada. Esta labor sería, a mi juicio, el primer propósito de una verdadera y elemental acción cultural, unido, naturalmente, a los que se refieren al espíritu y al ocio o al juego pero ocupando un primer lugar. Poner al día, por el procedimiento de cursillos si tú quieres, los programas de enseñanza artesanal, de la viejas escuelas de Artes y Oficios o de las Sociedades Económicas de Amigos del País, tan extraordinarias cuando se fundaron y que hicieron posible la existencia de cantidad de artesanos de la madera, de los metales, del modelado, la talla, etc., en algún centro como Santiago, cuyos efectos se hicieron notar en América, en Buenos Aires concretamente. Pero bueno, aceptado el plan tal como tú lo propones creo que hace falta incluir algunos apartados como cursillos sobre nuevos materiales. Ampliar lo que se refiere a sistemas de comunicación, el libro ocupa el cuarto o quinto lugar en cuanto a los medios. Hoy le preceden el diario, la revista, la radio, la televisión, el cine. La letra impresa cede cada vez más terreno a la imagen y al sonido. Creo que es muy importante, y estoy seguro que lleva camino de convertirse en una nueva ciencia y en una metodología para la enseñanza es la fundación de lo que se puede denominar un taller de juegos, o de diversión, donde a los grandes como a los chicos se les puede enseñar a divertirse creando, aprendiendo oficios, utilizando distintos materiales, los de siempre: el metal, la madera, el barro, la pintura, la piedra, el yeso, etc., y los nuevos, como los derivados plásticos en general, procedimientos técnicos derivados de la electricidad, del aprovechamiento del agua, etc. Te escribo todo esto pensando que más importante que atraer al japonés o al norteamericano a ese centro es atraer al mozo campesino de la aldea de al lado, como fue nuestro propósito primero al crear el Laboratorio de Formas. Ayudando al turismo ayudamos a la emigración. Nosotros hablamos en el pasado de aprovechar al “zoqueiro”, al cartero, a la bordadora, etc., de crear para ellos iniciativas y formas. Te propongo todo esto, a que extiendas tu programa a la enseñanza de: A) Alimentos y agricultura; B) Materiales y manufactura; C) Nuevas artes de comunicación masiva: Diarios, revistas, radio, televisión, cine, publicidad; D) Taller de diversión, debe estudiarse el nombre. Este último apartado me parece el posible fundamento de todo. Por mi partiría de él para desarrollar todo el plan. En cuanto al Consejo Asesor si no tiene más función que la de asesoría creo que los representantes deben ser solamente de instituciones gallegas, y, de patrocinado por el Laboratorio de Formas, un representante de éste, tú a Albalat, deben integrar dicho Consejo. Siempre el Laboratorio de Formas debe estar presente, precisamente por su carácter de patrocinador de iniciativas, que, naturalmente, nunca debe detenerse con la primera que inicia un trabajo.
No me enviaste el catálogo de la exposición Clavé ni el afiche. Me gustaría ir teniendo estas cosas para mi archivo referente a cuestiones del Museo y de Sargadelos, aparte de que quiero tener todo cuanto hago. Para ahí salió Geno Díaz que va a trabajar, creo, en algo a España. Ya está de regreso Jorge Arranz. Todo lo mismo. Trato de ayudarle. Nos gustaría que nos dijeses como fue la operación de Mimina.
Piensa en el posible viaje a Méjico. Preveo todas esas dificultades de trabajo pero creo que sería muy útil para ti y para Mimina y para nosotros. ¿Qué quieren Rey y Nogueira? Pienso que haces muy bien en querer en llevar adelante tus planes.

Te dejo por hoy. Recibid Mimina y tú un abrazo muy grande y fuerte.

Seoane

1972-10-06 Mencionado/a
Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972
Sargadelos
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972 en 06/10/1972

6.10.72

Sr. Don Luis Seoane
Buenos Aires

Querido Luis:

He llegado a mediodía a Sargadelos y me he encontrado aquí tu carta del 29 de sept[iembre] último. Yo te confirmo la mía del 30 del mismo mes. Tomo buena nota de las sugerencias para el anteproyecto del Seminario. Ten en cuenta de que se trata de una institución fundamentalmente dedicada a la cerámica, si bien amplía sus conocimientos, sus investigaciones, sus conexiones con unos estudios básicos y con otros sistemas de comunicación para que no quede especializada. De todos modos es indudable que tus sugestiones que encuentro muy bien tienen ya previsto su marco pues tu apartado A)- Alimentos y agricultura entran dentro de la investigación socio-económica ya que se trata de una investigación del sector primario.- B)- Materiales y manufactura creo que hay que recogerlo como lo expones tú en uno de los incisos de sistemas de comunicación. Y lo mismo digo del C) y del D). Este último sería, no cabe, es un nuevo sistema de comunicación. Desde luego tus gestiones son muy valiosas y serán recogidas en una nueva tentativa de perfeccionamiento del anteproyecto, al que, naturalmente, hay que darle muchas vueltas. Siempre que se te ocurra algo para este fin no dejes de exponérmelo. Cuenta conque, en un principio al menos, su proyección fundamental ha de estar dirigida a la investigación cerámica que es de lo que se va a nutrir y obtener recursos; lo que no quiere decir que termine siendo, por ejemplo, un instituto del teatro. Esta posibilidad yo no la descarto.
Por segunda vez te hemos enviado por correo aéreo el cartel y catálogo de Clavé. (Si aún así no te llegó, de las dos veces iba en rollo y costó lo suyo, te lo enviaremos una tercera vez doblado ya que estoy sospechando que son los rollos los que no llegan).
Ayer llegó Neira Vilas a Galicia. Lo fui a ver a Gres. Vino con Anisia. Trajo para el Museo C[arlos] Maside donado por la Sección Gallega del Dep[artamento] de Lingüística del Ministerio de Educación y Ciencia de Cuba los dos dibujos de Castelao de cuyas fotografías te había hablado que aparecen en la exposición del libro del Castro. Uno de negros y otro de paseados. Los dos inéditos. Y muy buenos. Felicitémonos. Neira Vilas estará por aquí un mes y medio y dentro de unos días se vendrán con nosotros. Ya hablamos mucho de vosotros.
Yo me voy mañana a recoger a Mimina y llevarla para el Castro. Es decir que sale mañana –casi seguro– del Sanatorio. Posiblemente se quedará unos cuantos días en casa de José Luis. Parece ser que la cosa fue completamente normal aunque, naturalmente se encuentra bastante estropeadiña. Y la tensión, que fue de donde partió todo le pasó a normal. Vamos a ver como va confirmándose esto. Ahora queda el problema de los chicos. Rosendo repitiendo íntegro su segundo año de arquitectura y Xosé con una desorientación formidable paseándose en coche con su novia y acariciando su barba como únicas actividades desde que rifó conmigo. Con todo el que está mejor es Camilo. ¡Ay dios!

[Manuscrito na marxe esquerda:] Un abrazo muy fuerte a entramos

Isaac

1972-11-11 Mencionado/a
Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972
Bos Aires
Sargadelos
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972 en 11/11/1972

Buenos Aires, 11 de Noviembre de 1972

Sr. D. Isaac Díaz Pardo
Sargadelos

Querido Isaac:

Te debo la respuesta a algunas cartas, notas, etc. No me llegaron, eso sí, el catálogo de Clavé, el libro de Blanco Amor si salió, etc. No me los mandes, los recogeré ahí. En muchos años no se perdió ningún tubo de los grabados que fueron y vinieron de Buenos Aires a Tokio, de Yugoslavia, a Polonia, a Madrid, este año mismo de Buenos Aires a Roma y a Tokio, ida y vuelta. Y en cuanto al precio alto de estos envíos nos podremos de acuerdo en lo sucesivo, pues no tiene por qué pagar la fábrica o tú algo que está destinado a mí. Nunca se me había ocurrido esto. Te envié últimamente el álbum Intentando golpear ideas por medio del ingeniero Temes, de Vigo, a quien le pedí que te viese y te lo entregase. Esta semana salió el libro Martín Fierro con grabados de madera míos que te llevaré personalmente y por correo te enviaré el librito de poemas A maior abondamento. También te llevaré otro pequeño álbum, Martina Céspedes, narración en grabados en madera de una heroína argentina de las invasiones inglesas. Nosotros marcharemos directamente a esa en los primeros días de Enero, pues tenemos que acompañar a mi madre que se va a Asturias. Tiene 86 años y quiere estar en casa de mi hermana una temporada. De modo que adiós ida a Puerto Rico y a Méjico. Irán a Puerto Rico solo los grabados.
Para ahí marchó alguien que creo conoces, secretario de “Irmandade Galega” aquí, que fue de las personas que con mayor tesón se dedicó a divulgar las injurias contra mí de hace dos años de que, tú sabes muy bien y sin que yo hubiese tenido trato alguno con él. Pues bien, la noticia es que va a trabajar contigo a Sargadelos. Noticia que me costó un disgusto y el casi pelearme con alguien que puso en duda tu conducta con respecto a mí, por suponerte protector de ese sujeto y capaz de hacerme tu una felonía parecida. A este Mera lo llegaron a echar un día de la F[ederación] de S[ociedades] Gallegas por insistir en calumniarme. No tienes necesidad de aclararme nada pues no creo en absoluto esa noticia. Tómalo como noticia divertida producto de la desocupación mental de algunos.
Aquí estamos todos pendientes de la semana que viene. Esto está políticamente sobre ascuas. La preocupación es general con motivo del regreso de Perón. Nadie puede predecir qué ocurrirá. Por mi parte pienso hoy que nada cambia como no sea el nacimiento de una nueva vida política argentina, distinta, quizá, a la que ahora remata con este viaje.
Bueno, basta hoy. Anoche vi las espléndidas diapositivas que hizo Lipa Burd de Sargadelos, del Museo del Castro y para otro día veré las que hizo de los murales de Vilar de Donas y de los monasterios del itinerario que le hice antes de salir de viaje. Sintió mucho no verte. Todos vienen maravillados de Sargadelos.

Un gran abrazo para Mimina y para ti de Maruja y mío.

Seoane

1972-11-22 Mencionado/a
Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972
Sargadelos
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1972 en 22/11/1972

22.11.7[2]

Sr. Don Luis Seoane
Buenos Aires

Querido Luis:

Al volver de Barcelona (montar Hogarotel) leo la tuya del 11 cte. Trae la buena noticia de vuestra llegada en los primeros días de enero.
Lamento que no te llegara eso de Clavé, tampoco esta vez. Ahora estás a llegar y ya lo ves todo. Ese señor Mera no tengo la menor idea de que exista, jamás oí ese nombre aplicado a una persona ni tengo compromiso alguno para dar trabajo a nadie y menos para alguien de ahí, y tampoco entiendo como puedes tú ni por un momento hacerte mala sangre ante esa imagen de una felonía a ti cuando sabes que por la que le hicieron a Arranz fui capaz de abandonar toda mi obra de diez años.
La felonía me la hicieron Rey y Nogueira. Mientras estaba en Barcelona nombraron apoderados y delegaron sus facultades de Administradores en el Castro y Sargadelos en un sobrino de Páramo (que mal dirige una empresa de ganadería) y en otro profesor mercantil. Llegué y labré un acta notarial negándoles facultades para delegar sus funciones administrativas y eché al ganadero y al otro. Y convoqué Juntas extraordinarias en el Castro y Sargadelos para enjuiciarlos de acuerdo con la convocatoria que te envío de Sargadelos (similar es la del Castro) y ellos a continuación convocaron otra Junta para el mismo día por la mañana, de la que te envío una copia. Parece ser que ellos no tienen nada que hacer y que todas estas bravatas son para haciendo imposible acuerdo alguno justificar vender su parte parece ser a los del Banco del Noroeste que es donde está el tristemente célebre Páramo de Lugo. Es decir: que estos señores nos meterían aquí algo con intenciones semejantes a las del boticario de Lugo, pero peor. Les falló lo de incapacitarme pero se ve que no renuncian al ataque contra mí. Vamos a ver cual es mi defensa. Risco padre e hijo están en ello. Cabría, independientemente de otras cosas, querellarme contra Rey pues además de él Nogueira es también Administrador y el quererme hacer blanco a mí de su ataque está visto que no es un ataque contra un Administrador sino contra una persona... pero ¿desde dónde viene este ataque? y ¿soy ciudadano clasificado para tener defensa?
Bueno, mi vida está como ves bastante complicada, ya lo de menos es atender algo estos tinglados de fábricas y demás, lo más difícil es defenderse de los ataques que me vienen desde el mismo seno familiar hasta la línea de mis socios...
En Madrid almorzamos con Álvaro y con Ramón Falcón, subdirector de Bellas Artes. Muy bien. Está con muy buena disposición para la labor que se pueda hacer en Sargadelos. Falcón es de Lugo y autor de la liberación de la Muralla de Lugo.
En Barcelona quedó inaugurada la exposición de Pesqueira y el 1º de diciembre se inaugura la de Laxeiro, con el que estuvimos en Madrid.
Ya te informaré de como se van desarrollando las cosas.
Os esperamos como al santo advenimiento.

Un abrazo muy fuerte para entrambos.

Isaac

1972-12-01 Mencionado/a
Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972
Bos Aires
Sargadelos
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972 en 01/12/1972

Buenos Aires, 1 de Diciembre de 1972

Sr. D. Isaac Díaz Pardo
Sargadelos

Querido Isaac:

Recibí tu carta del 22, la recibí el 29 de noviembre y el día antes recibí el tubo con el cartel de Clavé y el catálogo. Fue enviado el 22 de septiembre desde ahí, Cervo, por correo ordinario, con un franqueo de 39 pesetas. Naturalmente, en nuestro tiempo apenas vienen barcos a Buenos Aires, basta ver la lista de los que salen de puertos españoles hacia aquí y toda la correspondencia se hace por correo aéreo, pero esta tuvo no podía ser enviado por otro medio, pesa nada menos que un cuarto de quilo, solo el tubo, lo pesamos a propósito. Lamento todo lo que ocurre con Rey y Nogueira y que termine de esta manera, tan tristemente, una amistad que os profesabais desde hace muchos años. No sé qué decirte. Ya hablaremos de todo ahí. Estoy trabajando mucho pues quiero dejar mis cosas arregladas antes de emprender viaje. Fue este un año de mucho trabajo para mí. En este momento está abierta una exposición de acuarelas y dibujos coloreados en una nueva galería, “Martina Céspedes”, para la que hice el álbum del mismo nombre, Martina Céspedes biografía narrada en grabados en madera que te llevaré. El libro de poemas te lo envío esta semana. Políticamente esto está muy tranquilo. Perón, es decir, su imagen, comienza, creo yo, a desinflarse. Repite los mismos conceptos, tópicos en general, a diario y las gentes están dándose cuenta de su engaño, de la doblez de su política. Los jóvenes cuando lo tenían lejos unían su imagen a la de un Ricardo Corazón de León propietario. Ahora comienza a resultar una encarnación de Tartufo. Con los periodistas y con los políticos monologa. Monologa siempre. Un hombre envejecido. Es una gran experiencia política la que se está realizando aquí, y, en la experiencia, Perón parece desinflarse repitiendo gestos del pasado, los brazos en alto, poniéndose el gorrito de jockey para complacer a los chicos del secundario que le llaman superpibe. Te contaremos todo esto y de la indignación que produjo una tapa del ABC y el desconocimiento español de la realidad argentina. Por hoy nada más. Puedo ser tan conciso como tú. Saludos a todos. Te tendré al tanto de nuestra llegada. Recibir Mimina y tú el abrazo de Maruja y mío.

Seoane

1974-11-22 Mencionado/a
Carta de Isaac Díaz-Pardo a Luís Seoane, 1974.
Sargadelos
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Isaac Díaz-Pardo a Luís Seoane, 1974. en 22/11/1974

22.11.74
Sr. D. Luis Seoane
Buenos Aires
Querido Luis:
Al volver de Barcelona (montar Hogarotel), leo la tuya del 11 corriente. Trae la buena noticia de vuestra llegada en los primeros días de enero.
Lamento que no te llegara eso de Clavé, tampoco esta vez. Ahora estás a llegar y ya lo ves todo. Ese señor Mera no tengo la menor idea de que exista, jamás oí ese nombre aplicado a una persona ni tengo compromiso alguno para dar trabajo a nadie y menos para alguien de ahí, y tampoco entiendo como puedes tú, hacer ni por un momento, hacerte mala sangre ante esa imagen de una felonía a ti cuando sabes que, por la que le hicieron a Arranz, fui capaz de abandonar toda mi obra de diez años.
La felonía me la hicieron Rey y Nogueira. Mientras estaba en Barcelona, nombraron apoderados y delegaron sus facultades de Administradores en el Castro y Sargadelos en un sobrino de Páramo (que mal dirige una empresa de ganadería) y en otro profesor mercantil. Llegué y labré un acta notarial negándoles facultades para delegar sus funciones administrativas y eché al ganadero y al otro. Y convoqué Juntas extraordinarias en el Castro y Sargadelos para enjuiciarlos de acuerdo con la convocatoria que te envío de Sargadelos (similar es la del Castro) y ellos, a continuación, convocaron otra Junta para el mismo día por la mañana, de la que te envío una copia. Parece ser que ellos no tienen nada que hacer y que todas estas bravatas son para hacer imposible acuerdo alguno justificar vender su parte, parece ser a los del Banco del Noroeste que es donde está el tristemente célebre Páramo de Lugo. Es decir: que estos señores nos meterían aquí algo con intenciones semejantes a las del boticario de Lugo, pero peor. Les falló lo de incapacitarme, pero se ve que no renuncian al ataque contra mí. Vamos a ver cual es mi defensa. Risco padre e hijo están en ello. Cabría, independientemente de otras cosas, querellarme contra Rey, pues además de él Nogueira es también administrador y el quererme hacer blanco a mí de su ataque está visto que no es un ataque contra un administrador, sino contra una persona... pero, ¿desde dónde viene este ataque? y ¿soy ciudadano clasificado para tener defensa?
Bueno, mi vida está, como ves, complicada, ya lo de menos es atender algo estos tinglados de fábricas y demás, lo más difícil es defenderse de los ataques que me vienen desde el mismo seno familiar hasta la línea de mis socios...
En Madrid, almorzamos con Álvaro y con Ramón Falcón, subdirector de Bellas Artes. Muy bien. Está con muy buena disposición para la labor que se pueda hacer en Sargadelos. Falcón es de Lugo y autor de la liberación de la Muralla de Lugo.
En Barcelona, quedó inaugurada la exposición de Pesqueira y el 1º de diciembre se inaugura la de Laxeiro, con el que estuvimos en Madrid.
Os esperamos como al Santo Advenimiento.
Un abrazo muy fuerte para entrambos.
Isaac.

1977-02-16 Mencionado/a
Carta de Seoane a Parker. 1977
A Coruña
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Parker. 1977 en 16/02/1977


La Coruña, 16 de Febrero de 1977

Sra. Margot Parker
Buenos Aires

Querida Margot:

Estamos empezando, con mucha pereza, a escribir cartas. Galicia se presta más para la vida contemplativa y la conversación más o menos plácida, que para la acción. Cuando los gallegos escriben, en general poco, pueden surgir las Emilia Pardo Bazán, Valle Inclán o Camilo José Cela, o ser bastante disparatados, como creo es mi caso. Antes de llegar a La Coruña estuvimos en Madrid y Barcelona. En Madrid las exposiciones importantes empiezan a surgir en estos últimos 15 días, cuando estábamos ya en Galicia donde, sin embargo, vimos en el Convento de Santo Domingo de Santiago de Compostela, una exposición antológica de pintura española contemporánea, con Miró, Millares, Saura, Tapies, Clavé a la cabeza. Muy buena. Pero en Madrid se inauguraron cuando no estábamos, habíamos llegado a La Coruña, una gran exposición de pintura norteamericana y otra, muy importante, de pintura polaca, que supongo no llegará a Buenos Aires. En Barcelona estuvimos en la Fundación Miró, cuyo edificio fué hecho por el arquitecto catalán Sert, uno de los que trata de reivindicar la arquitectura popular mediterránea que antes había hecho el hogar-taller de Miró, en Palma de Mallorca y la Fundación Maeght, en el sur de Francia. Se trata de uno de los grandes arquitectos de nuestra época. La Fundación Miró encierra al mismo tiempo que el museo del pintor, salones para exposiciones, conferencias, audiovisuales, cine, biblioteca, etc. Se trata de una gran empresa cultural con sentido de oportunidad para nuestra época más que con relación al pasado. Cuando estuvimos en los salones de exposición se mostraba el envío hecho por España a la Bienal de Venecia, referido a la vanguardia española desde 1931 e incluyendo la guerra civil. Faltaban unos pocos nombres, algunos que se negaron, yo entre ellos, (de una época que podría ser neo-dadaísta, un dadaísta muy tardío, pero que haría el encanto actual de Romero Brest, y de lo que no tengo casi nada y lo que tengo o veo en casa de amigos me parece poco presentable) y otros para quienes sería dificil el envío, supongo, desde los países americanos donde residen.
Esto es todo por hoy, se trata de noticias que generalmente no vienen en los diarios. Estas, las que vienen, ya las habéis leído, seguramente y podeis interpretar a vuestro gusto. Escríbenos, cuéntanos que ocurre en Buenos Aires en cuanto a cuestiones culturales. Para saber precios de ganado y cereales y alguna noticia social, casi nada más, tenemos La Nación aérea.

Un gran abrazo de Maruja y mío:

[Seoane]