PROXECTO EPÍSTOLAS

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9 MENCIóNS A Esther de Cáceres (1903-1971)

Poeta e ensaísta. Estudou medicina licenciándose en 1929 e alternou a súa profesión coa docencia como profesora universitaria de Literatura. Obtivo o Premio Nacional de Literatura en 1933, 1934 e 1941. Foi Embaixadora de Uruguai en USA nos anos sesenta.
Epístolas
Destinatario/a [2]
Mencionado/a [9]
Remitente [13]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Mencionado/a
Carta de Baltar Domínguez a Seoane. Sen data
Chos Malal
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Baltar Domínguez a Seoane. Sen data

[Carta mecanografada con firma autógrafa]

Chos Malal, 30 de mayo de 1950

Querido Seoane:

Por el telegrama que te habrá mostrado Olsen ya sabrás que recibimos tu carta contestando a la que te remití por el mismo Olsen. Estábamos realmente un poco intranquilos sobre posibles extravíos postales y por eso aproveché el viaje de ese amigo para escribirte, además tener también así la oportunidad de haceros llegar mis directas noticias nuestras.
Lamentamos que tu ciática no se muestres lo dócil que fuera deseable a tu afán de mejoría y a las intervenciones terapéuticas del Dr. Paterson. Supongo que este te habrá hablado (y tú lo habrás tenido en cuenta), de lo que contribuye a la mejoría de casos como el tuyo la eliminación de la perniciosa costumbre de fumar, entre otras causas de intoxicación desde afuera. Pienso que también en tu caso puedas beneficiarte con la pérdida de algunos kilos de peso, aliviando así la tarea de sostén a músculos, vértebras y discos gelatinosos: Disculparéis tú y el Cuerpo Médico a cargo tuyo, esta intromisión “comedida” (en sentido sudamericano) de un médico rural cuya opinión no está tal vez a la altura de los modernos conocimientos.
Hoy por la mañana, te puse un telegrama en relación al departamento de Rafael, pidiéndote que dieses oportunidad a que se entrevistase Olsen con Baudizzone. Sabiendo que al igual de otros muchos miles de personas, aquella familia tiene el problema de conseguir un lugar donde vivir en Buenos Aires y al tener noticias por tu carta de que Rafael daba instrucciones a Baudizzone sobre su departamento, se nos ocurrió dar esa mínima oportunidad a nuestros amigos. Desde luego, nos complacería poder ayudarles en su deseo y es de tener en cuenta, además, que siempre sería preferible hacer cualquier arreglo de esa naturaleza con amigos que con desconocidos de cuya conducta ulterior no habría tanta garantía. Naturalmente que todo esto lo diga sin pretender influir ni sobre las instrucciones que Rafael haya dado –que es lo fundamental a tener en cuenta– ni sobre los compromisos de Baudizzone o sobre lo que este estime más conveniente desde el punto de vista jurídico-económico en relación a Rafael. Nuestra intervención podría sintetizarse diciendo que: “en igualdad de condiciones y dentro de lo correctamente posible, recomendaríamos al matrimonio Olsen como candidatos para el departamento de Rafael”. Puedes trasmitirle esta síntesis en forma de mensaje a Baudizzone, con mis saludos, y diciéndole que no le escribo directamente por no tener su dirección actual.
Volviendo al Dr. Paterson y como dato para tu anecdotario, te diré que hace algunos años fue Gobernador de Neuquén un hermano de aquel y que su actuación terminó declarando algo así como la independencia neuquina, con medidas de defensa de fronteras táctica y estratégicamente muy bien dispuestas, aunque desgraciadamente causadas por un ulteriormente demostrado y definitivo desarreglo mental del causante.
Recibí una tonificante carta de Bermúdez, comunicándome noticias sobre las nuevas autoridades faraldinas. Le contestaré uno de estos días.
Hace aproximadamente un mes escribí a Frontini respecto a unas gestiones que desearía me hiciese para el cobro de unos sueldos de los primeros meses de mi actividad con Salud Pública en Chos Malal. Envié la carta certificada a la dirección de Lavalle 1312 (1312), sin haber tenido hasta ahora ninguna contestación. ¿Podrías telefonearle para asegurarnos de si llegó a su poder la carta susodicha?
Nada más ya. Deseamos tu mejoría.

Saludos y abrazos para los dos de

Antonio

Algo más, sin embargo: Tuvimos carta de Rafael y Carmen desde Cagnes. También de Esther anunciando que embarcaban en Bilbao y hacia el 23 de mayo a bordo del Monte Urbasa en dirección al Río de La Plata (Montevideo o Buenos Aires). Nos gustaría estar ahí cuando lleguen, pero dudo que sea posible. En todo caso, les daríais un abrazo de nuestra parte si a van a Buenos Aires y les diríais que pueden dejar en vuestra casa unos encargos que al parecer traen para nosotros.

[Manuscrito por Mireya:] Querida Maruxiña: Iba ya a escribirte cuando llegó vuestra carta. Estábamos intranquilos. No sabíamos que os podía “estar pasando”, como dicen estos sureños. Siento mucho la enfermedad de Seoane, pues ya me imagino lo que a ti también te contraria que esté maliño. Dios mediante, todo pasará. Como ya os dice Antonio, nos haría muy felices un viaje a ésa para recibir a los Cáceres y pasar todos juntos unos deliciosos días… pero no sé aún. La parte masculina de esta corta flia. (sic) ya es posible que pueda ir, pero yo, sería más problemático. Veremos. Me parece magnífica idea la que has tenido de tomar clases de corte. Espero, pues, que cumpláis vuestra promesa y que os decidáis a venir. Lo pasaríamos estupendamente. Ya tengo que dejar. ¡Hasta pronto! Un beso fuerte de

Mireya

1949-00-00 Mencionado/a
Carta de Cuadrado a Luís e Maruxa Seoane. 1949
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Cuadrado a Luís e Maruxa Seoane. 1949 en 00/00/1949


[1949]

Luis y Maruja:

Vuestras noticias, noticias de vuestras vidas, me llegan por muchos conductos: cartas, diarios, radios. Todo ello anuncia y certifica tus merecidos éxitos. Y especialmente tus dos cartas –Varela y Cuadrado por la que se descubre tu felicidad en Londres y tu seguridad en el triunfo. En París debes tener tres cartas mías sobre asuntos que ya contestarás.
Hace unos días te mandé por avión los tres libros que pediste. Todo lo que dices de Botella al mar es un orgullo para nuestras ediciones siempre entre el riesgo y la aventura.
Me alegra mucho lo que dices del comportamiento de Plácido Castro, tan buen gallego, a quien recuerdo con la mayor simpatía. Dale mis saludos. Estos días estoy encendido con noticias de Galicia con la maravillosa correspondencia de Esther de Cáceres. Lo único malo es la muerte de Manteiga y el agravamiento de la enfermedad de Castelao.
Supongo (que) habrás recibido un cable el día 13, el día de la inauguración de la Exposición de Torrallardona. Todos están encantados con tus actuaciones por Europa, actuación que nosotros divulgamos por todas partes. Torrallardona sale para París en el mes de octubre, becado por los franceses. Creo que no vendió nada en la exposición.
Julio Rinaldini, que se encargó de la presentación de Parra, me dice que veas a su hijo Luis María Rinaldini, que vive en 85-Castle Street. Cambridge. Dice que él te presente a sus amigos, en especial a Camacho, de la BBC. Sigue diciendo Rinaldini que, tanto su hijo como Camacho, pueden ponerte en contacto con Cyrill Conolly, director de Horizon. Y sigue diciendo que veas también de parte de él al pintor Trevelyan, de la galería Lefebre; pueden informarte en el Consejo Británico. Todos ellos hablan el castellano. Como ves, Rinaldini está bien.
Encontré a D. Lorenzo Luzurriaga que me dice que su hija está en Londres. Le escribió dando tu dirección para que te visite.
Hoy me habló Guillermo de Torre. Dice que tuvo carta de Dieste que es encontró con Salazar Chapela. Aconseja que le saludes en nombre de él. Yo conocí a Salazar Chapela en el Ministerio de la Gobernación. Y salúdale en mi nombre.
Se inauguró la exposición de Parra. Fue todo un éxito. Veremos como le va. El primer día vendió 5. Claro que no tanto como Palmeiro que ha sido algo milagroso. Vendió casi todo... Parra te quiere y admira mucho. (Tu pintura vale mucho. Le gusta más que la de Colmeiro. Le dimos una gran comida. Todos españoles y peruanos. Los argentinos siempre en la Luna.
Estamos impacientes por tenerte otra vez por aquí. Todos te quieren y recuerdan. Saludos muchos. Todo Nova. Odilda y Antonio. Perrotta, López, Manolo, los empleados. Severo casi llora cuando le comunicamos tus noticias desde Londres.
Varela por aquí anda sin hacer nada. Hizo un hermoso prólogo para el escultor Alonso. Ahora está escribiendo un gran libro de poemas sobre el Río de la Plata. Su vida particular siempre como Botella al mar. Y siempre piensa marchar.

Y recibid el mejor abrazo de María Julia y Arturo.

Arturo

[Manuscrito na esquina superior dereita por Aznar?:] Un gran abrazo de Aznar con la recomendación de que no reavive la vieja rivalidad naval galaico–argentina.

1956-05-14 Mencionado/a
Carta de Otero Espasandín a Luís e Maruxa Seoane. 1956
Nova York
Washington, D.C.
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Otero Espasandín a Luís e Maruxa Seoane. 1956 en 14/05/1956


3450 38th Street, N. W.
Washington 16. D. C.
Estados Unidos
14 de mayo de 1956

Queridos Luis y Maruja:

Hace tanto que no escribo una carta propiamente dicha que ni sé como dar comienzo a ésta. ¡Han pasado tantos años y tan mal pasados! Pero en fin, algún día volverán las cosas a su cauce de nuevo y entonces nos entenderemos. Mientras tanto, os diré cuánto me alegró la carta de Carmen Dieste anunciándonos los éxitos de Luis en Nueva York. Unas horas antes había salido para allá Cuqui, quien vino a pasar el fin de semana con su madre, pues ayer se celebró el llamado día de las madres en el país. Acabo de escribirle para que trate de obtener ejemplares de los diarios en que se habla de la exposición, para que vaya a ver los cuadros e invite a algunos amigos pintores a que la vean también. A nosotros no nos es posible ir, aun sintiéndolo mucho, por diversas razones. Tendremos que contentarnos con contemplar el San Amaro d´Armenteira, que preside nuestra mesa y extiende sobre nosotros su mirada externa o de eternidad, y con mirar y remirar los dibujos de la Torre de Hércules, la María Pita, el dibujo de la muchacha junto al mar que sirvió de portada al libro de Ester de Cáceres y otros recuerdos vuestros.
Hablé al dueño de una galería de arte y de una librería, que están al lado de mi oficina, sobre la posibilidad de hacer una gran exposición de artistas argentinos. Me dijo que era muy caro el transporte y demás trámites. Te conoce de nombre y ahora aprovecharé las noticias de Nueva York para insistir, aunque aquí hay pocas posibilidades de mercado. Quien tiene aquí un puesto clave en la Unión Panamericana o Asociación de los Estados Americanos, es Orfila. Si tienes amistad con él, podría arreglar una exposición en gran escala de tus cuadros, pues tienen un salón espléndido para ello. Yo no tuve ocasión de verle ni de hablarle por teléfono; mis relaciones con él eran prácticamente nulas, y por otra parte, no sé en qué actitud está en relación con los artistas de ahí y en particular contigo. Si son buenas, puedo acercarme a él en cuanto regrese de Lima, donde creo que hay una reunión ahora.
Conviene que obtengas los recortes de la crítica hecha a tus cuadros por los periódicos de Nueva York y que hagas copias de ellas, pues son esenciales para cualquier gestión que tú o cualquiera en tu nombre haga sobre exposiciones o ventas de cuadros. También convendría tener fotografías de tus pinturas murales en Buenos Aires. Si este éxito se aprovechara bien aquí, acaso por la mediación de un agente o marchante de talento y conocedor del mercado, podría tener consecuencias estupendas. Por mi parte, espero obtener los recortes y hacer de ellos el mejor uso que me sea posible. Veré si hablo en la Corcoran Gallery, en la Phillips Gallery y en otros sitios, utilizando las cosas tuyas que tengo. Aquí hay poco ambiente artístico. Es un país inmenso, y los que entienden están dispersos y son difíciles de abordar. Se encuentran cuadros de buena gente en las librerías de viejo y nadie les presta atención y lo que encargan un cuadro son en su mayoría gente sin opinión propia y quien gusta lo que las amistades elogian. Claro que se gasta dinero en arte, pero aun el Museum of Modern Art de Nueva York no tiene inconveniente en aceptar cuadros gratuitos a cambio de la sanción que supone para el autor el poder decir que tiene obras colgadas allí. Esto es absurdo, pero así es. Rota, sin embargo, la barrera de la prensa de gran circulación –circulación es equivalente a solvencia para la mayoría– todo es posible aquí: por ejemplo, la National Gallery, una maravilla de museo, acaba de adquirir una crucifixión de Dalí, por la que debió pagar mucho. Conocemos al pastor de la iglesia a que asiste el presidente, un hombre de gran simpatía y ascendiente aquí, pero él mismo posó para el retrato que le hizo una señora que no pasa, en nuestra opinión, de una alumna de una escuela de Bellas Artes de una capital de provincia en España. Por todo esto, verás cuán desigual es el ambiente de este país: al lado de críticos y especialistas excelentes, hay una caterva de personas de gran ascendiente social o económico o político que sólo admiran lo que elogia el Readers Digest.
Bueno; enhorabuena por tus triunfos aquí y allá, que nunca serán lo que mereces, pero son algo prometedor. Ahonda y depura; trabaja y lucha contigo mismo; empieza todos los días en busca del (tú que aún desconoces y que te asombrará) a ti y a todos nosotros.
Alicia, que te admira y quiere profundamente, se une a mí al enviaros un abrazo sin límites.

Otero

1961-10-05 Mencionado/a
Carta de Seoane a Muñoz Manzano e Dieste. 1961
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Muñoz Manzano e Dieste. 1961 en 05/10/1961

Buenos Aires, 5 de octubre de 1961

Queridos Carmen y Rafael:

Hemos recibido hace dos días vuestras cartas que esperábamos con la impaciencia que podéis imaginaros, aún habiendo leído la enviada a Varela y la copia circular de la que enviásteis a Esther. Deseamos vuestras impresiones de Rianjo, de Galicia y de España, porque necesitamos de ellas como sabeis muy bien para ordenar, si se puede, nuestro futuro. Pudimos habernos equivocado, que hasta ahora no creo, en nuestra fugaz visión española. Desde que marchásteis, los seis que quedamos en Buenos Aires incluyendo a Marika, nos vemos con más frecuencia en una u otra casa, como si sintiésemos la necesidad de compartir una soledad acrecentada por tu ausencia y la de Carmen. En los comentarios que hacemos me queda a mí la sensación de que guardase cada uno para sí una elegía que no puede expresar por toda una vida perdida noblemente, pero perdida sin servir realmente a nada, viéndola en cambio cumplida en aquellos que se limitaron a vegetar sin ambición alguna en el rincón de su infancia y de su juventud. Estos quedaron naturalmente incorporados a la historia de su pueblo, aún sin saberlo, mientras que nosotros constituímos una especie de almas en pena y sin arraigo posible. Hablamos de vosotros y estamos deseando que os vaya muy bien y esteis felices en España para que nos sirva y decida. Varela está escribiendo y aceptó ultimamente algunas conferencias y Laxeiro pinta con más intensidad que hace algunos meses, preparando su exposición en Madrid, con la que está muy ilusionado. Por mi parte el próximo sábado cierro otra exposición en Bonino que tuvo mucho éxito de crítica, público y aún de venta y de la que os mandamos por correo aéreo un catálogo, con una espléndida presentación de Varela, firmado por todos los que asistieron a la comida de inauguración, que va resultando tradicional, y en la que se cantaron esas canciones gallegas que van quedando entre nosotros desfiguradas por el tiempo y la nostalgia, como seguramente se fueron quedando los romances ibéricos, en la primera generación de sefardíes, en los puertos del Mediterráneo y del Atlántico. Cantar por no llorar. Díaz Pardo se mantiene solitario en su aislamiento de Magdalena de nuevo en compañía de Mimina, que acaba de llegar. Núñez Bua se droga en conversaciones telefónicas con amigos y posibles clientes. De Antonio tenemos apenas alguna noticia lejana por la que sabemos que insiste en su vocación de Ulyses médico. Los amigos comunes argentinos nos preguntan mucho por vosotros. En Buenos Aires todo continúa aproximadamente lo mismo que en todos los órdenes que cuando os fuísteis. Amenazas de huelgas generales y rumores de posibles cambios tienen estos días a las gentes preocupadas. A veces uno piensa en aquella frase escrita con alquitrán que leí, cuando acababa de llegar a Buenos Aires, en el pedestal de la estátua a Colón y en la cual un gallego emigrado expresó con rencor su desesperanza: “¡Por que non te calaches, idiota!”; quizá a España y a los gallegos y a los otros españoles les hubiese ido mejor limitándose solo a utilizar sus energías en Europa, pero había que contribuir a hacer realidad un sueño, el reino igualitario de Dios, antes que tratar de ir allá en el propio oficio heredado, sedentario. Pero Colón no se guardó más secreto que el de su orígen.
Si volvéis a La Coruña no dejéis de visitar los interiores de las iglesias de la ciudad vieja y hacer el paseo hasta El Ferrol costeando la bahía de los Artabros. Pienso que es uno de los más bellos paisajes de la tierra. Todos esperamos de tí ensayos, teatro y narraciones de tu reencuentro con Galicia y España. Creemos que con todo lo que tu has visto y vivido, con toda tu experiencia acrecentada durante años puedes dar una visión original y única de Galicia. Hablamos entre nosotros de esto. Tienes que relatar la aventura silenciosa de Galicia, los sueños de sus habitantes, la novela de el Berberecho que describe Carmen tan perfectamente y obligar también a que Carmen escriba, con el rigor severo con que parece, según los extranjeros, que tratan a sus mujeres los maridos españoles. Nosotros tenemos muchas ganas de ir el año que viene, aún no sabemos como, trataría de preparar una exposición en Galicia y otra en Madrid de pintura y grabados. Para el mes que viene salen de Losada el Llanto por Sánchez Mejías de Lorca con grabados en madera míos y una plaqueta de poemas religiosos y a Castilla, de Unamuno tambien con grabados míos, que representan Cristos y recuerdos de pueblos castellanos tal como a éstos en la memoria. Se inicia éste último con la mano del Pantocrator en colores. Os mandaré los dos tan pronto salgan.
Tenemos noticias de Carmen, la hermana de Maruja, de la visita que le hicísteis. Quedaron encantados de vosotros. Cuando volváis a Madrid, te recomiendo que no dejes de ir a alguna corrida con Paco, creo que como Hemingway es admirador de Ordóñez, pero es un aficionado que conoce a los toros tan pronto asoman el hocico al ruedo y sabe injuriar con gracia a los toros y a los toreros que resulta la contrapartida del piropo, géneros absolutamente españoles.
Espero que estas líneas no os resulten aburridas y con muy pocas noticias de Buenos Aires, pero es que en realidad no hay casi novedades desde que vosotros marchásteis. La primavera es muy desigual, se alterna el calor con el frío y la humedad y días espléndidos de sol con días de lluvia como el que hoy hace, igual que otras primaveras que vosotros debeis de recordar. Recibid con el recuerdo de los amigos de ésta el fuerte abrazo para Carmen y para tí de Maruja y mío y un ruego, escribidnos.

[Seoane]

1962-11-06 Mencionado/a
Carta de Dieste a Luís e Maruxa Seoane. 1962
Rianxo
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Dieste a Luís e Maruxa Seoane. 1962 en 06/11/1962

Rianjo, 6 de noviembre, 1962

Queridos Luis y Maruja:

Sin noticias precisas, pero atenidos a un cálculo razonable, os suponemos ya instalados en el nuevo departamento. Estuvieron por aquí Prada y el ingeniero Díaz –éste con las hermosas ediciones de Lorca y Unamuno– y, si mal no recuerdo, algo dijeron de mudanza. También Virginia, aunque no muy segura, y creo que también Lala en alguna carta de hace tiempo.
Hemos sabido de la prolongada huelga de correos y algún amigo navegante nos dijo –lo oiría en un bar de Buenos Aires– que hay aproximadamente un millón de cartas atrasadas y sin repartir. Unas sin repartir ahí, presumo, y otras sin enviar el resto del mundo. Entre éstas pudiera ser que hubiese alguna vuestra o de algún amigo, con vuestra nueva dirección. Como no nos fiamos de la antigua, van estas líneas por mediación de Lala.
Prada y el ingeniero Díaz os habrán dado ya noticias nuestras. Nada importante o decisivo. Pequeños rasgos de ambiente, ánimo, etc., que habrán completado un poco la impresión general que intentábamos daros en cartas anteriores. Hay cosas, sin embargo, que sólo podríamos concretar en diálogo, irreductibles a expresión esquemática, sutiles, huidizas, y que son las que más importaría poder comunicaros. Quizá no es indispensable, pues estuvisteis por aquí...
Este verano tuvimos en Rianjo a los hermanos de Carmen, con parte de sus respectivas familias. Visitas breves y en dos tandas. Enseguida llegó Eladio, que estuvo aquí unos veinte días. Poco después, mi hermano Antonio con su hijo Antonio; y a esta visita sucedió la de Esther, pero de esta vez no en Rianjo, sino en Madrid, adonde nos citó desde Nueva York, pues a punto de regresar a Montevideo en avión, había resuelto hacerlo con escala en España para encontrarse con nosotros. También estuvo aquí, en casa, Colmeiro. Y otro día Souto. ¡Ah! Faltaban por mencionar Barbudo y Ángela, que estuvieron aquí alrededor de una semana, antes de los hermanos de Carmen, y se fueron maravillados y con proyectos de retorno y hasta de relativo afincamiento, hablando de hacer por estas riberas una casa en cuanto junten los dólares. ¿Qué más? ¡Gabriel anuncia ahora su llegada de un momento a otro!
Con Eladio hicimos unas cuantas excursiones. Sería importante que hablaseis con él. Como era de esperar, vio con perfecta lucidez, y con amor directo, natural, impremeditado, los valores de España y singularmente de Galicia, en la cual acabó por reconocer no sólo la tierra de sus abuelos, sino la suya personalísima. Como ya supondréis, se volvían así más misteriosos y entrañables para él –más asistidos de fundamentos y responsabilidades– sus firmísimos vínculos con la Banda Oriental. Descubrir y sentir las clases de valores a que él se refería es sentirse, también, preocupado y consternado por todo lo que los amenaza... Resulta, pues, que se fue de aquí muy entusiasmado y, al mismo tiempo, con muy graves problemas que ya no tendrá más remedio que ayudarnos a resolver.
Esther estuvo muy animosa. Como sólo pensaba estar dos o tres días en Madrid, no vino a Galicia. Luego sintiéndose muy a gusto en España, se fue dilatando el plazo. A última hora estuvo a punto de resolverse a venir; pero optó finalmente por volver ahora a Montevideo –pensando ante todo en Alfredo–, para venir los dos sin prisa el año próximo. Tiene ya en orden, presto para editar, un espléndido libro de poemas. Se fue de aquí con la intención de encomendarlo a Losada y muy feliz con la posibilidad de que Luis tuviese alguna parte en la decoración o en la vigilancia. Con rasgo ingenuo, debo deciros que espera mucho de nuestra recomendación en tal sentido. Os la recomendamos, pues, de todo corazón, aun pensando que su influencia directa sería suficiente. Quizá os haya escrito ya sobre el particular y también –contando de todos modos con vuestra mediación– al mismo Losada.
Mientras os escribo, llega una carta de Mimina por la cual nos enteramos de que Isaac está en el Castro. Anuncian que vendrán a buscarnos.
Con el ingeniero Díaz y luego con Prada estuvimos viendo los grabados del Llanto de Lorca y de la selección del Diario de Unamuno. Quizá os hayan comunicado en términos generales algo de la magnífica impresión que nos causaron. Después los vimos más despacio, adentrándonos en sus finuras gráficas y de alusión poética. Los del Llanto valen para mí como una sutilísima exégesis de Lorca, como un vivo retrato de su poesía –hecho, naturalmente, a la luz del bellísimo poema. En adelante, cuando se estudie a Lorca, convendrá tenerlos en cuenta... Los del Diario cumplen en gran medida análoga función respecto a Unamuno, pero aquí el retrato se ve como intrincado por las luces oblicuas de un espejo roto. Probablemente a causa de la índole del texto. De todos modos, el efecto de conjunto –una vez lograda la síntesis con un poco de atención– es para mí interesantísimo.
Tuve que suspender ayer esta carta porque la llenaba de estornudos. Me alcanzó la racha de constipados que anda por ahí. Ya estoy casi bien; pero tengo que concluir a toda prisa porque acaba de llegar un telegrama de Gabriel, según el cual estará en Santiago con el primer avión. Nos hablará por teléfono. No sabemos si iremos a buscarlo o si le daremos instrucciones para que se venga solo. En cualquier caso, es inminente su llegada y con ella –al menos por unos días– la crisis de mis actividades epistolares que tan formalito y empezando por vosotros me había propuesto reanudar. Vaya, pues, en estilo telegráfico algo de lo que quedaba por decir.
Está hace tiempo en manos del censor, si no ha pasado a la imprenta sin nuevas noticias de la primera edición y algunos otros, entre ellos los que hallé de aquellas fechas en El Pueblo Gallego. Hice una cuidadosa revisión, unificando con algunos toques y con el orden oportuno la atmósfera general del libro. Mencioné, hablando con del Riego, tu proyecto de ilustrarlo, pero sin insistir en la cuestión por no estar seguro de que estuvieses ahora en buena coyuntura –tiempo, tranquilidad, etc.– para hacerlo a gusto. Sospecho que para abreviar acudirán como de costumbre a Xoán Ledo.
Recibí –el año pasado– unas simpáticas líneas de Sabsay y señora, escritas desde Canarias. Les contesté, y unos meses después, por Navidad les escribí de nuevo brevemente. No me pareció oportuno en aquel momento preguntar nada a Sabsay sobre el libro de ensayos que dejé en sus manos. Y como la situación argentina –que afectará, supongo, a las editoriales– no da señales de mejoría, no sé bien que hacer. ¿Querrías tú preguntarle algo? Él me había hablado de Taurus, con cuyas gentes parecía tener relaciones –no sé bien si amistosas o también financieras–, brindándose, si no entendí mal, a encauzar por ese lado el asunto si ahí surgían dificultades o dilaciones excesivas. Esperaré para escribirle a conocer la impresión que recibas del diálogo con él.
Asistí en Madrid a la apertura de la exposición de Souto. El efecto de conjunto era de gran esplendor. Figuraban ya algunas cosas pintadas en Galicia, un tanto improvisadas, pero que ya atestiguan, por sus valores de gracia y simpatía humana, el saludable efecto del retorno.
Acaba de llegar una carta de Lala. Nos da muy alegremente la noticia de que le ha sido otorgado a Luis con toda justicia el premio Palanza. Apenas necesitamos decir cuánto lo celebramos. Con todo el entusiasmo de esta noticia y el cariño de siempre, os abrazan Carmen y

Rafael

Saludos nostálgicos a Lala y Laxeiro, Lorenzo y Marika, Antonio y Mireya (si están por ahí), los Scheimberg...

1963-02-19 Mencionado/a
Carta de Muñoz Manzano a Luís e Maruxa Seoane. 1963
Rianxo
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Muñoz Manzano a Luís e Maruxa Seoane. 1963 en 19/02/1963


Rianjo, 19 de febrero, 1963

Queridos Luis y Maruja:

Seguimos muy contentos con las noticias de vuestro próximo viaje. Ayer nos dice Esther en una carta que salía el 2 de marzo. Quisiéramos unas líneas vuestras diciéndonos si venís por mar y si hacéis alguna escala en España en vuestro viaje de ida a Suiza.
Además del gusto de saludaros, tendríamos un pequeño encargo que haceros: Gabriel nos trajo de regalo un termómetro-barómetro-higrómetro, comprado en Ginebra, y no funciona bien. Escribimos a la casa y no hay otra manera que llevarlo por mano para evitar los gastos y enojos de aduana. Es una cajita de 19x8x5 centímetros, que no os molestaría mucho si está en vuestros planes hacer escala en Vigo.
Esther ha sentido que no vaya la solapa de Rafael en su libro. Ayer nos mandó una carta del señor Vázquez, de Ed. Losada, en que éste le aconseja no cambiar la tapa por diversas razones, todas de buen sentido. Las cosas se pusieron así, ¡qué se le va a hacer! Esther está muy agradecida a Luis por su viñeta y por la ayuda en la edición. Gracias también por nuestra parte.
Adjunto una carta para Citania, pidiendo unos ejemplares del libro de Rafael. No sé la dirección. Acaso podéis llamar por teléfono, para que los envíen.
Hemos estado preocupados con Olegarita, que tuvo un gran trastorno de origen hepático. Ahora está ya mejor, y esperamos que pronto pueda recobrarse.
Está lloviendo furiosamente –ahora siempre llueve furiosamente–; pero al parecer Galicia es el edén comparada con otras regiones. Todos estos días la radio y la televisión no dan sino desastres en Córdoba y Granada.

Perdonad tantas molestias. Saludos a los amigos y para vosotros un abrazo de Rafael y

Carmen

1968-03-21 Mencionado/a
Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1968
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada]
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1968 en 21/03/1968

Castro, 21.3.68

Sr. Don Luis Seoane
Buenos Aires

Querido Luis:

Recibí tu carta de mediados de febrero en su momento. Y de todo cuanto dices tomo buena nota. He estado, y sigo ocupadísimo, acaso como nunca dándole un cambio a una buena parte de las instalaciones del Castro. Preferí instalar aquí previamente y con carácter definitivo el horno que habíamos estudiado para Sargadelos, de esta forma vamos más seguros. Y como va muy bien ya hemos tirado el que teníamos y en base a ello replanteado una serie de cosas en las que estamos.
Va una fotografía de cómo estaba lo de Sargadelos hace una semana y otras del letrero que se puso en la carretera general. La obra lleva traza de cumplirse en el tiempo establecido. Estamos con todas las demás cosas y tenemos ya aquí trabajando (practicando) en la F[ábri]ca la persona que va a ser el encargado en Sargadelos, un muchacho de 25 años, casado con la hija de la que nos vendió los solares y natural de allí mismo de Cervo. El trabajo se amontona por momentos. El Banco de La Coruña nos concedió el crédito de que te hablaba en otra anterior que de momento, y aunque es poco, algo ayudará. Luego, si tengo ánimo, buscaría otras combinaciones de financiación. Ya veremos. Desgraciadamente la noticia que te anticipaba del copamiento del Banco de La Coruña por el Banco de Bilbao está plenamente confirmada. Huelgan comentarios.
Dentro de cinco días salgo para Valencia. Como de esta vez no tengo que recogerte a ti y a Maruja en Madrid como el año pasado, iré en tren o en avión. Voy a lo mismo. Volveré enseguida.
Me hicieron, grabaron, unas entrevistas para la radio nacional de La Coruña una y otra para Madrid que radiaron en cadena por toda España, sobre lo de Sargadelos. Hablé naturalmente de ti. Martínez-Anido me dijo que te había escrito y esperan que le envíes lo que te piden. Creo que debes hacerlo. Ediciones del Castro sigue detenida. El Minist[erio] mandó otro rollo de inquéritos para mejorar su información que cubrí de inmediato y aproveché para forzar el permiso. Un lío. Haré cuanto pueda.
Y todo mi tiempo ocupado con una gran preocupación venida de ahí de la Argentina: Magdalena. Desde que lograron echarme fuera en cinco meses debieron perder 6 millones y suponte: la gente sin cobrar, etc. Camilo puede contarte (por cierto se operó de la garganta y tuvo que hacerlo fuera del Centro Gallego porque no tenía médico de esa especialidad). Suponte la desesperación que me trasmite el equipo de muchachos de allí. Villamarín amenaza con dimitir sí yo no me incorporo a Magdalena. Yo le pido que no dimita y me comprometo a volver siempre, naturalmente, que el Directorio se comprometa a no innovar en mis ausencias y se ve que el resto de los directores o la mayoría no quiere ceder y después de los esfuerzos que han hecho capitaneados por N[úñez] Búa para eliminar primero a Arranz y luego a mí todavía les sería más difícil ceñirse a la realidad. Así que yo me encuentro atado de pies y manos. Creo que he hecho todo lo posible por resolver las cosas sin atacar públicamente a nadie y tratando de entenderme con estos señores. He reiterado repetidas veces que si la empresa la llevan adelante sin mi criterio y aún en contra de él yo estoy conforme, y hasta puedo decirte a ti que ese es mi deseo. Lo que desde luego no puedo acomodarme es a permanecer impasible mientras a la empresa se la lleva a la ruina. Allí están gentes que he llevado yo y que me encuentro en cierto modo responsabilizado de su suerte y que como ahora me están pidiendo poco menos que responsabilidades por haberlos abandonado. Allí están también varios años sacrificados, entre los que cuenta el esfuerzo prestado por el Castro, a cuyos socios no me he atrevido a enterar para evitar que al que era nuestro apoderado se le aplique de inmediato la figura de traición y fraude. Así que estoy viendo que no habrá más remedio que convocar una asamblea extraordinaria y llamarle a cada uno por su nombre y suponiendo que la mayoría esté dispuesta a defender a la empresa pues, con dejarla morir pierde, tratar de barrer a toda esa mierda. Figúrate que todo esto me quita el sueño.
Bueno, esto es lo más desagradable. Hubiese querido darte mejores noticias, entre ellas que el Museo de Castrelos se decide a comprarte una colección cuadros para instalar una sala, para lo cual el Alcalde tiene prometido venir un día con Valentín a conocer tu obra. Pero lo estoy esperando. La situación económica en España se agrava por momentos, no se sabe a dónde se va. Es delicadísima la situación. De arte por aquí poco importante. Estuvo por aquí Esther de Cáceres y viene para aquí Kóppola (Horacio) ¿se escribe así? Los estudiantes de Santiago siguen en huelga. De estas cosas ya te supongo enterado.
Manda noticias de tus exposiciones. Sabes cómo me alegran tus éxitos. El himno que constantemente cantan los estudiantes de Santiago es Venceremos nós. Y nada más por hoy. ¿Cuándo venís? Sabéis como se os recuerda en esta casa. Aún me quedan cosas por decirte, será en otra.

Abrazos muy fuertes para ti y para Maruja

[Díaz Pardo]

1971-01-03 Mencionado/a
Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1971
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada]
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1971 en 03/01/1971

Castro, 3.1.71

Sr. Don Luis Seoane
Buenos Aires

Querido Luis:

Hace bastante tiempo que no tenemos noticias directas vuestras. Al llegar anteayer aquí me encontré con una carta de Basilio Losada y al final me decía que estaba por allí Palmás. Llamé seguidamente por teléfono a Basilio y Palmás acababa de salir para París. De allí creo que irá a Roma y luego retornará para Galicia. Creo que está entusiasmado. Parece que mandaba para acá una maleta. Las noticias que de vosotros le transmitió a Basilio es que vosotros no vendríais antes de abril, de forma que nada habríais adelantado el viaje.
Aunque supongo que María Xosé te mandará noticias directas de tu exposición de Vigo, te mando esa nota que veo en el Faro. Pasa por alto esa estupidez que dice de influencias picasianas. Todo eso es producto de la gran ignorancia estética en que aquí nos movemos. El parentesco de las cosas de un tiempo, en este caso del nuestro, enseguida se lo endosan al único nombre que conocen, de referencias y no muy bien. Yo tengo alguna nota de prensa que me tienen hecho hace tiempo en las que también me veían influencias picasianas. Bueno hoy intenté hablar con María Xosé pero no contestaba el teléfono. Mimina se queda hoy y a la noche llamará ella, y luego ya os escribe.
Los Dieste andan con Ester de Cáceres por ahí no logré localizarlos. Dieste volvió a retirar por vigésima vez, creo, las pruebas terceras o décimas de página de su libro en su afán de depurar algo. Estoy temiendo que no le lleguen los años que le restan de vida para terminar de corregirlo y a los de la imprenta los trae de cabeza porque les hace hacer y deshacer textos para hacer rectificaciones de tipo filosófico... Hoy vio Xosé a Fern[ando] Mon y le dijo que había escrito un artículo sobre el Museo en una nueva revista que se llama Bellas Artes que creo es del Ministerio, que lo mandarían, pero en el ínterin si la encontramos te lo mandarán. Y que pensaba hacer otro con los cuadros en color.
Bueno. El año terminó normalmente con presagios de complicarse mucho las cosas en este país desde una economía de signos alarmantes. Nosotros fuimos remontando las cosas no sin penosidad porque las cosas que nos gravitaron este año fueron muchas. Entre el Castro y Sargadelos en diciembre tuvimos que ingresar en Hacienda más de dos millones de pesetas. Un poco milagrosamente y otro poco por el esfuerzo que se hace, de todos modos vamos cumpliendo todo aunque por poco margen. Es una situación envidiable en el panorama de como están las cosas. Lo de Burgos creo que se resolvió, entre otras cosas porque se imponía una desaceleración del descalabro al que se va.
Para mí lo peor es que mi salud quedó muy resentida con esa gripe y con la intoxicación de antibióticos que creo que ya os hablé. Ahora ando con multitud de porquerías para recuperarla.
Hoy domingo me voy para Sargadelos. Está todo helado y estamos rodeados de nieve. Nada más por hoy.
Espero vuestras noticias con la esperanza de que en cualquier momento os he de ir a esperar a alguna parte, a Ribadeo, a Madrid...

Un abrazo muy fuerte para ti y para Maruja

[Díaz Pardo]

1974-06-14 Mencionado/a
Carta de Seoane a Pereira Caamaño. 1974
Bos Aires
Montevideo
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Pereira Caamaño. 1974 en 14/06/1974


Buenos Aires, 14 de xunio de 1974

Sr. D. Fernando Pereira
Montevideo

Meu querido amigo:

Cercana a data da mostra de dibuxos meus na Galería Losada, sin ter dibuxos pra esa mostra e sin posibilidades materiales de facelos, polo pouco tempo que resta e o traballo que me atosiga, propóñolles, en troques, facer unha mostra que gostará moito máis polos temas, de augadas e apuntes de paisaxes galegos, de Carlos Torrallardona, a súa dona e fillas, feitas en Galicia arredor do ano 70, e que constitúien unha proba de amor a unha terra á que iban por vez primeira. Eu faría, si non teñen inconveniente, a presentación escrita da mostra. Torrallardona é un dos máis importantes pintores arxentinos da miña xeneración. E dende fai moitos anos amigo de Colmeiro, Rafael Dieste, Díaz Pardo e meu, etc. En Montevideo, expuxo conmigo fai uns 25 anos en Amigos del Arte, presentándonos entón Esther de Cáceres. Penso, pois, que non perde nada o Patronato e a Galería Losada relevándome a min do meu compromiso. O púbrico poderá contemprar unha obra de estudo feita, como dixen denantes, con moito amor e moi bela. Tamén iría eu á inauguración e podería falar dela en La Voz de Galicia como, naturalmente, non podería facelo, si fose miña. Eu, dende logo, a pesar da miña vontade non podo facer a exposición, pois estou atafegado como dixen, de traballo.
Respóndame o máis pronto posibre, pois en principio xa lle falei a Torrallardona que están de acordo en exhibir esas obras polo propósito.
Con esta, remítolle a tampa pra o libro de Zubillaga.

Saúdos pra o Sr. Martínez e os membros do Padroado, e vostede e a súa dona reciban o saúdo da miña e meu. Unha aperta de:

[Seoane]