PROXECTO EPÍSTOLA

----

TEMÁTICA: Vieiros [libro]

[libro] Poemario de Ricardo Carballo Calero editado na Coruña en 1931 por Nós.
Epístolas
2
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
1953-00-00
Carta de Azcoaga a Seoane. 1953
Vigo
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Azcoaga a Seoane. 1953 en 00/00/1953

Ca. novembro 1953

Querido Luís:

Ahí te van las ampliaciones que me pediste para mi libro. Se me ocurrían bastantes más, pero entonces había que reformar el texto en gran parte. Lo que sí te agradecería era que vigilases la unificación ortográfica, suprimiendo toda clase de apóstrofes, etc. El modelo para la ortografía de todo el libro debe de ser el del artículo dedicado a tí, que te acompaño y que he rehecho en algunos aspectos. Fijándote en él, te será fácil seguir las mismas normas para el resto de la obra. Más adelante te enviaré un artículo sobre Maside.
Supongo que habrás recibido la carta que te escribí. No me ha llegado aún tu último libro, que me anunciabas, ni recibí tampoco las publicaciones del Centro. Supongo que se trata de alguna demora de Correos.
Cuando me contestes, indícame lo que te costaron los grabados para la monografía de Maside, que trajo García Sabell, para hacerte efectivo su importe en la forma que digas.
Nada más por el momento. Espero tus noticias. Un cariñoso saludo a Maruja, de mi mujer para los dos, y para tí un fuerte abrazo de

Fdez del Riego


Anexo nº 1:

A súa poesía ten, nembargante, moitas facetas. Si Cabanillas é un poeta civil e social, en No desterro e Da terra asoballada, móstrase tamén como agudo pintor de cadros de costumes, de dondas visiós campesiñas. En Vento mareiro, e sobre todo en A rosa de cen follas, revélase como un lírico de fonda emoción, de entranabre pureza. Nos Camiños do tempo fai unha poesía narrativa, e âs veces achégase âs formas épicas.
Aló no fondal da poética, variada, ricaz, do vate cambadés, hai unha finísima cobiza que apaga a súa sede nas nidias fontaíñas do romantismo e do realismo. Pero hai, tamén, no fondo e na forma dos seus versos, un infruxo da corrente modernista que esparexéu pol-os vieiros peninsuares a lírica rubeniá.
A devoción do poeta pol-o popular, pol-os manantíos que xurden da anónima voz do pobo, amósase patente na devoción pol-as canciós que aínda viven nos nosos escearios labregos e mariñeiros. Dilas fixo unha intelixente e fermosa escolma, no seu libro Antífona da Cantiga.
Nas belidas “sagas”, âs que denantes aludimos, o poeta, basándose en lêndas armoricás, emprega as formas lírico–narrativas, ou lírico–descriptivas, con unha axeitadísima gracia que non ten parello antre nós. Nisas sagas, o tema histórico mistúrase coa esencia persoal no canle escoador dos versos. Ahí están, enriquentando o Parnaso galego, vencelladas a un céltigo vento lexendario, na triloxía de Na noite Estrelecida. A elección do rei Artur cobra un inxel poder evocador en A espada Escalibor; a traveso das estrofas de O cabaleiro de Sant Grial vai escorrendo o viaxe de Galahaz en percura do Santo Grial; en O sono do rei Artur, píntase, con espresivo lirismo, o recollimento do monarca na coba onde está durmindo.
(Para sustituír en el texto de Cabanillas por los dos párrafos primeros de la página 54, que deben suprimirse).


Anexo nº 2:

(A continuación de: “baixo da sinxela denominación de Do meu diario…”).
E, de xeito particular, en As cruces de pedra na Galiza. Nista obra, o artista ten feito un estudo lumioso, no que se conxugan a arqueoloxía, a historia e a arte dise grande movimento popular noso, refrexado nas cruces de pedra. Andando as roitas de Galicia, ô longo de dez anos de pelerinaxe sin pousa, Castelao foise situando frente dos cruceiros galegos; copiounos co seu lápiz en versión directa, e arrincoulles a gracia dos seus máis íntimos segredos.
E velahí o resultado do seu labor pacente, fondo, minucioso, arredor do tema da cruz. No mundo dunhas fermosas páxinas, vai escorrendo a tradición e a xénesis dun proceso latexante: Insculturas cruciformes, as primixenias cruces cristiás de Galicia, o alento cristianizador de menhires, camiños e miliarios; e logo, a emoción dos cruceiros recollida pol-a acariñante ollada dos poetas; o misterio do seu orixe, a raigaña da súa antigedade, o seu vô esparexedor...
Os valores culturás dos cruceiros –múltiples, vivos– teñen sido actualizados, con erudita axilidade, pol-o xenio de Castelao. Foinos relacioando en maravillosa eséxesis; estabrecéu os seus contrastes, e anotóu as súas semellanzas e diferencias cos moimentos parellos da Bretaña francesa, da Irlanda, e das máis terras céltigas. Todo, nun esforzo persoal, único. E a íl engadíu aínda unha abondosa ilustración de deseños i estampas, realizada pol-o propio artista con mestría insuperabre.
Tamén no ensaio político, deixóu Castelao unha fértil amosa do seu rexo temperamento. O volume Sempre en Galiza constituie unha viva espresión interpretativa do sentir galeguista, na visión dun home que todo llo ofrecéu ô porvir da súa patria.
(Para añadir al texto de Castelao)
Anexo nº 3:

No libriño Triscos a súa poesía amósase limpa e nidia, sinxela e díspida; pura no máis profundo senso da verba, “con isa sobriedade formal que adxetiva de sí mesma a millor lírica de todol-os tempos: poesía, poesía”.
(Para intercalar en el texto de Pimentel, a continuación de:
Non convén chorar máis.
Ela chorou por todos e pra sempre
Calemos...)

Outra cousa é a súa consideración no plano poético. Son varios os volumes que teñen saído da súa pluma. En galego deu á lírica catro libros: Vieiros, O silenzo axionllado, Anxo de terra e Poemas pendurados dun cabelo.
(Para sustituir en el texto de Carballo Calero por las tres primeras líneas del párrafo que comienza del mismo modo).

1966-08-20
Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1966
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1966 en 20/08/1966

20.8.66

Sr. Luis Seoane
BUENOS AIRES

Querido Luis:

Llegué mal peor que salí. Cama, etc. Y aún no he eliminado de todo los efectos de los antibióticos. Mucha gente como consecuencia de la época y el encuentro con los problemas esenciales me dejaron sin tiempo y más desorientado que de costumbre. Hoy al fin te pongo estas líneas.
Aquí, cuando llegué, tenían organizada una exposición de Maside. Te envié un catálogo. Se celebró una velada literaria en la que intervino Mon, Martínez Barbeito y yo. Yo me limité a hacer una crónica de la velada que se le había hecho en Bs. As. hace ocho años a raíz de su muerte y en la que había pronunciado una conferencia Dieste y en la que habías intervenido tú y Laxeiro. Leí, pues, parte de lo que aquella noche habíamos dicho. La muestra, que con buena intención provocó Antonio Baltar y ayudó Dieste, Mincho y Mon, no ha sido un ejemplo de organización. El ayuntamiento, por gestión del padre de Míguez les dio diez mil pesetas, y se realizó en una sala decorada con estilo mostrenco-románico-feudal que ha montado un tío pesado que se llama Lombera donde antes estuvo Boedo al final de la calle de San Andrés. Ahora está exponiendo Tomás Barros en la Asociación de Artistas cosas muy buenas y cosas muy malas. Este muchacho no anda bien. Su vieja manía persecutoria que una sociedad secreta histórica vendría dirigiendo contra los intelectuales a través de objetos-símbolo e individuos utilizados como agentes inconscientes empiezan a transcender a la vía pública en manifestaciones de matiz paranoico. En la exposición hay también signos de su estado psíquico, entre otros que ha puesto precios a los cuadros desde 500 pesetas que no le cubren el valor de los materiales empleados en ellos.
Los Dieste estuvieron dos días por aquí. Muy bien. Recuerdan a la Argentina con sus amigos con visible nostalgia. De Laxeiro, que está en Vigo, nada sé, ni alcancé a ver a Mariví. Al director de Vieiros, que yo tenía ganas de conocer personalmente parece ser que el mes pasado por las fiestas del Apóstol la policía lo agarró y lo devolvió a Méjico ¡un hombre que tanto ama a Galicia que le puedan hacer esta cosa tan desconsiderada en su propia tierra! Desde luego se nota que hay reacción contra Galicia pues hasta aquellos fragmentos del Evangelio en gallego que se venían publicando han dejado de salir en La Noche. Esto entre otras muchas cosas. A Alberto le iniciaron un proceso por lo del libro de Castelao. ¡Es el colmo! Claro que esto no creo que pueda prosperar. El éxodo del campo sigue y este está en un abandono sin precedentes. Se leen cosas en la prensa reaccionando contra esto. En el campo donde Galicia tenía guardado su historia podría estarse ubicando una punta de la confabulación para aventar los restos de lo genuinamente gallego, porque si sumas que la presión turística impersonal con su avalancha de plástico y cocacola lo va vulgarizando todo y pensando que en algún momento tendrá que acometerse lo del campo, no sería extraño que se trajesen técnicos agrícolas y braceros extranjeros para solucionar el problema. Como tú no vas a tardar en venir tendrás ocasión de ver las cosas con tus propios ojos. Celso Emilio al emigrar para Venezuela dijo unas palabras ejemplares: “Tenemos que aspirar a que Galicia además de ser una tierra para nacer y para morir sea también una tierra para vivir”.
Sargadelos: ando a vueltas con el anteproyecto con Albalat. La idea creo que va por buen camino y que te gustará. Estamos coordinando la idea de la planta según el arquitecto con la nuestra, es decir: con la función que ha de cumplir. Casi estamos de acuerdo. Una vez que tenga las líneas visuales del alzado las conocerás tú para que digas tu opinión. Estoy viendo que se va a ir mucho tiempo en todas estas cosas, pero ya a estas alturas interesa hacer una cosa muy bien hecha y que resulte verdaderamente ejemplar.
Por todas estas cosas es conveniente que tú me tengas al tanto de vuestras fechas de viaje y que desde Alemania o desde donde te encuentres nos enviéis vuestra dirección para comunicarnos.
Tu estudio sigue esperando por ti. Es una pena que tengamos un pueblo tan poco preparado para entender de arte o de otra cosa. Indudablemente la culpa no es de él, sino, como diría Dieste, de su clase dirigente rufianizada, adinerada y condecorada, que, naturalmente, tampoco puede valorar el arte. Pero tal circunstancia no debe de cambiar nuestro rumbo, especialmente el tuyo, de perfeccionar una determinada faceta del espíritu. Y yo por ahora junto con mi irrenunciable orgullo de emigrante puedo jactarme de admirar tu obra. Emigrante o presidiario son destinos buenos por vía de ser leal antes de renunciar a querer mirar para las cosas.
Mientras tanto miro con inquietud lo que sucede por la Argentina. Eso de la Universidad me da ganas de llorar.
Si se te ocurre no dejes de poner unas líneas diciendo lo que te parezca.

Un abrazo a Maruja y otro a ti de

[Díaz Pardo]