PROXECTO EPÍSTOLA

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TEMÁTICA: Los sueños

[libro] Editado por Poseidón en 1945 en Bos Aires e ilustrado por Luís Seoane.
Epístolas
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Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
1975-04-28
Carta de Seoane a Pérez Prado. 1975
Madrid
Nova York
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Pérez Prado. 1975 en 28/04/1975

Madrid, 28 de abril de 1975

Sr. D. Antonio Pérez Prado
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Debo respuesta a dos cartas suyas. Debo respuesta a otras cartas de otros amigos míos en ésa y unas líneas primeras de llegada a todos. Pero desde que llegué, no hice más que sentirme confuso, desorientado y trabajar para una exposición que se inaugura mañana. Tengo todo el material para concretar una monografía sobre el gran dibujante satírico de este siglo, el catalán Bagaría, y aún no pude empezarla. Por vez primera, dudo de todo y noto algo que cambia en mí y creo se lo debo a las circunstancias de que escribía Ortega. Todo es largo de explicar. Yo que odio la soledad me la estoy explicando en aquellos que la aman y la gozan. Me explico al ermitaño y al pescador de caña. En cuanto a ustedes comprendo por todo lo que pasan con motivo de la película sobre Castelao. Sobre todo lo que debe pasar Prelorán, tan ajeno a nuestro modo de ser, tan sin defensas para las sutilezas de las gentes gallegas. Cuando me escribió la primera carta, imaginé que ocurriría algo así, que todos tendrían ideas para que las desarrollasen Prelorán y usted y que lo que tenían que dar, dinero, lo harían discutiendo y muy mezquinamente. De Castelao en Buenos Aires no se puede hacer, pienso, película alguna. Sólo de su obra, la de Buenos Aires y la de aquí. Ni siquiera los emigrantes de que se podría sacar partido son los que Castelao estimó más. Aquellos que salían de Galicia hacia lo desconocido de cualquier muelle de los puertos gallegos. Perplejos ante el porvenir, temerosos y esperanzados a un tiempo, deseando romper con el pasado, con su país y no deseando dejarlos. Aquel, repetido hasta el infinito, convertido repitiéndose en multitud, que embarcado, apoyando su cabeza en los brazos le hace decir a Castelao: “Deixa raíces na terra. Voltará”. No, esos con quienes Prelorán y usted se comprometieron y discutieron no son los emigrantes que Castelao quiso y queremos nosotros. Éstos están en sus casas amorriñados, sin esperanzas, solos, con los recuerdos de sus casas de Galicia. No son los transformados en aventureros, los corrompidos por la lucha de muchos años para sobrevivir, los que están dominados por el deseo de mandar en otros, los que sustituyeron las normas morales heredadas por otras más elásticas que les sirvan para acomodarse al medio en que viven. Hablan de Castelao y no lo leyeron. Les gusta el Castelao de los chistes. Qué chistoso es Castelao, me dijo un día un directivo del Centro Gallego y no supe qué decirle, o sí supe y no me atreví. Al anunciarse la ida de Castelao a Buenos Aires, Cuadrado y yo decidimos publicar Cincuenta homes por dez reás como homenaje a su llegada y publicamos Cincuenta hombres por dos pesos. Se pusieron a la venta en un banquete de más de mil personas que organizó el Centro Gallego para su recibimiento. La venta la efectuaban muchachas de los coros gallegos vestidas con los trajes regionales ofreciendo el libro de mesa en mesa. Vendimos siete ejemplares. Se trataba de un número cabalístico. Resultó entonces que los chistosos fuimos Cuadrado y yo. El libro terminó como otros libros de Hórreo, Dorna y Camino de Santiago, en las librerías de la Calle Corrientes incluido en los paquetes de a tantos pesos el lote. Allí se agotó.
En cuanto a conocimiento de la colectividad, creo ser un sabio. La defiendo porque creo que en sus deformaciones tienen que ver esas circunstancias a que antes me referí y que acompañan al hombre y, porque en ella, o en sus gentes aisladas, continúa existiendo cierta ingenuidad saludable. A mí, después de todo lo ocurrido conmigo, de sabotear mis libros, de silenciar cualquier noticia sobre mí, me escriben para que envíe una colaboración sobre Castelao. Así mismo invitaron a alguna otra gente de Galicia. Por mi parte, no contesté para no agriar más las pocas relaciones que existen entre los actuales dirigentes del Centro Gallego y yo, consistentes en las que puede mantener cualquier asociado. Por todo esto, comprendo lo que les ocurre a ustedes, a Prelorán y usted con ese hueco, megalómano señorito de aldea que es Pampillón.
Trabajo bastante. Mañana, ya la dije, inauguro una exposición aquí en Madrid. En septiembre, tengo otra en La Coruña y debo hacer un álbum de grabados para una editorial de jóvenes de Madrid e ilustrar con grabados también Los sueños de Quevedo. Aparte, publicaré otro álbum de dibujos el mes que viene. Haré lo posible para que lo que me rodea influya lo menos posible en mí. También ahora empezaré a escribir cartas a mis amigos y familiares. Las primeras que escribí no llegaron en general, no sé por qué. Tuvimos que llamar a mi hermano por teléfono, pues no sabíamos qué ocurría, no sabemos qué ocurrió con ellas. Con Díaz Pardo, organizamos la inauguración de la Galería Sargadelos de Madrid, equivalente a la de Barcelona. Constituyó un éxito. Exposición del libro gallego, de grandes fotografías sobre Galicia, de ejemplos prehistóricos prestados por la Universidad, azabaches, mapas, etc. Una idea bastante completa de Galicia colgada de las paredes y en vitrinas. Hasta ahora se pronunciaron dos conferencias, una de Ramón Piñeiro y otra de García Sabell, extraordinarias las dos. Faltan, serán a fines de mayo, otras dos, de Rof Carballo y Rafael Dieste.
Traté de contestar a sus cartas, en realidad, no las contesto. No sabría qué decir a la primera, por la segunda le felicito, huelga cualquier comentario. Se trata de una carta de justiciera.

Con saludos a su madre de Maruja y mío, reciba un fuerte abrazo mío:

[Seoane]

1975-05-20
Carta de Jonquières a Seoane. 1975
París
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Jonquières a Seoane. 1975 en 20/05/1975


París, 20 de mayo de 1975

Querido Luis:

Si te escribo a máquina es porque mi letra ha llegado a un extremo de ilegilibilidad patético.
Gracias por las noticias. Sabía de tu éxito por los Lifschitz que nos contaron de unas ventas importantes hechas antes de la exposición de Madrid. Espero que ésta no haga más que ampliar aquéllas y que todo te vaya a pedir de boca. Alguna vez intenté –sin el menor éxito– ponerme en contacto con la galería AELE, pero se ve que la dueña ya tiene su “equipo” completo. Con Inguanzo acaba de pasarme lo mismo: programa completo hasta dentro de dos años... Lo de La Coruña me seduciría si tuviera oportunidad de llevar los cuadros no vendidos –que no se venderán, ya me voy acostumbrando a que suceda eso– a otra ciudad española, Valencia, por ejemplo o, claro está, mucho mejor, Madrid. Pero a pesar de que voy a España todos los años desde 1964 nunca se me ocurrió buscar oportunidades de exponer allí. Defecto de alguien que practicó la pintura por amor al arte, como se decía antes, más que para ganarse la vida... Este tren hay que tomarlo temprano, si no te quedas en la estación. Pero no nos pongamos dramáticos: pintar pinto lo mismo y creo que no demasiado mal. El que a otros les guste lo que hago es música diferente.
Los Baudis están en Londres con María. Lo pasamos muy bien con ellos, saliendo casi todos los días juntos mientras estuvieron en París; incluso fuimos a Bélgica en un viaje relámpago, para ver a la sobrina de Elena que vive cerca de la frontera francesa. Ahora están por salir –creo que fue ayer con destino a España. De los Lipa sabemos lo que ustedes. Lo pasaron muy mal 24 horas y más que nunca tienen ganas de venirse a vivir a Europa, después del episodio de Ezeiza. La Argentina se ha vuelto tierra inhóspita hasta para los que creyeron que el “cambio” iba a ser real. ¡Qué ilusión absurda!
Me alegra que ilustres Los Sueños de Quevedo: es una de las más bellas obras de ese fenómeno de la escritura. Y ya me imagino las cosas que harás con semejante texto...

Cariños a Maruja y para ti un abrazo fuerte de

E.

Saludos cordiales al arquitecto López Calvo. Me gustaría saber algo más sobre sus intenciones y sobre todo detalles –si los encara– de transporte y dimensiones de obras. Todo eso sin estar seguro de exponer allá, ojo.

1975-05-20
Carta de Seoane a Girri. 1975
Madrid
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Girri. 1975 en 20/05/1975

Madrid, 20 de mayo de 1975
Sr. D. Alberto Girri
Buenos Aires
Querido Girri:
Recibí tu nuevo libro Quien habla, no está muerto , título que deduces para su totalidad de un estupendo poema, tan estupendo como la totalidad del libro incluyendo las traducciones. Tu obra va quedando como una de las más firmes y singulares en lengua castellana y personalmente de las que más me interesan, quizás por El Pascal que hay en mí, igual o parecido al Pascal que hay en todos.
No hemos podido veros ni a Aurora ni a ti en Buenos Aires. Llamamos repetidas veces a las casas de ambos y no estabais. Luego nos enteramos que habíais marchado a Punta del Este. Supongo que allí os encontrasteis con amigos comunes que os dieron noticias nuestras. Estamos desde la primera quincena de enero y proyectamos estar un año o casi un año. Actualmente, estoy exponiendo en Madrid con mucho éxito, en la misma Galería Aele de hace dos años y tengo algunos encargos, una carpeta de grabados para una editorial de gente joven, 13-14-15 , así se llama la editorial, y las ilustraciones, también en grabados, para Los sueños, de Quevedo . La exposición es un éxito de crítica y público, pero además vendí algún cuadro, de manera que estoy satisfecho. Trabajé desde que llegué, viendo muy poca gente y ahora, dentro de pocos días, retornaremos a La Coruña donde volveré a encerrarme y a trabajar. Tengo una exposición en esta ciudad en septiembre. Aquí, en Madrid, estuvieron Emma y Rafael Lifschitz. Pasaron a la venida unos días en La Coruña y ahora al retorno otros en Madrid. Lo pasamos muy bien con ellos. Antes estuvo Sabat, el dibujante, en La Coruña y los hijos de Lifschitz, Carlos y Malena. Ayer noche llegaron a Madrid Elena y Baudizzone, los veremos hoy, proceden de París. También están aquí un poeta, Leiva , Colombres, el pintor y Guzmán, el escultor . La Argentina se extiende por el mundo. Nosotros empezamos ahora a escribir cartas. Tengo que escribirles a muchos amigos. Esta es una de las primeras. Contéstame.
Un gran abrazo de Maruja y mío para Aurora y para ti.
Nota: Esta carta fue escrita en Madrid, pero echada al correo en La Coruña, a donde llegamos hace unos días. Hoy es 2 de junio.

1975-06-05
Carta de Seoane a Varela e Gerstein. 1975
A Coruña
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela e Gerstein. 1975 en 05/06/1975


La Coruña, 5 de junio de 1975

Sr. D. Lorenzo Varela
Buenos Aires

Queridos Lorenzo y Marika:

No recibo carta de nadie. Les he escrito a casi todos los amigos y algo ocurre que no contesten. Por favor, os ruego contestéis. Estoy celebrando una exposición en Madrid, pero de esa ciudad tuve que venirme luego de inaugurada por un fuerte ataque de ciática que me tiene encerrado en casa sujeto a tratamiento, pues no puedo andar. La exposición se celebra con mucho éxito de crítica y público y he vendido algo en unos meses en que dicen no se vende nada o muy poco. En septiembre, expongo en La Coruña. Mientras tanto, debo hacer un álbum de grabados para una editorial de jóvenes madrileños, Tres, catorce, diecisiete, diecisiete, no dieciséis, e ilustrar con grabados en madera Los sueños de Quevedo para otra. Hemos estado con algunos amigos argentinos, entre otros con Lifschitz y Enma, Elena y Baudizzone, Frontini y su compañera..., etc., con Carybé que nos invitó a pasar unos días con ellos en Bahía a nuestro regreso a Buenos Aires y desde luego con Lidia y Freitas, que os envían abrazos. Con todos ellos, os recordamos. Freitas, al ir sumando años, va teniendo lo que supongo la serenidad de los viejos jardineros o de los capataces de granja en el Mississipi a mediados del siglo pasado, sentados en un sillón de mimbre en la terraza de un palacio de madera con arquitectura parecida a la de Lo que el viento se llevó. Carybé venía de ser invitado por un grupo o asociación de artistas japoneses y dar, con ese motico, una especie de vuelta al mundo. Es curioso verse reunidos después de tantos años Baudizzone, Freitas, Carybé y nosotros, recordando el pasado, Buenos Aires evocando a cuenta, no recuerdo de qué, viejas películas, personas hace mucho desaparecidas, sucesos que alguno de nosotros recordaba, del que todos habíamos sido protagonistas, mientras los otros trataban de extraerlo dificultosamente y por trozos de su memoria, como en una cinta de grabador que no hubiésemos terminado de borrar... Luego, al cabo de dos o tres días llegaron a Madrid Dieste y Carmen y volvieron a surgir nuevos recuerdos lejanos y siempre estuvisteis presentes vosotros. Dieste pronunció una estupenda conferencia sobre Maside en la Galería Sargadelos que se abrió una estupenda conferencia sobre Maside en la Galería Sargadelos que se abrió en Madrid con una exposición del libro gallego y un ciclo de conferencias, Piñeiro, García Sabell, Rof Carballo y Dieste. Acaba de publicar un nuevo libro, Testamento geométrico, que te enviará y creo que tiene en reedición La vieja piel del mundo con algunas modificaciones, y otros más, teatro.
Esto es todo. Para la exposición que estoy haciendo en Madrid hice un nuevo Cristo que obtiene mucho éxito. Pero no te quiero hablar de mis cosas. Trato de hacer lo que puedo que cada día, lo siento, es menos.

Me prometiste escribir, contéstame.
Un gran abrazo de Maruja y mío para Marika y para ti:

[Seoane]

1975-06-05
Carta de Seoane a Sábat. 1975
A Coruña
Olivos
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Sábat. 1975 en 05/06/1975


La Coruña, 5 de junio de 1975

Sr. D. Hermenegildo Sábat
Olivos

Querido Sábat:

Recibí tus dos cartas que te agradezco mucho. Desde que os fuisteis trabajé mucho, estoy haciendo una exposición en Madrid con mucho éxito de crítica y público y tengo el encargo de un álbum de grabados en madera para una editorial de jóvenes, haré a mi modo un bestiario; y por otra, el de ilustrar Los sueños de Quevedo, también con grabados. Trabajé lo que pude. Ahora llevo un mes sin poder hacer nada, pues una condena ciática me tuvo inmovilizado en Madrid durante tres semanas y ahora aquí en La Coruña donde llevo otras dos sin poder andar. Proyecté un monumento a los emigrantes en Sargadelos para ser colocado en la montaña que domina la fábrica. Se trata de un grupo escultórico hecho con grandes piedras de granito que en partes será policromado. Representa una multitud en marcha. Me ilusiona el hecho de que surja entre la maleza de una montaña. Tendrá 6,50 de largo y 4,50 de alto. Me gustaría que tuviese la misma presencia importante y popular de un menhir, un dolmen o de un crucero de los que abundan en Galicia. En septiembre, expongo aquí en La Coruña y con todo esto doy por finalizado los trabajos de un año más.
A vosotros os recuerdan las gentes con las que hemos estado aquí. Isaac y su mujer. Dónega y Fernanda, Pillado, el director de La Voz de Galicia, etc., y nosotros a quienes disteis una gran alegría. De ahí sabemos lo que publican los diarios y La Nación en su edición semanal para el extranjero. Estos días voy a escribirle a Blum, a quien debo carta desde que llegué, pues me desanimó para escribir el hecho de que no hubiesen llegado, no sé aún por qué, las primeras cartas que envié a algunas personas. Si lo ves, dile que vi en Madrid una exposición grande, de 200 obras, de Kokoschka, del que me gustan mucho sus retratos y el de que sea capaz de pintar unas ranas gigantes una tras otra; de que haga una gran acuarela con uvas y pámpanos y el que se ande haciendo autorretratos todas las veces que puede. Es un gran artista. Vino con la exposición y anda por Madrid luciendo sus 89 años acompañado de su mujer, Olda, checoslovaca, más alta y joven que él con quien seguramente no discute, como lo hacía con Alma Mahler, sino que la retrata una y otra vez. Con Alma Mahler se retrató abrazado llevado por los aires en un cielo de tormenta. El cuadro está ahora en el Museo de Basilea.

Esto es todo por hoy. Un abrazo para los dos y para los chicos de Maruja y mío:

[Seoane]

1975-06-12
Carta de Seoane a Jonquières. 1975
Madrid
París
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Jonquières. 1975 en 12/06/1975


Madrid, 12 de Junio de 1975

Sr. Eduardo Jonquières
París

Mi querido amigo:

Debí haberte escrito hace tiempo, cuando el arquitecto López Calvo regresó de esa ciudad muy contento de haberte conocido, lo mismo que a los Burd. Muy contento también de contar con una exposición tuya para su galería, no sé en qué fecha, creo que para Noviembre, mes que casi seguro estaremos aún en La Coruña. Se trata de una muy buena persona y también de un notable arquitecto y hará lo que pueda con la muestra de tu obra. Por mi parte, expondré en ella con seguridad, casi con ella, en Setiembre. Estos días estoy en Madrid con una exposición en la Galería AELE, que acabo de inaugurar con mucho éxito, hasta ahora, de crítica y público. No sé qué pasará con la venta. Se trata de obra hecha en Galicia desde que llegué. Aparte tengo el encargo de un álbum de grabados para una editorial de gente joven y, es posible, que ilustre también con grabados en madera Los Sueños de Quevedo para una edición de bibliófilos.
De Buenos Aires no sé nada más que aquello que transmiten los diarios que no resultan demasiado para los deseos que tenemos de noticias. Le hemos escrito a Lipa, pero aún no tenemos respuesta. Baudizzone debe estar por esa, no sabemos muy bien su itinerario, creo que se encontraban con los Lifschitz, y que a Newton Freitas le escribió diciéndole que estarían por Madrid el 19 de este mes. Estamos deseando verles para saber algo de los amigos comunes.
Esto es todo. Se trata de una carta rápida para decirte que te esperamos en La Coruña. Que nos gustaría ver una exposición tuya en esa ciudad. Muchos abrazos para María y para tí de Maruja y míos. También para tus hijos:

[Seoane]