PROXECTO EPÍSTOLA

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TEMÁTICA: Cartas europeas

[libro] Cartas Europeas (Segundo Cuaderno de viaje) é un libro de Simón Scheimberg editado en Bos Aires na Imprenta López en 1963.
Epístolas
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Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
1963-05-12
Carta de Scheimberg a Seoane. 1963
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Scheimberg a Seoane. 1963 en 12/05/1963

Domingo, 12 de mayo 1963

Querido Seoane:

Recibí su carta del 30 de abril –que debe haberse cruzado con una mía del martes 16 de mismo mes–. Allí, en mi carta, después de darle noticias de la iniciación de nuestra temporada artística y de las sombrías perspectivas que nos deparaba nuestra absurda y confusa situación política, le prometía para una próxima carta hablarle de Biografía Precoz1de Evtouchenko –que leí con verdadero interés y deleite. Pero las cosas de aquí están cada vez más enredadas y sería absurdo que pierda y le haga perder tiempo con comentarios que Vd. debe adivinar, pues que en este aspecto (el que sirve de leit motiv a la biografía de Evtouchenko –y que constituyó repetido tema en las Memorias2 de Ehrenburg) siempre hemos coincidido. En la interesante interviú que en Letres francaises precedió a la dicha biografía precoz, dice Evtouchenko que el hombre comunista tiene la obligación de denunciar el error donde lo descubra (y más si se trata de fraude o mala fe) y con más razón –dice– debe hacerlo el poeta–sin preocuparse del uso que de esa denuncia puede hacer el enemigo. Y así es, en efecto. Con el pretexto de cuidarnos de servir al enemigo, se pretende –a menudo con mala fe– de acallar una crítica justa –sin darnos cuenta que con ello hacemos un doble daño: el de ocultar una verdad y el de provocar la sospecha en cuanto decimos después. En este sentido, talvez el aspecto más vulnerable que ofrece la obra de Ehrenburg es el de haber callado cosas que no pudo ignorar y que debió denunciar. Pero dije que no iba a hablarle de esto. Ya tendremos ocasión de hacerlo en otro momento más propicio que éste que estamos viviendo aquí, en nuestro país. Estamos acercándonos a grandes pasos a un gobierno militar y no sería extraño que esto suceda mañana mismo, antes de que tenga tiempo de despacharle esta carta. Y lo peor es que no hay perspectiva de evitarlo, ni posibilidad. Los partidos (y esto es algo más de lo mucho que le debemos a Frondizi) están divididos y desarticulados, sin saber para dónde enderezar; y algo parecido le pasa al movimiento obrero, internamente dividido por intereses de fracción y gobernados por dirigentes venalles –y en el mejor de los casos, cobardes– Todos los días leemos nuevas proclamas y declaraciones –que casi siempre sólo sirven para disimular intenciones. A menos de 2 meses de la fecha señalada para las elecciones, Rauch se descarga con un memorial en el que exige –como condición para posibilitar las mismas– aparte del cambio de todo el equipo civil de Gobierno, la modificación de todos los códigos, y no sé cuántas cosas más. Todo esto sería para reír si no fuera tan trágico. Un ex-diputado radical amigo, el doctor Carlos E. Cisneros, me recordaba hace apenas algunos días, a propósito de lo que nos está pasando, la envidia conque no hace aún más de un par de décadas le hablaban de nuestro país en los demás de latinoamérica... Y pensar que ahora, hasta en el Congo africano le hablaron despectivamente de la Argentina al ingeniero Casella en un viaje que acaba de hacer no hace más que algunos meses. Y a la descomposición de los partidos se una la falta de hombres que puedan significar siquiera una esperanza. La desorientación, el desconcierto, son totales y sólo Dios sabe cuándo saldremos de esto –y cómo!–. Entretanto el pueblo sigue inconmovible, indiferente a todo –como si en este juego nada tuviese que ver: una insensibilidad y una indiferencia que alarman. Creo que somos uno de los pocos países donde el asesinato de Julián Grimau ha pasado casi inadvertido. Solamente una protesta del Centro Gallego y de una agrupación republicana; y nada más. Ni una protesta de nuestra prensa aborregada –que apenas si se hizo eco (y nada más que por un prurito profesional) en la sección de lo telegramas de las muchas protestas habidas en el extranjero –sobre todo, en países de Europa–. Me imagino de la magnitud de éstas, que han obligado a Franco a prometer que en lo sucesivo esos juicios van a ser sometidos a jueces civiles y no militares. Después del asesinato, la burla. Entre las pocas cosas que se han filtrado en nuestros diarios, es interesante la carta que le ha dirigido a Franco el doctor Galarza al día siguiente creo del fusilamiento de Grimau. Ah, si tuviésemos aquí gente de ese coraje!.. Pero para qué derramar inútiles lágrimas cuando lo que se necesita es el valor de arrojar piedras. Que es el que nos falta.
Ya ve Vd., querido Seoane, mientras Vd. y Maruja deambulan por esas calles de Ginebra, la calvinista, a la busca de Dios, nosotros aquí lo andamos buscando para que nos salve: Y como en el caso de Vds., no lo encontramos –o, como en la filosofía kafkiana, se nos cierran los caminos cada vez que más parece que nos aproximamos a Él. Dios te busca!, se titula, según su carta, el folleto que le entregó la salvacionista suiza en el día de Semana Santa que a Vd. y a Maruja se les ocurrió la peregrina idea de buscar a Dios... Y si fuera que no nos busca en realidad, por qué en su estúpida vanidad de Todopoderoso para nada nos necesita? De todos modos, gracias por el paseo a través de calles y vidrieras de Ginebra que con Vds. he hecho. Y si en esto estuviera la razón de ser de Dios? Un pretexto nada más para buscarlo y así buscarnos?
Y aquí voy a terminar. Deseamos saber cómo le va a Vd. en sus cosas y cuáles son sus perspectivas, aunque confiamos en que todo les andará bien –como Vd. y Maruja se lo merecen–.
En lo que a mi se refiere, estoy cada vez más acorralado por preocupaciones de orden profesional –que de nada provechoso me proveen y sí sólo de dolores de cabeza que no me dejan tiempo ni lugar para pensar en cosas mejores. Y lo peor es que creo q’ como las del país, no tienen salida (por lo menos visible).
Aída, que recibió la segunda carta de Maruja, tenía el propósito de escribirle; pero, desgraciadamente, no está ahora en las mejores condiciones de ánimo para hacerlo: van a hacer para dos semanas que se le ha agravado la sordera –y ahora de ambos oídos. Está en tratamiento y esperemos que, en el peor de los supuestos, todo esto no vaya más allá de la necesidad de usar de audífonos. Mientras tanto, casi no salimos. A los amigos tampoco los vemos casi. Esperemos, sin embargo, q’ todo se andará y que nuestros males no duren los cien años del pronóstico popular...
Gracias, Seoane; gracias, Maruja, por vuestras hermosas cartas. Sigan escribiéndonos y téngannos al tanto de cuanto les acontece. Aquí los extrañamos.

Abrazos, etc.

Scheimberg

Ah, espero la tapa para mis Cartas europeas, 1958. –Vale–.

1. O autor refírese á obra Autobiografía precoz de Eugène Evtouchenko
2. Trátase da obra Gentes, años, vida: Memorias, 1921-1941 de Iliá Ehrenburg.

1963-07-15
Carta de Scheimberg a Seoane. 1963
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Scheimberg a Seoane. 1963 en 15/07/1963


Buenos Aires, 15 de julio de 1963

Querido Seoane:

Estoy realmente alarmado. De tres cartas que le escribí a Vd. sólo ha recibido la segunda. La última, del 8 de junio pasado, como medida de seguridad, se la despaché certificada al nombre de su cuñado en Madrid. Salvo que Vd. haya recibido ésta con retraso –después que me despachó la suya del 19 de junio, en la que me habla de su viaje y admiración por El Escorial–. Comparto su entusiasmo y admiración por esta monumental e incomparable fábrica arquitectónica. Desde 1920, en que visité por primera vez el Escorial, admiro a Herrera y en las dos veces que volví a visitar España, nunca dejé de hacerlo al Escorial –éstas con Aída– y mi admiración no ha hecho más que acrecentarse. Su estilo –modelo de sobriedad y de limpieza– corresponde a mi juicio al estilo de vida de la época de Felipe II, ascético, pero en modo alguno pobre (que son dos cosas distintas). Allí, en el Escorial, además de El Carro de heno de ese gran surrealista que fue El Bosco, he vuelto a ver siempre con deleite el San Mauricio, del Greco, y creo que un Expolio1 maravilloso de Goya –con un Cristo estupendo en el centro, envuelto en una túnica de amarillo de seda (allí lo he visto?), un Velázquez y creo que un par de Tizianos –entre muchas otras de valor–.
Ya aquí, en nuestro Buenos Aires, estuvimos unos días con Esther y Lipa, quienes nos transmitieron sus afectuosos saludos. Muchas gracias por recordarnos y pensar en los pobres que no podemos viajar.
De haberse realmente perdido mis dos aludidas cartas, me daría una verdadera pena, pues la historia habrá perdido irremisiblemente el testimonio de dos nuevos augurios políticos míos total o casi totalmente equivocados –como casi todos los míos–. En efecto, a pesar de mi temor de que se llegara a votar el 7 de julio (con proscripciones y ostracismos) el país votó –y creo que con una sensatez que no habría sospechado–. Por mi parte, colaboré en ese acto de sensatez votando para Presidente y Vice la fórmula de Ilía-Perette, de la UCRP (que era una manera de votar contra Aramburu y el continuismo). En el caso de Ilía, hay por lo menos: 1º, que es un hombre honrado y de una vida limpia; 2º, que prometió anular –y por decreto, como corresponde– los contratos petroleros, en cuyo nombre se ha saqueado al país (aunque Sofovich siga creyendo lo contrario); 3º, prometió comerciar con todos los países que quieran comprarnos y vendernos; y 4º, promete anular las proscripciones y los decretos en que se procesa las ideas y en los que, so capa de anticomunismo, se coloca en el index a todas las fuerzas liberales y progresistas del país. Esperemos que esta vez los militares permitan que esas promesas se cumplan. Por de pronto, hay muchos de éstos que están deseando que alguien tenga los c... suficientes para hacerlo. Además que hay una experiencia que no puede repetirse...
Permítame que por razones de prudencia y para no equivocarme una vez más, interrumpa aquí mis pronósticos y esperanzas. El nuevo gobierno tendrá que luchar a brazo partido con los sectores más reaccionarios del Ejército (que son los más) y con el Pentágono, que no se van a cruzar seguramente de brazos y movilizará al ejército de mulatos que lo sirven. Y no sigo. Cuanto menos escriba, menos me equivocaré.
Por de pronto, hay una verdadera euforia en el país y yo participo de ella –aunque, le confieso, me alarma una sola cosa: el coro de aplausos conque ha sido recibida esta victoria de la UCRP. Además, son muchos –y yo entre ellos– los que se alegran que hayan sido desoídas las órdenes de nuestros dos santones: Perón y Frondizi, aunque de paso hayan sufrido un descalabro los de la CGT.
Y ahora a otra cosa: en mi última, le escribí de una sección argentina de pintura, escultura y grabados que un grupo de amigos piensa protagonizar dentro del Museo de Bellas Artes de La Habana. La primera lista de obras la integrarían: Usted, Alonso, Anadón, Audivert, Badi, Berni, Castagnino, Diomede, Giambiagi, Lea Lublín, Policastro, Soldi, Spilimbergo y Urruchúa, y de los escultores, Falcini, María Carmen y talvez Sibelino. A Badi le escribió Falcini y a Berni y Spilimbergo, Falcini y Castagnino. A mí me encargaron que yo obtuviera su asentimiento. Luego que las obras de éstos hayan llegado a su destino, el grupo organizador ampliará la nómina –aunque cuidando siempre que se trate de artistas con títulos para figurar en un Museo. Piénselo con calma, y mándeme su consentimiento a la brevedad posible.
Lo felicito por el mural que le han encomendado y la preparación de sus Exposiciones de grabados y pintura. Estoy seguro que tendrá éxito –y tenga presente que en esto acierto bastante más a menudo que en política. Mándenos noticias, para seguirlo en su carrera de éxitos.
Por sus últimas cartas llegadas a amigos, y más por lo que nos dijeron Esther y Lipa, veo que están Vds. contentos de encontrarse en España. Me alegro, aunque no se encariñen tanto como para quedarse allí definitivamente. La Argentina –a pesar de todo– sigue siendo un país donde es agradable vivir y si mis augurios y los nuevos gobernantes no nos fallan, se volverá a vivir sino como en la belle époque, por lo menos bastante mejor que ahora. Lo de la belle époque corresponde a una asociación de ideas que no deja de ser lógica –pues cada vez que pienso en Balbín (jefe virtual de la UCRP) no puedo dejar de hacerlo simultáneamente en los buenos tiempos del tango con corte y el conventillo de las 14 provincias –mejor desde luego que “villas miseria” de hoy.
En cuanto a otras cosas, estoy pobre de noticias. Salgo poco para no hacerlo sin Aída, cuya sordera no mejora. A veces, ella se olvida y sobrepone, aunque otras sufre mucho con lo que le pasa.
Dentro de unos momentos, veré a Varela (Lorenzo) que me citó para EUDEBA. Le dije en mi última que la exposición de los dibujos de los 10 fue un éxito de público y la edición de los 10 cuentos (120 mil ejemplares) se está vendiendo como pan?
Mis Cartas europeas están casi listas. Todavía no vi como quedó la tapa que Vd. me dibujó (espero que resulte estupenda). Manuel López –que ya se repuso después de casi dos meses de enfermedad– retomó a su cargo el cuidado de la edición, en la que suprimí el pie de la editorial. Le manda muchos saludos.
Y termino. Un gran abrazo para Maruja y Vd. de todos nosotros y que sigan bien y con suerte. Saludos a los amigos que le salgan al paso. Chau,

Scheimberg

O autor refírese á obra de Goya: El Prendimiento de Cristo

1963-09-12
Carta de Scheimberg a Seoane. 1963
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Scheimberg a Seoane. 1963 en 12/09/1963


Buenos Aires, 12 de septbre, [1]963

Querido Seoane:

Estoy realmente avergonzado. Desde q’ la recibí, hace aproximadamente un mes, ando con su carta del 9 de agosto en el bolsillo para contestarla, y no lo hice porque andaba (y ando) totalmente absorbido por las cosas del Banco Israelita. Ni a exposiciones ni al cine casi voy. Hice una escapada para ver la colección de Palanza que salió al remate –que totalizó (nada más que en cuadros) casi 50 millones de pesos: Un retrato de hombre de Picasso, cuando firmaba todavía Pablo Ruíz Picasso (está reproducido en el libro de Merli) se vendió en 4.550.000 pesos y lo compró un señor totalmente desconocido y apellido rumano –aunque sospecho que por encargo. Y una visita, a todo correr, a la exposición de Butler en Bonino y que parece haber vendido a la fecha todas o casi todas las piezas expuestas. Ah! A todo correr visité la muestra de Di Tella: Lamentable. Algo así, o peor aún, la calificó Lorenzo Varela en su audición de Radio Mitre; y una media hora el 27 de agosto, en la inauguración de Lea [Lublin]. Está realmente bien y por primera vez ha merecido una crítica justa –y en algunos casos hasta entusiasta. Y esto es todo.
Las cosas del Banco desembocaron en lo peor. Su intervención y liquidación por orden del Banco Central. Andamos corriendo como locos: los abogados, en los recursos de orden legal; los directores, en mil diligencias de todo orden para ver si se puede levantar la medida. El Banco Central tomó posesión el día 30 de agosto y a la fecha casi han sido retirados todos los depósitos. Un desastre!
Salió Cartas europeas: La presentación es buena, aunque –aparte de haber tenido que cambiar 2 páginas (cortando los pliegos), ha debido agregarse un Fe de erratas. A pesar de eso, impresiona bien. No he tenido tiempo de distribuirlo entre los amigos a que está destinado; pero ha gustado a los pocos amigos a quienes he tenido oportunidad de entregarlo. Para usted y los amigos de España tengo reservado y dedicados unos 10 ejemplares. No los despaché por temor a que ello sea una imprudencia. Vd. dirá. A pesar de que no tengo la cabeza para estas cosas, tengo una verdadera impaciencia porque Vd. lo conozca y lo vea. Si no a España, les despacharé un ejemplar (o los que Vd. me indique) a Suiza –adonde calculo que irá pronto ya. Y con los dedicados, qué hago?
Cuándo piensa volver? No se imagina Vd. en qué medida los extrañamos nosotros, y los amigos. Y aquí debiera terminar. Sólo quiero agregarle –que a pesar de todos los desaguisados que está haciendo el gobierno a todo vapor (con el evidente propósito de crearle problemas difíciles a Ilía y Peretti) y la posibilidad de que esas dificultades y las insistentes declaraciones de éstos en el sentido de que están firmemente decididos a cumplir el programa electoral: anulación de los contratos del petróleo, de los compromisos con Segaba y con el Fondo Monetario, y más y más, puedan desembocar en un nuevo golpe, me resisto a creer en ello. Lo cierto es, sin embargo, que en estos días –y a medida que salen a la luz nuevos decretos encaminados a cercenarle los recursos al nuevo Gobierno– el dólar está subiendo y la gente empieza a andar inquieta. Felizmente, ya faltan nada más que días para el 12 de octubre.
Aída anda siempre con intención de escribirle a Maruja. Si no lo hace, no es por falta de deseo, sino porque con su problema del oído no tiene ánimos para hacerlo. Lo hará en cuanto le hayan desaparecido los ruidos y los mareos –que van disminuyendo– y sepa que puede usar audífonos. Esperemos que sea pronto.
Espero que Vds. estén bien. A pesar de mi silencio, del silencio de Aída, escríbannos. Siempre los leemos con gusto –y envidiados por quienes no tienen la suerte de que Vds. les escriban. Y basta de declaraciones de amor.

Aída y yo y todos los míos los abrazan a Vd. y a Maruja. Hasta pronto.

Scheimberg

1963-10-15
Carta de Seoane a Scheimberg. 1963
Madrid
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Scheimberg. 1963 en 15/10/1963


Madrid, 15 de octubre de 1963

Sr. Simón Scheinberg
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Estamos de regreso en Madrid desde hace aproximadamente quince días. El 18 de julio, cuando se inició la huelga de Asturias, nos encontrábamos casualmente en esa región, dos meses después estando en Galicia nos enteramos que la huelga continuaba atravesando diversas alternativas y, en estos días, 102 intelectuales madrileños dirigieron una carta a uno de los ministros, el de Información y Prensa, pidiendo noticias sobre las torturas que se dice aplicaron en aquella huelga. El ministro respondió a uno de los firmantes, Bergamín, con una larga carta donde se admite que se le cortó el pelo (por el modo de decirlo parece que por humor) a dos mujeres de los huelguistas. Dando la sensación de libertad el mismo ministro permitió que se publicaran las dos cartas, que los diarios madrileños, todos dependientes de él, comentan en general en términos desdeñosos para los firmantes y los huelguistas. Bergamín, según dicen, le envió otra carta de respuesta invitándolo al diálogo público sobre éste y otros sucesos. En la Universidad de Madrid antes de finalizarse el curso pasado, un catedrático, que fue compañero y amigo mío en su época de estudiante, Santiago Montero Díaz, pronunció una conferencia favorable a Cuba y a Fidel Castro con la protesta de los cubanos exiliados. Otra carta de Montero Díaz afirmando sus principios y atacando a éstos circula en el ambiente universitario. Sólo estas dos noticias pueden darle una idea del ambiente político que se respira en Madrid y en España en general, aparentando el público indiferencia ante todos estos problemas. Son varias las cartas con firmas que últimamente los intelectuales dirigieron a los poderes públicos e invariablemente son tachados de comunistas aunque muchos de ellos sean reconocidamente de derechas y aún del Opus Dei. En un ciclo de conferencias celebrado en La Coruña en el mes de agosto, se pronunciaron algunas francamente valientes y precisamente una de ellas al finalizar mi exposición y con motivo de ésta. Muchos artículos de diario están escritos con sobreentendidos difíciles de comprender para quienes sean ajenos a los problemas diarios de España, e igual ocurre con el lenguaje de los conferenciantes. Estos días se celebra en Madrid un Seminario Internacional titulado Realismo y realidad en la literatura contemporánea, patrocinado por el Club de Amigos de la Unesco y el Instituto Francés de Madrid. En ningún diario madrileño leí hasta ahora la noticia sobre un suceso tan importante en el que participan personalidades del exterior: franceses, italianos, ingleses. Bueno, éstas son algunas noticias referidas a este momento de España. Las que pueden interesarnos de otra índole, las artísticas por ejemplo, aún no pude ponerme al día sobre exposiciones, prácticamente no comienza la temporada hasta este mes. La mía es el 25 de noviembre de óleos y grabados. He pintado bastante en Galicia, antes en Suiza, y ahora comencé a hacerlo aquí en el departamento minúsculo que tenemos. Trabajo, y tanto Maruja como yo nos acordamos de todos los amigos de ésa y de Buenos Aires.
Deseamos tener noticias y apenas nos llegan. No sabemos nada de Sofovich, ni de Lipa, no nos escriben hace mucho y tampoco de otros amigos.
En Galicia, hemos pasado unos meses maravillosos y nos gustaría tener una casa en su costa para invitarles a todos a estar algunas temporadas en uno de los paisajes más bellos de Europa. De Cartas europeas que estoy impaciente por tener, enviaría sólo ejemplares a los amigos de Madrid. El mío le ruego que me lo guarde hasta nuestro regreso.
Esto es todo por hoy. Nos enteramos con mucha pena por usted del cierre del Banco Israelita. Esperamos que se resuelva de alguna manera favorable. ¿Qué tal Illía en sus primeros días de Gobierno?

Un abrazo a todos. A Anita y Petrone, María, Silvia, Nélida, Pepita y Luisa Kaufman, a los Golubof y a todos aquellos que nos recuerden, y otro muy fuerte para Aída y usted, y para los hijos de:

[Seoane]

1963-11-04
Carta de Scheimberg a Seoane. 1963
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Scheimberg a Seoane. 1963 en 04/11/1963


Buenos Aires, 4 de noviembre de 1963

Querido Seoane:

Recibí el catálogo de la Exposición de grabados que Vd. realizó en la Asociación de Artistas de La Coruña, así como parte de las hermosas –y por momentos atrevidas palabras pronunciadas por el veinteañero Alberto Míguez en el banquete que le ofrecieron los amigos de La Coruña; y también la hoja de La Voz de Galicia a Vd. dedicada. Bien, muy bien. Me alegro –y conmigo Aída y todos los amigos– del éxito alcanzado y que Vd. se merece, por lo demás. Creo que tienen razón sus amigos de allá cuando lo llaman pintor gallego. Y de qué modo lo es Vd.!; y con qué profundidad y autenticidad! Con todo –y nada más que por vanidad patriótica– lamento que no se haya recordado bastante su condición de argentino... Pero, qué importa? A Vd. lo tenemos en nuestros museos y en nuestras casas y, sobre todo, en nuestros corazones. Esperamos que su exposición de pinturas y grabados en Madrid resulte un triunfo... Me olvidaba decirle que de la hoja La Voz de Galicia me agradó sobremanera lo que Vd. dice en la interviú que le hacen. Se lo leí a Falcini y participa de mi entusiasmo. Recibí también su carta de Madrid, del 15 de octubre. Gracias por sus recuerdos y por las palabras amables que tiene para los amigos. Vd. sabe bien que también nosotros –Aída y yo, los amigos, los recordamos y extrañamos a Vd. y a Maruja (Aída le agradece de alma las tan cordiales cartas y que se decidirá a contestar así que mejore de ánimo). Piensa volver a Suiza? Cuándo? Mis Cartas europeas parecen que han gustado bastante a los amigos. Me dice Vd. que a los amigos de Madrid se las mande... No será una imprudencia y talvez ponerlos en un compromiso? A pesar de esta preocupación, estoy impaciente porque Vd. las conozca –mejor dicho, las vea ya impresas–. Su tapa ha quedado muy bien. Muy interesante todo lo que Vd. me dice de las cosas de España. Es como un nuevo renacimiento. En la comida que le dieron a Ana en Cochabamba 955 y a la que asistimos Aída y yo, se repartió el petitorio de los 1021. Vale por su valentía y, sobre todo, por quienes lo firman. Cómo no estar orgulloso de un pueblo que cuenta con un tal planten de escritores, poetas, artistas y profesores universitarios?
Por aquí, a la espera de que las promesas se vayan convirtiendo en actos. Por de pronto, y salvo en algunos aspectos, creo que las cosas andarán un poco mejor. Es cierto que subsisten las leyes represivas –que se comprometieron a anular al día siguiente de la asunción del mando y que ahora dejan para que decida el Parlamento–, pero no es menos cierto que hay como una sensación de libertad en las calles y en todas partes. Y en cuanto a nuestro petróleo, no sería difícil que de un momento a otro se anulen los contratos (la venta de Petroquímica ya se anuló y no pasó nada; al contrario, Compancs2 ha tenido un gesto muy elegante acatando la decisión del Gobierno). Por de pronto, la gente que integra Energía y Combustibles e YPF es de lo mejorcito de este Gobierno y todo hace presumir que no se van a achicar ante las amenazas y chantages que nos vienen de Estados Unidos. Las Empresas Petroleras y sus defensores dicen y repiten que hacen un mal negocio; pero nunca se ha visto defender tan zañudamente un mal negocio como este de las concesiones petroleras. Y cómo se movilizan sus testaferros criollos!
No quiero anticipar vaticinios para no tener de que lamentarme luego; pero no puedo ni quiero ocultarle que espero –esperamos– que el país se va a enderezar; no sé si mucho, pero algo sí... Y ya sería un buen principio.
Y aquí termino. Me he quedado sin luz en mi escritorio y aprovecho la última que me llega de la calle. Escriba, escríbannos Vd. y Maruja aunque los de aquí seamos un poco remolones en contestar. Básteles saber a Vd. y Maruja –lo ignoran acaso?– que todos los amigos de aquí los extrañamos y los esperamos. Pero para quedarse entre nosotros...

Bueno, Seoane, Maruja, reciban los saludos de los amigos y de Aída y mío un grande abrazo. Hasta siempre, hasta pronto.

Scheimberg

P.S. Mis cosas personales no mejoran hasta ahora –aunque no han muerto aún las esperanzas de salvar al Banco–.

1 Refírese ao manifestó asinado por 102 intelectuais (entre outros José Bergamín que tivo que exiliarse de novo en 1963) dirixido a Manuel Fraga, no que se denunciaban torturas y represión contra os mineiros asturianos.
2 Refírese á empresa petrolífera argentina.