PROXECTO EPÍSTOLA

----

TEMÁTICA: praza Vendôme

[espazo xeofísico]
Epístolas
1
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
1948-12-09
Carta de Serrano Plaja a Seoane. 1948
París
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Serrano Plaja a Seoane. 1948 en 09/12/1948

París, 9-XII-48

Querido Seoane:

Yo sé –y tú sabes, también, puesto que yo mismo incurro en ello– que los españoles escribimos pocas cartas. Pero yo creo que a ti se te va más la mano aún. En fin, no importa que no hayas escrito hasta ahora, pero sí quisiera que me contestes a esta en un plazo algo menor del que sueles.
Alguien que ha llegado por aquí últimamente me ha dicho que tú piensas estar aquí en febrero, pero no sé que fundamento tiene esa noticia. Sin embargo, las que yo te voy a dar tienen el de la experiencia o cosa vista y vivida, como hay que decir en estos casos.
Y es esto que para nuestro plan apremia el tiempo. Primero, porque cada día veo y noto y siento más y mejor que sería ahora el momento super recontra ideal para comenzar algo por el estilo. Mas si por yo no lo sintiera bastante, me lo hacen remarcar como dicen por aquí muchos españoles las casi constantes iniciativas que bordeando la nuestra se producen poco menos que cada día.
Así, por ejemplo, hay unos chicos catalanes que han montado –aún no está terminada– una galería de arte con librería, a todo meter y que será, sin duda, un éxito, pues es de las pocas cosas españolas que hay aquí de cierto tono. Como en sus proyectos entran muchas cosas y como por lo que se ve de la galería –montada nada menos que en plena plaza Vendôme, es decir, el mejor sitio de aquí para eso–no me extrañaría que pronto o tarde –y más bien pronto– dado que son catalanes y con instinto para ello, dan con el quid de lo nuestro, pues está, como te digo, en el aire, en el ambiente hasta un punto que casi le dan a uno ganas de decir, como los chicos: “que te quemas, que te quemas”.
Por otra parte, Manuel Ángeles Ortiz, gran amigo como sabes de Picasso, está gestionando la posibilidad de mandar ahí cosas editadas por la editora suiza Sikra, la cual, influida por el mismo Picasso, si no le ha concedido la exclusiva, le dará muchas facilidades y creo que hará algo en serio.
Por otra parte, ha llegado aquí Sarita Maglione de Lautare. Viene a muchas cosas y, como supongo que sabes que es muy amiga mía, hemos hablado de casi todas. Entre otras, me propone que nos encarguemos, por cuenta de Lautare, de enviar ahí libros de lujo, etc., ya que tiene noticias del éxito comercial que ha conseguido Peuser haciendo eso. Para ello, me ofrece condiciones aceptables en principio, pero aceptables en el sentido de trabajar con capital ajeno. Pero si nosotros echásemos a andar, podríamos hacer lo nuestro, quiero decir, las ediciones, y mandar también cosas por nuestra cuenta, quiero decir, contando no con tal o cual tanto por ciento, sino con el beneficio consiguiente de lo que se consiguiera ahí. Lo cual ya en sí mismo es muy interesante, pero lo es, a mi juicio, más aún, por el hecho de confirmar lo que habíamos pensado, es decir, que ahora es el momento de hacer competencia, desde aquí al libro de ahí, sobre todo a base de ediciones de lujo y con todo nuestro plan en suma.
En otro sentido, he recibido estos días una carta de Horacio, quien me dice que ha hablado contigo varias veces y que todo está claro, pero sin darme mayores precisiones lo cual no me extraña, ya que así es él. Pero como tú no eres así, me gustaría saber lo que hay de nuevo y de concreto: con respecto a tu viaje, con respecto a lo hablado y concretado con Coppola, con relación a la aportación de Torrallardona y, sobre todo, en relación a lo que yo pueda y deba intentar aquí con Ussía, a quien aún no he hablado nada por esperar a tener noticias tuyas, condenado. Insisto mucho en que cada día palpo mejor las posibilidades estupendas que tendríamos. Y, por tanto, te pido que hagas un esfuerzo en serio para estar en contacto. Ya sabes que de siempre me pareció muy buena la idea; pero ahora es que siento que cada día que pasa es un día perdido, y como estas cosas van por rachas, acaso si no aprovechamos la que ahora se presenta, si dejamos que alguien se nos adelante, luego lleguemos tarde y perdamos el tren típico. Por lo tanto, necesito que me contestes aunque sea las consabidas cuatro líneas, dándome noticias tuyas y hablándome de todo esto. Y nada más por hoy para ser ejemplo de laconismo comercial.
Ah, sí, otra cosa y esta de carácter privado: si has tenido tiempo y gana para ocuparte de mi maldito libro sobre Avila Camacho, me gustaría que me lo dijeras, ¿quieres? [Manuscrito:] Un fuerte abrazo para Maruja y para ti de vuestro

Arturo